Dos periodistas novelistas ganan un Planeta sin sorpresas-foto,
La fiesta de los premios Planeta es una caja de sorpresas controlada:
menos desconocer el nombre del ganador, te puede pasar de todo. La
novela premiada se sabe con días de antelación y la intriga se deja para
lo baladí. Por ejemplo, bajas a desayunar con un señor en camiseta
encarnada y calzonas azules que te suena de algo. Te fijas y es el
exministro Josep Piqué, que baja al gimnasio del hotel. Subes de
desayunar y un caballero en tejanos y sudadera te saluda jovial. Vuelve a
sonarte, vuelves a fijarte y es Karlos Arguiñano.
Pero la incógnita principal, la novela ganadora, te la despejan enseguida. Yendo a la gala, se sentó detrás de mí en el autobús una joven periodista española, que había trabajado en México, y le detalló a su compañero de asiento la biografía del premiado: «Se llama Jorge Zepeda. Fundó dos periódicos en Guadalajara y un digital, pero solo sigue abierto el digital. Colabora en El Universal. Tuvo de becaria a la reina Letizia. Una vez me entrevisté con él para un trabajo y es majo».
Efectivamente, Jorge Zepeda Patterson, ganador del premio Planeta 2014, premiado con 601.000 euros, con su novela 'Milena o el fémur más bello del mundo', parece un tipo majo. Es un señor maduro (nació el mismo año que empezaban los Planeta: 1952) y delgado, con melena rizada y gafas de pasta negra. Lo ves y dan ganas de tener una conversación con él. También de leer sus libros.
Zepeda es un periodista que, como Reverte o Saviano, ha llegado a la conclusión de que el mundo de corrupción y violencia que conoce se cuenta mejor en una novela que en un reportaje. Pertenece al grupo de nuevos periodistas latinoamericanos, como Leila Guerriero, que escriben crónicas tan vibrantes como deliciosas: los lees y te entran unas ganas de escribir irrefrenables.
Jorge Zepeda Patterson vendió 30.000 ejemplares de su novela 'Los corruptores', editada por el grupo Planeta en 2013. Eso se une a que el premio Planeta Casa de las Américas, para promocionar a escritores latinoamericanos, ha desaparecido por falta de financiación. El tercer factor es que América se ha convertido en un mercado literario de crecimiento espectacular. Se suman los tres factores, se añade el hecho de que el Planeta suele ser un premio de encargo y ¡voilà! Pero más allá de si el premio está cocinado o no, lo importante es cómo la literatura, una vez al año, es capaz de competir con el día a día visceral y simplón de la España deluxe. En torno a 400 páginas de novela negra se reúnen Risto y De Prada, Pedro Sánchez y Dragó, Del Olmo y Millás, Revilla y Artur Mas. Y hablan de literatura.
De todas maneras, da algo de pena pensar en los seis cacereños y el pacense que presentaron sus novelas desde Extremadura. Pobres ilusos, comparsas de un premio al que se han presentado 21.000 novelas en 62 años y del que se han vendido 41 millones de ejemplares. Planeta marca tendencia con su premio y estos son tiempos de novela negra de denuncia y de mirar al mercado americano, tan poderoso.
Para consumo local, queda la finalista, Pilar Eyre, otra periodista-novelista, conocida por la tele y por sus trabajos en El Mundo e Interviú. Su especialidad, hasta ahora, era la biografía, ya fuera del anarquista Quico Sabaté, ya fuera de diversas reinas borbónicas, incluida doña Sofía. «Ahora voy a contar mi vida», retaba tras recibir su jugoso premio de consolación: 150.250 euros.
Explica Pilar que un día estaba comiendo con unos amigos, entró un tipo alto y se enamoró de él. Era reportero de guerra. Pasaron juntos tres días apasionados y desapareció en la frontera entre Siria y Turquía. Sus desvelos por encontrarlo y liberarlo son la esencia de 'Mi color favorito es verte'. La esencia de la novela ganadora son las andanzas de Milena, una mujer muy bella que en su hermosura lleva prendida la tragedia, una prostituta cuyas andanzas por Ucrania, Croacia, Marbella y México leerán cerca de un millón de personas. Incluidos Piqué y Arguiñano.
Pero la incógnita principal, la novela ganadora, te la despejan enseguida. Yendo a la gala, se sentó detrás de mí en el autobús una joven periodista española, que había trabajado en México, y le detalló a su compañero de asiento la biografía del premiado: «Se llama Jorge Zepeda. Fundó dos periódicos en Guadalajara y un digital, pero solo sigue abierto el digital. Colabora en El Universal. Tuvo de becaria a la reina Letizia. Una vez me entrevisté con él para un trabajo y es majo».
Efectivamente, Jorge Zepeda Patterson, ganador del premio Planeta 2014, premiado con 601.000 euros, con su novela 'Milena o el fémur más bello del mundo', parece un tipo majo. Es un señor maduro (nació el mismo año que empezaban los Planeta: 1952) y delgado, con melena rizada y gafas de pasta negra. Lo ves y dan ganas de tener una conversación con él. También de leer sus libros.
Zepeda es un periodista que, como Reverte o Saviano, ha llegado a la conclusión de que el mundo de corrupción y violencia que conoce se cuenta mejor en una novela que en un reportaje. Pertenece al grupo de nuevos periodistas latinoamericanos, como Leila Guerriero, que escriben crónicas tan vibrantes como deliciosas: los lees y te entran unas ganas de escribir irrefrenables.
Jorge Zepeda Patterson vendió 30.000 ejemplares de su novela 'Los corruptores', editada por el grupo Planeta en 2013. Eso se une a que el premio Planeta Casa de las Américas, para promocionar a escritores latinoamericanos, ha desaparecido por falta de financiación. El tercer factor es que América se ha convertido en un mercado literario de crecimiento espectacular. Se suman los tres factores, se añade el hecho de que el Planeta suele ser un premio de encargo y ¡voilà! Pero más allá de si el premio está cocinado o no, lo importante es cómo la literatura, una vez al año, es capaz de competir con el día a día visceral y simplón de la España deluxe. En torno a 400 páginas de novela negra se reúnen Risto y De Prada, Pedro Sánchez y Dragó, Del Olmo y Millás, Revilla y Artur Mas. Y hablan de literatura.
De todas maneras, da algo de pena pensar en los seis cacereños y el pacense que presentaron sus novelas desde Extremadura. Pobres ilusos, comparsas de un premio al que se han presentado 21.000 novelas en 62 años y del que se han vendido 41 millones de ejemplares. Planeta marca tendencia con su premio y estos son tiempos de novela negra de denuncia y de mirar al mercado americano, tan poderoso.
Para consumo local, queda la finalista, Pilar Eyre, otra periodista-novelista, conocida por la tele y por sus trabajos en El Mundo e Interviú. Su especialidad, hasta ahora, era la biografía, ya fuera del anarquista Quico Sabaté, ya fuera de diversas reinas borbónicas, incluida doña Sofía. «Ahora voy a contar mi vida», retaba tras recibir su jugoso premio de consolación: 150.250 euros.
Explica Pilar que un día estaba comiendo con unos amigos, entró un tipo alto y se enamoró de él. Era reportero de guerra. Pasaron juntos tres días apasionados y desapareció en la frontera entre Siria y Turquía. Sus desvelos por encontrarlo y liberarlo son la esencia de 'Mi color favorito es verte'. La esencia de la novela ganadora son las andanzas de Milena, una mujer muy bella que en su hermosura lleva prendida la tragedia, una prostituta cuyas andanzas por Ucrania, Croacia, Marbella y México leerán cerca de un millón de personas. Incluidos Piqué y Arguiñano.
Viernes:
Su
desayuno,
café con leche y unas porras».
- Cena: Ensalada, patatas asadas o cocidas y pescado (blanco a la plancha).TÍTULO: EL HORMIGUERO VIERNES 17 OCTUBRE, PEDRO GARCIA AGUADO, AHORA VUELVE A EMOCIONAR,.
- Pedro García Aguado vuelve a hacer de 'Hermano Mayor'. Tras siete temporadas, no olvida su primera vez: "Salí a llamar a mis hijas para ...foto,.
Pedro García Aguado vuelve a hacer de 'Hermano Mayor'. Tras siete temporadas, no olvida su primera vez: "Salí a llamar a mis hijas para decirles: 'Os quiero tal y como sois'",.
Trabajaba en un hotel de Marbella por 900 euros al mes cuando recibió una oferta de trabajo de Cuatro. En ese momento la vida de Pedro García Aguado (Madrid, 1968), campeón olímpico con la selección nacional de waterpolo y exadicto a la cocaína, iba a cambiar para siempre aunque él entonces no lo sabía. Así empezó su etapa al frente de 'Hermano Mayor', un idilio televisivo que cumple 7 temporadas (en cinco años) y que regresa esta noche a partir de las 21.30 horas con nuevos casos de adolescentes conflictivos.
- Lleva ya siete entregas, ¿qué recuerdos le vienen de los comienzos?- Cuando entré en la primera casa sentí una especie de ahogo, de ansiedad. Salí a llamar a mis hijas para decirles: 'Os quiero tal y como sois, no cambiéis', porque me estaba enfrentando a dos hermanas que eran dos demonios.
- ¿Cómo se siente ahora?- Hacía tiempo que no sentía cosas. Sufrir una enfermedad como es la adicción te incapacita para una serie de cosas. A mí este año me están sobreviniendo muchas emociones, ahora me vuelvo a emocionar. Cuando me voy de las casas me siento muy satisfecho con el trabajo realizado.
- La televisión ha sido su segunda oportunidad...- Por eso me emociono cada vez que pienso en cómo se había torcido mi vida, habiendo sido un gran deportista. Me acuerdo cuando estaba en el centro terapéutico para recuperarme, que empecé a trabajar en un hotel de Marbella por 900 euros al mes, que no veía a mis hijas… Estuve dos años así hasta que recibí la oferta de Cuatro. No sabía que eso iba a ser mi vida desde entonces.
- ¿Sigue en contacto con los chavales de otras temporadas?- Por supuesto que sí, te podría hablar de que un 70% de los chavales que hemos tratado se mantienen muy bien y tiran adelante. Muchos volverán al programa porque su testimonio es muy valioso.
- ¿Cómo seleccionan las peticiones que les llegan?- Normalmente elegimos los más extremos. Nos llegan muchos casos a través de redes sociales y esta temporada ha sido la primera vez que hemos dado con un chico que realmente no tenía claro que quisiera que le ayudáramos, su situación era extrema hasta el punto de que hacía a sus padres ir al banco para pedir un crédito y poder pagarse sus caprichos.
- ¿Y quién les llamó?- Era tal la que armaba que nos llamaron los vecinos, porque no podían vivir a gusto.
- ¿Qué pasa cuando no lo consiguen?- Los derivamos a otros profesionales, a centros o incluso al despacho mío de Barcelona.
- ¿Alguna asociación se ha puesto en contacto con usted para pedirle consejo?- Lo que estoy haciendo es dar muchas conferencias en colegios. Ayudamos a chavales que están en riesgo de exclusión social. Pero, sobre todo, ayudamos a padres.
- ¿Qué tuvo de especial la entrevista con Risto Mejide?- El ir a una piscina donde yo había estado de pequeñito, el ver un sofá en el que ponía 'no lo volveré a hacer'… Risto lo hizo perfecto, le dije: '¡Me estás haciendo daño!' pero yo mismo me metí en ese berenjenal. Había tapado todas esas vivencias y en aquel momento abrí la caja de pandora. Él está acostumbrado a meter caña y creo que le descontrolé.
- ¿Sus hijas conocen su historia?- La conocen y vieron el programa… Y lloraron. Saben que papá sufrió y eso les educa a ellas en las consecuencias desagradables que tienen algunas sustancias.
TÍTULO: VIERNES CINE, SR. Y SRA. SMITH,.- Reparto
- Brad Pitt, Angelina Jolie, Vince Vaughn, Adam Brody, Michelle Monaghan, Kerry Washington, Keith David, Chris Weitz, Jennifer Morrison, Rachael Huntley,.
- La acomodada vida de Jane Smith (Angelina Jolie) y John Smith (Brad Pitt) no impide que el suyo sea un matrimonio gris y anodino. Además, ambos ocultan un secreto por el que su pareja estaría dispuesta a matar: los dos son agentes secretos, asesinos increíblemente eficientes que trabajan para organizaciones enfrentadas entre sí. Ambos descubren una nueva fuente de emoción en sus vidas cuando resulta que son contratados para asesinarse mutuamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario