TITULO: Atención obras - Cine - Camilo Lara ,. Viernes - 19 , 26 - Abril ,.
Viernes - 19 , 26 - Abril ,. a las 20:00 horas en La 2, foto,.
Atención obras - Cine - Camilo Lara,.
Cayetana Guillén Cuervo recibe al músico Camilo Lara, que presenta su último disco recopilatorio, 'Algo-Ritmo'. Un vinilo doble con el que celebra 20 años de trabajo con el Instituto Mexicano del Sonido. Son 22 de sus mejores canciones y dos temas nuevos en colaboración con Ceci Bastida, Foudeqush y Esteman.
Artista imprescindible en la agitación cultural de México, Camilo Lara rinde un homenaje a su país a través de su personal mezcla de cumbia y ritmos urbanos como el punk, hip-hop y la música electrónica. También es intérprete, DJ y productor, uno de los nombres de referencia de la música de América Latina, creador de bandas sonoras de grandes series y películas, compositor y descubridor de nuevos talentos.
La actriz Marta Poveda salta a la dirección con la obra de Lope de Vega ‘La Francesa Laura’. Su propuesta mezcla el teatro clásico con miradas contemporáneas sobre el amor, el poder y la condición femenina. Se trata de un texto inédito descubierto en 2023 con inteligencia artificial. El programa se ha acercado al Corral Cervantes de Madrid para contarlo.
En Madrid, ‘Atención Obras’ ha visitado la Fundación Mapfre para conocer la faceta más sociopolítica del pintor Marc Chagall. A lo largo de sus 98 años de vida, el exilio y las guerras le hicieron transitar por los grandes sucesos del siglo XX, que le dejaron una profunda huella.
También en clave teatral, se acerca a uno de los montajes más destacados de la temporada pasada, ‘Tea Rooms’, basado en la novela de Luisa Carnés, de la que también bebe la serie de La 1 ‘La Moderna’. El próximo miércoles, Día Mundial del Teatro, podremos disfrutar en La 2 de su adaptación televisiva. Un equipo del programa se coló durante la grabación en Prado del Rey.
TITULO: Detrás del instante - Fotógrafas que han puesto el dedo en la llaga al captar las mil caras de las victimas de trata,.
Miércoles - 17 , 24 - Abril a las 20:00 horas en La 2 / fotos,.
Fotógrafas que han puesto el dedo en la llaga al captar las mil caras de las victimas de trata,.
No toda violencia es física, ni deja moratones y heridas visibles, ni va acompañada de ruido o golpes. Ni siquiera de gritos. Tampoco sucede solo en momentos concretos. Hay una violencia que es silenciosa, continuada y validada cultural y socialmente, una violencia cuyas huellas son tan visibles y tan cotidianas que pasan desapercibidas. Para nosotras. Para ellos. Para el mundo.
Pero lo invisible también puede plasmarse en una foto, en una mirada. Puede sugerirse, adivinarse y denunciarse a través de una cámara. Porque las imágenes, aunque no impacten, hablan. Y gritan. Y acusan. Y, lo más importante, nos abren los ojos y nos hacen pensar. Son testimonios mudos que se nos quedan grabados en el cerebro. Y eso es lo que importa. Ahí reside su tremendo valor.
Aprovechando que en unas horas es 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, os presento brevemente el trabajo de varias fotógrafas, concretamente diez, que han puesto el ojo y la cámara en la llaga, en formas de violencia a veces muy sutiles que todas las mujeres soportamos. Y también, y esto me parece especialmente importante, en formas de violencia que nosotras mismas, a veces sin saberlo, ejercemos sobre otras mujeres. Vamos a verlas.
NAN GOLDIN Y DONNA FERRATO: la violencia doméstica vista desde dentro y desde fuera
El retrato de una mujer maltratada, su mirada, dice mucho más que páginas y páginas de informes médicos y policiales. Jamás entenderemos la violencia contra las mujeres si no conectamos a gente real con historias reales. Por eso no me dedico a la fotografía, porque para mí no hay nada más poderoso que una historia real.
Es una cita de Donna Ferrato, la fotógrafa que fue la primera en fotografiar una agresión doméstica en el momento en el que se producía. Fue en 1980, cuando ese tema aún era visto como algo que había que “solucionar en privado” o “de puertas hacia dentro”.
Ferrato estaba realizando un trabajo sobre matrimonios de clase alta que acudían a un club de intercambio de parejas en Nueva York. Trabó amistad con una de esas parejas, los visitaba habitualmente en su casa y en una de esas visitas fue testigo de la agresión.
Su testimonio gráfico contribuyó a poner el tema sobre la mesa, a darle una relevancia y una dimensión públicas, aunque le costó lo suyo, ya que ningún editor quería publicar sus fotografías. Al final, la propia Ferrato las publicó en un libro. Una década más tarde, el Congreso estadounidense aprobó la Ley de Violencia contra la Mujer.
Escribí todos los detalles de la historia en el post ‘Así se hizo la foto con la que Donna Ferrato sacó a la luz pública el problema de la violencia contra las mujeres’.
Nan Goldin es otra de las referencias ineludibles en lo que a trabajos sobre la violencia contra la mujer se refiere. La sufrió en sus propias carnes, a manos de una de sus parejas, y la documentó en su legendario ‘The ballad of sexual dependency’ (en el link tenéis el post que escribí sobre ese magnífico trabajo).
A finales de los 80 yo sufría malos tratos, me maltrataron hombres y también me maltraté yo misma. Pero mi generación creció con eso, era la norma, y parte de ello se reflejó en mi trabajo.
También se me maltrató cuando enseñé mis fotos. Me dijeron que una mujer que fuera artista no podía ser buena, fui atacada en festivales de fotografía por haber hecho esas fotografías siendo mujer, me llamaron de todo. Así que fue difícil enseñar mi trabajo porque eso significaba luchar, pegarme con la gente y con el poder. Creo que no hace falta valentía para hacer fotos, para lo que hay que ser valiente es para enseñarlas.
El trabajo de Goldin no es un documento sobre la violencia conyugal, esta aparece como parte de las relaciones a afectivas y de amistad que le unían al grupo de personas que retrató en aquella época. Eran sus amigos, la gente que más quería, y que formaban parte de su vida. Ese es valor añadido de “The ballad of sexual dependency”, que es un trabajo hecho desde dentro. Y además. en este caso, como en el anterior de Donna Ferrato, no se trata de una violencia de alguien ajeno que irrumpe en la vida de otra persona, sino de un tipo de violencia normalizada hacia la mujer, que es parte de la forma en que los hombres se relacionan con las mujeres.
Ana Mendieta (1948-1985), artista conceptual víctima de la violencia de género
“Mi arte surge de la rabia y la sublimación. Aunque puede que la imagen no transmita toda esa rabia, creo que todo el arte surge de una rabia sublimada».
La sublimación entendida como destino de la pulsión, en este caso artística y vital, de la propia Mendieta. La necesidad de actuar, de crear, para dar respuesta a una tensión interna. Sus primeros trabajos, realizados entre 1972 y 1975, son de marcado corte feminista, a la vez que provocadores. En ellos, la artista cubana muestra su preocupación por la mujer y la violencia que sobre ella se ejerce, y reivindica la necesidad de crear nuevas estructuras sociales que doten a las mujeres de un lugar de libertad y expresión.
La obra de Ana Mendieta es una llamada a reflexionar sobre el feminismo, la violencia, la vida, la muerte, el lugar y la pertenencia.
En ‘Silueta’ (1973-1980), uno de sus trabajos más conocidos, Mendieta muestra lo físico del cuerpo, su materialidad en fusión con la naturaleza, un cuerpo que va mutando en su representación en elementos más etéreos como el fuego, el humo y el propio aire. Lo sólido se deviene en gaseoso. Sublimación.
En el Medio Oeste, la gente me miraba como un ser erótico (el mito de la latina ardiente), agresivo, y en cierta manera diabólico. Esto creó en mí una actitud muy rebelde, hasta que, por así decir, explotó dentro de mí y yo cobré conciencia de mi ser, de mi existencia como un ser particular y singular. Este descubrimiento fue una forma de verme a mí misma separada de otros, sola.
Una de sus obras más controvertidas es ‘Rape Scene’ (escena de violación), de 1973. Basada en el caso real de una estudiante de la Universidad de Iowa que había sido violada y asesinada pocos días antes.
Se trata de una serie de fotografías tomadas de una performance que Mendieta representó por sorpresa a un grupo de amigos a los que había invitado a su casa, en el mismo campus universitario. Al llegar, los amigos de la artista se encontraron con la puerta semi-abierta y, cuando pasaron dentro, vieron el cuerpo de Mendieta sobre una mesa, desnudo de cintura para abajo, con las manos y los pies atados, y las piernas manchadas de sangre. Una imagen impactante, violenta y perturbadora, como el propio acto de la violación. En Estados Unidos, una de cada cinco universitarias son víctimas de agresiones y abusos sexuales.
Con esta contundente serie, Ana Mendieta subraya la estrecha relación que hay entre la reducción que se hace de la mujer a un cuerpo y de este cuerpo a un objeto, un objeto eminentemente sexual, y cómo el hombre usa este “objeto” (que ya no es cuerpo, que ya no es mujer y, por tanto, no es persona) de manera violenta y sin consentimiento.
Bajo este trabajo y el resto de los que conforman la obra de Mendieta subyace la necesidad de replantear el lugar que la mujer y lo femenino ocupan en la sociedad y de reivindicar la creación de espacios donde la mujer pueda redefinirse, reafirmarse y construir nuevos discursos identitarios y de género.
En ‘Glass on Body’ (1972) la fotógrafa y artista cubana denuncia la violencia física hacia las mujeres, el maltrato. Para ello se fotografía pegando diferentes partes de su cuerpo a un cristal de modo que estas se vean deformadas, como si hubieran sido golpeadas.
Pese a que su obra tiene una ineludible vertiente feminista, Mendieta fue crítica con el movimiento, al que acusó de representar los intereses y las interpretaciones propias de las mujeres blancas y occidentales de clase media, olvidándose del resto. Algo que, como veremos, otras fotógrafas han denunciado en sus trabajos.
La figura de Mendieta ha quedado marcada no solo por su obra, sino también por su muerte. Falleció en 1985, a los 36 años, tras caer por la ventana de su apartamento de Nueva York, situado en el piso 34 de un edificio del Greenwich Village. Mendieta vivía allí con su marido, el escultor y poeta estadounidense Carl Andre.
A pesar de que testigos oyeron a la pareja discutir violentamente y de que Andre presentaba arañazos recientes en cara y brazos, el artista fue absuelto del asesinato de su mujer. En el juicio, su abogado presentó a Ana como una mujer desequilibrada con tendencias suicidas.
ASHLEY ARMITAGE: la reivindicación cuerpo ante la violencia estética
«La censura de una foto que muestra una línea de bikini natural es como decir que el cuerpo natural de una mujer es obsceno, anormal e inaceptable. Es como decir que para ser decentes y aceptables debemos afeitarnos».
La imposición de ciertos cánones de belleza, muchas veces inalcanzables, estereotipos que se dan por supuestos y de obligado cumplimiento, es otra de las violencias que sufrimos las mujeres. Cuando se traspasa la línea de los que es cuidarse por temas de salud, de querer verse bien por una misma, y se cae en la obsesión por la eterna juventud, la eterna felicidad, la eterna perfección y la eterna necesidad de aceptación por parte del resto… Entonces es cuando los “cuidados” y la “atención” a nuestro cuerpo y aspecto, a la imagen que proyectamos, se convierten en violencia hacia él y hacia nuestras mentes.
Ashley Armitage es una joven fotógrafa estadounidense que reivindica la belleza no ligada a criterios de perfección física normativa y arbitrariamente impuestos, sino como un concepto abierto, personal, una consecuencia de cómo vivimos, cómo nos vemos y, sobre todo, de cómo nos aceptamos y definimos ante el mundo.
Armitage parte de la premisa de que es prácticamente imposible cambiar la forma en que las mujeres nos vemos a nosotras mismas cuando son los hombres los que definen lo que es hermoso o no en una mujer, lo que es deseable, lo que es aceptable y lo que es sancionable. En los últimos años, las cosas han ido cambiando muy lentamente, pero los principales fotógrafos de las industrias de la moda y la belleza siguen siendo predominantemente hombres.
Como contraposición a todo ello, Armitage, de 27 años y que lleva trabajando en sus fotos desde antes de cumplir los 20, prescinde de modelos profesionales y retrata a chicas de su entorno más cercano, sus amigas, para mostrar la feminidad vista por iguales, por una chica de su misma edad. Esto le permite retratar los cuerpos femeninos explorando todos sus matices y poniendo en valor su individualidad, alejándose de fantasías masculinas e idealizaciones comerciales.
Representa a las personas tal como son, mostrando con naturalidad sus “imperfecciones”.
Quiero hacer fotos para normalizar todos los tipos de cuerpo y romper el estándar de belleza. Los grupos de personas que están fuera del estándar de belleza son marginados, están subrepresentados o mal representados, y yo quiero ayudar a desmantelar esa toxicidad, no alimentarla. Siempre me he inclinado por fotografiar una amplia variedad de personas, solo porque es algo natural, ya que principalmente fotografío a mis propios amigos.
En 2015, esta joven estadounidense publicó en redes una foto de una amiga en ropa interior en la que se veía una mancha menstrual y parte del vello púbico. La reacción le reafirmó en su noción de los tabúes que existen en torno a las imágenes que se salen de lo que se considera “correcto” y “deseable” en lo que respecta a las mujeres.
Internet empezó a arder. Los primeros comentarios fueron de mi círculo de amigos, y eran positivos, del tipo ‘¡Eso es real! ¿Quién diablos tiene el dinero para tirar su ropa interior cada vez que se mancha de sangre?’ Luego llegaron los trolls y los comentarios negativos. Fue terrible. Un comentario decía literalmente: «Aféitate, guarra». Otro me dijo: ‘Ningún hombre te querrá jamás’.
RADHIKA CHALASANI: La tradición como fuente de violencia
India es uno de los países del mundo en los que ser mujer es más difícil. Tanto, que la feminidad se convierte en estigma desde el nacimiento. Aunque la igualdad de género está reconocida legalmente, en la práctica las cosas son muy diferentes. En los círculos más conservadores, son los hombres los que siempre deciden por las mujeres. Primero, el padre. Después, el marido. Cuando enviudan, las mujeres lo pierden todo y muchas veces son expulsadas de su hogar por su familia política o sus hijos, que las consideran una carga y motivo de vergüenza.
La violencia es, en estos casos, cultural, social y religiosa.
Miles de estas mujeres acuden a Vrindavan, conocida como la ciudad de las viudas. Es una ciudad santa de la India, con casi 4.000 templos, donde las viudas malviven dedicadas a la oración y mendigando para subsistir. Vestidas de blanco, el color asociado a la viudedad, viven allí hasta que mueren.
TITULO:TARDE DE CINE CON - Coloquio: Sátiras berlanguianas,.
Coloquio: Sátiras berlanguianas,.
foto / En el coloquio intervienen José Mota, actor y gran admirador de Berlanga; Marta González de Vega, guionista de cine y televisión, actriz, escritora y autora teatral; Bernardo Sánchez, escritor, dramaturgo, guionista y comisario de la exposición ‘Interior Berlanga’; y Javier Ocaña crítico cinematográfico del diario El País y colaborador habitual del programa.
TITULO: Historia de nuestro cine - Cine - El Verdugo ., Viernes - 19 , 26 - Abril, ,.
El Viernes - 19 , 26 - Abril ,. a las 22:15 por La 2, foto,.
Reparto,. Nino Manfredi, Emma Penella, José Isbert, José Luis López Vázquez, Ángel Álvarez, Guido Alberti, Julia Caba Alba, María Luisa Ponte, María Isbert,.
José Luis, el empleado de una funeraria, proyecta emigrar a Alemania para convertirse en un buen mecánico. Su novia es hija de Amadeo, un verdugo profesional. Cuando éste los sorprende en la intimidad, los obliga a casarse. Ante la acuciante falta de medios económicos de los recién casados, Amadeo, que está a punto de jubilarse, trata de persuadir a José Luis para que solicite la plaza que él va a dejar vacante, lo que le daría derecho a una vivienda. José Luis acaba aceptando la propuesta de su suegro con el convencimiento de que jamás se presentará la ocasión de ejercer tan ignominioso oficio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario