A vivir que son dos días - Cadena SER,.
A vivir, dirigido y presentado por Javier del Pino, quiere ayudar a que los oyentes disfruten del fin de semana sin que nadie les recuerde,.
El programa, que se emite sábados y domingos de 8 a 12 en España, sábados, domingos y lunes festivos en Colombia de 7 a 9 am y los Domingos de 10 a 12 am en Argentina. corresponde al formato de magacín o espacio de variedades y entretenimiento, en el que, por medio de distintas secciones, se acercan al oyente novedades culturales, sociales, políticas y humanas, así como información útil sobre ocio. Se incluyen también debates, entrevistas y consejos culinarios, y la información de las vías, lugares para ir de puente y recomendaciones de viajes en Colombia., etc.
La aldea maldita de la Raya,.
Cambedo fue atacada en 1946 por fuerzas militares hispano-lusas,.
«Eso son cosas de la guerra», dice la vecina. «Pero la guerra había terminado hacía siete años», matiza la turista mientras lee la placa situada junto a la iglesia del pueblo: «1946-1996. En lembranza do voso sofrimento». La vecina sentencia: «Algunas guerras parece que nunca terminan».Estamos en Cambedo da Raia, aldea de 100 habitantes situada en la frontera entre España y Portugal, a diez kilómetros de Verín (Ourense) y a otros diez de Chaves (Vila Real). Hasta 1864, Cambedo estaba justo encima de la raya y lo mismo sucedía con Lama d'Arcos y Soutelinho da Raia. Las casas de estos tres pueblos vecinos eran malas de guardar por tener una puerta que daba a España y otra, a Portugal, facilitando el contrabando.
Pero los estados de España y Portugal no podían tolerar aquel desbarajuste fronterizo y, en 1856, una delegación de la Comisión de Límites visitó las tres aldeas, tomó notó de la situación y se llegó una decisión diplomática: España se quedaría con los tres pueblos del Coto Mixto, otra rareza rayana (tres pueblos que no eran españoles ni portugueses y constituían una especie de Andorra), que pasarían a la provincia de Ourense, y Cambedo, Lama y Soutelinho pasarían a ser portugueses con una salvedad: la raya fronteriza se correría cien metros hacia el lado español para que las casas dejaran de tener una puerta a cada país.
Esta decisión complicó el contrabando y ahí empezó el declive de las tres aldeas, cuyos habitantes escogieron el camino de la emigración. Pero las tres siguieron estando alejadas de todo, en plena raya seca y en una zona montañosa de difícil acceso.
Visité Cambedo a finales de agosto. La aldea es pequeñita y tranquila, vive del bosque, de las pensiones y de los emigrantes retornados. Pero mi visita tenía un interés singular. Entre los años 40 y los años 80, Cambedo fue la aldea maldita de Portugal. Una leyenda negra, escrita por la dictadura de Salazar, la señalaba como una aldea de malhechores, criminales y fuera de la ley.
A principios de los 80, la investigadora Paula Godinho escuchó el relato de una anciana de Cambedo que explicaba las causas de la leyenda negra. El pasado mes de mayo, acabaron las excavaciones de arqueología contemporánea realizadas por el portugués Rui Gomes, profesor de la Universidad de Rutgers (Estados Unidos), y el gallego Xurxo Ayan, que ya trabajaron en Extremadura, en las excavaciones del campo de concentración de Castuera.
Entre los relatos recogidos por Paula Godinho y las prospecciones de Gomes y Ayan, que han descubierto restos de bombas, balas y casas destruidas por explosiones, se ha podido reconstruir el origen de la leyenda negra de Cambedo. Curiosamente, lo sucedido tiene similitudes con otro episodio de la posguerra española, que ya les hemos contado en estas páginas, sucedido por la zona rayana de Ouguela y Alburquerque.
El caso es que a principios de diciembre de 1946, se refugiaron en Cambedo tres maquis españoles (Demetrio Álvarez, Juan Ribera y Bernardino García), que fueron bien acogidos por los cambedeses, como había sucedido diez años antes en Barrancos o, en algunos casos, en Elvas. Pero en la madrugada del 20 de diciembre, el pueblo fue rodeado por fuerzas portuguesas del ejército, de la GNR, de la PIDE y de la PSP y por guardias civiles españoles. Atacaron el pueblo durante dos días, con morteros y fusiles. Destruyeron casas, murieron dos guerrilleros y dos 'guardinhas', apresaron a 20 portugueses y, tras la destrucción, vino el silencio: el asalto se presentó en Portugal como una batida para detener a delincuentes comunes y en la prensa española ni se presentó.
A mediados de los 80, la verdad sobre Cambedo salió a la luz en la prensa portuguesa y se rodó un documental sobre el tema: «O Silencio». Las prospecciones de 2018 han permitido precisar los hechos y, en 1996, se colocó la placa conmemorativa que comentan la turista y la vecina: «Algunas guerras parece que nunca terminan».
TITULO: LA HORA DEL DESPERTADOR - Piden más control policial en Almendralejo para garantizar la convivencia,.
LA HORA DEL DESPERTADOR -Piden más control policial en Almendralejo para garantizar la convivencia , fotos.
Piden más control policial en Almendralejo para garantizar la convivencia,.
La Organización en Defensa de lo Público cree necesario que las administraciones busquen soluciones para prevenir conflictos,.
El colectivo realiza esta petición tras la reyerta entre un numeroso grupo de temporeros ocurrida la noche del pasado jueves, en la que un hombre de 28 años resultó herido, además de producirse daños en el mobiliario urbano.
En un comunicado, la organización considera que el Ayuntamiento y la Delegación del Gobierno deben «intensificar» la presencia de los agentes «en toda la barriada para que la convivencia entre las diferentes personas que componen la población del barrio y de la localidad transcurra con total normalidad».
Afirma que es consciente de que la mayor parte de los problemas de convivencia entre las personas nacen de la explotación laboral, la pobreza y de las condiciones de vida de los sectores socialmente más desfavorecidos, «y de la pasividad de las diferentes administraciones públicas para hacer frente a las causas de estas situaciones tan negativas que se dan en la vida social».
Considera que los hechos sucedidos en Almendralejo son «buen ejemplo» de ello y recuerda que en numerosas ocasiones ha instado a las administraciones a «dejar de lado su tremenda pasividad y adelantarse a estos posibles acontecimientos».
«Un año tras otro encontramos una situación potencialmente explosiva por la convergencia de varios elementos que determinan la vida de un grupo social que acude masivamente a la localidad de Almendralejo en estas campañas agrícolas», indica en este sentido.
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