domingo, 4 de mayo de 2014

EL BLOC DEL CARTERO,. Una historia de España (XXIV),./ LA CARTA DE LA SEMANA , Mi abuelo salvó a un país pero perdió a su familia,./ ¡ QUE TIEMPO TAN FELIZ ! FARUQ ES EL QUE MAS LIGA,. / DOMINGO, CINE, Ira de Titanes (Furia de Titanes 2)

TÍTULO: EL BLOC DEL CARTERO,. Una historia de España (XXIV),.

En la España cristiana de los siglos XIV y XV, como en la mora (ya sólo había 5 reinos peninsulares: Portugal, Castilla, Navarra, Aragón y Granada), la guerra civil empezaba a ser una costumbre local tan típica como la paella, el flamenco y la mala leche (foto) -suponiendo que entonces hubieran paella y flamenco, que no creo-. Las ambiciones y arrogancia de la nobleza, la injerencia del clero en la vida política y social, el bandidaje, las banderías y el acuchillarse por la cara, daban el tono; y tanto Castilla como Aragón, con su Cataluña incluida, iban a conocer en ese período unas broncas civiles de toma pan y moja, que ya contaremos cuando toque; y que, como en episodios anteriores, habrían proporcionado materia extraordinaria para varias tragedias shakesperianas, en el caso de que en España hubiéramos tenido ese Shakespeare que para nuestra desgracia -y vergüenza- nunca tuvimos. Ríanse ustedes de Ricardo III y del resto de la británica tropa. Hay que reconocer, naturalmente, que en todas partes se cocían habas, y que ni italianos ni franceses, por ejemplo, hacían otra cosa. La diferencia era que en la península ibérica, teóricamente, los reinos cristianos tenían un enemigo común, que era el Islam. Y viceversa. Pero ya hemos visto que, en la práctica, el rifirrafe de moros y cristianos fue un proceso complicado, hecho de guerras pero también de alianzas, chanchullos y otros pasteleos, y que lo de Reconquista como idea de una España cristiana en plan Santiago cierra y tal fue cuajando con el tiempo, más como consecuencia que como intención general de unos reyes que, cada uno por su cuenta, iban a lo suyo, en unos territorios donde, invasiones sarracenas aparte, a aquellas alturas tan de aquí era el moro que rezaba hacia la Meca como el cristiano que oraba en latín. Los nobles, los recaudadores de impuestos y los curas, llevaran tonsura o turbante, eran parecidísimos en un lado y en otro; de manera que a los de abajo, se llamaran Manolo o Mojamé, como ahora en el siglo XXI, siempre los fastidiaban los mismos. En cuanto a lo que algunos afirman de que hubo lugares, sobre todo en zona andalusí, donde las tres culturas -musulmana, cristiana y judía- convivían fructíferamente mezcladas entre sí, con los rabinos, ulemas y clérigos besándose en la boca por la calle, hasta con lengua, más bien resulta un cuento chino. Entre otras cosas porque las nociones de buen rollito, igualdad y convivencia nada tenían que ver entonces con lo que por eso entendemos ahora. La idea de tolerancia, más o menos, era: chaval, si permites que te reviente a impuestos y me pillas de buenas, no te quemo la casa, ni te confisco la cosecha, ni violo a tu señora. Por supuesto, como ocurrió en otros lugares de frontera europeos, la proximidad mestizó costumbres, dando frutos interesantes. Pero de ahí a decir (como Américo Castro, que iba a otro rollo tras la Guerra Civil del 36) que en la Península hubo modelos de convivencia, media un abismo. Moros, cristianos y judíos, según donde estuvieran, vivían acojonados por los que mandaban, cuando no eran ellos; y tanto en la zona morube como en la otra hubo estallidos de violento fanatismo contra las minorías religiosas. Sobre todo a partir del siglo XIV, con el creciente radicalismo atizado por la cada vez más arrogante Iglesia católica, las persecuciones contra moros y judíos menudearon en la zona cristiana (hubo un poco en todas partes, pero los navarros se lo curraron con verdadero entusiasmo en plan Sanfermines, asaltando un par de veces la judería de Pamplona, y luego arrasando la de Estella, calentados por un cura llamado Oillogoyen, que además de estar como una cabra era un hijo de puta con balcones a la calle). En cualquier caso, antijudaísmo endémico aparte -también los moros daban leña al hebreo-, las tres religiones y sus respectivas manifestaciones sociales coexistieron a menudo en España, pero nunca en plan de igualdad, como afirman ciertos buenistas y muchos cantamañanas. Lo que sí mezcló con la cristiana las otras culturas fueron las conversiones: cuando la cosa era ser bautizado, salir por pies o que te dejaran torrefacto en una hoguera, la peña hacía de tripas corazón y rezaba en latín. De ese modo, familias muy interesantes, tanto hebreas como mahometanas, se pasaron al cristianismo, enriqueciéndolo con el rico bagaje de su cultura original. También intelectuales doctos o apóstoles de la conversión de los infieles estudiaron a fondo el Islam y lo que aportaba. Tal fue el caso del brillantísimo Ramón Llull: un niño pijo mallorquín al que le dio por salvar almas morunas y llegó a escribir, el tío, en árabe mejor que en catalán o en latín. Que ya tiene mérito.


  1. El segundo de los 20 nietos de Nelson Mandela, un hombretón de 32 años y 1,90 de estatura, ha visitado Madrid para presentar Wild Love in ...

    «Mi abuelo salvó a un país pero perdió a su familia»

    GENTE

    «Mi abuelo salvó a un país pero perdió a su familia»

    -foto--Ndaba Mandela. Filántropo, nieto de Nelson Mandela


    El segundo de los 20 nietos de Nelson Mandela, un hombretón de 32 años y 1,90 de estatura, ha visitado Madrid para presentar 'Wild Love in Africa', una colección de gafas de sol de la firma Etnia Barcelona que destinará parte de los beneficios a Africa Rising, la ONG que él preside, y que intenta ayudar a los oprimidos y cambiar la percepción que el mundo tiene de su continente. Soltero y padre de dos niños, Ndaba sueña con una «especie de Unión Europea a la africana».
    -Veo que dedica su vida al activismo social, como su abuelo.
    -Dedico solo parte de mi vida, no toda ella, porque eso es lo que hizo mi abuelo y su familia sufrió. Pagamos un precio muy alto. La familia nunca estuvo unida.
    -¿Tiene ambiciones políticas como presidente?
    -Para nada. Mi ambición es contribuir al desarrollo de mi gente. Y para eso no hace falta estar en el gobierno.
    -¿Qué estudió?
    -Políticas. Y eso que mi nombre, Ndaba, me predisponía al periodismo. En lengua 'xhosa' significa noticia.
    -¿Qué recuerdos guarda de su abuelo?
    -Muchos. Él siempre me decía que ante todo fuese humilde. «No conduzcas nunca un Jaguar si llegas a ser un líder», me advertía. Por supuesto no tengo un Jaguar, je, je...
    -Cuando usted nació, Mandela estaba en la cárcel.
    -Sí, cuando salió de la cárcel yo tenía siete años. Fui a verle poco antes. Para entonces, él ya vivía recluido en una casa. Y la casa era bastante mejor que la nuestra. Tenía hasta piscina. Lo que pensé en ese momento fue: «Cuando crezca, yo también quiero ir a la cárcel».
    -¿Era cariñoso Nelson con sus nietos?
    -Yo pasé más tiempo con mi abuelo que con mi propio padre. Me fui a vivir con él en 1993, un año antes que mis hermanos. Conmigo fue muy estricto, no era esa clase de abuelo que te da abrazos por la mañana. Una vez perdí un jersey en la escuela y me dijo: «Esta noche duermes fuera». Y me mandó al jardín. Yo tendría unos doce años. Hacía frío, y él hizo que me llevaran una manta. Pero una hora después me llamó para que entrara. Me decía: «La gente espera que seas un líder, por eso tus notas tienen que ser las mejores». Pero yo era travieso y rebelde. Y él me trataba con firmeza.
    -Por lo que cuenta parece que Mandela fue más afectuoso con los de fuera que con los de casa.
    -Esa es la verdad. Así fue.
    -Y luego han peleado ustedes por su herencia...
    -Sobre eso se ha mentido y exagerado mucho.
    -Les dejó unos cuatro millones de dólares, ¿no?
    -Yo no me enfado con mi abuelo, sino con sus abogados. No me creo que tuviera solo cuatro millones de dólares. Con su libro, 'El largo camino hacia la libertad', calculo que llegaría a ingresar unos diez millones de dólares. Sin embargo, a cada nieto nos dejó solo 100.000 'rands', unos 7.000 euros. Y nadie lo impugnó. Todos lo hemos aceptado.
    -¿Apellidarse Mandela no es ya un negocio?
    -He visto a cantidad de gente ajena a la familia forrarse usando el nombre de Mandela. ¿Por qué no iba a utilizar yo mi propio nombre? Eso sí, hay que usarlo de modo que no pierda el valor que nuestro abuelo le dio.
    -Pues tres primas suyas han participado en un 'reality'...
    -No me gustó el título del programa: 'Ser Mandela'. Que yo sepa Mandela, a secas, solo hubo uno, y ellas no viven como Madiba. No trabajan para la comunidad ni están en política.
    -Creo que está enfadado con su hermanastro mayor.
    -Está enfermo de egolatría. Procedemos de una familia real y él es ahora el jefe, pero por razones egoístas, no por el bien de la comunidad. Se casa y se divorcia cada año...
    -¿No es irónico que un hombre como su abuelo, que unió a un país, fuera incapaz de unir a su propia familia?
    -Lo es. Pero eso demuestra que mientras mi abuelo salvó a su país, perdió a su familia. No fue perfecto en todo. Además, peleas familiares hay en todas partes.
    -Ya, pero descendiendo de un hombre tan íntegro...
    -La desunión no se deriva de la altura moral de mi abuelo sino de la de sus esposas. Y él se casó tres veces. 
    TITULO:¡ QUE TIEMPO TAN FELIZ ! FARUQ ES EL QUE MAS LIGA,.

    1. A -foto--Thais Blume (Barcelona, 1984) le llamaron el otro día por la calle Paqui. Su personaje en El Príncipe es la agente Mati. Aunque ha ido ...

      «Faruq es el que más liga»GENTE Y TELEVISIÓN

      «Faruq es el que más liga»

      Thais Blume es la única mujer de la comisaría de 'El Príncipe', que cierra el martes la primera temporada en Telecinco: «Cuando leemos los guiones, flipamos»


      A Thais Blume (Barcelona, 1984) le llamaron el otro día por la calle 'Paqui'. Su personaje en 'El Príncipe' es la agente Mati. Aunque ha ido ganando peso en la trama, la actriz sufre un poco de refilón el 'boom' que ha provocado la serie de Telecinco, que ha fidelizado a más de cinco millones de espectadores: «Rubén Cortada, que interpreta a Faruq, es el que más liga». Descubierta la doble cara de Hakim, el capítulo del martes (22.30 horas), el último de la primera temporada, encaja las piezas que faltan en el puzle: «Va a ser un cierre emocionante», promete.
      - Menudo final el del martes...
      - Voy a tener que ver ese capítulo otra vez porque estaba tan nerviosa que miraba pero no veía nada. Encima lo vi sola, así que me puse más nerviosa todavía.
      - ¿Cómo fue aquella secuencia?
      - Muy distinta a como se ve. Se supone que estamos en el puerto, pero grabamos en un restaurante de carretera, en Madrid, sin mar, ni olor a sal ni nada.
      - ¿Ha sido la escena más difícil?
      - Le tenía mucho respeto, pero me resultan más complicadas las escenas de descripciones policiales o cuando hay que enumerar muchas cosas.
      - ¿Y a partir de ahora?
      - No puedo avanzar nada, pero el final va a ser emocionante. Cierra muy bien la primera temporada.
      - O sea que nos espera otra ración de sobresaltos.
      - Cada capítulo ha tenido un final muy potente. Yo me preguntaba siempre: 'Y ahora, ¿qué más va a pasar?'. En junio empezamos a rodar la segunda temporada.
      - ¿Mati tiene una cara oculta?
      - Mati es el personaje más transparente, al menos en esta temporada. Es como se muestra y no oculta nada, pero los guionistas...
      - ¿Habría ayudado a Hakim pese a todo? ¿Tan enamorada estaba?
      - Igual no le habría ayudado, pero no se habría chivado. El amor está por encima de todo.
      - ¿Cómo va a salir de esta decepción que ha supuesto Hakim?
      - Por narices va a tener que salir convertida en otra persona. Ella tiene una manera de ser muy recta, pero esto le ha descuadrado los esquemas.
      - ¿No sospechaba nada?
      - No sabíamos nada de este desenlace. Los guiones nos llegan con uno o dos capítulos de antelación y flipamos. El actor que hace de Hakim (Ayoub El Hilali) no se enteró hasta el capítulo diez de lo que le pasaba a su personaje en el episodio doce, el que se emitió el martes pasado. Yo me engullo los guiones como si fueran libros.
      Las 'supernenas'
      - Ha ido ganando peso en la trama. ¿Seguirá en esa línea?
      - ¡Ojalá! Solo sé que voy a estar en la segunda temporada, pero no cuánto va a durar mi personaje, ni qué giros le van a dar.
      - ¿Qué le dicen por la calle?
      - Pues una señora me dijo: '¡Qué bien está tu papel, Paqui!' (risas). Normalmente me dicen que Mati les llega, que me creen, que soy natural...
      - Es la única chica de la comisaría. ¿Qué pasa?
      - Yo estoy encantada. Pero también tiene su lógica, porque es un barrio complicado.
      - ¿No echa de menos una historia de amor tan intensa como la de Fátima y Morey?
      - No, pero ese ingrediente de Romeo y Julieta que aporta a la trama es atrayente y ha funcionado.
      - ¿Quién liga más: José Coronado o Álex González?
      - He oído cosas maravillosas de los dos, pero Rubén Cortada, que interpreta a Faruq Ben Barek, se lleva la palma.
      - ¿Se ha quitado ya la etiqueta de 'Sin tetas no hay paraíso'?
      - Yo creo que sí. No me encasillé.
      - ¿Qué queda de aquel 'boom'?
      - ¡Un chat de las supernenas! Las actrices de 'Sin tetas no hay paraíso' seguimos en contacto. Amaia Salamanca ha sido madre y aunque todavía no conozco al bebé, sé que se le cae la baba.

      TÍTULO: DOMINGO, CINE, Ira de Titanes (Furia de Titanes 2),.
      Ira de Titanes (Furia de Titanes 2) 
      Reparto
      Sam Worthington, Liam Neeson, Ralph Fiennes, Bill Nighy, Rosamund Pike, Danny Huston, Toby Kebbell, Édgar Ramírez, John Bell,.
       Diez años después de los sucesos de “Furia de titanes”, Perseo (Sam Worthington) está decidido a llevar una vida tranquila con su hijo Helio. Sin embargo, los dioses, debilitados por la falta de fe de la humanidad, pierden el control sobre los Titanes, cuyo líder no es otro que Kronos, el padre de Zeus (Liam Neeson), Hades (Ralph Fiennes) y Poseidón (Danny Huston). Cuando Hades y Ares (Edgar Ramírez) llegan a un acuerdo con Kronos para capturar a Zeus, entonces Perseo tendrá que abandonar su apacible vida para rescatarlo, misión en la que cuenta con la ayuda de Andrómeda (Rosamund Pike), Agénor (Toby Kebbell) y Hefesto (Bill Nighy).


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