TITULO : Un país en la mochila - Avicenas,.
Avicenas,.
foto / Mujer sirviéndose café. Grabado del siglo XVIII.
Bunchum, bann, kaoah, caveah, cahaona, caueh, cavet, cophè, y finalmente, café. El largo viaje de esta bebida desde Etiopía hasta España, pasando por Arabia, Siria, Turquía y Venecia quedó reflejado en los múltiples nombres que fue recibiendo en las etapas del camino. Lenta pero inexorablemente las bayas de un pequeño arbusto de Abisinia conquistaron el mundo gracias a los efectos mágicos de uno de sus componentes, la cafeína. Hoy en día resulta difícil imaginarse la vida sin café y sin sus maravillosas resultados sobre la vagancia matutina, pero es un producto relativamente moderno dentro de la dieta occidental. En el año 1500 nadie en Europa había oído hablar de él y un siglo más tarde lo habían hecho solamente cuatro gatos, los valientes lectores de dos obras minoritarias sobre Oriente: una de 1582 sobre el viaje a Mesopotamia del alemán Leonhard Rauwolf y otra editada por el botánico veneciano Prospero Alpini en 1592 acerca de la flora egipcia.
Mientras los europeos vivían en la inopia el mundo árabe se ponía de café hasta arriba. Aunque podría ser que los sabios Avicena y Al-Razi describieran la planta del café ya en el siglo X, lo cierto es que los musulmanes no empezaron a aficionarse a su infusión hasta quinientos años después. Fue en el siglo XV cuando llevaron cafetales a Yemen y Arabia, dando pie a un próspero comercio entre los países de la zona y a un consumo cada vez mayor de esta bebida energética que servía como sustituto del alcohol. Allá por el XVI se abrieron los primeros establecimientos públicos de café en Constantinopla, Grecia, Siria y Persia, lugares donde los viajeros europeos conocerían la mágica poción. El boca a boca haría el resto, propiciando en la primera mitad del siglo XVII la apertura de cafés en ciudades con gran actividad comercial como Venecia, Marsella o Londres.
¿Y en España qué? Aquí estábamos ocupados sorbiendo otro brebaje exótico, también de misteriosos efectos y rabiosa novedad: el chocolate. La pasión por el cacao fue tal durante el Siglo de Oro que no encontramos tiempo para engancharnos a la infusión de los infieles hasta bastante después de que triunfara en los países vecinos.
Del Kaoàh al caphè
La noticia de su fama nos llegó con cuentagotas a través de aventureros como García de Silva y Figueroa, miembro de la embajada de Felipe III a Persia, o Pedro Cubero Sebastián, misionero aragonés que dio la vuelta al mundo entre 1670 y 1679. El portugués Pedro Teixeira nos hizo el favor de explicar, largamente y en castellano, qué demonios bebían los sarracenos en sus 'Relaciones de un viaje hecho por el mismo autor desde la India oriental hasta Italia por tierra' (1610). En ellas contó que había conocido una bebida llamada kaoàh, muy popular en Turquía, Arabia, Persia y Siria, elaborada con «una simiente muy semejante a pequeñas habillas secas, tráese de Arabia, cuécese en casa; el cocimiento es espeso, sobre negro e insípido, y si algún gusto o sabor tiene es declinante a amargo». Teixeira explicó que el kaoàh o café se vendía en casas públicas habilitadas para ello, en las cuales se juntaban a beber hombres de toda clase y condición hermanados por aquella bebida hirviente «de provecho para el estómago, para las ventosidades y almorranas, y que despierta el apetito».
El médico italiano residente en Madrid Juan Bautista Juanini sería el primero en utilizar la palabra «café» en nuestro idioma, en un texto que se le atribuye de mediados del siglo XVII. La 'Carta que escrivio un medico christiano, que estava curando en Antiberi, à un cardenal de Roma, sobre la bebida del cahuè, ò cafe' (sic) habla largamente de los efectos beneficiosos del café sobre la salud y de cómo había que tomarlo, tostado, molido e infusionado en agua caliente. En 1689 el mismo Juanini volvería sobre el tema en su 'Discurso phisico y politico' dedicado al rey Carlos II, que incluía un capítulo sobre los usos medicinales del café e instrucciones para elaborarlo. Aquella bebida por fin se iba introduciendo «en los puertos de mar de España y en la Corte», tanto que según el autor ya había en Cádiz puestos callejeros en los que se vendía. Según los doctores aquel bebedizo negro abría las vías, destruía ventosidades, fortificaba el estómago, ayudaba la digestión, excitaba el cerebro, aumentaba el apetito y contrarrestaba el cansancio.
El café se convirtió rápidamente en herramienta imprescindible de escritores, pensadores y médicos ajetreados como Juan de Tariol, galeno del hospital de Palencia que le dedicó en 1692 el libro 'Noticias de el Caphè, sus efectos y virtudes'. Declarándose consumidor frecuente y prácticamente un adicto al café, Tariol recomendaba comprar granos lo más frescos posibles, tostarlos en casa hasta que exhalaran «olor a pan y cacao tostado agradable, que conforta el cerebro y estómago», molerlo, echarlo en una chocolatera llena de agua hirviendo y cocerlo durante un Credo. Luego se dejaba reposar y se tomaba caliente, todo hecho del mismo modo con el que se sigue haciendo café de puchero. Tan moderno fue nuestro amigo palentino que dio hasta dos métodos para elaborar café con leche, ese elixir que toma ahora todo hijo de vecino según se levanta. Claro que él lo llamaba «leche caphetada» pero qué quieren ustedes, hace de esto 326 años.
TITULO : AQUI HAY TRABAJO -Nace Activa Zamora para impulsar la economía local a través de formación y la colaboración empresarial ,.
Nace Activa Zamora para impulsar la economía local a través de formación y la colaboración empresarial,.
foto / Paula Santos y Narciso Prieto,.
Un proyecto piloto que busca revitalizar la economía zamorana a través de la colaboración y el aprendizaje empresarial, promoviendo la sinergia entre profesionales,.
Activa Zamora es un proyecto piloto que busca ofrecer a los empresarios, autónomos y emprendedores de la provincia herramientas útiles para facilitar su actividad, dándoles formación y promoviendo la colaboración con otros profesionales para mejorar los negocios. Su objetivo es la dinamización de la economía de Zamora a través de la concienciación y ayuda a los empresarios zamoranos y a sus futuros emprendedores.
El proyecto se propone revitalizar la economía zamorana mediante tres enfoques clave, según lo expresado por Paula Santos, la gerente de LaborUs. Por un lado se trabajará la formación "teniendo en cuenta las necesidades que hemos detectado entre el tejido empresarial Zamorano", señaló. La formación se estructura en tres bloques: mentalidad empresarial, gestión empresarial y estrategia empresarial. Paula Santos subrayó la importancia de desarrollar habilidades de gestión y estrategia empresarial, además de fomentar una mentalidad proactiva y positiva.
Además de la formación, el proyecto se centra en el networking y la creación de sinergias entre las empresas de la provincia. "Vamos a intentar que el dinero de Zamora quede en la provincia", aseguró Santos. Con más de 12.000 empresas y autónomos en la provincia, el objetivo es conectar a estos actores empresariales para generar colaboraciones y oportunidades de negocio locales. Mediante reuniones presenciales en diferentes comarcas y convocatorias online, 'Activa Zamora' busca impulsar el trabajo colaborativo y el intercambio de experiencias.
El proyecto incluye un calendario de formación y eventos que se extiende desde agosto hasta diciembre de 2023. Paula Santos compartió que se tratarán temas como la autoestima empresarial, la diferenciación en el mercado y técnicas de venta efectivas. También se mencionó la importancia de la visibilidad empresarial y el liderazgo en las interacciones con empleados, clientes y proveedores.
Un punto culminante del proyecto será una formación intensiva de un día, el 28 de noviembre, con destacados ponentes de diversos campos empresariales como el coaching José Morcillo, la experta en ventas Inés Torremocha; o el director general de Cobadu, Rafael Sánchez Olea, como ejemplo del cooperativismo de éxito. Esta formación se centrará en cuestiones como las creencias limitantes y la estrategia empresarial.
Este proyecto está siendo financiado por el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico; la Fundación Caja Rural y la propia LaborUs Consulting. Además, 'Activa Zamora' cuenta con el apoyo de diversas entidades, incluyendo la Diputación de Zamora, la Cámara de Comercio, Zamora 10 y CEOE Cypme Zamora.
Paula Santos destacó la necesidad de unir esfuerzos y colaborar para superar los desafíos empresariales en la provincia. "Todos en algún momento necesitamos ayuda, apoyo, información, formación y acceso a recursos", subrayó. 'Activa Zamora' representa un primer paso en este sentido y, con un presupuesto de 68.000 euros del Gobierno de España para el proyecto piloto, se espera dar continuidad a esta iniciativa en el futuro para lo cual ya se ha solicitado una segunda ayuda al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico.
El proyecto 'Activa Zamora' ya ha comenzado a dar frutos, con alrededor de 50 empresas inscritas en sus primeras etapas. Paula Santos compartió ejemplos de sinergias emergentes, como la colaboración entre empresas de alojamiento rural, turismo activo y bodegas en Alcañices Aunque el proyecto está en sus primeras fases, se espera que tenga un impacto significativo en la revitalización económica de la provincia de Zamora.
El apoyo de Caja Rural de Zamora
En consonancia con el espíritu y los objetivos de 'Activa Zamora', Narciso Prieto, director de comunicación de Caja Rural de Zamora, destacó la estrecha relación entre el proyecto y los valores que representa la entidad financiera. En sus declaraciones, resaltó la relevancia del dinamismo, la fortaleza y la voluntad de crecimiento presentes tanto en el proyecto como en Caja Rural de Zamora. Y de ahí, el acuerdo de colaboración económica que la entidad ha cerrado esta mañana con el proyecto.
"Un proyecto 'Activa Zamora' está muy ligado al perfil del proyecto a lo que ella (Paula Santos) representa, lo que representa su empresa, dinamismo, fortaleza, ganas de hacer, ganas de crecer, ganas de ayudar, ganas de concienciar", expresó Prieto. Subrayó cómo el movimiento empresarial y la generación de empleo son fundamentales para la prosperidad de la provincia y cómo 'Activa Zamora' se alinea con esta visión.
Además, agradeció la colaboración con la Fundación Caja Rural y señaló que desde el principio estuvieron dispuestos a apoyar la iniciativa. "Este tipo de proyectos son el número uno de lo que esta entidad bancaria quiere apoyar", aseguró.
Para Caja Rural de Zamora, el respaldo a proyectos como 'Activa Zamora' se traduce en apoyar el empleo, los clientes y las operaciones bancarias que sustentan la economía local. Prieto afirmó que "estamos hablando del latido principal de esta entidad financiera, que es el desarrollo financiero de empresas, de préstamos, de nóminas, de bibliotecas, de todo lo que representa la economía de energía bancaria local, como somos nosotros".
Prieto hizo hincapié en que la Fundación Caja Rural siempre estará comprometida con el éxito de 'Activa Zamora', tanto a nivel de concienciación empresarial como en la motivación y el apoyo a los empresarios locales y futuros emprendedores. Agradeció a Paula Santos por ofrecer una oportunidad de colaboración y destacó que este tipo de proyectos "no tienen un objetivo a corto plazo", sino que contribuyen al desarrollo a medio y largo plazo de la economía local.
El director de comunicación de la entidad resaltó la importancia de estas iniciativas en la provincia y alentó a que proyectos similares sean más comunes en Zamora. "Sinceramente creo que hace falta este tipo de iniciativas, hace falta modelarlas, hace falta pedirlas con más asiduidad a las convocatorias que hay regionales, nacionales, europeas", enfatizó. Prieto concluyó subrayando la necesidad de unir fuerzas en pro de la prosperidad económica de Zamora y destacó la importancia de la colaboración entre diferentes agentes sociales y económicos.
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