Viernes - 9 - de Agosto a las 22:00 en La 1, foto.
Guillermo del Toro: “Los dogmatismos me aterran”,.
El cineasta mexicano estrena ‘Historias de miedo para contar en la oscuridad’, un filme de terror sobre el poder de las mentiras con un protagonista latino. “Quiero que el público entienda lo que está pasando aquí y ahora”, dice,.
La noche de Halloween de 1968 no fue otra jornada festiva más de
truco o trato: aquella fiesta se celebró a cinco días de las elecciones
presidenciales que ganó Richard Nixon, en un país radicalmente dividido
en dos y enfrentado por las consecuencias de la guerra de Vietnam. En
ese ambiente hostil se desarrolla Historias de miedo para contar en la oscuridad, película de terror escrita y producida por el mexicano Guillermo del Toro
que se estrena en un mundo y, específicamente, en un país dividido en
dos por culpa del “dogmatismo, lo que más miedo me da hoy en día”,
apunta el cineasta. El tiempo cinematográfico nada tiene que ver con el
real, pero menos de una semana después de la matanza de El Paso,
en la que un supremacista blanco asesinó a 22 personas, entre ellas
ocho mexicanos, llega a los cines estadounidenses y españoles este
viernes. Un filme con un protagonista latino, que encuentra amistad
cómplice con un grupo de chavales amantes del cine y las historias de
horror mientras otros adolescentes le pintan en el coche un doloroso
mensaje: “Espalda mojada”. De repente, Del Toro se ha convertido en la
voz de millones de latinos que se sienten vilipendiados por una parte de
la población estadounidense y señalados con el dedo por el presidente
Donald Trump.
Dos horas antes de la entrevista con EL PAÍS en la madrugada española del miércoles, Guillermo del Toro había inaugurado su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood. Con la bandera mexicana en la mano, el ganador del Oscar por La forma del agua
definió los días actuales como de gran miedo y división. Delante de un
público enfervorizado que gritaba en español "¡Viva México!" y "¡Viva
Guillermo!", el director explicó en inglés: "Deben saber una cosa, soy
mexicano y soy inmigrante. Como mexicano, recibir esta estrella es un
gesto y ningún gesto ahora mismo puede ser banal o simple. Es muy
importante que esté sucediendo en estos momentos". Justo antes había
pedido "no tener miedo" porque el miedo "estos días se usa para generar
división, para decirnos que somos diferentes, que no debemos confiar los
unos en los otros. Estas mentiras hacen que sea más fácil controlarnos y
que nos odiemos unos a otros". Contra ello, Del Toro propone como
antídoto "la unión, el conocimiento de que esas divisiones son
fantasías. Fantasías en las que viven los políticos o la Iglesia". Y
animó a que los inmigrantes "crean en sus posibilidades y no en los
obstáculos". "No hagan caso de las mentiras que dicen sobre nosotros",
insiste.
Poco después del discurso, Del Toro, junto al director del filme, el noruego André Ovredal, atiende algunas llamadas de la prensa mundial. Cuando llega el turno de la entrevista con El PAÍS, Del Toro empieza en español, hasta que por deferencia a Ovredal —que sustituyó en la silla de director al mexicano cuando este tuvo que renunciar a ella porque se le acumulan los proyectos— se pasa al inglés.
Pregunta. Que haya un personaje latino en una película de terror, que llega a la típica ciudad mediana estadounidense, es una clara toma de posición. Una proclama que se acentúa tras la matanza de El Paso.
Respuesta. No fue una decisión accidental, sino que la tomé yo. La película se basa en los libros de Alvin Schwartz, que se desarrollan en los ochenta [y en los que no aparecen latinos]. Como mexicano, decidí incluir en mi guion a Ramón, ese chaval valiente, sofisticado. En pantalla, André ha logrado que sea más profundo y guapo de como lo escribí. Y lo que pasa entre él y la chica protagonista, Stella, es una hermosa amistad. No quisimos que hubiera relación sentimental, ni historia de amor con besos. El amor que aparece es un amor entre iguales, entre pares que se entienden. Muy a propósito buscamos una chica en las antípodas de las que aparecen en los anuncios de Coca-Cola. Es lista, espabilada, una chica con la que el espectador pueda sentirse identificado y a través de sus ojos apreciar también a Ramón.
P. ¿Ese presidente Nixon, que en su película no sale bien parado por algunos comentarios de los personajes, es un trasunto de Donald Trump?
R. Hablamos de cualquier presidente que tenga ese mismo perfil. Personajes así se han repetido en muchos lugares, por desgracia, a lo largo del tiempo. Y no solo en Estados Unidos. Hoy en día surgen políticos así hasta en España. Por supuesto, en todo el continente europeo. Vale para todo aquel que alcance el poder usando las mentiras y que se mantenga en su cargo con los bulos.
En el intrincado mundo de las entrevistas de promoción, los
relaciones públicas estadounidenses advierten: solo se aceptan preguntas
sobre el filme. Pero el mismo Del Toro es consciente de que su cine
siempre conlleva grandes cargas políticas, sociales y medioambientales. Historias de miedo para contar en la oscuridad cumple
escrupulosamente con sus mandamientos: "Mi intención al hacer este
filme y trasladar la acción a 1968 es que el público entienda a través
de esas aventuras lo que ocurre aquí y ahora. Historias de miedo
es una película sobre las mentiras tanto en la vida diaria como a lo
más altos niveles. Me asusta cómo se propagan los bulos por las redes
sociales, cómo se esparcen historias que pueden destruirte. Una historia
puede curarte, una historia también puede destruirte. La
responsabilidad hoy en día de los narradores, de los contadores de
historias es enorme. Y me refiero a cineastas, periodistas, escritores,
políticos, en general a todos. Como padre, tú cuentas historias a tus
hijos. Como amigo, me defino en lo que narro a mis colegas. Como
miembros de una sociedad, vivimos bajo la lluvia de las historias de los
Gobiernos, y hoy te dicen que somos distintos, que no confíes en los
otros, que solo confíes en el sistema. Eso es mentira".
En tiempos difíciles los políticos y la Iglesia, había subrayado Del Toro ante su estrella del Paseo de la Fama, viven en un mundo de fantasía. ¿Una fantasía siniestra? "Yo creo que ante eso debemos oponernos con el arte. Por eso uso mi cine para explicar la sociedad. Mira, en una primera versión La forma del agua se titulaba La forma del agua. Una historia de hadas en tiempos problemáticos". Al mexicano le asusta mucho "el imperio de las ideologías". Y se explaya: "La ideología es la sabiduría de los tontos, de los que no tienen interés por el otro. Esos dogmatismos me aterran".
La segunda vez que Guillermo del Toro pisó Los Ángeles estaba acabando la posproducción de Cronos (1993), su primer
Guillermo del Toro, en el rodaje de 'La cumbre escarlata'.
largometraje. "Vine con dos amigos y con muy muy poco dinero. Comprábamos la comida más barata y nos entreteníamos de la única manera gratis que encontramos: pasear por la calle". En lo económico su vida ha mejorado, aunque no es un director que logre fácilmente dinero para sus proyectos. "Sigo luchando y animo a todo el mundo a que crea en sus posibilidades, y en que puede marcar la diferencia". Además de inmigrante, ¿qué es Del Toro? "Soy un tipo raro [usa en inglés el término weird]. Tenemos que ser raros, ir a lo más profundo de nuestro interior. Solo si somos honestos y auténticos con nuestras almas nos mereceremos ser quien realmente somos".
Poco después del discurso, Del Toro, junto al director del filme, el noruego André Ovredal, atiende algunas llamadas de la prensa mundial. Cuando llega el turno de la entrevista con El PAÍS, Del Toro empieza en español, hasta que por deferencia a Ovredal —que sustituyó en la silla de director al mexicano cuando este tuvo que renunciar a ella porque se le acumulan los proyectos— se pasa al inglés.
Pregunta. Que haya un personaje latino en una película de terror, que llega a la típica ciudad mediana estadounidense, es una clara toma de posición. Una proclama que se acentúa tras la matanza de El Paso.
Respuesta. No fue una decisión accidental, sino que la tomé yo. La película se basa en los libros de Alvin Schwartz, que se desarrollan en los ochenta [y en los que no aparecen latinos]. Como mexicano, decidí incluir en mi guion a Ramón, ese chaval valiente, sofisticado. En pantalla, André ha logrado que sea más profundo y guapo de como lo escribí. Y lo que pasa entre él y la chica protagonista, Stella, es una hermosa amistad. No quisimos que hubiera relación sentimental, ni historia de amor con besos. El amor que aparece es un amor entre iguales, entre pares que se entienden. Muy a propósito buscamos una chica en las antípodas de las que aparecen en los anuncios de Coca-Cola. Es lista, espabilada, una chica con la que el espectador pueda sentirse identificado y a través de sus ojos apreciar también a Ramón.
R. Hablamos de cualquier presidente que tenga ese mismo perfil. Personajes así se han repetido en muchos lugares, por desgracia, a lo largo del tiempo. Y no solo en Estados Unidos. Hoy en día surgen políticos así hasta en España. Por supuesto, en todo el continente europeo. Vale para todo aquel que alcance el poder usando las mentiras y que se mantenga en su cargo con los bulos.
Pedro Almodóvar, maestro de productores
Guillermo del Toro lleva años produciendo a jóvenes directores y películas que le interesan. “A mí me enseñó Pedro Almodóvar cuando me produjo El espinazo del diablo.
Es el mejor productor que he tenido en mi vida. Me protegió, me apoyó,
me hizo sentir valioso. Recuerdo que tras una discusión siempre decía:
‘Esta es mi opinión, pero es tu película’. Y esa máxima la sigo con mis
directores”.
En tiempos difíciles los políticos y la Iglesia, había subrayado Del Toro ante su estrella del Paseo de la Fama, viven en un mundo de fantasía. ¿Una fantasía siniestra? "Yo creo que ante eso debemos oponernos con el arte. Por eso uso mi cine para explicar la sociedad. Mira, en una primera versión La forma del agua se titulaba La forma del agua. Una historia de hadas en tiempos problemáticos". Al mexicano le asusta mucho "el imperio de las ideologías". Y se explaya: "La ideología es la sabiduría de los tontos, de los que no tienen interés por el otro. Esos dogmatismos me aterran".
La segunda vez que Guillermo del Toro pisó Los Ángeles estaba acabando la posproducción de Cronos (1993), su primer
Guillermo del Toro, en el rodaje de 'La cumbre escarlata'.
largometraje. "Vine con dos amigos y con muy muy poco dinero. Comprábamos la comida más barata y nos entreteníamos de la única manera gratis que encontramos: pasear por la calle". En lo económico su vida ha mejorado, aunque no es un director que logre fácilmente dinero para sus proyectos. "Sigo luchando y animo a todo el mundo a que crea en sus posibilidades, y en que puede marcar la diferencia". Además de inmigrante, ¿qué es Del Toro? "Soy un tipo raro [usa en inglés el término weird]. Tenemos que ser raros, ir a lo más profundo de nuestro interior. Solo si somos honestos y auténticos con nuestras almas nos mereceremos ser quien realmente somos".
- TITULO: De seda y hierro - El programa de ocio y recreo de Trujillo congrega a 500 participantes ,. Domingo -11- Agosto,.
- El Domingo -11- Agosto a las 20:20 por La 2, foto,.
-
El programa de ocio y recreo de Trujillo congrega a 500 participantes.
Participantes en una de las actividades. Se ha celebrado durante las últimas semanas con actividades en diversos espacios,.
Este programa echó a andar el 22 de julio con un concurso de aquaerobic. A partir de ahí se han sucedido las actividades. Quizá, las que más aceptación han tenido han sido los juegos de agua dirigido a los más pequeños. Una de ellas, realizada con flotadores, también ha contado con una buena acogida por parte de adultos, según fuentes de la Concejalía de Deportes. Además, se han realizado juegos tradicionales, así como concursos y competiciones de tenis de mesa, petanca, la rana, futbolín, cuatrola, dardos y minigolf con un campo diseñado en Huertas e Ánimas.
Junto al entretenimiento y la diversión, uno de los objetivos ha sido llevar esas actividades a diversos lugares de la población, señalan estas mismas fuentes. Con ese fin, las propuestas se han desarrollado en el hogar de mayores de Huertas de Ánimas, en el merendero del parque de San Lázaro, así como en las piscinas municipales y en sus respectivos bares. Resaltan, igualmente, el apoyo de diversas casas comerciales que han hecho posible que se puedan entregar, en la clausura de ayer, diversos premios.
Acabado este programa, ahora se da paso a las actividades englobadas en el programa de fiestas y organizadas por la Concejalía de Deportes. Como en ediciones anteriores, se celebrarán los torneos de peñas, en categorías infantil y senior. También habrá juegos para los más pequeños. El plazo de las inscripciones se abrirá en los próximos días.