miércoles, 27 de noviembre de 2013

Santi Barragán, Temporada gris para Barragán,./ LA TRAVIATA, TEATRO, EL CLUB DE LA COMEDIA,.Ramón Barea, teatro puro.


  1. Santi Barragán ha tenido que nadar esta temporada por aguas fanganosas a las que no está acostumbrado. Habitual en el podio del ...
    Santi Barragán ha tenido que nadar esta temporada por aguas fanganosas a las que no está acostumbrado. Habitual en el podio del Campeonato de España de Velocidad en cinco años, este curso nunca tuvo opciones de pelear por un cajón en la última foto del año. Ni siquiera en la doble cita jerezana del pasado fin de semana tenía posibilidad de acabar entre los tres primeros y encima el cúmulo de despropósitos de Jerez le ha 'regalado' una séptima posición del campeonato que no está en consonancia con el caché conquistado en años anteriores. Campeón de Europa en 2010 y subcampeón del CEV, segundo en 2011 y cuarto en 2012, una pasada campaña en la que siempre estuvo luchando por el podio.
    Séptimo es una losa demasiado pesada y que tiene muchas causas. Alguna de ellas es preferible no contarlas, así que lo dejaremos en la multitud de inconvenientes con los que se ha topado el piloto de Almendralejo. Problemas de adaptación a la nueva Suzuki -no al equipo, aclara Barragán- y sobre todo los neumáticos. Espinoso asunto que el extremeño prefiere olvidar cuanto antes. «Los resultados lo dicen todo. Ha sido una mala temporada. Ahora toca descansar y empezar a pensar en la próxima», se lamenta.
    Santi Barragán tendrá un mal recuerdo de Jerez, donde el domingo se vivieron las dos carreras que bajaban el telón. Y todo salió mal. Un noveno puesto y un undécimo lo dicen todo. Ha habido carreras donde incluso cayéndose terminó más arriba en la clasificación. El CEV lo ganó finalmente Fores, que no ha dado tregua y ha dominado esta competición. «He tenido que tragar mucha saliva. No es plato de buen gusto. Jerez ha sido un desastre y han pasado muchas cosas. Hemos tenido muchos problemas con la moto y los neumáticos...». Lo siguiente es mejor no reproducirlo, como pide el piloto. «Es una pena no poder estar ahí arriba, que es donde siempre he estado. Nunca me ha pasado ésto porque siempre he luchado por lo más alto. Pero ya se acabó todo y hay que pensar en la próxima temporada porque ya no podemos hacer nada. He tropezado con una pared. Desconfío de todo el mundo», continúa.
    Con vistas al próximo año, Santi Barragán baraja varias opciones. Una de ellas es recomponer el antiguo Extremadura Junior Team con Kawasaki e intentar que Michelin le surta los neumáticos. Seguir con Suzuki parece improbable por lo que comenta, aunque su equipo no fue la principal traba que encontró en el campeonato recien concluido. «Con el equipo no estoy descontento. A algunos ya los conocía de antes y con el personal he trabajado muy bien. Me sabe mal por el Suzuki Speed Racing, que no ha visto recompensado su esfuerzo durante toda la temporada en especial los mecánicos de mi moto», argumenta. Otra opción que se verá en las próximas semanas es fichar por BMW y participar en el próximo CEV para motos tipo Superbikes. Y una tercera, más complicada por cuestiones presupuestarias, sería participar en el Mundial de Superbikes con la nueva categoría que se implantará para las CRT. Haga lo que haga, y a nada que cambien un poco, las cosas le irán mejor.
    1. TÍTULO: LA TRAVIATA, TEATRO, EL CLUB DE LA COMEDIA,.Ramón Barea, teatro puro.

      Un hombre de teatro «integral». Así se refería a-foto,. Ramón Barea (Bilbao, 1949) el acta que lo declara ganador del Premio Nacional de Teatro ...
       
      Ramón Barea, teatro puroUn hombre de teatro «integral». Así se refería a Ramón Barea (Bilbao, 1949) el acta que lo declara ganador del Premio Nacional de Teatro 2013, galardón que concede el ministerio de Cultura y que está dotado con 30.000 euros. El actor, director, productor y autor vizcaíno se lo adjudicó por mayoría y en reconocimiento a «su amplia trayectoria como hombre de teatro integral en la que ha desarrollado todas las facetas». Una labor que ha compaginado con su presencia en un centenar de películas y series.
      Antes que pensar en un premio, Barea supuso que el teléfono sonaba ayer para reclamar un impago. El galardón fue así «una sorpresa enorme y una gran alegría», la guinda en una larga carrera marcada por su entrega pero con pocas distinciones: el premio Ercilla al mejor director teatral y el de la Unión de Actores del País Vasco. Dedica Barea este premio «a todos los que aman la profesión tanto como yo amo este oficio que defiendo a muerte para seguir en la brecha y haciendo lo que más me gusta, ser actor y convertirme en otro». Los 30.000 euros de bolsa serán «para tapar agujeros», ya que los malos tiempos son muy crudos para los pasajeros del carro de la farsa.
      Como destacaba el fallo, este polifacético hombre orquesta de la escena domina un amplio registro dramático que le ha permitido abordar de piezas clásicas a comedias de situación, películas cómicas y firmar una treintena de dramas. Él se define como «una hormiguita» que desde la adolescencia no ha hecho otra cosa que «trabajar y hacer kilómetros en furgonetas destartaladas, con entrega y sin excesiva visibilidad». «Es como si hubiera sido transparente todos años», ironiza este actor de enorme oficio, capaz de pasar sin problemas de un papel protagonista a uno secundario o de ponerse a escribir». Recibe la distinción como «una inyección de autoestima profesional y personal» y se alegra especialmente de que «un premio como este recaiga en un corredor de fondo que, como yo, no ha parado nunca, cuando por lo general suelen otorgarse a caballos ganadores».
      Ha combinado en su larga andadura en las tablas «proyectos arriesgados -como la sala bilbaína 'Pabellón 6', con clara implicación en su entorno-, con otros de amplia difusión nacional, como sus últimos trabajos en la Compañía Nacional de Teatro Clásico». Producciones como 'En la vida todo es verdad o todo es mentira', o 'Las comedias bárbaras' de Valle-Inclán que estrena el CDN el próximo día 3, y cuyo papel de Montenegro ensayaba cuando llegó la buena nueva.
      Tímido y de formación autodidacta, lamenta Barea que su Bilbao natal no le ofreciera demasiadas oportunidades para formarse y disfrutar solo del teatro cuando las compañías recalaban en la capital vizcaína durante las fiestas.
      Fundador y actor en los setenta en grupos profesionales e independiente del País Vasco como 'Cómicos de la Legua' y 'Karraka', pasó a escribir sus propios dramas -ha firmado una treintena- y a ejercer la dirección en montajes como el musical 'Bilbao Bilbao'; 'Oficio de Tinieblas 5', sobre textos de Cela; 'Okupado'; 'Euskadifrenia'; 'Ubú Emperatriz' y 'Hoy última función'.
      Como director ha afrontado 'El hombre que confundió a su mujer con un sombrero', basado en el ensayo del neurólogo Oliver Sacks, y 'El hombre de los dados', de Luke Rinhard; 'El buscón', 'Emma', 'Ecografías' y 'Esencia patria'. Entre sus desafíos más recientes, 'La monja alférez', de Domingo Miras; el monólogo 'Los perjuicios del tabaco', de Chéjov; 'Luces de Bohemia'; 'La tempestad'; 'Coriolano', con dirección de Helena Pimenta; 'Morir cuerdo y vivir loco', escrito y dirigido por Fernando Fernán Gómez; 'El chico de la última fila' y 'Cartas de amor a Stalin', ambas de Juan Mayorga, o 'Beaumarchais', de Sacha Gitry, con dirección de Josep María Flotats, Entre sus películas 'El cura Santacruz', 'En la puta calle', 'Matías juez de línea' o 'Atilano Presidente', además de las óperas primas de Imanol Uribe, Enrique Urbizu, Julio Medem, Juanma Bajo, Ulloa, Pablo Berger, Ana Díez y Álex de la Iglesia.
       

No hay comentarios:

Publicar un comentario