domingo, 2 de agosto de 2015

DOCUMENTOS TV, LUNES 3 AGOSTO,./ EL HORMIGUERO MARTES 4 AGOSTO - MERCEDES CARMONA,.

TÍTULO: DOCUMENTOS TV, LUNES 3 AGOSTO,.  

Documentos TV es un programa dedicado a la transmisión de documentales y reportajes de temática variada que se emite en La 2. foto

    Resultat d'imatges de DOCUMENTOS TV lunes 3 agosto
  • 23:50Documentos TV
     
    (Homo turisticus). En pocas décadas el número de turistas ha crecido exponencialmente, hay turismo de sol, terapéutico, deportivo, etc. Un turismo tan variado como individuos hay. Presentado por Manuel Sánchez Pereira.


TÍTULO: EL HORMIGUERO MARTES 4 AGOSTO - MERCEDES CARMONA,.

 MERCEDES CARMONA - foto
Mercedes Carmona, delegada de Servicios Sociales, frente al edificio municipal junto al Estadio. :: J. M. R
No sabes la pobreza que hay hasta que llegas a la delegacion,.
Mercedes Carmona, delegada de Servicios Sociales, frente al edificio municipal junto al Estadio. 
  • Mercedes Carmona , delegada de Servicios Sociales e Intermediación frente a desahucios apuesta por invertir en investigación de enfermedades raras y parálisis para mejorar la situación de las familias,.

Reconoce que desde siempre le ha atraído la política como medio para poder ayudar a los demás, sin duda, su principal vocación. Hace siete años, de la mano de Antonio Vélez, Mercedes Carmona comenzó a formar parte de Siex, partido con el que el PSOE formó coalición antes de las elecciones de mayo. Desde el triunfo de Antonio Rodríguez Osuna en las urnas preside una de las delegaciones más relevantes del Consistorio, Servicios Sociales. Carmona confiesa que aunque fue una sorpresa, encabezar esa delegación junto con Mayores, Migraciones y Cooperación, Vivienda e Intermediación frente a los Desahucios, hace que la mayoría de los días se lleve trabajo a casa.
¿Cuál es la situación en la que se encuentra Mérida en relación a los Servicios Sociales?
Tengo que reconocer que aterrizar en esta delegación fue una sorpresa. Al principio no tan grata, porque es una delegación a la que le tengo muchísimo respeto. Además, no sabía que esto estaba así. Hasta que no aterrizas no sabes realmente el problema que hay en Mérida. Ha habido una dejadez absoluta de los Servicios Sociales de la ciudad. Es la gran olvidada del Gobierno anterior. La pobreza ya no está en barrios ni en personas que por circunstancias económicas, sociales o familiares eran pobres. No, la pobreza se ha extendido a todas las clases sociales. Eso es muy triste. A mí no me enorgullece tener que poner en marcha una oficina de intermediación frente a los desahucios. Ni me enorgullece gestionar con entidades y recursos, en lugar de poder ofrecer formación y ayudas de otro tipo. Las entidades públicas estamos para dar soluciones, ayudar y dar la mano al ciudadano. Y creo que no se ha hecho en estos últimos años.
¿A cuántas persona atiende al día?
Hay días que si te digo que doce, a lo mejor me quedo corta. Y siempre son familias diferentes. Además es que atiendo sin cita previa. Es sorprendente, porque simplemente con tener la puerta abierta y escuchar la gente se va muy agradecida. Y es lo que he hecho toda mi vida, desde mi parcela particular, echar una mano a todo el que me ha pedido ayuda. Y no siempre con un fin económico, por mi trabajo. Es por vocación humanitaria. Y es lo que he intentado trasladar a los Servicios Sociales. Y trato de hacerlo escuchando y buscando soluciones. Tirando de todos los recursos municipales y administrativos que haya. De hecho, no me vale con que una administración me diga que no. Intento por todos los medios que me digan que sí, respetando los procedimientos y los protocolos, pero luchando por conseguir la solución que haga falta. Para que nadie se sienta desamparado, y que Mérida vuelva a ser ciudad.
Con la situación que describe, será complicado desconectar del trabajo...
Es complicado no llevarte el trabajo a casa. Hay casos que te lo ponen muy difícil. Te encuentras con todo tipo de situaciones. Desde familias que estaban bien y con trabajo, hasta los que sobreviven con la Renta Básica, sin ningún recurso más que ese, y son matrimonios con hijos, y en ocasiones cargas familiares. Algunos incluso están pendientes de cobrar la Renta Básica de enero y febrero. Necesitan ese dinero para poder comer. Hay personas que reconocen buscar comida en la basura, personas con formación, o que hasta hace poco trabajaban con puestos de jefe. No quiero que nadie se quede en casa si se ve en esa situación. No tengo una varita mágica, ojalá. Pero si no me plantean un problema, no puedo buscar una solución. Ahora estamos lidiando con esto, paliando una situación a la que no debíamos haber llegado. Ningún político debería haberlo consentido.
¿Ha habido algún caso que le haya impactado más que el resto?
Lo que más me impacta son las familias con niños con problemas de enfermedades graves, sin capacidad y sin recursos. No se les ha atendido como deberían. Yo he llorado al escuchar esas situaciones. Las ayudas para estas familias no se palian con conciertos, no se resuelven tampoco con la fila del euro, ni con eventos populistas. Se resuelve con gestión, si hay que hacer un protocolo de actuación y hay que invertir el dinero en unas máquinas, se hará. Pongámonos todos manos a la obra. Se trata de eso. De hacer política para gestionar por los ciudadanos, que son los que han confiado en nosotros. Con un solo caso que haya ya hay que movilizarse. Pongámonos en contacto con las organizaciones, con los colectivos y fundaciones que representan a este tipo de enfermedades. No se puede mirar a otro lado. La administración está para facilitar el camino.
Viviendas sociales
¿Habrá sorteo de viviendas sociales como en años anteriores?
Es cierto que se han entregado otros años. Pero la medida de urgencia que hemos puesto en marcha se centra en solicitar a la Junta de Extremadura entre ocho y diez viviendas para realojar a las familias que se encuentren inmersas en un procedimiento de desahucio, hasta que se les adjudique otra. No podemos dejarlos en la calle. Aun así, es un trámite que está paralizado.
En cuanto a las viviendas ocupadas de manera ilegal...
Me personé en la barriada que está sufriendo este problema después de tomar posesión, y no fui bien recibida por quien dice ser representante del colectivo 'La Corrala'. Él dice representar a un colectivo pero nadie me ha acreditado que ese señor represente a nadie. Aún así, llevo dos meses esperando que me vengan a contar cuál es realmente su situación y aquí no ha venido nadie. Yo les expliqué que si tenían una situación de exclusión social o de desamparo que vinieran a los Servicios Sociales que íbamos a estudiar su caso, como cualquier otra persona que entra por la delegación. Con el mismo rigor profesional de las trabajadoras sociales de esta delegación. No les habrá interesado. A día de hoy no ha venido nadie.
¿Tienen pensado hacer algo al respecto?
Servicios Sociales no va a prestar ayuda porque se entiende que no necesitan nada. Están allí porque les ha venido bien meterse en una vivienda. No son viviendas de propiedad pública, sino que son de particulares con un procedimiento judicial abierto. Me comprometí a ayudarles si venían a la delegación. Pero no lo han hecho.

EL HORMIGUERO LUNES 3 AGOSTO - CORY MACLAUCHLIN ESCRITOR,./ MUERE LA CANTANTE DE COUNTRY LYNN ANDERSON,.

 TÍTULO: EL HORMIGUERO LUNES 3 AGOSTO - CORY MACLAUCHLIN ESCRITOR,.

Ni excéntrico ni maldito


John Kennedy Toole.
John Kennedy Toole. / -foto

  • Una biografía sobre John Kennedy Toole desmonta malentendidos y tópicos,.

    Obra de culto que sigue haciendo reír a carcajadas a quien se acerca a ella, 'La conjura de los necios' es una enorme sátira que va camino de convertirse, si no lo es ya, en un clásico contemporáneo. Su autor John Kennedy Toole, continúa siendo un personaje brumoso. Muchos de los lectores de Toole tienden a ver en Ignatius Reilly el alter ego del novelista. Se trata, sin embargo, de una percepción equivocada. Un exhaustivo trabajo de investigación de Cory MacLauchlin desmonta muchos malentendidos sobre el autor.
    En su biografía sobre el escritor, 'Una mariposa en la máquina de escribir' (Anagrama), McLauchlin despoja al personaje de ese halo de malditismo que siempre le ha rodeado. El biógrafo argumenta que no estamos ni ante un loco ni un deprimido, sino ante un hombre muy centrado cuando cogía la pluma. Su trastorno mental, en todo caso, fue una consecuencia de avatares desgraciados. Y la sombra de su madre, con toda su carga de frustraciones y resentimientos, tampoco ayudó a un hombre que se sentía llamado a redimir a sus progenitores.
    Toole se quitó la vida en 1969, desilusionado por no encontrar editor para su novela. Si hubiera sabido la historia completa seguramente no se habría suicidado. 'La conjura de los necios', a cuya publicación se entregó en cuerpo y alma su madre Thelma, es hoy uno de esos libros que nunca pasan de moda y que sigue encontrando nuevos lectores.
    Perritos calientes
    Del escritor se han dicho demasiadas tonterías que sirven para caricaturizarlo como un excéntrico irredento. De acuerdo con que durante un tiempo despachó perritos calientes en un puesto ambulante y trabajó en una fábrica de pantalones, pero la realidad dista mucho del arquetipo. Era un hombre querido por sus amigos y respetado en los cenáculos académicos. No en balde, se convirtió en el profesor más joven del Hunter College, donde sus alumnos le tenían en gran estima. Por añadidura, estaba especialmente dotado para el baile, el teatro y la parodia.
    McLauchlin concede que la personalidad del escritor presentaba rasgos de paranoia y esquizofrenia, pero considera imposible que un tarado alumbrase una obra que ganó el Pulitzer. Si acaso, su madre sí que ejerció una presión enfermiza. Proyectó sobre su hijo algunos de sus tormentos, y como ella no tuvo éxito en la vida, quería que su vástago triunfase a toda costa. Los padres vieron en ese niño la solución a todos los problemas, la persona que les iba a compensar de todos los sinsabores sufridos. Esas ansias por ganar acabaron costándole muy caro. Puso demasiadas esperanzas en un libro con el que pretendía resolver los problemas económicos que atenazaban a sus padres. Ese deseo por obtener reconocimiento terminara devorándole.
    Escrita en Puerto Rico durante una etapa en que sirvió al Ejército, 'La conjura de los necios' gustó -con muchas reservas- al célebre editor Robert Gottlieb, aunque pensaban que «no trataba de nada». El desencanto y las recurrentes negativas de los editores socavaron fatalmente la entereza del escritor, quien un mal día conectó una manguera al tubo de escape de su coche y murió asfixiado.
    Sensacionalismo morboso
    La vida de Kennedy Toole había sido objeto de un par de tentativas biográficas que adolecían de imprecisiones y se decantaban por un sensacionalismo morboso. La investigación de MacLauchlin tiene la virtud de acudir a la fuentes directas y se nutre de numerosas entrevistas con amigos y familiares. Además, el libro está sustentado en la consulta rigurosa de archivos y documentos.
    MacLauchlin pudo hablar con el editor Gottlieb, al que Themla Toole hizo culpable del suicidio de su hijo por no dar su consentimiento a la publicación. Pero Gottilieb, según MacLauchlin, nunca rechazó de forma tajante la obra, pero sí que estaba convencido de que necesitaba cambios profundos.
    Nueva Orleans, escenario de las andanzas de su antihéroe, condicionó la existencia y la literatura de Toole. El biógrafo indaga en el estrafalario personaje y concluye que hay muchas similitudes entre el protagonista de la novela y una persona real, el profesor Bob Byrne, quien compartía con Ignatius muchas rarezas, el bigote y una irrefrenable pasión por los perritos calientes.

    TÍTULO: MUERE LA CANTANTE DE COUNTRY LYNN ANDERSON,.

    Resultat d'imatges de LYNN ANDERSON,.MÚSICA

    Ganadora de un premio Emmy en 1971

    Muere la cantante de country estadounidense Lynn Anderson a los 67 años,.

    • Muere Lynn Anderson, intérprete de la famosa 'Rose Garden'. foto
    La cantante de country estadounidense Lynn Anderson, ganadora de un premio Emmy en 1971 por su interpretación de 'Rose Garden', murió de un ataque al corazón la noche del jueves al viernes, informó el centro hospitalario Vanderbilt University Medical Center, donde se encontraba ingresada.
    Anderson había sido hospitalizada en este centro de Nashville (Tennessee) por una neumonía tras regresar de un viaje a Italia.
    La cantante, fundamentalmente conocida por su interpretación de la canción 'Rose Garden', escrita por Joe South, nació el 26 de septiembre de 1947 en Grand Forks (Dakota del Norte), aunque poco después su familia se trasladó a California, donde pasó su juventud.
    Hija de músicos, su andadura particular empezó en 1966, cuando lanzó su primer "single", 'For Better or for Worse' en dueto con Jerry Lane.
    El mayor éxito de su carrera, y por el que es recordada hasta el día de hoy en EEUU, es su interpretación en los 70 de "Rose Garden", que le valió un Grammy en 1971 y cuya popularidad la propia cantante atribuyó al componente emocional de la canción, que conectó perfectamente con una sociedad "que trataba de recuperarse de Vietnam".
    "Esta canción destaca que puedes hacer algo a partir de la nada. Te dispones a ello y lo sacas adelante", solía indicar Anderson en referencia a la canción.

SILENCIO POR FAVOR - Economía y comportamiento con Richard Blundell,./ EL BLOC DEL CARTERO - LA CARTA DE LA SEMANA - MIRADAS EN BLANCO,.

TÍTULO: SILENCIO POR FAVOR -  Economía y comportamiento con Richard Blundell,.

Economía y comportamiento con Richard Blundell

Británico del 52, economista. Analiza cómo influye la economía en el comportamiento humano. Sus conclusiones repercuten en las políticas europeas. Ha recibido el Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento.

XLSemanal. Ustedes los economistas no fueron capaces de prevenir la crisis...
Richard Blundell. Es cierto. No la vimos venir. Ha sido una lección de humildad. Aunque también hemos aprendido mucho analizando las razones por las que no se pudo predecir.
XL. ¿Conclusiones?
R.B. A ver, llevábamos un ritmo de crecimiento insostenible y era de esperar un cambio de ciclo. Pero lo difícil es prevenir el momento exacto en que se producirá. Predecir un gran evento macroeconómico siempre será difícil.
XL. Deme una buena noticia: ¿estamos saliendo?
R.B. Sorprende el tiempo que nos está llevando salir de esta recesión. El crecimiento de la productividad suele llegar antes. Comparado con otras crisis históricas, tardaremos más.
XL. ¿Y por qué?
R.B. Tiene que ver con la intensidad de la crisis financiera que hay detrás de la recesión y también con la crisis productiva.
XL. Usted usa datos macroeconómicos para entender nuestro comportamiento. ¿Es posible tal cosa?
R.B. ¡Es muy difícil! Al contrario de otros campos de la ciencia, aquí todos los actores, los individuos, las familias, las compañías, las firmas... interactúan entre sí. Cambian el ambiente económico, las políticas... ¡Todo cambia!
XL. Y, ahora, la crisis...
R.B. Bueno, ahora entendemos mejor cómo reaccionamos ante un ambiente adverso.
XL. Pues este lo es.
R.B. ¡Absolutamente! Es un mal de ojo por partida doble.
XL. Me está usted animando. Explíquese.
R.B. A menudo en las crisis se producen despidos. Algo terrible. Afecta a sus vidas, a sus ingresos, pero la gente por lo menos, en otras crisis, tenía otros recursos a los que recurrir.
XL. ¿Cuáles?
R.B. Esta crisis es de origen financiero, y las familias no solo ven complicado su acceso al trabajo, también sus bienes pierden valor, sus recursos disminuyen... Es un doble golpe. Pero el Estado puede ayudar.
XL. ¿Cómo?
R.B. Hay que hilar muy fino. El sistema de impuestos debe estar bien diseñado, garantizar el estado del bienestar, las pensiones...
XL. ¿Vamos por el buen camino?
R.B. Antes de la crisis había muchas cosas que mejorar. ¡Ahora, además, es urgente!
XL. Diga, diga...
R.B. Tenemos que mejorar la situación de los menos favorecidos. Pero sin desincentivar el trabajo y la capacidad de ahorrar.
XL. Más...
R.B. Los contratos de trabajo deberían revisarse. España es un buen ejemplo de un sitio donde esto se podría mejorar.
XL. ¿En qué sentido?
R.B. Si hay demasiada gente con contrato temporal, tú no tendrás los incentivos necesarios para invertir en mejorar tus capacidades, y las firmas no los tendrán para invertir en gente.
XL. Usted trata de influir en los gobiernos. ¿Le escuchan?
R.B. Los investigadores no esperamos que nuestros estudios se traduzcan en un cambio inmediato. Es como cuando creas un fármaco, pasar de la investigación a la práctica clínica lleva su tiempo.
XL. Y usted ¿qué fármacos sugiere?
R.B. La tasación de los servicios financieros, por ejemplo. Tasar de la misma manera a todas las fuentes de ingresos.
XL. ¿Las políticas apropiadas nos convierten en mejores personas?
R.B. No hablaría de ser mejor o peor persona. Pero podemos cambiar el comportamiento a través de leyes y políticas.
XL. Por ejemplo. 
R.B. Ofrecer un seguro en tiempos difíciles, como las pensiones o el desempleo... La sociedad es buena a la hora de proveer esas cosas. Los individuos, menos. Por eso, las políticas son tan importantes.
Pregunta a bocajarro
¿Es optimista sobre la naturaleza humana?
Soy optimista en la medida en que corregimos nuestro comportamiento cuando vemos que es nocivo; por ejemplo, el tabaquismo. Pero debemos acompañarlo con las políticas apropiadas.

TÍTULO: EL BLOC DEL CARTERO - LA CARTA DE LA SEMANA -  MIRADAS EN BLANCO,.

Foto - Reloj,.

reloj.jpegMuy poco después de dimitir como ministro de las maltrechas finanzas de su país, Yanis Varufakis concedía una entrevista en la que describe las discusiones que tuvieron lugar en el llamado (con denominación tan mostrenca como inorgánica, como corresponde a un ente sin humanidad) 'eurogrupo', antes de que Grecia fuese por completo rendida. Por supuesto, las simpatías que el mencionado Varufakis nos despierta son por completo nulas (aunque le reconocemos algo más de dignidad y vergüenza torera que a su jefe de filas, que después de organizar una pantomima de referendo se allanó ante las exigencias del 'eurogrupo' como un patético felpudo); pero hay en su entrevista una autenticidad impetuosa de la que resulta difícil dudar.
Por supuesto, Varufakis es un iluso (o un demagogo) que sigue alimentando el sueño de una democracia de fantasía. Así se percibe, por ejemplo, cuando define ese mefítico 'eurogrupo' como un ente «sin existencia legalmente reconocida, sin un tratado que lo sustente, pero con el máximo poder para decidir sobre las vidas de los europeos». Y añade: «No responde ante nadie, no hay actas de las reuniones, y es confidencial. De modo que ningún ciudadano se entera nunca de lo que se discute, a pesar de que sus decisiones son casi de vida o muerte». La descripción de Varufakis, amén de pavorosa, es muy atinada; pero delata su propensión demagógica cuando establece una distinción implícita entre este protervo 'eurogrupo' y las instituciones políticas cuyos miembros son nombrados mediante procesos democráticos y cuyo funcionamiento se rige legalmente, al estilo de los parlamentos o los gobiernos. Esta distinción implícita es grotesca; y como prueba tenemos, sin ir más lejos, la actitud adoptada por el gobierno y el parlamento griegos, que se pasaron por la cruz del pantalón el muy democrático resultado del referendo que ellos mismos habían convocado. En realidad, este execrable 'eurogrupo', al igual que los parlamentos y gobiernos, no son sino expresiones diversas (unas más descaradamente opacas, otras más fingidamente democráticas) de una amalgama de poder oligárquico al servicio del Dinero en donde el pueblo, reducido a masa cretinizada sin representación efectiva (¡ciudadanía!) es un mero paisaje de fondo al que se le arroja la carnaza de la demogresca, para que se desfogue. Y el Dinero sólo permite que alcancen poltrona en tales instituciones (lo mismo en las descaradamente opacas que en las fingidamente democráticas) aquellos sujetos cuyas dotes de felpudo ha probado previamente, aunque a veces a las masas cretinizadas se les ofrezcan unos tipos con retórica comunista, que tras mucho aspaviento acaban arrojando a sus pueblos a las fauces del Dinero, igual que haría el liberal o socialdemócrata de turno.
En su entrevista, Varufakis explica cómo obra este 'eurogrupo': «Se negaban por completo a debatir argumentos económicos. Era plantear un argumento que te habías preparado mucho para asegurar su coherencia lógica y encontrarte con miradas en blanco. Como si no hubieras hablado». Y concluye: «La negociación fue interminable porque la otra parte se negaba a hacer concesiones. Insistían en un acuerdo global, es decir, en hablar de todo, que, en mi opinión, equivale a no querer hablar de nada. No hacían ninguna propuesta. Por ejemplo, con el IVA. Después de pedirnos que les diéramos todos los datos de las empresas estatales, que rellenáramos infinitos cuestionarios y presentáramos nuestras ideas, antes de poder negociar un acuerdo cambiaban de tema y empezaban a hablar, por ejemplo, de privatizaciones. Les presentábamos nuestra propuesta, la rechazaban y pasaban a hablar de las pensiones, o del mercado de trabajo, y así sucesivamente». Es una descripción que parece salida de la pluma de Kafka, tan vívida y pesadillesca que no puede ser inventada. Esos tipos con «miradas en blanco», programados como un electrodoméstico, zombis impasibles que llegan a las reuniones con las decisiones tomadas (con las decisiones de su Amo interiorizadas de un modo robótico) son simples sicarios de la plutocracia, marionetas sin otro designio que sacrificar a los pueblos y abastecer las apetencias del Dinero.
Este es el meollo último de la amalgama de poder que nos tiraniza, tras el decorado retórico en donde las masas se agotan, enzarzadas en una demogresca con sus negociados de izquierdas y derechas: unos tipos con la mirada en blanco, como recién salidos de una sesión de hipnosis, que sirven a su Amo. Y las masas, entretanto, votando como descosidas, para lograr (risum teneatis) el «cambio»; que, como nos enseñaba Gómez Dávila, consiste en avanzar más rápidamente en la misma dirección.

EN PRIMER PLANO, ENTREVISTA - Diálogo de pura raza: Lolita & Pastora,./ REVISTA XL SEMANAL - PORTADA - Rory Mcilroy: "Cuando te obsesionas,las cosas se tuercen",.

TÍTULO: EN PRIMER PLANO, ENTREVISTA - Diálogo de pura raza: Lolita & Pastora,.

LolitaEntrevista  / fotos

Diálogo de pura raza: Lolita & Pastora

Las dos son gitanas por parte de padre. Y eso marca el carácter, dicen. Este verano se suben juntas al escenario con la obra 'La asamblea de las mujeres', de Aristófanes. De mujeres, del amor y de cómo estar espléndidas pasados los cincuenta hablamos con ellas.
Ha sido fácil y divertido quedar con las dos a la vez porque son casi hermanas. Se conocen desde que nacieron porque sus familias siempre fueron amigas. Pero es que, además, Pastora Vega y Lolita Flores coinciden este verano sobre el escenario. ¿El responsable? Juan Echanove, el director de La asamblea de las mujeres, de Aristófanes, que ambas representan en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida (del 29 de julio al 2 de agosto y del 5 al 9 de agosto). Aprovechamos la ocasión para hablar con las dos actrices sobre el gobierno de las mujeres y sobre la vida después de los 50.

XLSemanal. Festival de Mérida, palabras mayores... 
Lolita Flores. Desde luego. Yo nunca había estado, ni siquiera de espectadora.
Pastora Vega. Yo sí; en varias ocasiones como espectadora y este año entregando un premio. 
XL. En La asamblea de las mujeres, Lolita es Praxágora, la que manda...
Pastora. Es la cabecilla del golpe de Estado en Atenas, sí.
Lolita. Pero no mando tanto, ¿eh? Luego, en la vida real, no soy tan fuerte como la gente se imagina. Sí tengo mucho temperamento, pero la fortaleza no tiene nada que ver con eso. Se me va la fuerza por la boca.
XL. Llama la atención que en Grecia, hoy en día, no haya una sola mujer en el Gobierno ni en el Parlamento.
Pastora. Es bastante sospechoso, sí. Habría que hacer una investigación de por qué las mujeres en Grecia o no se presentan o, si lo hacen, por qué no les votan [ríe].
Lolita. Bueno, todo es cíclico. A lo mejor nos sorprenden y, en un futuro, en Grecia quienes triunfan son las mujeres. Pero yo lo que quiero es que ese país salga adelante, con una mujer al frente o con un hombre, me da igual.
XL. Dicen que son ustedes de armas tomar, ¿exageran?
Pastora. Depende. Si esta expresión tiene una connotación negativa, pues no. Es cierto que somos mujeres de carácter, valientes, que cogemos los toros por los cuernos, vengan de donde vengan, que sacamos adelante a nuestras familias. Es verdad que somos muy de clan, muy solidarias con nuestra gente, con nuestros amigos, trabajadoras y que, cuando hay que dar el do de pecho, no nos escondemos debajo de una mesa. 
Lolita. Yo creo que la raza influye. Pastora es gitana por parte de padre y yo también. Aunque yo soy un poquito más que ella porque mi padre era puro puro [se ríe].
XL. ¿Se creen más bravas por ser gitanas?
Lolita. Vamos a ver, yo pienso que influye mucho el hecho de tener la familia tan arraigada.
Pastora. Es por el sentido familiar, que no quiere decir que solo los gitanos lo tengan. Hay gente paya que lo tiene igual o más. Pero sí es verdad que es un rasgo inherente a nuestra raza.
XL. Pero si el patriarca gitano siempre es varón...
Lolita. En nuestras familias no ha habido patriarcas. Y lo que quiero decir es que la gente se piensa que somos mujeres de armas tomar porque somos morenas, porque somos gitanas, porque tenemos rasgos fuertes y porque parece que nos vamos comiendo el mundo. Y no es así porque, luego, somos seres humanos como los demás.
XL. ¿Sus familias son matriarcados?
Pastora. Pues más bien sí. En mi casa éramos cuatro hermanas y estaba llena de primas, de amigas... Y cuando mi bisabuela vivía, que era un personaje increíble, el matriarcado era total. No necesitaba más que hacer un gesto para poner firmes a todos; sobre todo en los momentos difíciles, porque ahí es cuando se ve quién lleva la cuestión.
Lolita. En mi familia, mi padre decía la última palabra, pero la que decidía todo era mi madre. Y en mi casa, ahora, mi hija y yo somos las que partimos el bacalao.
XL. Pero la mujer en ocasiones está sometida al marido.
Lolita. No. Yo he estado sola mucho tiempo: me casé, me divorcié, estuve diez años sola, luego me volví a casar, ahora estoy otra vez separada, y siempre me he sentido libre. Aunque también es verdad que el mundo de la farándula es mucho más libre que otros.
Pastora. Todavía hay muchos fantasmas con respecto a la mujer libre e independiente. En general, la mirada sobre la realidad sigue siendo machista. Queda mucho por hacer.
XL. Cambio de tercio, ¿cumplir 50 años fue un impacto?
Lolita. No, yo ya cumplí los 50 hace siete años.
Pastora. Y yo hace cinco; ya ha pasado un montón de tiempo.
XL. ¿No les molesta reconocer la edad?
Pastora. No; y si nos importara nos daría igual, porque cada vez que salimos en una revista lo ponen entre paréntesis: «Lolita, en la playa tomando el sol (57)»; «Pastora, de vacaciones (55)». Como si a la gente le importara saber si tengo 55 o 53. Da igual, hemos pasado los 50 y no hay que pedir perdón por ello.
Lolita. Lo que hay que hacer es dar gracias a Dios porque estamos de puta madre [se ríen].
 XL. La pregunta iba más sobre si el cambio de década impone. Hay a quien le da vértigo...
Pastora. ¿Cómo no va a imponer? Me impuso cumplir los 30, los 40, los 50. Pero esto es lo que hay: cumplir años, envejecer e irse. Lo que quiero es estar lo mejor posible en cada etapa.
Lolita. A mí, sin embargo, me da miedo cumplir años; simplemente porque sé que me queda menos tiempo, nada más. Y eso me asusta porque me gusta mucho la vida. Además, creo que le hago mucha falta a mis hijos y no me gustaría morirme; por eso, me preocupan los años.
XL. ¿Se quitarían años si pudieran? 
Lolita. Yo es que no me salvo ni de coña porque cuando nací fui la niña más retratada de ese año. Todo el mundo sabe que yo vine al mundo el 6 de mayo de 1959.
Pastora. Jamás; pero tengo muchas amigas que, ridículamente, se quitan siempre dos o tres años. Y yo me pregunto si hay tanta diferencia entre tener 54 o 56. Para mí es un honor decir: «Tengo 55 años y estoy feliz, con ganas de vivir y me siento bien». Y el día que tenga 70 habrá que encajarlo y torear el toro que te toque.
XL. Parece que las actrices tienen fecha de caducidad antes que los actores...
Lolita. ¡Como los yogures! [se ríen].
Pastora. Yo creo que no, mira sino a Meryl Streep. Pero es verdad que el universo es machista: la mayoría de los personajes importantes están escritos para hombres. Y, además, un hombre como Harrison Ford, con 70 años, es todavía un galanazo que se separa y se va con una que tiene 35 años menos. Si eso le ocurre a una mujer, es una loca que se ha ido con uno que podría ser su nieto. En los papeles que escriben, siempre somos la madre de..., la abuela de..., la vecina de... ¡Coño! ¿Qué pasa? ¿Que no puedo yo con 55 años vivir una historia de amor? La realidad no es así, joder. A ver si se enteran los guionistas.
Lolita. Yo creo que la edad también depende del físico que tengas. Yo veo chicas con 25 y 30 años que...
Pastora. ¡Que están hechas unos zorros! [se ríen].
Lolita. No tienen mis piernas.
Pastora. ¡Y ya quisieran tus muslos!
Lolita. Y tengo 57 años y todavía no he pasado por quirófano. ¡Espérate al día que pase! [se ríen].
XL. ¿Así que no hay pacto con el diablo ni con cirujanos ni con el Photoshop?
Pastora. ¡No! Yo me cuido bastante, pero sin obsesionarme.
Lolita. Yo lo único que hago es darle gracias a Dios porque estoy más cerca de los 60 que de los 50 y me encuentro estupenda; aunque me cuido mucho, eso sí. El único vicio que tengo es el de fumar, que, con esta vida de estrés que yo llevo, es más complicado de quitar; pero lo conseguiré.
XL. Las arrugas las combaten bien. 
Lolita. Yo tengo algunas, pero no demasiadas.
Pastora. Es verdad que no todo el mundo tiene ni tiempo ni ganas ni presupuesto, pero hay cada vez más alternativas a un estironazo de esos que les deja a todos las caras iguales. Hay tratamientos puntuales que te ayudan a tener mejor aspecto.
Lolita. Pero para el descuelgue en los brazos, por ejemplo, no hay tratamiento.
Pastora. Sí, sí que lo hay y te dura un año. Ya te contaré. Yo, en un futuro, me lo pienso hacer.
Lolita. Pero si estás muy bien de brazos.
Pastora. Yo voy al gimnasio, camino mucho y, si un día me paso comiendo o bebiendo, al día siguiente me dedico a hacer zumos y me hago una limpieza de colon.
Lolita. Yo no hago nada, la verdad; solo yoga de vez en cuando.
XL. ¿Cada vez es mayor la parte de estantería que ocupan en el cuarto de baño?
Pastora. La estantería es toda mía [se ríe]. No comparto cuarto de baño con nadie porque yo vivo sola con mis hijos. Pero, si tuviera que compartir la estantería con alguien, sería horrible porque no le quedaría hueco. 
Lolita. Yo tampoco lo comparto [se ríe]; bueno, con mi hijo Guillermo porque a veces prefiere usar mi baño.
Pastora. Yo me cuido la cara y me pongo buenas cremas y, de vez en cuando, me hago algún tratamiento de vitaminas.
Lolita. Yo soy de las que piensan que lo que es importantísimo es lavarse la cara antes de acostarte, llegues a la hora que llegues. He tenido esa disciplina toda mi vida: primero, me la lavo con agua y jabón y, después, me pongo la crema, aunque sea ya metida en la cama.
XL. Y ¿para qué no tienen ya edad? 
Pastora.Para irme de aventura con una mochila sin saber dónde voy a dormir. Yo quiero dormir en un sitio muy bueno, donde haya una ducha muy buena.
Lolita. Pues depende; porque, si es por amor, yo sí cogería una mochila y hasta una tienda de campaña.

TÍTULO: REVISTA XL SEMANAL - PORTADA -  Rory Mcilroy: "Cuando te obsesionas,las cosas se tuercen",.

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Rory Mcilroy: Rory Mcilroy: "Cuando te obsesionas,las cosas se tuercen"

Es el mejor golfista del mundo. Un número uno que va de frente. Ahora, una lesión ha frenado su carrera por unos meses, pero el campeón norirlandés es capaz de seguir dando lecciones. Es lo que hace en esta entrevista. Y no solo sobre golf, también sobre lo que de verdad importa en la vida.
Nunca olvido que mi padre tenía tres empleos a la vez y que trabajaba más de 90 horas a la semana. Apenas libraba miércoles por la noche y domingos por la tarde. Estoy seguro de que se moría de ganas de quedarse en casa sin hacer nada, pero yo siempre lo arrastraba al campo de golf o a la cancha de prácticas. Durante mi niñez y adolescencia, mi padre hacía lo que yo quería, y no lo que a él le hubiera gustado hacer. Y lo mismo pasaba con mi madre, que, cuando yo tenía nueve o diez años, trabajaba todas las horas del mundo para pagarme las inscripciones en los torneos».
Rory McIlroy es un norirlandés bajito y de ojos brillantes, un número uno del golf capaz de emocionarse hasta las lágrimas cuando habla de sus padres: Rosie y Gerry. Él trabajaba de barman y como empleado de limpieza y, al igual que ella, hacía horas extras por la noche en una fábrica para costear la formación del pequeño Rory como golfista.
McIlroy, de 26 años, se inició en el golf con dos. Su padre era muy aficionado a este deporte, pero, a diferencia del progenitor de Tiger Woods, el del irlandés nunca ambicionó que se convirtiera en profesional.
«Cuando eres tan pequeño, no percibes la magnitud de su sacrificio. Yo pensaba que era lo normal. Hoy sé que de normal no tenía nada. Todo lo hacían por mí, para ayudarme a ser mejor jugador -confiesa el hijo pródigo, progresivamente emocionado-. Tampoco soñaban con que me convirtiera en figura. De hecho, trataron de que me interesara por otros deportes, haciendo siempre hincapié en la importancia de los estudios».
Lo que de verdad importa
McIlroy se detiene. Traga saliva. Sus ojos enrojecen. Necesita unos segundos para rehacerse, mientras sonríe como pidiendo perdón. El número uno mundial se muestra meditabundo, como si se descubriera a sí mismo al reflexionar sobre lo que de verdad importa en la vida.
Incluso hoy sus padres no aspiran a vivir a través del hijo famosísimo; se limitan a brindarle apoyo constante. «Andan siempre a caballo entre Irlanda y Estados Unidos -explica-, de forma que nos vemos con mucha frecuencia. Eso sí, nunca voy a poder hacer por ellos lo que en su momento hicieron por mí. Nunca voy a poder pagar esa deuda. Solo espero que sepan lo mucho que significan para mí. No hay nada más importante en el mundo».
El trono de McIlroy se tambalea estos días debido a una lesión que le ha impedido jugar ya el Open Británico y que lo apartará también del torneo de la PGA -del 13 al 16 de agosto-, último major del calendario. Aun así es uno de los deportistas con mayores ingresos: 48,3 millones de dólares anuales. Una cifra astronómica que no se entiende sin la figura de Tiger Woods, el hombre que popularizó este deporte hasta convertirlo en una industria gigantesca, con mareantes premios en metálico. El ganador de 14 'grandes', de hecho, sigue siendo la principal referencia para los patrocinadores, aunque el hombre no levante cabeza desde 2009, tras confesar sus infidelidades conyugales. Woods, que no se lleva un major desde 2008, ingresa mucho más que el irlandés fuera de los torneos.
El pastel, en todo caso, da para mucho. Según Bloomberg, se trata de un negocio con beneficios anuales de 70.000 millones de dólares en Estados Unidos y otros 15.100 millones en Europa, mientras crece el número de profesionales y aficionados en Asia y América Latina.
La asignatura pendiente
McIlroy es el número uno, sí, pero también es uno de los jugadores con mayor talento en la historia del golf. A sus 26 años ya ha ganado cuatro majors, los torneos que componen el Grand Slam: Open Británico (2014), Open USA (2011) y PGA (2012 y 2014). Le falta, eso sí, el Masters de Augusta. Un déficit grave para un número uno.
Su lesión, además, en el curso de una pachanga futbolera con sus amigos ha puesto en peligro su reinado ante la huracanada irrupción de un chaval de 21 años llamado Jordan Spieth, triunfador este año en el Masters y en el Open USA. McIlroy, que no volverá a jugar hasta septiembre, podría perder su trono este mes ante el empuje de Spieth. Una circunstancia que el vigente rey del golf lleva con naturalidad: «Las cosas que hace Jordan me sirven de motivación. Es bueno tener rivales que te empujan».
Pregunto a McIlroy cómo se las arregla para preservar la ambición durante todos sus años de formación y los millares de horas pasadas en el campo durante su etapa profesional. Las recompensas, sin duda, son enormes, pero ¿alguna vez hubiera preferido dedicarse a otra cosa, llevar una vida de otro tipo?
Sonríe. «Cuando tenía 17 años, acababa de ganar un importante torneo para aficionados en Irlanda y mi padre me estaba llevando a casa en coche. Recuerdo, sin embargo, que en aquel momento no sentía nada. Había ganado, pero no estaba contento. Le dije a mi padre que no quería seguir jugando al golf. Se lo tomó con calma y dijo: 'Bueno, pues no pasa nada. Dedícate a otra cosa que te guste. Tu madre y yo seguiremos apoyándote, como siempre'. Durante tres o cuatro días ni toqué los palos, pero entonces volví a sentir la comezón del juego. Simplemente, necesitaba un respiro. Comprendí que, por mucho que te guste una cosa, de vez en cuando necesitas olvidarte un poco de ella».
El momento más significativo de su carrera profesional sucedió el 10 de abril de 2011. McIlroy había llegado al punto culminante de su primer gran torneo, encabezaba el Masters de Augusta y se disponía a cubrir los últimos nueve hoyos en la ronda final. La pifió de forma espectacular en el golpe de salida del décimo hoyo y, a continuación, se vino abajo. En los hoyos decimoprimero y decimosegundo ejecutó un triple bogey, seguido por un bogey y por un doble bogey. Fue una humillación pública tan grande que muchos comentaristas se preguntaron si algún día se recuperaría de lo sucedido. Ian Poulter, su compañero en la Ryder-Cup, publicó un tuit en el que se veía una señalización con la leyenda: «Primeros auxilios para los que tengan ganas de vomitar».

Promesas personales
Pero McIlroy es un hombre resuelto. «Necesitaba transformar la decepción en motivación -afirma-. Me dije que, en realidad, lo sucedido no tenía nada que ver con quien yo era, con quien yo quería ser. Es decir, un competidor duro de roer, capaz de mantener la cabeza fría. Me negaba a ser de esos que se desmoronan bajo la presión y me prometí que nunca más iba a sucederme una cosa igual. Me fui a casa y analicé bien lo ocurrido. Miré el vídeo una y otra vez. Hablé con unas cuantas personas y me di cuenta de que el problema era que estaba demasiado obsesionado. No hacía más que pensar en aquella ronda final a todas horas del día y de la noche. Pensaba en lo que podía salir bien, pero también en lo que podía salir mal. Estaba demasiado tenso y angustiado. Ese no es el estado mental adecuado a la hora de salir al campo a jugar».
Dos meses después aplicó su nueva estrategia mental. La víspera de la jornada final del Open USA iba por delante con una ventaja de ocho golpes. En lugar de pasarse la noche dándole vueltas en la cabeza a la ronda final, desconectó. «La lección que aprendí en Augusta, y a la que trato de seguir ateniéndome cada vez que llega una ronda final, es que tengo que abstraerme de los nervios y de la presión. Incluso he aprendido a desconectar por completo entre un golpe y el siguiente. Ahora hablo con mi caddie sobre la película o el partido de fútbol que estuve viendo por la noche. A veces, yo mismo animo a J. P. (su caddie) a que me hable de una película, de lo que sea, para olvidarme de la presión y vuelvo a concentrarme en el momento de golpear la bola. De ese modo, no tengo tiempo para pensar en lo que puede salir mal o que, de pronto, me entren dudas. Solo tengo tiempo para considerar el golpe que voy a ejecutar, sacar el palo de la bolsa y visualizar lo que voy a hacer a continuación. Soy una persona muy visual, y lo que hago es crear una imagen de la trayectoria de la pelota, de lo que la bola va a hacer. Y a continuación ejecuto ese golpe final».
Una estrella de nueve años
A los dos años, Rory ya era capaz de enviar una pelota a 40 metros con el palo de plástico que su padre le había comprado. A los nueve, la televisión de Irlanda del Norte lo grabó ejercitándose de una forma insólita: enviando una bola tras otra al tambor de la lavadora de su madre; fue por entonces cuando empezó a ganar torneos en Estados Unidos. Hoy sigue sintiéndose empujado por el poderoso afán de convertirse en el mejor golfista de todos. Su ética del trabajo es irreprochable. «Me digo que ha llegado el momento de dejar mi impronta en el juego», explica. 
A principios de 2013, McIlroy pasó por otro bache en su carrera profesional tras firmar un contrato con Nike por valor de 78 millones de dólares a lo largo de cinco años. La firma tuvo lugar por todo lo alto en el esplendoroso hotel Fairmont Bab Al Bahr de Abu Dabi. Casi de forma inmediata, su forma se resintió. «Era la primera vez que un patrocinador de los grandes depositaba tantas expectativas en mí -observa-. Todo el mundo andaba alborotado y nunca había experimentado nada semejante. Había ganado torneos importantes, pero hasta entonces seguía jugando con los mismos palos que cuando tenía 15 años».
«Voy a serle sincero: después de aquel follón en Abu Dabi, me sentí bajo una presión increíble. Durante un tiempo no jugué a mi mejor nivel. Quizá ponía demasiado empeño en demostrar que lo sucedido no iba a afectarme para nada a la hora de jugar. Necesitaba seguir entrenando como siempre, mirar al pasado para seguir adelante. Me estaba obsesionando demasiado en el plano mental, y eso nunca es bueno. Muchas veces las cosas se tuercen en momentos así». Fue otra lección sobre la importancia de la mente en este deporte, donde el factor psicológico resulta más determinante que en cualquier otra disciplina.
McIlroy vive ahora en Palm Beach, Florida, y tras la difícil separación de la tenista danesa Caroline Wozniacki, ex número uno del ranking femenino, ahora tiene un nuevo amor. Su nombre es Erica Stoll, tiene 29 años y es empleada de la PGA. «Estoy muy satisfecho con mi vida sentimental -indica-. Tampoco hemos dado mucha publicidad a nuestra relación. Erica es estadounidense, por eso me gusta pasar temporadas en Palm Beach. Los últimos seis o siete meses han sido muy bonitos. Este aspecto de mi vida marcha sobre ruedas».
«Soy una persona casera. Me encanta volver a Irlanda y reunirme con los amigos de siempre. No soy muy dado a las fiestas con alfombra roja o a relacionarme con los famosos. Esas cosas no me van. Lo paso mucho mejor en casa, con los amigos y la familia, con la gente que me conoce de verdad y sabe bien cómo soy. No es que sea una persona en público y otra en privado. En mi barrio tengo media docena de colegas que me conocen desde que era un chaval. Toda esta gente es muy importante para mí. Es sencillo, me resulta más fácil relajarme y ser yo mismo cuando estoy con gente que me conoce desde hace mucho tiempo».
El encuentro toca a su fin y sus padres regresan a la conversación, al rememorar su sonado fracaso en el Masters de 2011. Entonces, McIlroy rompió a llorar al hablar por teléfono con su madre. «Cuando ves llorar a una persona a la que quieres -recuerda-, es inevitable que te emociones». La otra vez que estuvo a punto de romper en llanto tras un partido fue en circunstancias muy distintas. En el Open Británico de 2014 le dedicó el triunfo a su madre, con la que se abrazó ante todo el mundo en el mismo green. Era la primera vez que ella estaba presente durante la ronda final de un torneo de relumbrón. «Se puso a llorar como una magdalena y tuve que reprimirme para no hacer otro tanto -cuenta-. Fue un momento muy especial».
Los grandes duelos del golf
Años sesenta
Arnold Palmer & Jack Nicklaus

En los primeros momentos del golf moderno, ya con la irrupción de la televisión y la publicidad, Palmer y Nicklaus monopolizaron de tal forma los triunfos en los grandes torneos que se los consideraba alternativamente los mejores del mundo. Todavía no existía el ranking mundial. El primero, The King, contaba con una legión de seguidores («el ejército de Arnie») que disfrutaron de sus siete majors entre 1958 y 1964. El Oso Dorado, por su parte, tuvo una carrera mucho más longeva. Logró también siete 'grandes' en esa época inicial (el último ante El Rey) y 11 más a lo largo de su trayectoria. Todavía hoy, nadie tiene más que él: 18.
Años ochenta 
Bernhard Langer & Seve Ballesteros


La irrupción de estrellas de todas partes del mundo, y el hecho de que no todas participaran en el PGA Tour regularmente, forzó la creación de una lista universal, que empezó a funcionar en 1986 con Bernhard Langer como primer líder tras ganar el Masters de Augusta. Sin embargo, al alemán le duró solo tres semanas el puesto. Seve Ballesteros se lo arrebató y lo conservó durante 61 semanas de manera alternativa a lo largo de las siguientes tres temporadas. Su rivalidad se trasladó sobre todo a los torneos del Circuito Europeo, aunque luego nació una gran amistad entre ellos.
Años noventa 
Greg Norman & Nick Faldo


Aunque hubo incursiones de otras figuras a lo largo de esta década (Ian Woosnam, Nick Price o Tiger Woods), el protagonismo se lo llevaron el australiano Greg Norman y el inglés Nick Faldo. El primero, conocido como el 'Tiburón Blanco', fue número uno mundial durante 331 semanas a lo largo de doce años, por lo que los dos únicos majors que ganó se quedan como escaso premio a su calidad; el británico, por contra, estuvo menos tiempo en la cumbre (97 semanas), aunque sacó un mayor rendimiento a sus victorias (seis 'grandes').
Años 2000 
'Tiger' Woods & Phil Mickelson


El dominio de Tiger Woods en lo más alto se extendió desde 1997 hasta 2014 (683 semanas) y en este tiempo conquistó 14 torneos del Grand Slam. Curiosamente, el hombre con el que ha mantenido las más duras contiendas dentro y fuera de los campos, Phil Mickelson, nunca ha llegado a ser número uno mundial (ha sido número dos durante 270 semanas), pese a tener cinco 'grandes' en su palmarés. También suma nueve subcampeonatos en los majors. En su caso, la sombra del Tigre ha oscurecido su carrera de forma significativa.
Su gran rival
Jordan Spieth: "Ser el número uno es uno de mis objetivos, pero no me lo tomo como una obligación"

Nadie lo esperaba tan pronto, pero tras arrasar, con apenas 20 años (acaba de cumplir 21), en el Masters de Augusta y en el US Open, es el gran aspirante al número uno.
Lleva tiempo agotando la capacidad de asombro de los aficionados. Tras ganar el Masters en abril y el US Open en junio, falló en su asalto al tercer major del año: el Open Británico. Se quedó a un golpe de entrar en el desempate (acabó cuarto) y se le frustró la oportunidad de llevarse el Grand Slam (los cuatro majors en un año).
XLSemanal. ¿Cuántas veces va a pensar en esos cuatro putts del hoyo 8 que, a la postre, lo alejaron del título?
Jordan Spieth. Ya los he olvidado. A lo largo del torneo tomé algunas decisiones incorrectas y muchas correctas más; son las que me guardo. Estoy orgulloso de cómo jugué el British. Ya vendrán más ediciones en el futuro.
XL. Ya tiene a Rory McIlroy a tiro. Como él está lesionado, le bastará con una victoria en uno de sus dos próximos torneos (Bridgestone o PGA) para ser número uno. ¿Es una presión añadida?
J.S. En absoluto. Es uno de mis objetivos, pero no me lo tomo como una obligación. Si fuera así, no disfrutaría como lo hago cada semana. Lo afronto paso a paso. Primero trato de dar buenos golpes; luego, buenas vueltas; después, buenos torneos; y, una vez que ganas, llegan las recompensas. No se construye la casa por el tejado.
XL. McIlroy se está perdiendo la parte más intensa de la temporada por un percance no relacionado con el golf. ¿Qué le parece?
J.S. Todo el mundo necesita una vida fuera de su profesión. Todos necesitamos evadirnos de la tensión de los torneos para no volvernos locos. No ha hecho nada incorrecto por jugar al fútbol con sus amigos. Yo también soy un fanático del deporte y juego al baloncesto con mi hermano. Los accidentes ocurren.
XL. En su caso, ¿cuál es la última locura que ha hecho?
J.S. Quizá haya sido pescar un tiburón el mes pasado [sonríe]. Estuve de vacaciones en las Bahamas durante la Semana del Tiburón y salí de pesca con mis amigos. Nunca lo había hecho previamente y estaba tremendamente excitado con la situación, sobre todo cuando noté que un atún picaba el anzuelo y empezamos a batallar cada uno en una dirección. Aguanté con todas mis fuerzas, pero no conseguía izarlo al bote. A las dos horas y media tenía el brazo agarrotado, no lo podía mover. Lo mejor fue cuando conseguimos subirlo a cubierta. ¡Era un tiburón! Se había comido el atún y se había quedado enganchado en el mismo anzuelo. Lo soltamos, claro, pero me llevé un susto tremendo.
XL. ¿Sus éxitos le están cambiando la vida?
J.S. No. Tengo menos tiempo para atender a los chavales y me da mucha rabia marcharme de los campos sin haber firmado todos los autógrafos que me piden, pero mi vida diaria sigue como antes. Mis padres me han inculcado unos valores muy sólidos. Gracias a eso, lo sobrellevo bien.
XL. ¿Saca la fuerza mental de su familia?
J.S. Sin duda. Cuando alguien muy cercano tiene una discapacidad, ves la vida desde otro punto de vista y tus valores son diferentes a los de los demás. Mi hermana Ellie es el pilar en el que me apoyo para conseguir mis objetivos. Me ayuda a mantener siempre los pies en el suelo. Ella es lo mejor que nos ha sucedido en casa, y verla disfrutar cada vez que le traigo un regalo de un viaje o gano un torneo es algo impagable. Trato de llevarla al colegio siempre que puedo y hace poco estuvimos en una fiesta con sus compañeros de clase en la que pasamos unos momentos geniales.
XL. Una de las primeras cosas que hizo al triunfar en el Circuito Americano fue poner su propia fundación benéfica, la Fundación de la Familia de Jordan Spieth...
J.S. Tratamos de ayudar a la gente desde una triple vía: la educación para chavales con necesidades especiales, el deporte de base y el apoyo a las familias de militares y veteranos. También tenemos un programa de integración laboral de discapacitados en unas cadenas de restaurantes.
XL. Volviendo al golf, ¿cómo mantiene la tensión?
J.S. Lo importante es no conformarse y ponerse los objetivos más ambiciosos posibles. No vale con decir: «Ya he ganado un 'grande', estoy en la élite y me voy de fiesta». Al contrario, hay que seguir trabajando, más si cabe, para tratar de ganar el segundo, el tercero, el cuarto... Hay que mejorar cada semana para subir un peldaño más.
XL. El ejemplo de Tiger Woods está siempre presente. Usted está igualando las marcas que consiguió a su edad. ¿Le gusta que lo comparen con él?
J.S. No, es injusto hacia su figura. Es cierto que yo le empato hasta ahora, pero solo llevo tres años de profesional y he ganado apenas dos 'grandes'. Cuando tenga 14 como él y haya estado triunfando una semana tras otra durante tres lustros, entonces podremos comentarlo. Miguel ángel barbero,.

A FONDO - CONOCER HISTORIA - El polémico hotel del tercer Reich Un sueño de Hitler hecho realidad,./ ¿Tenéis calor? Os refresco un poco,.

TÍTULO: A FONDO - CONOCER HISTORIA -  El polémico hotel del tercer Reich Un sueño de Hitler hecho realidad,.

Un sueño de Hitler hecho realidad El polémico hotel del tercer Reich / fotos

Un sueño de Hitler hecho realidad

Una ciudad de vacaciones solo para obreros. Este fue uno de los proyectos estrella de Hitler. Nunca llegó a inaugurarse. Ahora, 76 años después, va a convertirse en un 'resort' de lujo. La polémica noticia ha desempolvado la estrategia que urdió el nazismo para capturar el favor de la clase trabajadora. por José Segovia
¿Le gustaría comprar un apartamento de lujo en un complejo turístico nazi? Ahora es posible. La compañía alemana Metropole Marketing ha decidido dar vida a una de las construcciones más gigantescas del Tercer Reich: la ciudad balneario de Prora, enclavada en la isla de Rügen, a orillas del mar Báltico.
En ese lugar del noroeste del país, Adolf Hitler ordenó construir una estación vacacional para veinte mil trabajadores que incluía teatro, cine, piscinas y un aparcamiento que podía albergar cinco mil vehículos. El estallido de la guerra impidió la apertura de las instalaciones, que durante un tiempo fueron ocupadas por la Luftwaffe. 
Setenta y nueve años después, el faraónico balneario nazi, compuesto por ocho edificios que se extienden a lo largo de cuatro kilómetros, a 150 metros de la playa, abre sus puertas a los inversores europeos. Sus promotores hablan de un proyecto «colosal de fama mundial», unas palabras que han desatado la polémica, ya que son similares a las que utilizó el Führer cuando lo presentó en 1936. Para los más críticos, estos edificios representan la barbarie de una época oscura, razón más que suficiente para no banalizar la comercialización de los apartamentos.
La idea de construir el complejo turístico de Prora comenzó poco después del 2 de mayo de 1933, cuando tropas de la Sturmabteilung (SA) ocuparon y desmantelaron los sindicatos, integrando a sus miembros en el recién creado Frente Alemán del Trabajo. Este organismo puso en marcha un programa, llamado Kraft durch Freude ('Fuerza a través de la Alegría'), para que los obreros pudieran disfrutar de unos días de vacaciones al año. Más de la mitad de los 42.000 trabajadores de Siemens en Berlín nunca habían tenido días de asueto. A lo sumo, acudían los fines de semana a los lagos y bosques que rodean la ciudad.
Vacaciones con cuotas
Fuerza a través de la Alegría fue diseñado por el Gobierno para asegurar el apoyo de gran parte de la clase obrera al régimen nazi. Se financiaba con cuotas del 1,5 por ciento del sueldo de los trabajadores y ofrecía grandes descuentos para hacer excursiones por el país y asistir al teatro o a salas de conciertos. El gigantesco balneario de Prora fue uno de los proyectos estrella del nuevo programa, que también organizaba cruceros que navegaban a España, Italia y Noruega, aunque solo el diez por ciento del pasaje era ocupado por obreros. El restante 90 por ciento pasaba a manos de miembros del partido nazi, que siempre conseguían los mejores camarotes.
Informes internos de la Gestapo revelaron que junto con esos pasajeros viajaban algunas prostitutas. Sin embargo, a pesar de esos casos de corrupción, la organización Fuerza a través de la Alegría fue todo un éxito, que llegó a convertirse en el símbolo del bienestar que prometía el nacionalsocialismo a sus trabajadores. Millones de alemanes tuvieron la oportunidad de disfrutar de sus primeros días de vacaciones y de conocer Berlín y Múnich, dos de los destinos más demandados por los obreros.
Piscinas públicas
Los trabajadores que visitaban la capital alemana se reunían en la berlinesa Potsdamer Platz para sentarse en la terraza del café Josty y observar el torbellino de gentes y coches que circulaban por esa céntrica zona de la ciudad. A partir de 1936, miles de obreros que provenían de otras partes del país acudían cada día al estadio olímpico de Berlín y disfrutaban con las piscinas públicas, a las que ya no podían acceder los judíos.
Muchos se acercaban al hotel Adlon, situado en el elegante paseo Unter den Linden, donde se alojaban los famosos, como la actriz Olga Chejova o la directora de documentales Leni Riefenstahl. Aunque no podían acceder a pasar una noche en sus lujosas suites, los obreros también acudían al hotel Esplanade, con su sofisticada pista de baile en el Patio de las Palmeras, donde quizá, con un poco de suerte, podrían ver a algunos de los actores de moda del cine nazi.
Algunos de aquellos trabajadores hubieran dado el salario de un año por poder cruzar unas palabras con la bellísima actriz checa Lída Baarová, que en el verano de 1938 mantenía una aventura amorosa con Joseph Goebbels. Aquel idilio acabó bruscamente cuando Hitler ordenó a su ministro de Propaganda que abandonara a la joven eslava, dado que era de «raza inferior».
Una vez recuperado del escándalo, el todopoderoso Reichminister presionó a varias empresas para que fabricasen receptores de radio económicos para todos los alemanes. La gente ya no podría evitar escuchar a todas horas los discursos del dictador, ni siquiera en sus días de asueto. Goebbels había ordenado colocar miles de altavoces en los balnearios, calles y comercios de las ciudades alemanas. La propaganda a través del cine y la radio fue el vehículo ideal para vender un programa de vacaciones nunca visto en el país. 
Cien mil obreros viajaban cada año a la ciudad bávara de Landsberg para conocer la prisión en la que su admirado líder había escrito Mein kampf('Mi lucha') en 1924. La popularidad del Führer alcanzó nuevas cotas cuando decretó el Anschluss ('anexión') de Austria en marzo de 1938, lo que animó a miles de trabajadores alemanes a visitar Viena, Salzburgo y otras localidades austriacas.
En 1933, Hitler presionó al empresario Ferdinand Porsche para que diseñara un automóvil que alcanzara los 100 kilómetros por hora; no consumiera más de 7 litros cada 100 kilómetros; tuviera cinco plazas y que no costara más de mil marcos para que cualquier trabajador alemán pudiera adquirirlo. Eran exigencias casi imposibles en esa época, pero Porsche se encerró en su estudio y trató de buscar la forma de agradar a Hitler.

Porsche popular
En febrero de 1938, el modelo definitivo fue presentado a los alemanes. Se denominó KdF, siglas de Kraft durch Freude ('Fuerza a través de la Alegría'). Pero en octubre de aquel año el nombre de la sociedad pasó a denominarse Volkswagen (coche del pueblo). Se hicieron presentaciones del automóvil en diversas ciudades, pero solo un puñado de trabajadores pudo disfrutarlo. El estallido de la guerra paralizó su producción, ya que el régimen decidió utilizar el talento de Porsche para la construcción de carros de combate, como el Tiger.Los escasos modelos de Volkswagen que circularon por las nuevas autopistas podrían haber sido usados por obreros para viajar a la nueva estación vacacional de Prora, pero el ataque alemán a Polonia lo impidió.
Teatro y conciertos
Gracias a la organización Fuerza a través de la Alegría, muchos alemanes también viajaron a Múnich para visitar algunos ejemplos de la nueva arquitectura del régimen, como la Casa del Arte Alemán (todavía en pie en la capital bávara). En 1937, 1,4 millones de trabajadores se beneficiaron de los paquetes vacacionales. Ese mismo año, la organización llevó a 13,5 millones de alemanes a obras de teatro y a 3,5 millones a conciertos de música.
El programa de vacaciones nazi hizo posible que millones de obreros acudieran en masa a la exposición Arte degenerado, que exhibió las obras de pintores «bolcheviques y judíos», como Marx Ernst, Ernst Ludwig Kirchner, Marc Chagall, Otto Dix, o Paul Klee. Mientras estos artistas fueron perseguidos por la Gestapo, los adeptos al régimen prosperaron en el estrecho mundo cultural del Tercer Reich, como el escultor Arno Breker o los directores de orquesta Herbert von Karajan y Wilhelm Furtwängler.
Proporcionar ocio y diversión a los alemanes se convirtió en uno de los principales símbolos del nacionalsocialismo. El programa Fuerza a través de la Alegría también fortaleció la idea de crear una comunidad racial del pueblo (Volksgemeinshaft). Además, el pleno empleo facilitó la recuperación industrial y el desarrollo de la maquinaria bélica, que abrió las puertas al gran objetivo del Tercer Reich: construir un imperio en Europa central y oriental que durara mil años.
Apartamentos de lujo para el siglo XXI

Los ocho edificios idénticos del proyecto Prora se vendieron en 2012 por 3,2 millones de euros a la empresa Metropole Marketing, que lo ha reconvertido en un hotel de lujo de 400 habitaciones y 400 apartamentos con spa y vistas al mar Báltico. Ya han vendido cerca de 60 apartamentos por entre 178.000 y 1,2 millones de euros. Los más grandes tienen solárium y una suite de 100 m2. «Los nazis no llegaron a utilizarlo y el lugar sigue siendo hermoso», asegura Manfred Hartwig, representante de Metropole Marketing.
Para saber más: Strength through joy: consumerism and mass tourism in the Third Reich. Shelley Baranowski. Cambridge University Press.

TÍTULO:¿Tenéis calor? Os refresco un poco,.

Ballena beluga foto


Los visitantes del Hakkeijima Sea Paradise Aquarium de Tokio, Japón, se llevaron una sorpresa cuando una ballena beluga decidió escupir un buen chorro de agua sobre ellos. Las ballenas beluga son habituales en los grandes acuarios: resultan simpáticas porque son muy expresivas.
En realidad no son ballenas, son Delphinapterus leucas, cetáceos dentados emparentados con los delfines. Quedan solo unos 150.000 ejemplares repartidos por América del Norte, Rusia y Groenlandia. Son blancas como muchas especies del Ártico. A ellas les va el fresquito, esta ha pensado que a la gente le gustaría una ducha refrescante. G. H.