miércoles, 6 de junio de 2018

LUNES -11- JUNIO - Imprescindibles - Eugenio: Toda la tristeza que se ocultaba detrás del “saben aquel que 'diu”,./ DESAYUNO - CENA - MARTES - MIERCOLES - JUEVES - VIERNES - Antonio Pampliega: - MI ERROR FUE QUERER SER EL MEJOR,.

TITULO: LUNES -11- JUNIO - Imprescindibles  - Eugenio: Toda la tristeza que se ocultaba detrás del “saben aquel que 'diu”,.

LUNES -11- JUNIO - Imprescindibles  ,.

Imprescindibles, serie de documentales sobre los personajes más destacados de la cultura española del siglo XX cada semana en La 2 y en RTVE, a las 21:00 el lunes -11- junio, etc.

Eugenio: Toda la tristeza que se ocultaba detrás del “saben aquel que 'diu”,.

Toda la tristeza que se ocultaba detrás del “saben aquel que ‘diu”,.

Eugenio, en una imagen promocional sin datar.

El documental ( foto ) ‘Eugenio’ recorre la cara amarga y menos conocida de un humorista que marcó con su inmutable laconismo dos décadas de la historia sentimental de España,.

Escribía los chistes en libretas con su letra menuda, abigarrada. Cientos de libretas donde apuntaba los que inventaba, los que le contaban o los que leía en libros. Luego los pasaba a máquina. Era metódico, perfeccionista. Analizaba el chiste y lo probaba antes con su familia. “Como si fuéramos sus conejillos de indias. Hasta se reía él”, explica Nuria Jofra, hermana de Eugenio, uno de los cómicos más populares en la España de los años ochenta y noventa.
Serio, siempre de negro, con gafas oscuras, un vaso de whisky sobre una mesita y un cigarrillo en la mano, sentado en una banqueta alta, Eugenio hizo reír a miles de personas durante más de una década. “Las actuaciones eran cortas; no tenía mucho repertorio. Y yo veía que era bueno contando historias, así que le convencí para que lo hiciera”, cuenta Amadeu Molins, propietario del pub KM en Barcelona. Ese local se empezó a llenar en 1972 todas las noches gracias a los chistes de Eugenio, quien era el guitarrista del dúo folk Els Dos, que había formado en 1965 con su esposa, Conchita Alcaide.
El despegue de Eugenio Jofra Bafalluy (Barcelona, 1941-2001), con ese “saben aquel que diu” que llegaría a hacer archifamoso, se produjo en los últimos años del franquismo en pubs barceloneses como el citado KM, el Babieca y, sobre todo, el Sausalito. Imágenes de esos locales llenos a rebosar —de público y de humo— desfilan por el documental Eugenio, coproducido por TV3 y TVE, que los directores Jordi Rovira y Xavier Baig han realizado con una treintena de testimonios de personas que conocieron bien al humorista: familiares, amigos, empresarios de la noche, humoristas, médicos...
“Es un relato coral sin ningún narrador para evitar dar un punto de vista. Hemos querido explicar el personaje tan poliédrico que fue, su lado oscuro, pero sin juzgarlo”, explican sus autores. Álbumes de fotografías y películas familiares, fragmentos de entrevistas y actuaciones en televisión, además de los citados testimonios, nutren un trabajo que se ha convertido en el documental más visto de la plataforma Filmin, que lo estrenó el 16 de mayo, y se ha podido ver en el reciente festival DocsBarcelona. Llegará a las salas en octubre.
“El 80% del documental es positivo, el relato de la parte buena de ese triunfo profesional, y el 20% es el drama final que se impone”, cuentan Baig y Rovira. Eugenio fue un mal estudiante, cuyo padre le sentenció: “Nunca harás nada en la vida”. Optó por dedicarse a la joyería hasta que conoció a Conchita Alcaide, quien fue su gran amor, con la que se casó y formó un dúo musical en la época de la Nova Cançó. Gerard, el mayor de los dos hijos que ambos tuvieron [tuvo un tercero de su relación con Conchita Ruiz], es una de las personas que más información aporta en el filme sobre la personalidad del humorista: “Un hombre triste, inseguro, que nunca superó la muerte de su mujer”. Un hombre que reconocía que los chistes nacen de las tragedias, como el fallecimiento de Alcaide de cáncer en 1980.
Eugenio, en una imagen promocional sin datar.
Un casete de chistes que grabó en 1979 y que se vendía en las gasolineras catapultó su éxito. Luego llegaron los discos. “Pasó de ganar 10.000 pesetas un fin de semana a medio millón por gala”, recuerda Joan Carlos Doval, editor discográfico. De ahí pasó a las actuaciones en grandes discotecas, como Florida Park en Madrid o Planeta 2001 en Barcelona. Después llegaron las televisiones, que le hicieron todavía más popular.
Amante de la noche y las juergas, le gustaba la compañía de las mujeres. Sus hijos explican que fue un padre ausente; los humoristas, que tenía un estilo único: “Se presentaba con cara de funeral, con ese hablar pausado, ese acento catalán... Y esa manera de administrar los silencios”, apunta Carlos Latre, rendido admirador —e imitador— de Eugenio.
“Lo que le pasó fue que el éxito le devoró”, opinan los autores del documental. Una época en la que la cocaína le apartó de todo se llevó por delante su larga relación con Conchita Ruiz, quien ya tenía un hijo, Daniel, cuya paternidad asumió el humorista. Es él el quien define a Eugenio en el documental como alguien introvertido, “tierno, pero como escondiéndolo, frágil y vulnerable”.
Su recta final fue trágica. Eugenio no hizo caso de las advertencias de los médicos sobre el tren de vida que llevaba hasta que una noche un infarto le fulminó en un restaurante de Barcelona, como cuenta su amigo Manuel Agustí en el filme: “Se me murió en los brazos”. Tenía 59 años.

TITULO:  DESAYUNO - CENA - MARTES - MIERCOLES - JUEVES - VIERNES - Antonio Pampliega - MI ERROR FUE QUERER SER EL MEJOR,.

 DESAYUNO - CENA - MARTES - MIERCOLES - JUEVES - VIERNES - Antonio Pampliega - MI ERROR FUE QUERER SER EL MEJOR,fotos,.

Antonio Pampliega: «Mi error fue querer ser el mejor,.

Pampliega cuenta cómo los ultras rusos quedan para pegarse en los alrededores de Moscú a modo de entrenamiento. /Cuatro
Pampliega cuenta cómo los ultras rusos quedan para pegarse en los alrededores de Moscú a modo de entrenamiento.

El fotoperiodista, que estuvo secuestrado 299 días por el Estado Islámico, muestra la otra cara del Mundial en Cuatro. «Los ultras rusos son el brazo armado de los grupos políticos», advierte,.

El fotoperiodista Antonio Pampliega (Madrid, 1982), que estuvo secuestrado por el Estado Islámico en Siria durante 299 días, cambia el conflicto en Oriente Medio por las peleas callejeras entre ultras del extrarradio de Moscú. El próximo 14 de junio arranca allí el Mundial de fútbol y una de las grandes preocupaciones son los 'hooligans' locales, que ya han amenazado con atacar a los hinchas de otras selecciones si se les «provoca». El resultado se verá esta noche en Cuatro (a partir de las 22.30 horas), en la nueva entrega de 'Pasaporte Pampliega'.
Resultat d'imatges de cafe con tortita de maiz- Esta es la otra cara del Mundial.
- Sí, hemos visto cómo actúan los ultras rusos. Primero en Bilbao, durante los incidentes en el partido entre el Athletic y el Spartak de Moscú, y después viajamos con ellos a Rusia para entenderlos.
«Dicen que son patriotas y usan el fútbol como excusa para reventar protestas»
- ¿Qué ha acabado entendiendo?
- Que todo es cultural, la violencia entre los ultras rusos viene de los 80, cuando organizaban auténticas batallas campales. A raíz de la Perestroika y el gobierno de Putin se trasladaron a las afueras de las grandes ciudades para crear clubes de lucha. Quedan para pegarse y entrenar con tácticas paramilitares. Todo eso lo ponen en práctica cuando viajan al extranjero.
Resultat d'imatges de sandwich mixto- Parece difícil acceder a ellos.
- Hemos logrado entrevistar a un gran ultra del CSKA de Moscú. Nos costó muchísimo porque para Vladimir Putin el Mundial es un escaparate de su país. Él los ha atado en corto y los ha blindado.
- ¿Qué le dijo?
-Que los ultras van a estar tranquilos salvo que británicos, franceses o alemanes les provoquen o ensucien el nombre de Rusia. Ellos no se definen como nazis, sino como patriotas. Luego te das cuenta de que estos grupos son el brazo armado de grupos políticos, los que revientan manifestaciones de la oposición o a favor de los homosexuales. Usan el fútbol como excusa, les da igual lo que ocurra dentro del estadio.
- ¿Le ha controlado el gobierno?
- Nos estuvieron siguiendo durante todo el reportaje y el último día, durante una entrevista, aparecieron seis policías para interrumpirla. Nos hicieron ver que no éramos bienvenidos porque, dijeron, la prensa manipula y miente.
- ¿Los seguidores españoles van a poder estar tranquilos?
- Mi sensación es que no va a haber grandes disturbios. Los ultras van a quedar para pegarse en los bosques. Así que no creo que pase nada, quizá algún enfrentamiento por culpa del alcohol.
- ¿Qué opina su familia de que vuelva a jugársela?
- Después de hacer lo que he hecho, ir a Rusia no suponía un gran peligro, como mucho me hubieran dado un puñetazo. Otra cosa es cuando les dije que en dos semanas me voy a Afganistán a hacer otro reportaje...
- ¿Regresa a Oriente Medio?
- Sí, a hacer un reportaje sobre matrimonio infantil y la situación de la mujer allí. Vamos con mucho cuidado, con gente de confianza. Grabaremos lo mínimo en la calle, porque ahora mismo hay atentados suicidas todas las semanas en Kabul. Es zona de riesgo pero voy tranquilo.
-¿Y si un estudiante de Periodismo le dice que quiere ir a Siria?
- Que no vayan por ser el nuevo Pérez-Reverte o Jon Sistiaga. Mi error fue querer ser el mejor. Les diría que fueran conscientes del peligro, que arriesgan sus vidas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario