lunes, 12 de octubre de 2015

DESAYUNO - CENA - MARTES - MIERCOLES - LA MALDICIÓN DE TUTANKAMÓN,./ MOTOS - PEDROSA DOMINA Y ROSSI GOLPEA A LORENZO,.

TÍTULO: DESAYUNO - CENA - MARTES - MIERCOLES -  LA MALDICIÓN DE TUTANKAMÓN,.

DESAYUNO - CENA - MARTES - MIERCOLES -  LA MALDICIÓN DE TUTANKAMÓN,.fotos,.

Resultat d'imatges de LA MALDICIÓN DE TUTANKAMÓNLa maldición más famosa: Las muertes por Tutankamón

En 1922, el egiptólogo inglés Howard Carter descubrió la tumba donde reposaban los restos de un desconocido faraón. A los pocos meses del hallazgo comenzaría una cadena de inexplicables muertes.
Resultat d'imatges de cafe con tortitasEl egiptólogo inglés Howard Carter llevaba más de quince años trabajando en prospecciones arqueológicas en Egipto, pero lo motivaba una vieja obsesión. Encontrar la tumba de un desconocido faraón de la dinastía XVIII, de quien tenía sólo una referencia: un anillo en el que leyó por primera vez su nombre: Tut-Ankh-Amun, que traducido equivale a “más que nunca está vivo Amon”.
Financiado por un mecenas llamado Lord Carnarvon, Carter se abocó a la búsqueda de la tumba de este faraón en el lugar conocido como el Valle de los Reyes. El 4 de noviembre de 1922 sus trabajadores descubrieron los escalones que descendían hasta una puerta de una tumba, que aún mantenía los sellos originales. El 26 de noviembre, en presencia de la familia de Lord Carnarvon, se hizo el famoso agujero en la parte superior de la puerta de la tumba, que había permanecido oculta durante más de tres mil años. Carter introdujo una vela y vio, según sus palabras, “cosas maravillosas”. Después de catalogar todos los tesoros de las cámaras anteriores, Carter llegó a la cámara real donde descansaba el sarcófago del joven faraón (su momia correspondía a una persona muy joven y de rasgos delicados).
Comienza la maldición
Resultat d'imatges de huevo frito con patatas fritas y filete panFoto: National Geographic Channel
Howard Carter no sólo encontró fabulosos tesoros en la tumba de Tutankhamón. También habría encontrado un ostracon de arcilla, cuya inscripción decía: «La muerte golpeará con sus alas a aquel que turbe el reposo del faraón.
La noche del 4 de abril de 1923, Lord Carnarvon, quien había financiado la excavación y estuvo presente el día en que se abrió la tumba, falleció a causa de una neumonía fulminante, detonada por una septicemia ocasionada por la picadura de un mosquito. Se cuenta que a la misma hora de su muerte en el Cairo hubo un gran apagón que dejó a oscuras la ciudad y, en Inglaterra, su perro aulló misteriosamente para luego caer fulminado en su casa en Hampshire. Para abonar el terreno a las coincidencias, al proceder a la autopsia de la momia se encontró que justo donde el mosquito había picado a Lord Carnarvon, Tutankamón tenía una herida.
A la muerte de Lord Carnarvon siguieron otras. En septiembre su hermano Aubrey Herbert, que estuvo presente en la apertura de la cámara real, murió inexplicablemente en cuanto volvió a Londres. Arthur Mace, el hombre que dio el último golpe al muro para entrar en la cámara real, murió en El Cairo poco después, sin ninguna explicación médica. Sir Douglas Reid, que radiografió la momia de Tutankamón, enfermó y volvió a Suiza donde murió dos meses después. La secretaria de Carter murió de un ataque al corazón, y su padre se suicidó al enterarse de la noticia. Un profesor canadiense que estudió la tumba con Carter murió de un ataque cerebral al volver a El Cairo. George Jay Gould, amigo de Carnarvon, se trasladó a Egipto, después de la muerte de su amigo, para ver el lugar con sus propios ojos. Murió de neumonía después de resfriarse tras visitar la tumba. Richard Bethell, que había ayudado a Carter a clasificar el tesoro, murió a los 49 años de edad, al parecer suicidado. Meses después, su padre, lord Westbury, se quitó la vida en Londres, al arrojarse por la ventana de su habitación. En su dormitorio tenía un jarrón de alabastro procedente del sepulcro de Tutankamón.
Para 1929, unas 16 personas relacionadas con Carnarvon o Carter fallecieron y de inmediato la prensa sensacionalista comenzó a hablar sobre la maldición de Tutankamón.
La novelista gótica Marie Corelli aderezó más la historia, afirmando poseer un primitivo texto árabe que mencionaba las maldiciones que seguirían a la apertura de la tumba. El escritor Arthur Conan Doyle, el creador del detective Sherlock Holmes, le echó más leña al fuego al declararse abiertamente creyente en la maldición.
Últimas víctimas
Los textos y escritos que apoyaban la teoría de la maldición no sólo se basaban en la muerte de Carnarvon y otras personas, sino en el hecho de que el día en que Howard abrió la tumba, una cobra se comió a su mascota, un canario (las cobras en el antiguo Egipto protegían a los faraones).
La presunta maldición reapareció en las décadas de 1960 y 1970, cuando algunas de las piezas encontradas en la tumba de Tutankamón se trasladaron a varias exposiciones temporales organizadas en museos europeos. Los directores del museo de entonces murieron poco después de aprobar los traslados. La última víctima atribuida a la maldición fue el actor inglés Ian McShane (famoso por personificar a Judas Iscariote en la película “Jesús de Nazareth”, de Franco Zeffirelli), quien durante la filmación de un película en los años ochenta sobre la supuesta maldición, sufrió un grave accidente: su coche se salió de la carretera y se rompió gravemente una de las piernas.
Muchos autores niegan que hubiese una maldición escrita, pero otros aseguran que Carter habría encontrado en la antecámara de la tumba un ostracon de arcilla cuya inscripción decía: «La muerte golpeará con sus alas a aquel que turbe el reposo del faraón».
Los científicos, por su parte, prefieren apuntar a otras teorías. Los insectos o las bacterias presentes en las tumbas de Tutankamón pudieron acelerar la muerte de Carnavon, quien padecía diversos problemas de salud. Otro estudio arrojó que las momias antiguas pueden portar Aspergillus Níger y Aspergillus flavus, dos tipos de moho que ocasionan reacciones alérgicas que van de una simple congestión nasal a una hemorragia pulmonar.
Howard Carter, el principal “implicado” en la supuesta maldición, en tanto, falleció en 1939 a los 64 años, de muerte natural, 17 años después que abriera la tumba. Su frase preferida cuando le hablaban de la “maldición” era: “Todo espíritu de comprensión inteligente se halla ausente de esas estúpidas ideas”.

TÍTULO: MOTOS - PEDROSA DOMINA Y ROSSI GOLPEA A LORENZO,.

foto

 Las previsiones climatológicas con las que pilotos y equipos jugaban desde el inicio de la semana del Gran Premio de Japón se cumplieron: lluvia en el domingo y todo el trabajo y las conclusiones sacadas los dos días anteriores que servirían de muy poco. Al igual que en Silverstone y en Misano, las condiciones del tiempo influyeron en lo sucedido en pista tanto como para hacer pasar a Jorge Lorenzo de potencial beneficiado de la jornada a damnificado.
Resultat d'imatges de PEDROSA DOMINA Y ROSSI GOLPEA A LORENZO,.El mallorquín era el claro favorito en seco, con un ritmo superior a sus rivales y se destapó como el mejor en mojado, con un inicio de carrera demoledor que terminó actuando como un bumerán sobre sus aspiraciones al final de la prueba, cuando la pista comenzó a secarse. Justo la única circunstancia en la que las opciones del piloto español caían en picado.
«Me deja un poco de mal sabor de boca el haber sido competitivo con el ligamento así como lo tengo, en seco y en mojado, y haber ido tan rápido al principio, pero que por el tiempo no haya podido conseguir la victoria», explicó el piloto balear tras lograr un tercer puesto que con el segundo de Valentino Rossi le aleja un poco más del objetivo de lograr su tercer Mundial de MotoGP.
 El problema no ha sido tirar al principio, sino que la pista se secase. Si hubiese seguido mojada hubiese seguido más o menos el mismo ritmo, en 1'55", y probablemente habría ganado con cinco o seis segundos de ventaja y no hubiese perdido la carrera por doce segundos», se defendió el español.
Lorenzo reflejó en su análisis su convicción acerca de lo que debería de haber pasado el domingo, y apuntó la razón por la que esto no se cumplió: porque la pista se fue secando y porque al tirar con fuerza desde la salida castigó mucho más el neumático delantero que sus rivales. La carrera de MotoGP se decidió por la gestión de las gomas de los favoritos.
Rossi cargó mucho menos su tren delantero en ese arranque de prueba, mientras veía cómo su compañero de equipo se le escapaba; Dani Pedrosa, que en la misma parrilla decidió cambiar su neumático trasero más duro para usar la opción más blanda que habían montado sus rivales, aguantó en el inicio de la carrera consciente de que este podría ser un factor determinante. Y lo fue.
Pedrosa acertó de lleno en la estrategia y protagonizó una carrera de menos a más en la que llegó a estar a 8,8 segundos del primero en la vuelta siete -en aquel momento Lorenzo-, y que terminó ganando con 8,5 segundos de ventaja.
 Después de decidir cambiar en la salida para tener las mismas armas que todos no me he sentido tan fuerte como los demás en las primeras vueltas pero he mantenido la calma: con tantas curvas de primera y segunda, donde se acelera mucho, puedes gastar el neumático y eso al final ha valido la pena porque ha habido un momento en que parecía que no sería el día», explicó el piloto de Honda, uno de los protagonistas también en la anterior prueba de Aragón.
«Esa creo que ha sido la clave, mantenerme calmado y pilotar suavemente sin estresar más el neumático para intentar recuperar», explicó el catalán. Pedrosa que reconoció la ayuda de la lluvia, después del tormento que su RC213V sufrió en entrenamientos con la pista seca. Esta vez él sí que supo sacarle el mejor rendimiento posible a una moto que no logró el mismo rendimiento en las manos de Marc Márquez, que no puso en ningún momento su lesión como excusa para el pobre rendimiento -aun así fue cuarto- en Motegi.
La mejor versión de Pedrosa echó una mano a Lorenzo en la pelea por el título frente a Rossi en el Motorland aragonés, compensando en Japón al italiano, que volvió a sacar petróleo cuando las condiciones climatológicas entraron en juego. «Dani me ha ayudado, no solo porque he podido utilizar su rueda si no porque también he podido ver sus trayectorias», confesó Rossi, que llegará a Australia con 18 puntos de ventaja en la general.
 No sé si sin él habría podido volver a alcanzar a Lorenzo, sabía que usar a Pedrosa podía sin mi única posibilidad», insistió el italiano. Mientras el catalán ponía tierra de por medio a la caza de su victoria número 50 en el campeonato, el líder de MotoGP tomaba la rueda de Lorenzo para terminar forzando su error. «Perder otros nueve puntos como en Aragón hubiera sido muy malo para el campeonato así que he tratado de pegarme a Dani, que tenía muy buen ritmo, y he llegado hasta Jorge. He visto que iba muy al límite con el neumático delantero. Yo un poco menos y me ha sido más fácil mantener el ritmo y coger estos veinte puntos que son muy importantes para el campeonato, porque cuatro puntos más sobre Lorenzo son una buena recompensa», reconoció el italiano.
De una carrera que pintaba bastos para las Honda, que parecía complicada para Rossi y que aparecía como otra oportunidad para Lorenzo, se pasó a la reivindicación de Pedrosa y a la enésima ganancia del pescador Rossi en un río revuelto. «Este año el único error que he cometido ha sido en Misano. Claramente fue mi error, pero en tres, cuatro o cinco carreras, por diferentes razones, hemos perdido puntos, quizás no por mi culpa, que es lo que sabe peor"» comentó resignado Lorenzo, que ahora tendrá solo tres oportunidades para batir al legendario Rossi, que ya sabe que, matemáticamente, con tres segundos puestos, se garantizaría su décimo título de campeón del mundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario