Figuras y toreros emergentes se reparten los carteles de la Feria de Olivenza,.
Cuatro corridas de toros y una novillada componen el cartel de la cita oliventina que abrirá la temporada taurina,.
La cita taurina, que tendrá lugar del 8 al 10 de marzo, se compone de cuatro corridas de toros y una novillada con picadores en la que estarán presentes las máximas figuras del momento junto a varios toreros jóvenes con mayor proyección.
El calendario previsto se iniciará el viernes, 8 de marzo, con reses de la ganadería de 'El Tajo y La Reina' para los diestros José Garrido, Luis David y Toñete.
El sábado, 9 de marzo, se abrirá con una matinal con novillos de varias ganaderías para Juanito, Diego San Román y Carlos Domínguez. En la vespertina del sábado se lidiaran toros de María Guiomar y Garcigrande por los diestros Diego Ventura, Enrique Ponce y Julián López 'El Juli'.
En la matinal del domingo, 10 de marzo, se lidiarán reses de la ganadería de Zalduendo por Antonio Ferrera, Sebastián Castella y Emilio de Justo. En la corrida de por la tarde los toros de Victoriano del Río serán lidiados por Morante del Puebla, Roca Rey y Ginés Marín.
Homenaje a Espartaco
El acto comenzó con la presentación del propio cartel, obra del pintor trujillano afincado en Badajoz Alfonso Sánchez Rubio, y con la proyección de un vídeo de homenaje a Espartaco en el que se resumió más de tres décadas de carrera taurina y en la que Olivenza fue parte importante.El diestro tomó el micrófono y comenzó teniendo palabras de agradecimiento para el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, por su presencia en el acto, calificándolo como «un valiente» en un tiempo difícil para la tauromaquia, ya que en su opinión asistir a este tipo de actos puede perjudicar en el plano personal o político. «En los tiempos que corren es mucho más fácil ni siquiera aparecer en los actos taurinos», señaló el de Espartinas.
También tuvo palabras de agradecimiento para el empresario de Ruedo de Olivenza, José Cutiño García, quien formó parte de su cuadrilla en sus inicios, y contó varias anécdotas vividas junto a él cuando estaba abriéndose camino en el mundo del toreo. Sobre el empresario taurino destacó que «nadie puede saber nunca lo que José Cutiño ha hecho por la plaza y por la feria», apuntando que en los inicios de la cita taurina pidió «gran cantidad de favores» para hacer que la Feria del Toro sea hoy lo que es, garantizando que primeras espadas «apostaran por Olivenza» desde el primer momento. Así, Espartaco consideró la Feria de Olivenza como «la Champions del toreo».
Apuesta económica
En el acto también intervino el alcalde de la localidad, Manuel José González Andrade, quien destacó, entre otras novedades, el estudio que realizó la Universidad de Extremadura y la de Barcelona por encargo de la Diputación de Badajoz, del que se desprendieron datos como que la Feria Ibérica del Toro de Olivenza de 2018 tuvo un impacto económico en toda España de 5'3 millones de euros (2'8 millones en Extremadura y 2'5 en el resto del país).González Andrade consideró que la Feria goza de una «buena salud», ya que los oliventinos la consideran «como suya», y por ello anunció que seguirá apostando junto al resto de administraciones provinciales y regionales para que la Feria sea considerada como Fiesta de Interés Turístico Nacional.
«Olivenza va a seguir defendiendo los toros por los taurinos y por los no taurinos», explicó el alcalde, ya que en su opinión, en un tiempo en que hay quien pretende «patrimonializar la fiesta», en la ciudad esta fiesta es «de todos, de los que van a los toros y de los que no van pero respetan a los que van», motivo por el que considera que Olivenza está celebrando ya su 29ª edición.
TITULO: CAFE BAR DAVID - COCINA -Las roscas de dos, cuarenta ,.
CAFE BAR DAVID - COCINA -Las roscas de dos, cuarenta ,. fotos,.
Las roscas de dos, cuarenta,.
Merendando roscas fritas de toda la vida y migas compradas en una pastelería,.
Cuando entré en la pastelería que hay en El Túnel de Cáceres, en Antonio Hurtado, la calle donde nací, realmente iba a por un bizcocho de naranja, que los hacen muy ricos. Pero no hay nada más peligroso que un hombre comprando a las dos de la tarde y sin haber comido, así que hice honor al tópico y, además del bizcocho, me llevé unas roscas fritas y una caja de migas.
En principio, pedí la caja de migas de dos euros, pero luego le comenté a la dueña que igual tenía mala suerte, aparecía mi suegra cuando me las estuviera comiendo, tenía que invitarla y me quedaba a dos velas, así que compré la caja grande de cuatro euros e hice las cosas bien: invité oficialmente a mi madre política esa tarde a mi casa para disfrutar, en amor y compaña, de una merienda cena con café y migas.
Así que llegó la hora de la verdad e hice lo que me pareció: eché un chorrito de aceite de oliva manzanilla cacereña de 2018 de Pozuelo de Zarzón en una sartén grande, le di fuego unos minutos, eché las migas y las fui revolviendo con una cuchara de madera hasta que estuvieron calientes. Nos sentamos a la mesa, coloqué una fuente con las migas, que llevaban pimentón, pimiento rojo, tocino y ajo y oye, visto y no visto: en un momento, mi suegra acabó con la fuente con mi ayuda y la de mi mujer.
Le gustaron las migas y es una garantía porque mi suegra es experta en sopas de tomate, en migas y en roscas fritas, que no faltaron y que mi suegra comió con delectación para acabar sentenciando, con mucho misterio, que esas roscas eran como las de dos, cuarenta que hacían en su pueblo, Aldea del Cano.
Nunca había escuchado tal nombre de rosca: ¿De dos, cuarenta? Parecía el nombre de un grupo indie de música más que un nombre de rosca. Pero mi suegra me aclaró la cuestión y, como casi siempre, me inspiró una historia. «Esas roscas se llamaban así porque con dos huevos, hacías 40», me desveló el secreto del nombre y volví a maravillarme ante la sabiduría popular para bautizar con finura y precisión.
Después hablamos de los tipos de migas. Las que me gustan son las de mi madre, ¿cuáles si no?, que solo llevan ajo y aceite, suaves, aunque estas de la pastelería no estaban nada fuertes. Las hay con chorizo y carne y se toman mucho con huevo frito. A mí me gusta cogerlas con la cuchara y mojarlas en el café. Nada más divertido que tomarlas así delante de unos turistas franceses, alemanes o ingleses, que observan asombrados cómo las comes y salen disparados hacia la barra para pedir lo mismo.
De las migas de bar, recuerdo con especial entusiasmo las que me preparó Juan Gil en el bar El Abuelo de Almendralejo, el templo extremeño de los desayunos con sus 35 tostadas diferentes. Los Gil son una saga de hosteleros de Almendralejo. El bisabuelo Antonio tuvo desde 1920 una taberna en la zona de Casas Nuevas, por el antiguo campo de fútbol. El abuelo Joaquín abrió el bar El Abuelo en la plaza de la Hierba en 1968. El nieto, Juan, inauguró en 1971 el bar Los Nietos, de 30 metros cuadrados, frente al mercado de abastos, que reformó y amplió en 1985 y hoy regenta su hijo y bisnieto de Antonio, Joaquín Gil. Preparan unas migas deliciosas con ajo castaño de Aceuchal, que sabe mucho y repite poco, y luego, para enjuagar el paladar y digerir bien, un aguardiente Espino o uno casero macerado con pepino. Tengo que llevar a mi suegra, que también entiende de aguardientes.
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