TITULO: A Crush, la pasta te aplasta - El mismo mohicano,.
El viernes -1- Noviembre a las 22:00 por La 1, foto.
El mismo mohicano,.
Vale que Espartero nunca dijo que hubiera que bombardear Barcelona cada 50 años (aunque le lanzara 1.014 proyectiles), pero si lo hubiera hecho sería muy distinto de Cristina Morales, ganadora del Nacional de Narrativa con 'Lectura fácil', soltando lo de que «es una alegría que haya fuego en vez de tiendas y cafeterías abiertas» [en Barcelona]. Y a estas alturas, eso escandaliza. La ministra Celaá responde que «nadie quiere ver a su propio país con llamas». Hay que ser ingenua y burguesa de toda la vida. ¿Alguien con un mínimo conocimiento de la literatura y sus escribientes podría no haber previsto las palabras de Morales? Sus greguerías de gregaria antisistema.
Alcántara, sobre la tribu de Morales, podría haber dicho: «Se visten todos en el mismo ferretero y los peina a todos el mismo mohicano».
TITULO: PUERTA CON PUERTA CANAL EXTREMADURA - El radar de la A-66 cerca de Zafra, el que más multa en la región,.
El radar de la A-66 cerca de Zafra, el que más multa en la región,.
Es el que más denuncias ha propiciado en el primer semestre del año; el segundo es otro de la A-5 situado cerca de Trujillanos,.
En el primer semestre del año, los cinemómetros de la DGT han formulado en España 1,3 millones de denuncias por exceso de velocidad. Un 12,4% más respecto a las cifras del año anterior, confirma Automovilistas Europeos Asociados (AEA) en un informe basado en datos del organismo que dirige Pere Navarro. En Extremadura se pusieron 45.383 denuncias frente a las 28.394 del mismo periodo del pasado. Esto es, un 60% más de multas. En el primer semestre de 2017 se alcanzaron las 27.699.
En el ranking de comunidades Extremadura ocupa el décimo lugar con más denuncias sobre quince regiones. En estos datos no están incluidas las de Cataluña y País Vasco. Las denuncias han supuesto una recaudación estimada de 200 millones en el conjunto de España. En Extremadura, la previsión es que hayan supuesto unos ingresos de 6,8 millones, según la AEA.
En Extremadura se ha multado un 60% más respecto a 2018, con 6,8 millones recaudados
De ese informe se extrae que la carretera
H-31, la autopista urbana que proporciona acceso a la ciudad de Huelva
por la A-49 procedente de Sevilla o Ayamonte, es donde más se multa en
el país (38.930), seguida de la A-92, que une Sevilla con Granada
(36.937). En el caso extremeño, en el kilómetro 685,9 de la A-66 se han impuesto 7.447 denuncias a través del radar fijo instalado ahí. Está en sentido Mérida. Justo antes de la salida de la A-66 hacia Zafra, que conecta con la N-432. Es el punto de Extremadura donde el radar ha sido más activo. La limitación de velocidad es la habitual en autovía, 120 km/h.
El doble de denuncias
Ese kilómetro llama la atención no solo porque se haya puesto una media de 41 denuncias diarias en los seis primeros meses sino porque en el primer semestre del año pasado se había formulado una sola denuncia en 180 días. En el primer semestre de 2017 no se puso ni una sola.Automovilistas Europeos cree que pasar de una denuncia a 7.447 solo se explica porque «en años anteriores o no estuviese activo o se hubiera estropeado» el radar. El colectivo da por hecho que la causa es que estaba desactivado.
El cinemómetro fijo instalado en la A-5 al lado de Trujillanos, en sentido Badajoz, sigue a la zaga en cuanto a su poder sancionador. Igualmente no se puede circular a más de 120 kilómetros por hora. Es el segundo punto de la región donde el cinemómetro funciona con más frecuencia. Allí se han redactado 4.627 denuncias. Una media de 25 multas diarias. Supone el doble que en 2018 (entonces, 2.345 en el primer semestre). En 2017 fueron 1.717.
El tercer enclave donde más se ha multado entre enero y junio es de nuevo en la A-66 pero ahora en la provincia de Cáceres. En Cañaveral, en sentido Mérida. Son 4.171 infracciones detectadas por exceso de velocidad en el kilómetro 508. En 2018 fueron 2.330 y en 2017, 1.995.
Lejos de las dos grandes autovías que estructuran las comunicaciones por carretera en Extremadura aparece un tramo de la N-432, la que une Badajoz con Granada, como zona con un buen número de multas. Es cerca de Llerena, en el kilómetro 111,6. Aquí el límite de velocidad es de 90 kilómetros por hora.
En el radar fijo se han detectado 3.037 infracciones en los seis primeros meses de este 2019. Son, de nuevo, casi el doble que en el mismo periodo del año pasado. Entonces se pusieron 1.670 denuncias. En 2017 fueron 1.543.
También es destacable el número de multas que han llegado por un radar situado en una vía que no es ni siquiera carretera nacional. Hablamos de la carretera autónomica EX-109, la carretera que conecta la autovía A-66 con la zona norte de la provincia de Cáceres, Coria y Sierra de Gata.
Nuevos cinemómetros
AEA destaca en su informe que solo 25 radares, de los cerca de 1.000 que dispone la DGT, formulan el 34% del total de denuncias (450.397) y de ellos, solo seis se repiten respecto de la lista de los más activos del año anterior, localizándose el resto (19) en nuevas ubicaciones.Este verano entraron en funcionamiento cuatro nuevos radares en Extremadura. Dos están en la provincia de Badajoz, ambos en la N-432 , uno a la altura de Santa Marta de los Barros y el otro, entre Zafra y Usagre. Este último se llama de tramo. Se trata de un dispositivo que mide la velocidad de los vehículos durante un tramo de 14,5 kilómetros, colocado entre esos dos municipios. Consiste en dos puntos de control situados a ambos extremos del tramo vigilado, en el que se controla la velocidad, fijada en 90 kilómetros por hora. Fotografia la matrícula del vehículo al inicio del tramo y toma el dato de la hora y fecha.
Al final del trayecto vigilado, otra cámara vuelve a fotografiar el vehículo y mide la hora. Entonces, el sistema calcula la velocidad a la que se ha recorrido la distancia entre los postes de entrada y salida del tramo mediante una fórmula matemática: la velocidad es igual al espacio dividido por el tiempo. Si la media supera los 90 kilómetros por hora, se tramita la denuncia y se manda la sanción al titular del vehículo.
Los otros dos radares ubicados este verano están en la provincia cacereña. El primero se encuentra a nueve kilómetros de Cáceres en la antigua EX-100 (ahora N-523), la carretera que conecta con Badajoz. El otro está en la N-521, que une Trujillo con Valencia de Alcántara, a la altura de Herreruela.