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Ganchillo Fashion,.
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El croché extremeño viste lo mismo un árbol que a un famoso,.
De un bajo situado entre el puente de Palmas y la estación de ferrocarril de Badajoz, acaban de salir varios paquetes de ropa solicitada por el estilista de Lady Gaga. Son prendas de la marca María ke Fisherman, es decir, diseñadas por la extremeña María Lemus y con el ganchillo como imagen de marca y diferencia.
Sin salir de la provincia de Badajoz, en Ribera del Fresno, una señora llamada Lali entretenía sus tardes haciendo tapetes de ganchillo. Un buen día, María Lemus la llamó y le propuso tejer ganchillo para ella. Al poco tiempo, una prenda con ganchillo de Lali aparecía en todas las televisiones y revistas del mundo: la vestía Miley Cyrus en el festival Iheart Radio de Las Vegas.
Otro caso curioso: en Badajoz hay una empresa que vinila coches y camisetas festivas. De pronto, recibieron un encargo inesperado: María Lemus les pedía que vinilaran su colección de vestidos para que desfilaran en la Tokio Fashion Week. Alucinaron porque nunca habían vinilado nada parecido, pero lo hicieron.
«Es que en Extremadura sabemos hacer las cosas bien, hay una gran tradición textil y es más fácil encontrar una buena modista aquí que en Madrid. Y es muy bonito que señoras extremeñas que se entretenían haciendo ganchillo, ahora lo hagan para que su trabajo desfile en Cibeles», explica María Lemus.
El ganchillo o croché es una técnica para tejer labores con hilo o lana. En Extremadura, se hace muy buen ganchillo. De hecho, los diseñadores de Kenzo se han dirigido a María Lemus para que les facilitara determinadas direcciones de ganchilleras, pero tanto ella como su socio y pareja, Víctor Alonso, se hacen los locos.
«El ganchillo es nuestra arma secreta. Nadie sabe hacer ganchillo como aquí. Nos cosen ganchillo señoras de Badajoz, Villafranca de los Barros, Don Benito, Ribera del Fresno y Fregenal de la Sierra», detallan.
El ganchillo es, tradicionalmente, una industria casera. Desde el siglo XVIII, en Irlanda y en el norte de Francia, su práctica sostenía las economías familiares dañadas por las guerras o las malas cosechas. Los artículos eran comprados principalmente por la emergente clase media. La clase alta lo consideraba una copia barata de otros métodos más caros y antiguos hasta que la reina Victoria empezó a comprar y tejer ganchillo, elevando así su consideración.
En Extremadura, las labores de ganchillo son una destreza muy extendida. Todas las generaciones de mujeres extremeñas, hasta los años 90, han sabido ganchillar. Era una sabiduría que se transmitía de madres a hijas. Sin embargo, aquí no era tan común su venta. Se tejía para casa, para regalar y para hacer el ajuar.
En los últimos años, el ganchillo se ha puesto de moda. Es una práctica adictiva que sienta bien y conecta con lo primigenio y ancestral, con el proceso de crear y con el resultado palpable de esa creación, lo que lo convierte en gratificante y poderoso propulsor de autoestima.
El ganchillo ayuda a evadirse y a espantar la angustia, relaja mucho y ejercita una virtud antigua y cada vez más despreciada: la paciencia. La constancia es otro de sus benéficos resultados. El ganchillo ayuda a concentrarse, estimula la creatividad, es portátil sin necesidad de batería y permite charlar a la vez que se teje: las tertulias callejeras del ganchillo son aún muy comunes en los pueblos extremeños.
Tantas virtudes han puesto el ganchillo de moda, también entre los hombres. Incluso han aparecido nuevas modalidades como el yarnbombing o bombardeo de hilos. Se trata de intervenciones públicas con ganchillo y se lo inventó en Houston un grupo callejero llamado Knitta liderado por dos mujeres. Envuelven en ganchillo troncos de árboles, columnas, cabinas de teléfono. En Extremadura, se practica el yarnbombing en Cabeza del Buey y en otras localidades de Extremadura, una región donde se ganchilla lo mismo para vestir un árbol que para vestir a una celebrity americana.
TÍTULO: LA CENA DEL VIERNES, ENTRE LAS 5 PRIMERAS,.
LA CENA DEL VIERNES, ENTRE LAS 5 PRIMERAS,.-fotos
- Ha comprado Ruth Lorenzo muchas papeletas para la lotería de Eurovisión, que se rifará mañana sábado a las 21.00 horas, en directo desde ...
Entre las 5 primeras»
José María Íñigo narrará el certamen. Ruth ha hecho amistad con la mujer barbuda. -
José María Íñigo incluye a Ruth Lorenzo en el 'top five' de Eurovisión. «Es la mejor voz del festival». La austriaca Conchita, la mujer barbuda, la da incluso por ganadora,.
Ha comprado Ruth Lorenzo muchas papeletas para la lotería de Eurovisión, que se rifará mañana sábado a las 21.00 horas, en directo desde Copenhague. Lleva la artista murciana una semana haciendo patria en Dinamarca y a la hinchada de casa, desde luego, la tiene ganada: «Va a quedar entre las cinco primeras», pronostica José María Íñigo, la otra voz del festival. El veterano presentador considera que Ruth es «la mejor cantante del certamen» y su canción, 'Dancing in the rain', «ha mejorado mucho con los arreglos».
Lo que ha ido sembrando Ruth en Copenhague, estos días previos de ensayos y promociones, va dando sus frutos. La mujer barbuda, la austriaca Conchita Wurst, también apuesta por la murciana, con quien ha hecho una amistad más estrecha de la que puede esperarse entre competidoras: «Me encanta su canción y su voz. Ruth es una belleza deslumbrante, adorable... Es mi favorita».
Pero en las encuestas, ni rastro de la española. En esta 59 edición del festival no hay claros favoritos, pero suena el nombre de Aran MP3, el representante de Armenia, que cantará 'Not alone', una balada con sonidos electrónicos. También aparecen bien situados Reino Unido, Dinamarca, Suecia... Los expertos coinciden en que es una de las ediciones «más abiertas», así que el puesto de Ruth (y el de todos) es una incógnita, aunque el 'run run' la sitúa en la primera mitad de la tabla. Le podría ayudar que es muy conocida en Inglaterra, donde participó en el concurso 'X Factor' en 2008 y que canta gran parte de la canción en inglés. Algo con lo que no todo el mundo estaba de acuerdo porque varios académicos de la RAE incluso enviaron una carta al presidente de RTVE, Leopoldo González-Echenique, mostrándoles su malestar porque la representante española recurriese al inglés.
En todo caso, insiste Íñigo, «en Eurovisión no hay una regla para ganar. Ni la peor canción de todas tiene garantía de quedar la última ni la mejor situarse la primera». Pero los eurofans, que han ido en tropel a Dinamarca, creen que sí, que este año «se puede». «Ruth es una artista fantástica y el suyo ha sido de los mejores ensayos de la semana», la animaban el otro día en un encuentro con la murciana en la plaza de Amalienborg de Copenhague, donde juntos entonaron el 'Dancing in the rain'.
En la segunda mitad
La próxima vez que suene será mañana. Ruth competirá con otros 25 artistas, entre los que no estará el belga Axel Hirsoux, eliminado contra pronóstico en la semifinal del martes (se presentan 37 países, pero solo llegan a la final 26). Bélgica competía con 'Mother', un tema del español Rafael Artesero, que también escribió 'Que me quiten lo bailao', la canción con la que Lucía Pérez defendió a España en el certamen de 2011, y las de Andorra en 2005 y 2006. «Curiosamente, las tres veces mis canciones han quedado en el puesto 23». Este año no tendrá oportunidad ni de engancharse a la cola porque los belgas se han caído del festival. La canción de Artesero no podrá ganar, pero él cree que «Ruth tiene muchas papeletas porque es una de las mejores voces».
La representante española actuará en la segunda mitad, tal y como ella deseaba -su puesto preferido es el 22-. Y confía en sus posibilidades: «Quiero ganar Eurovisión».
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viernes, 9 de mayo de 2014
EL DESAYUNO DEL VIERNES, Ganchillo Fashion,./ LA CENA DEL VIERNES, ENTRE LAS 5 PRIMERAS,.
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