martes, 25 de diciembre de 2018

Viva la vida -Peter Jackson: «He ayudado con el guion de la serie de "El señor de los anillos" de Amazon» ,.SABADO -29- DICIEMBRE ,./ VIVA LA VIDA -Humphrey Bogart, el galán que conquistó el cine clásico ,. DOMINGO -30- DICIEMBRE ,.

TITULO:  Viva la vida - Peter Jackson: «He ayudado con el guion de la serie de "El señor de los anillos" de Amazon» ,.SABADO -29- DICIEMBRE ,.

El sabado -29- diciembre  2018 a las 16:00 por Telecinco , foto,.

 Peter Jackson: «He ayudado con el guion de la serie de "El señor de los anillos" de Amazon»,.

El cineasta produce la distópica «Mortal Engines» y dirige «They Shall not Grow Old», un documental sobre la Primera Guerra Mundial,.

Peter Jackson, durante la presentación de «Mortal Engines» Peter Jackson (Nueva Zelanda, 1961) recibe a ABC en los estudios de Universal en Los Ángeles. Mientras camina por lugares que huelen a cine, charla sobre la última película que ha producido, «Mortal Engines», una superproducción de más de 100 millones de dólares cuya historia ha adaptado de la novela de Philip Reeve junto con Fran Walsh y Philippa Boyens, la terna de guionistas con la que ganó el Oscar en 2003 por «El señor de los anillos: El retorno del rey». Cansado de dirigir tras las películas de «El Hobbit», Jackson pidió a su amigo Christian Rivers (especialista en efectos especiales y ganador de un Oscar por «King Kong») que se pusiera tras la cámara en «Mortal Engines» mientras él se centraba en el guion y la producción del filme. Pero Jackson, en realidad, nunca ha parado. Desde 2014 se ha dedicado a preparar «They Shall Not Grow Old», un espectacular documental con material inédito de la Primera Guerra Mundial que ha coloreado y restaurado con una técnica nunca vista. Así, la guerra de trincheras aparece como si se hubiera grabado hoy con una cámara actual de 4K. «They Shall Not Grow Old» se estrenó en Estados Unidos cinco días después de «MortalEngines» convirtiéndose en el documental más exitoso en taquilla de los últimos tiempos. Además, durante la conversación con ABC, Jacksonadelantó que participará en el guion de la serie «El señor de los anillos» que está preparando Amazon.
P - ¿Por qué eligió convertirse en director?
R - Soy un tipo con suerte. Mis padres me regalaron una cámara Súper 8 cuando tenía nueve años y desde entonces no he dejado de filmar. Amaba ver películas de Ray Harryhausen, amaba a «Jason y los Argonautas», a «King Kong» y las películas de fantasía. Nunca jamás pensé que me convertiría en el realizador que adaptase a Tolkien. Sólo quería inventar mis propias historias.
P - Es un creador de universos cinematográficos y vuelve con un mundo mágico a la gran pantalla... ¿Por qué decidió no dirigirla?
R - Leí los libros en 2007. Me encantó el personaje de la joven protagonista, Hester Shaw, y su originalidad. Es un mundo con ciudades que se desplazan, no se parecía a nada de lo que había visto antes. La adaptación es siempre la parte más difícil del trabajo de un guionista porque tiene que editar la historia. No se trata de explicar demasiado lo que ves, algo que deben hacer los libros, en el cine se trata de mostrar la historia en imágenes. Sin embargo, tampoco puedes escribir las líneas del guion con titulares. Para mí, los temas más importantes, y que siempre encuentras en mis películas son poder, la fe, el coraje y el heroísmo. Cualquier película futurista debe ser atemporal y hablar de todo aquello con lo que nos identificamos. Ese es el secreto.
P - Hay muchos mensajes en su película, uno de ellos son los niños a los que se les separará de sus padres. Obviamente es un tema político de actualidad. ¿Cuál es el mensaje?
R - Bueno, no soy un tipo de mandar mensajes desde la pantalla. Lo que queremos decir está dentro de la película. Es el mundo futuro que podemos encontrarnos si seguimos así. Es una declaración a favor del medio ambiente, contra el consumismo de los recursos. Estamos devorando el planeta sin mirar más allá de lo inmediato, sin medir las consecuencias. En algún momento el petróleo se agotará y los recursos naturales que estamos explotando se agotarán. Ese es un tema que me interesa. «El señor de los anillos» era similar porque nació en un momento en el que el mundo y la magia de lo antiguo se estaba desvaneciendo. En casi todas mis películas hay formas de vida que desaparecen para dar la bienvenida a otro sistema... Y nosotros estamos llegando al fin de nuestra civilización tal y como la hemos conocido durante varios siglos, nos guste o no, el cambio está cerca y nadie puede hacer nada al respecto.
P - Ahora que estamos en plena negociación del Brexit, sorprende que el villano de su película esté directamente relacionado con la ciudad de Londres...
R - Inglaterra siempre se ha caracterizado por alimentarse de otras culturas. La metáfora es muy clara. El darwinismo municipal es el tipo de filosofía dominante que este mundo muestra y honra tanto a las grandes ciudades como a las pequeñas. Moralmente está justificado la elección de la ciudad. A veces los presidentes o los jueces del Tribunal Supremo, o las grandes ciudades, no son tan humanas como esperas que sean (se ríe).

Peter Jackson regresa a la Tierra Media

Amazon Studios está trabajando en la producción de la serie de «El señor de los anillos», que tendrá cinco temporadas con un presupuesto de un millón por capítulo. Se espera que el rodaje se alargue durante dos años.
P - ¿Se ha involucrado en el guion de la serie de «El señor de los anillos»?
R - Me llamaron, pero no tengo experiencia en el medio de la televisión. Ofrecí mi ayuda para desarrollar los guiones, por si la necesitaban en algún momento, pero rechacé la responsabilidad de tener el control de algo que nunca antes había hecho. Les he ayudado con el guion, pero una serie de esas características necesita una persona experimentada. Yo estoy entusiasmado con la serie y, desde luego, no he cerrado la puerta a Amazon. Estoy agradecido porque quieran hacer la serie y que la hayan desarrollado en el mismo mundo que las películas.
P - Cuando se triunfa a lo grande como usted con «El señor de los anillos», ¿ese éxito influye en las decisiones de sus proyectos futuros?
R - Una pregunta muy adecuada... Es cierto que después de un gran éxito no puedes pensar con claridad. Soy consciente de que cualquier cosa que haga ahora no va a superar el triunfo de «El Señor de los anillos». Probablemente nunca vuelva a hacer una película tan exitosa y estoy de acuerdo contigo, mis decisiones no la relativizan. Sin embargo, busco incesantemente repetir el éxito de «El Hobbit». No claudico, aunque sepa que es prácticamente imposible. Quiero hacer buenas películas, sean grandes, pequeñas o de cualquier tema, esa es realmente la presión que tengo; hacer una buena película y no creo que haya llegado a la cima.
P - ¿Tiene un Hobbit en su casa?
R - Sí, lo tengo en mi finca de Nueva Zelanda. Allí sigue en el jardín.
P - ¿La tecnología actual le permite plasmar todas sus ideas en la pantalla, o todavía existen limitaciones?
R - No, cualquier cosa que puedas imaginar ahora se puede filmar. Pero como director tienes una responsabilidad hacia el guion. Se trata de entretener al público. Las audiencias no solo se entretienen con la tecnología. Creo que no hay necesidad de exagerar con los efectos visuales, porque el corazón está en los personajes y las emociones. Las posibilidades visuales son ilimitadas, porque puedes imaginar cualquier cosa y ponerla en una película, esperemos que los directores vuelvan a centrarse en las historias y los personajes.

 

  TITULO:   VIVA LA VIDA -Humphrey Bogart, el galán que conquistó el cine clásico,. DOMINGO -30- DICIEMBRE ,.

El domingo -30- diciembre  2018 a las 16:00 por Telecinco , foto,.

 Humphrey Bogart, el galán que conquistó el cine clásico,.

El actor, leyenda del séptimo arte gracias a «Casablanca», nació un 25 de diciembre de 1899 en Nueva York,.

El actor Humphrey Bogart La figura permanece de Humphrey Bogart está grabada en la memoria colectiva como arquetipo del hombre duro, ese que es capaz de avanzar en medio de las más terribles adversidades a base de aceptarlas como envites consustanciales a una existencia en la que las penas son la regla y las escasas alegrías, las excepciones que confirman aquella. Un sujeto de rostro impasible que solo en contadas ocasiones deja asomar su tierno corazón, pero que cuando lo hace pilla con la guardia bajada a cuantos se hallan a su alrededor. Un conquistador empedernido que parece estar de vuelta de todo y que apenas aspira a hallar un poco de paz en una vida jalonada de tragedias. Tal día como hoy, de hace 120 años, nacía una estrella que aún hoy, más de medio siglo después de su muerte, sigue brillando en el firmamento cinematográfico.
Hijo de una dibujante y un cirujano, Bogart creció en Nueva York, en el seno de una familia acomodada. Tenía a su disposición todos los elementos materiales necesarios para llevar una alegre existencia. Otro cantar era lo que ocurría entre bambalinas. Bajo el lujoso escaparate se ocultaba un matrimonio disfuncional, con una madre alcohólica y un padre enganchado a la morfina. El pequeño Humphrey DeForest Bogart carecía del cariño necesario para lograr un completo desarrollo emocional. Emergió, por el contrario, un carácter rebelde que encontraría en el tabaco y en el teatro una perfecta válvula de escape que le permitiría exorcizar sus demonios.
Era incapaz de plegarse a las normas impuestas por otros. Expulsado del rígido instituto en el que le había inscrito su padre, los planes de labrarse camino en el campo de la medicina se vinieron abajo. Diestro navegante, se alistó entonces en la Marina y fue destinado al buque S.S. Leviathan. La Primera Guerra Mundial vivía sus últimas batallas, pero Bogart tuvo aún tiempo de entrar en combate, resultando herido cuando un torpedo alcanzó el buque en el que iba. Un fragmento de madera le alcanzó en la boca, alterando para siempre su manera de hablar. Sería uno de los sellos distintivos de Bogart una vez que se aventurase en Hollywood, junto a su melancólica mirada.

Pasión en Casablanca

A comienzos de los años veinte, debutaba en el teatro gracias al productor William A. Brady, padre de un viejo compañero de estudios. Poco después probaba fortuna en el cine, con pequeños papeles, muchos de ellos como gángster de tres al cuarto. Hasta que en 1941 Raoul Walsh le reclutó para «El último refugio», película que significaría el despegue de su carrera. Ese mismo año se metía en la piel de Sam Spade, el irónico, terco y cínico detective creado por Dashiell Hammett.
«El halcón maltés» inmortalizaría a Bogart junto con su inseparable cigarrillo. Pero la historia podría haber sido distinta en caso de que George Raft, el primer actor al que se le ofreció el papel, se hubiera plegado a trabajar con un por entonces inexperto John Huston. «Boogie» no fue tan melindroso. Resolvió el enrevesado crimen que se le había planteado y mandó a prisión a la culpable. Que esta fuera la mujer de la que se había enamorado poco importaba. Él cumpliría con su deber por mucho que hubiera de ahogar en alcohol las penas de su afligido corazón.
Lo mismo que en su siguiente y más extraordinario éxito, «Casablanca» (Michael Curtiz, 1942). La que para muchos es la mejor película que se ha rodado nunca mostraba a Bogart atrapado en el dilema planteado por la necesidad de escoger entre el amor y la virtud. Inevitablemente, acaba cediendo a esta, dejando partir a la dueña de su corazón, sabedor de que ella es el motor que hace girar una empresa mayor, la resistencia contra los nazis de la que forma parte su marido, Victor Laszlo.
La imagen de Rick Blaine viendo partir a su amada en un aeropuerto invadido por la niebla mientras le espeta al capitán Renault la inmortal frase «creo que este es el principio de una gran amistad» quedaría para siempre como abanderada de un modo de entender el cine sobre el que sería ya imposible volver.
Estar a la altura de ese personaje sería imposible para casi cualquiera. Pero Bogart tuvo tiempo de demostrar en su vida que llevaba dentro de sí parte de la grandeza espiritual de Rick. La ocasión se la sirvió en bandeja Joe McCarthy, el senador obsesionado con internarse en las cloacas de la sociedad estadounidense para hacer aflorar la supuesta podredumbre comunista que amenazaba con colapsar el sistema. El actor sería uno de los perseguidos por su Comité de Actividades Antiamericanas.
Pero nada haría arredrarse a «Boggie». Mientras compañeros de profesión como Gary Cooper o Ronald Reagan colaboraban con la «caza de brujas», el protagonista de Cayo Largo (John Huston, 1948) se erigía en uno de los líderes del denominado Comité de la Primera Enmienda, a través del cual denunció el atentado contra los derechos civiles que se estaba llevando a cabo.
A su lado, entre otras, Lauren Bacall, su cuarta esposa, la mujer que le aportó un mayor grado de felicidad y que le acompañaría hasta su lecho de muerte. La envidia de miles de féminas cuyo corazón aún hoy se rompe cada vez que contemplan el desgarrado amor que Humphrey Bogart le profesa a Ingrid Bergman en el local más popular de Casablanca.

 

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