La sonrisa del pelícano ,.
La sonrisa del pelícano fue un programa español de televisión emitido por Antena 3, Presentado y dirigido por Pepe Navarro,.
Esta noche cruzamos el Mississippi,.
Esta noche cruzamos el Mississippi fue un programa de televisión producido y presentado por el periodista Pepe Navarro y emitido por la cadena española Telecinco entre el 18 de septiembre de 1995 y el 10 de julio de 1997. Se emitía de lunes a jueves en la franja del late night., etc.
Crónicas marcianas ,.
Crónicas marcianas fue un late show de televisión, producido por Gestmusic Endemol y emitido por la cadena española Telecinco entre 1997 y 2005. Estaba dirigido y presentado por Javier Sardá y contaba con Miquel José y Jordi Roca, con quienes Sardá había creado La Ventana en la Cadena SER, como subdirectores y guionistas.
Es el programa de late night más longevo y más visto de la historia de la televisión en España.1 A pesar de ser considerado por muchos como uno de los máximos exponentes de la llamada telebasura en España, obtuvo multitud de premios, como un Ondas, dos de la Academia de la Televisión y seis TP de Oro., etc.
Mi maestro, mi jefe, mi amigo,.
foto / Yo quería escribir de motos y Tomás Díaz-Valdés me abrió las puertas del AS, casi nada. Por pura generosidad, como él era, porque no nos conocíamos en absoluto. Le envié un par de textos que había escrito y a los pocos días sonó el teléfono de mi casa. ¿Chaval, te vienes a echarme una mano?, me propuso. Y allí aparecí yo, con ventipocos años, en la antigua redacción de la Cuesta de San Vicente. Tomás me enseñó el oficio, me hizo periodista y me dio una oportunidad que nunca pude agradecerle lo suficiente. Me envió a los grandes premios y le pidió a Ángel Nieto que cuidara de mí. Quizá por eso los dos, hasta cuando ya era un cuarentón, me seguían llamando Raulito… Ahora ninguno de ellos puede hacerlo, vida cruel e injusta.
Tomás era un chico de barrio que acabó viviendo en La Moraleja. Porque era astuto, hábil y adelantado a su tiempo, encontraba oportunidades donde nadie más las veía y disfrutaba del motociclismo con una pasión que ha conservado inalterable. Cosas de esas que ocurren en las empresas provocaron que nuestros destinos profesionales se separasen en 1996, pero siempre siguió siendo mi maestro, mi jefe, mi amigo. Le conocía creo que como pocos, sin embargo me seguía sorprendiendo su entusiasmo, sus ganas de mantenerse en la brecha. Le decía que se jubilase, que disfrutara de otro modo de la vida. Lo hacía por pura ironía, yo sabía que para él vivir era continuar sintiéndose periodista. Y así ha sido hasta el final de sus días. Te voy a echar mucho de menos,.
TITULO: DESAYUNO - CENA - SABADO - ENREDATE - ¡ QUE HAY DE NUEVO ! - ¡ ATENCION Y OBRAS ! CINE - Vivan los novios - Telecinco - Por vicio,.
¡ ATENCION Y OBRAS ! CINE ,.
¡Atención y obras! es un programa semanal que,
en
La 2, aborda la cultura en su sentido más amplio, con especial
atención a las artes escénicas, la música, los viernes a las 20:00 presentado por Cayetana Guillén Cuervo, etc, foto,.
Vivan los novios - Telecinco ,.
Vivan los novios fue un concurso del género Dating show, emitido las tardes de los sábados por la cadena española Telecinco entre 1991 y 1994., Presentador
Andoni Ferreño, Arancha del Sol, Natalia Estrada y Gabriel Andres Corrado Andreacchio, etc,.
DESAYUNO - CENA - SABADO - ENREDATE - ¡ QUE HAY DE NUEVO ! - Por vicio,.
DESAYUNO
- CENA - SABADO - ENREDATE - ¡ QUE HAY DE NUEVO ! - Por vicio,. , fotos .
Por vicio,.
Neymar abraza a Messi en su etapa barcelonista.
El confinamiento —van cinco días, no quiero imaginar qué pasará cuando llevemos quince— me ha hecho comprender que el Barça necesita el fichaje de Neymar Jr. como el comer. El recogimiento siempre ha sido terreno abonado a las revelaciones, a los mandatos divinos, y entre quemar la casa o abogar por el fichaje del brasileño mi cerebro ha optado por lo segundo. Tampoco es que me queje, vaya, pero siempre aspiré a recados más ambiciosos en caso de escuchar la llamada.
Pero vayamos por partes. Las últimas noticias que tenemos del brasileño es que, aprovechando el parón en las competiciones, se ha marchado a Brasil: eso está muy bien. Tranquiliza saber que no ha perdido el contacto con sus raíces y que sigue siendo un muchacho de costumbres previsibles. El problema con el que se encuentra su club es que Neymar Jr. no tiene pasaporte europeo, así que no saben a ciencia cierta cuándo podrá volver, si es que lo intenta. Porque, a estas alturas de la película, pocos dudan ya de sus verdaderas intenciones: regresar a Barcelona, dejarse arropar por Messi y negociar su nuevo contrato con Bartomeu, no sea que una alternativa en el palco presidencial se muestre menos entusiasta y más rigurosa: lo que funciona no se debe tocar y a él le ha ido de perlas con el actual mandamás.
'Guerra y paz' estaba leyendo cuando se me encendió la bombilla, no puede ser casual. Es una novela en la que los ricos se pasan el día llorando, apuradísimos por diversos motivos que no vienen al caso pero que guardan cierta similitud con el asunto que nos ocupa: así ha sido y seguirá siendo su padre, Don Neymar Sr., un constante foco de problemas, reclamaciones y excusas que ni el propio Tolstoi hubiera recreado mejor.
En lo deportivo, nadie tiene ninguna duda sobre su capacidad para liderar y decidir, ese nunca fue el problema. Solo Cruyff desconfió de su sociedad con Messi y hasta para dar marcha atrás era único el Flaco, que siempre avisó de que él defendía a muerte sus opiniones hasta que empezaba a opinar lo contrario. Y por eso estoy convencido de que fichar a Neymar Jr. es lo mejor que puede hacer el Barça este verano: por Cruyff, por Tolstoi, por vicio y un poco por aburrimiento, yo qué sé.
TITULO: REVISTA MUJER HOY DE CERCA PORTADA - VIAJANDO CON CHESTER - Ana Peleteiro,.
VIAJANDO CON CHESTER
Viajando con Chester es un programa de televisión español, de género periodístico, presentado por Pepa Bueno, en la cuatro los domingos las 21:30, foto, etc.
REVISTA MUJER HOY DE CERCA PORTADA - Ana Peleteiro,.
Ana Peleteiro,.
Ana Peleteiro: "Todo lo que hago lo hago por orgullo"
La tercera tiene que ser la vencida. Tras perderse los dos últimos Juegos Olímpicos, Ana Peleteiro aspirará a todo en Tokio 2020. Gracias a un físico portentoso y su mentalidad ganadora, la campeona de triple salto es la gran estrella del atletismo español. Pero su ambición va mucho más allá de las pistas...
“Mis días son aburridísimos: entreno, cuido lo que como, descanso y duermo”. A veces, los domingos, se concede un pequeño homenaje en forma de copa de vino y siesta en el sofá. Y el lunes, a primera hora, vuelta a empezar. Pero cada día que pasa es uno menos en la cuenta atrás hacia Tokio 2020. La fecha marcada en el calendario obsesiona a Ana Peleteiro (Ribeira, A Coruña, 1995), la campeona de triple salto que aspira a todo en la cita olímpica tras proclamarse ganadora en el Campeonato de Europa en pista cubierta en 2019 y quedar sexta en el Mundial de Doha. Hoy, excepcionalmente, ha roto su rutina. Una breve escapada a Madrid desde Guadalajara, donde entrena con Iván Pedroso, leyenda viva del triple salto, y reside junto a su chico, Nelson Évora, actual campeón olímpico de la disciplina.
A Peleteiro le gusta la moda: disfruta eligiendo estilismos, charlando con el maquillador, buscando la mejor pose para el fotógrafo... A sus 24 años, sabe lo que es la cima, pero también el “fondo del pozo” después de despuntar con apenas 16. Competitiva y ambiciosa, sensible y sentimental, su sinceridad desarma tanto como su fuerza física. Su mejor marca personal está en 14 metros y 73 centímetros. Sabe que si quiere colgarse una medalla al cuello tendrá que superarla. O, mejor dicho, superarse.
Mujerhoy A cinco meses para los Juegos Olímpicos de Tokio, ¿cómo se encuentra?
Ana Peleteiro Estoy
teniendo muy buenas sensaciones y, a la vez, sufro el estrés de no
lesionarme. Por un lado, tengo que ser la mejor versión de mí misma; por
otro, necesito dosificar mi energía. A los de Londres no fui porque era
demasiado joven y en Río estaba lesionada. Tengo miedo de que me pase
lo mismo y por eso estoy nerviosa. Tengo que ir con cabeza, pero sin que
la cabeza me coma. Es un equilibrio difícil.
M.H. Pensemos que llegará a tope a Tokio. ¿Qué expectativas tiene?
Ana P. Sueño
con una medalla. Con llegar a la final y luchar con uñas y dientes por
una medalla. Y si puede ser el oro, mejor. Sería hipócrita decir otra
cosa. Soy realista, sé que pueden pasar muchas cosas. Pero creo
muchísimo en el destino. Todo está escrito.
M.H. ¿Cómo se entrena una mente ganadora?
Ana P. Queriendo
siempre más. También siendo consciente de que, si quiero acceder a las
sesiones de fotos, los programas de televisión o los patrocinadores,
necesito conseguir mejores resultados.“Leí un tuit que me reventó. Ahora, cuando salto, gozo viendo las caras de quienes entonces me criticaron. Sé quienes son y eso me motiva”.
M.H. ¿Cómo fue su infancia?
Ana P. Idílica.
Era la más pequeña y la más mimada. Viajaba con mis padres por todo el
mundo, tenía mis amigas, en verano mi casa se llenaba de primos... Y
siempre jugando en la calle: haciendo cabañas, con la comba o la peonza,
yendo en bici...
M.H. ¿Cuándo empezó a practicar atletismo?
Ana P. Con
tres años, mi madre me apuntó a ballet. Salía de allí con más energía
de la que entraba. A los cinco, le dije: “Mamá, estoy muy guapa con el
tutú, pero no es lo mío”. Así que mi padre me llevó a atletismo y me
encantó desde el primer día.
M.H. De todas las disciplinas, ¿qué fue lo que le atrajo del triple salto?
Ana P. Destacaba
en todo: cross, pista, velocidad, fondo... Elegí el triple porque había
una chica que nunca me ganaba en nada, pero saltaba más que yo. Me puse
a entrenar y al año era campeona de España.
M.H. Con 16 años se convirtió en campeona del mundo junior, pero ha dicho que preferiría no haber ganado.
Ana P. Se
me subió a la cabeza. De pronto, era una niña prodigio, una futura
campeona olímpica, con seguidores y repercusión mediática, me vine a
vivir sola a Madrid... No supe gestionarlo. Hice muchísimas cosas mal y
fue una etapa muy oscura, acabé en el fondo del pozo. Nadie creía en mí.
Mucha gente aprovechó para hacerme daño y tratar de hundirme.
M.H. ¿Pensó en dejarlo?
Ana P. Sí,
claro. No tenía beca, estaba fuera de forma y ni siquiera tenía ganas
de saltar. Mi representante me convenció para seguir y por suerte Adidas
renovó mi contrato. Pero lo que más me motivó fue saber que Iván
Pedroso ya no quería entrenarme. Cuando aceptó, empezamos de cero. Yo
estaba literalmente en la mierda.
M.H. ¿Cómo recuperó la motivación?
Ana P. Leí
un tuit que me reventó: “El 80% de los campeones mundiales junior no
llegan a absolutos. Ana Peleteiro es un claro ejemplo”. Entonces, yo
ganaba el campeonato de España cada año, tenía mi dinerito para compras y
viajes, y no quería más. No tenía ambición por ser la mejor. Prefería
ser la que más seguidores tenía. Estaba tonta perdida. Aquel tuit me
llegó al alma. A día de hoy, todo lo que hago lo hago por orgullo. Y
cuando salto, gozo viendo las caras de quienes entonces me criticaron.
Sé quienes son y eso me motiva.
M.H. ¿Hay muchos egos y envidias en el atletismo profesional?
Ana P. Sí.
El deporte individual es así. A la cara, todo el mundo te da la
enhorabuena, y por detrás dicen: “A ver si se lesiona”. En el Mundial de
Doha, un atleta español me preguntó: “Si fueras campeona del mundo,
¿preferirías ser la única medalla de España?”. Para mí estaba claro,
pero él me confesó que quería ganar sólo él. Es muy triste que pienses
que la gloria de los demás te perjudica.
M.H. Llegó al Mundial después de un mal momento personal.
Ana P. Meses
antes, falleció mi abuela, que era como mi madre. Tuve un bajón
terrible. Me sentía vacía, no tenía ilusión por nada. Una parte de mí
murió con ella. No dormía, tenía ansiedad, soñaba cada noche con ella...
Parezco dura, pero soy muy vulnerable.
M.H. Aún así, consiguió el sexto puesto.
Ana P. No
tuve un buen Mundial pero aprendí mucho. Especialmente tras compartir
lo que sentía en Instagram, donde tuve una respuesta muy positiva. Mucha
gente me dice que me admira no solo por cómo salto, sino por mi forma
de hablar, mi naturalidad.Siempre viví entre personas blancas y, hasta hace seis años, yo era racista. “No me gustan los negros”, solía decir. ¿Cómo podía ser tan tonta? Gracias a dios, cambié”.
M.H. ¿La fama es un peaje o una ventaja añadida?
Ana P. No
voy a ser hipócrita: siempre me ha gustado ser popular. Pero quiero que
me conozcan por ser Ana Peleteiro, la triplista. No me gusta cuando eso
afecta a mi familia, cuando estamos en un restaurante y todos están
pendientes de nuestra conversación.
M.H. Las carreras deportivas tienen fecha de caducidad. ¿Ha hecho ya planes de futuro?
Ana P. Tengo
un proyecto del que no puedo hablar aún. Me gusta la moda, la
televisión, dar conferencias... Si me ofrecieran una sección en un
programa de televisión, me harían feliz.
M.H. Su pareja, Nelson Évora, también es atleta. ¿Es más fácil así?
Ana P. Somos
un buen tándem, pero hay días que le mando a paseo. Lo más difícil de
nuestra relación es la monotonía: dormimos juntos, comemos juntos,
entrenamos juntos, vemos la tele juntos, jugamos a la play juntos... O
te llevas muy bien o lo dejas al mes.
M.H. Ha contado que quiere ser madre pronto.
Ana P. Si no fuera atleta, ya tendría hijos. Y si me dieran a elegir entre ser campeona olímpica o ser madre, escogería lo segundo.
M.H. También ha criticado con dureza las cláusulas anti-embarazo que algunos patrocinadores imponen a las deportistas.
Ana P. Hasta
hace poco, muchas atletas ocultaban sus embarazos. Te enterabas cuando
tenían el bebé. “¿Por qué esconden algo tan bonito?”, pensaba yo. Estás
embarazada, no enferma. Una lesión puede tener una recuperación más
larga. Si te cuidas, ¿por qué va a prohibirte ser madre una marca? ¿Por
qué aceptar algo así?
M.H. ¿Cómo negoció esa parte del contrato?
Ana P. Cuando
firmé con Adidas, lo dejé claro: “Este contrato es muy largo y yo en
estos años seré madre; ya os lo adelanto”. Mi mánager me daba patadas
por debajo de la mesa. Yo no me iba a callar, estaban en juego mis
derechos. En Adidas me agradecieron la honestidad y garantizaron que no
habría problemas...
M.H. Usted, que presume de gallega, es también algo supersticiosa...
Ana P. Tengo
presentimientos. No quiero hablar mucho porque me rayo. Creo en las
brujas y el día de San Juan me gusta ir a Galicia para lavarme con agua
de San Juan. Si no voy, mi madre mete el agua en una botella. Tú te
echas colonia todos los días, ¿no? Pues yo mis aguas de San Juan.
M.H. ¿Qué sabe de sus raíces africanas?
Ana P. Nada.
Mi sangre es medio negra medio gallega. Mi madre biológica es gallega,
pero no la conozco. Me adoptaron a los dos días de nacer. Quiero ir a
África, me gustaría conocer mis orígenes, pero no busco a mi familia
biológica. Es solo que, cuando tenga hijos, quiero poder explicárselo.
Siempre supe que era adoptada, pero mis padres no podían contarme más
porque no tenían información.
M.H. ¿Y qué les querría contar?
Ana P. “Tu
eres de aquí, pero tu abuelo biológico, que no es tu abuelo pero es un
señor que me dio la vida, era de allí. Y hay un cachito de ti que
también es de allí”. Solo eso. Me da mucha rabia cuando me preguntan de
dónde soy. Cuando abro la boca, se quedan callados. Soy gallega, no le
des más vueltas.
M.H. ¿Vivimos en un país racista?
Ana P. Cada
vez más gente me ve como un motivo de orgullo nacional, ya no se fijan
en el color de mi piel. De niña no sufrí racismo, siempre viví entre
personas blancas. Lo viví por primera vez con mi chico, que también es
mulato como yo, cuando nos mudamos a Guadalajara. En unos grandes
almacenes nos seguía el vigilante de seguridad. En España no somos
racistas, somos clasistas. Si eres negro, vas bien vestido, conduces un
BMV y hueles bien, perfecto. Pero si eres negro, llevas chándal y eres
un trabajador común, te miran mal. ¡Yo también lo hacía!
M.H. ¿A qué se refiere?
Ana P. Hasta
hace seis años, yo era racista. No quería tener una pareja de color.
“No me gustan los negros”, solía decir. ¿Cómo podía ser tan tonta?
Gracias a Dios, cambié. Y estoy intentando que la gente que me rodea y
que me sigue cambie también.
M.H. ¿Cómo reacciona cuando escucha mensajes contra la migración desde ciertos ámbitos?
Ana P. Me
da vergüenza. También pena. Somos un país que históricamente ha
emigrado. Nunca le cerraría la puerta a una persona que viene a
trabajar, a buscarse la vida, a darles un futuro a sus hijos. Quienes
hacen esos discursos no me representan.TITULO: Viaje al centro de la tele -Padres e hijos: la fotografía de moda heredada de Patrick y Victor Demarchelier ,.
Viaje al centro de la tele ,.
Padres e hijos: la fotografía de moda heredada de Patrick y Victor Demarchelier
Patrick Demarchelier fue el fotógrafo de moda más glamuroso y elegante de los 90... y su hijo Victor ha heredado su talento detrás del objetivo. Ahora ambos presentan su primera exposición conjunta en París.
¿Es el ojo artístico un rasgo hereditario? En la familia Demarchelier, al parecer, sí: Victor, el menor de los hijos del fotógrafo Patrick Demarchelier ha seguido las huellas de su padre y acaban de inaugurar su primera exposición conjunta: Heritage podrá verse en la A. Galerie de París hasta el 11 de abril.
TITULO: Me voy a comer el mundo -Desde la salsa de tomate de Vicky Martin Berrocal a los muslitos de pollo de Nuria Roca: tenemos las recetas del aislamiento de los famosos,.
Desde la salsa de tomate de Vicky Martin Berrocal a los muslitos de pollo de Nuria Roca: tenemos las recetas del aislamiento de los famosos,.
¿Quién se anima meterse en la cocina? Si hubo un momento para eanimarse a hacerlo, es este. Te mostramos los ricos platos que preparan los famosos para pasar los días de encierro,.
En estos complicados momentos, donde hacen falta ideas para entretenerse y cuando, obligados, más tiempo libre tenemos en casa… ¿qué mejor que ponerse a cocinar? Pues eso es lo que han pensado numerosos famosos, que han decidido meterse en la cocina y compartir con sus seguidores suculentas recetas. Estaremos confinados… ¡pero bien alimentados!
Nuria Roca ha sido una de las que nos ha conquistado con una receta de su abuela: Cuixetes en quereguilletes (o lo que es lo mismo unos deliciosos muslitos de pollo con patatas). La presentadora, que nos mostraba recientemente el interior de su casa, explica detalladamente esta sencilla receta, para la que los ingredientes necesarios son: muslos de pollo, patatas, pimienta en grano, sal, aceite y laurel. Se parten las patatas en daditos, y mientras se calienta un poco de aceite en una olla express, con un par hojas de laurel, pimienta y sal. Se añaden los muslitos, y se fríen por todos los lados. Cuando estén un poco doraditos, sin necesidad de que estén del todo hechos, se sacan. Se fríen ahora un poco las patatas a fuego alto dándole vueltas y se añaden los muslitos de nuevo. Retira un poco de aceite y baja el fuego, tapa la olla y deja durante 20 min. Cuando pase el tiempo, se remueve bien y se deja reposar media hora en la propia olla tapada. ¡Menuda pintaza!