El gran bazar de Thomas Cook,.
De un pañuelo a un pudding, los recuerdos de Thomas Cook, a subasta,.
Clientes y empleados sacan a subasta sus recuerdos del turoperador británico quebrado. «Nunca pensé que un postre sería objeto de coleccionismo»,.
Al calor del fracaso, hubo avispados que vieron una oportunidad de negocio y una forma de rentabilizar los retazos de lo que un día fue el segundo operador turístico del mundo. Basta con teclear el nombre de Thomas Cook en la plataforma de subastas eBay para que el buscador muestre 839 artículos relacionados con el turoperador británico, todos disponibles. Cualquier incondicional de la firma puede hacerse hasta con una bolsa para el mareo por un precio de salida de un euro.
Piezas de coleccionista
Una pareja que trabajaba en Thomas Cook vende un traje de novia para salir adelante
Hubo así oportunistas que, tras el anuncio de la quiebra el pasado 23 de septiembre,
se apresuraron a desempolvar aquel recuerdo que conservaban de su viaje
con Thomas Cook y ponerlo a la venta. Cualquier cosa de la compañía,
por nimia que fuera, se erigía en pieza de coleccionista. Insignias,
pañuelos, pines, folletos, mantas, cojines, ropa de segunda mano,
miniaturas de avión, tarjetas de embarque del último vuelo y hasta
comida envasada.El mismo día que la empresa sacudió al sector turístico con el anuncio de su entrada en suspensión de pagos, Jay Ray (31 años) reparó en que aún conservaba en su frigorífico el pudin de jengibre jamaicano del chef James Martin que le habían dado de postre en el vuelo MT 1541 que realizó con Thomas Cook entre la ciudad chipriota de Paphos y la inglesa de Manchester una semana antes de la bancarrota. «Me sirvieron a bordo un plato de pasta con pollo y tomate, pero no me quedó hambre para el postre. Nunca había probado nada de ese cocinero; por eso cuando vi el pudin de jengibre sentí curiosidad por cómo sabría y lo guardé en el bolso para tomármelo en casa», relató Ray.
Producto exclusivo de las aerolíneas de Thomas Cook, tras su desaparición aquel dulce que reservaba en su nevera se había convertido en una rareza, así que decidió subastarlo en 'eBay'. «Lo hice para probar qué pasaba; no esperaba que nadie pujara por él», confiesa esta viajera. Pero transcurrieron los días y su cotización crecía. Su precio inicial de un euro se multiplicó por veinte antes de que se cerrase la subasta. En total, 18 ofertas y un precio final de 23 euros. «Nunca pensé que un postre sería objeto de coleccionismo; es poco dinero, pero lo donaré a una ONG», declaró.
Desde que se abriese la veda, tanto clientes como empleados han encontrado en esta plataforma un floreciente negocio en el que desprenderse definitivamente de sus recuerdos físicos. Para algunos será difícil superar el varapalo y normalizar su situación profesional. Pero todos son víctimas de una muerte anunciada, porque Thomas Cook llevaba enfermo muchos años sin responder a los tratamientos financieros aplicados para salvarle. Hasta pocas semanas antes del fatal desenlace, sus directivos mantenían la esperanza e insistían en que gozaba de buena salud. No pudo ser y, ahora, clientes y trabajadores se sienten engañados. Por eso, muchos de estos empleados tratan de quitarse de encima todo aquello que les recuerde a su patrón.
Uniformes a la venta
Un piloto de la aerolínea ha puesto a la venta toda la documentación relacionada con sus vuelos por algo más de 12 euros, mientras que otros ofrecen su bolsa de viaje con un uniforme completo de tripulante de cabina por 25 euros. Chaquetas, pantalones, vestidos, blusas y hasta zapatos usados de azafata. «De piel, muy cómodos y con mucha vida; han viajado por todo el mundo», detalla su propietaria en la plataforma, donde salen a la venta con un precio base de 46 euros.La precariedad económica que los despidos han dejado en algunos empleados ha empujado a una pareja, ambos ya extrabajadores de la empresa, a subastar un vestido de novia de la diseñadora Stella York por 500 euros. «Ese dinero nos ayudará a pagar las facturas a partir de ahora», dicen.
Sin embargo, no es el artículo más caro que se ofrece. Entre las decenas de objetos de 'merchandising' que se liquidan en 'eBay' (el precio de salida de la mayoría no llega a los 50 euros), también hay piezas de gran valor histórico y económico, como una pequeña jarra Richard Gurney & Thomas Cook, de plata esterlina, fabricada en Londres en 1745. Los 675 euros con que abre la subasta hacen de ella el objeto más cotizado de la lista.
Hay otros de gran valor sentimental para la compañía, como una postal enviada por correo en uno de sus aviones desde Bombay (India) a Durban (Sudáfrica), que fue devuelta al no encontrarse a su destinatario, y un recibo hotelero, expedido en la ciudad inglesa de Norwich en 1951. Lo peor ahora será liquidar los otros recuerdos: esos que ni se compran ni se venden.
TITULO: Días de cine clásico -Cine Tiburón ., , Miercoles -9-Octubre,.
Este miércoles -9- Octubre a las 22:00
en La 2 de TVE, foto,.
- Reparto
- Roy Scheider, Robert Shaw, Richard Dreyfuss, Lorraine Gary, Murray Hamilton, Carl Gottlieb, Jeffrey C. Kramer, Susan Backlinie, Jonathan Filley, Chris Rebello, Jay Mello, Craig Kingsbury, Jeffrey Voorhees, Lee Fierro, Ted Grossman, Robert Chambers, Peter Benchley,.
- En la costa de un pequeño pueblo del Este de los Estados Unidos, un enorme tiburón ataca a varias personas. Por temor a los nefastos efectos que este hecho podría tener sobre el negocio turístico, el alcalde se niega a cerrar las playas y a difundir la noticia. Pero un nuevo ataque del tiburón termina con la vida de un bañista. Cuando el terror se apodera de todos, un veterano cazador de tiburones, un oceanógrafo y el jefe de la policía local se unen para capturar al escualo.
TITULO: Un país para escucharlo -Juan Gutiérrez - Marc Márquez no deja ni las migas,.
Un país para escucharlo,.
- Martes -8- Octubre a las 23:00 horas en La 2, foto,.
- Juan Gutiérrez - Marc Márquez no deja ni las migas,.
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Marc Márquez no deja ni las migas,.
Marc Márquez sufrió una caída el viernes, en los libres. También rodó por los suelos el sábado, en la clasificación. Y este domingo le bastaba con evitar esos accidentes para proclamarse otra vez campeón del Mundo. El ilerdense podía permitirse no arriesgar, no necesitaba exponerse. Si sacaba dos puntos más que Andrea Dovizioso, el octavo título iba para el zurrón. Y el italiano estuvo por detrás desde la salida, lejos de la puja por la corona y por el gran premio. Aun así, Márquez arriesgó. Está en su naturaleza.
El pulso de la carrera lo sostuvo con Fabio Quartararo, un maravilloso piloto de 20 años que todavía no ha estrenado victoria, pero sí ha demostrado que es muy rápido, como confirman las cuatro poles que suma en este campeonato. Márquez se la jugó en la última vuelta, superó al francés y remató el Mundial a lo grande, con un triunfo en Tailandia, a falta de cuatro premios. Buriram se traduce como la Ciudad de la Felicidad. Un buen lugar para su octava alegría en un Mundial, la sexta en MotoGP.
Márquez tampoco hizo nada nuevo. Ya nos tiene acostumbrados a estas emociones. De hecho fue casi un calco del año pasado, cuando venció en el Gran Premio de Japón para coronarse campeón a falta de tres carreras, y un día después de haberse caído en la clasificación. Unos ingredientes parecidos para un cocinado similar. Los ases del deporte son así. No dejan ni las migas en el mantel.
Marc es el mejor piloto de siempre a su edad, 26 años, como ya lo era antes con 25. Su voracidad le hace subir los escalones a pares. Con su sexto título de MotoGP ha adelantado en la máxima categoría a Mick Doohan, otro icono de Honda, que se retiró con cinco mundiales de 500cc en su palmarés, y sólo ve por delante a Valentino Rossi, con siete, y a Giacomo Agostini, con ocho. Nombres de leyenda en el motociclismo. Marc Márquez también lo es. Una leyenda viva y hambrienta. Insaciable.