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La Niña Bomba
Hace 10 días una niña secuestrada por Boko Haram se acercó a la entrada del mercado de Maiduguri envuelta con explosivo
Hace menos de un año, se aprovechó el espacio de estos párrafos para asegurar que, al parecer, ni los propios miembros de la organización terrorista conocidacomo Boko Haram de Nigeria saben cuál es el verdadero significado de su nombre. Fundado en el pueblo de Maiduguri como Congregación del Pueblo por la Tradición del Proselitismo y la Yijad, ganaron el apodo de Boko Haram (que podría traducirse como "pecado prohibido") como epíteto coloquial entre la gente que los identifica desde 2009 como extremistas islámicos no sólo con etimología indefinida, sino también sin límites en su credo enrevesado: la conversión forzosa de todo incauto a su interpretación particular del Islam, al tiempo que no conviven con la población musulmana y la profesión de unir todo militante de su concepto de religión, al tiempo que incluyen ahora criminales incrédulos, mercenarios sanguinarios y radicales irracionales. Mohammed Yusuf, fundador de esta Congregación del Mal, llegó a asegurar en una entrevista con la BBC de Londres que su cofradía luchaba por abatir no sólo la teoría de la evolución de Darwin y las oportunidades de educación entre mujeres, sino rechazar abiertamente la redondez de la Tierra. Para él y sus fanáticos ignorantes, la noción de que vivimos en un planeta esférico contradice las enseñanzas de lo ellos entienden por Islam, tanto como se niegan a creer que la lluvia es en realidad agua evaporada por el Sol.
TITULO: EL HORMIGUERO VIERNES 5 FEBRERO - FIDEL TOLDRÁ VILARDELL.
El placer de comer carne de cerdo es algo que no hay que perderse,.
El placer de comer una buena carne de cerdo es algo que no hay que perderse
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El jamón serrano contiene aminoácidos que contrarrestan el efecto negativo de la sal. Son antihipertensivos,.
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Fidel Toldrá Vilardell Investigador del CSIC y Premio DuPont de la Ciencia,.
Fidel Toldrá Vilardell (barcelonés de 1958, pero valenciano de adopción) es doctor en Ciencias Químicas por la Universidad de Valencia y profesor de investigación del Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos de Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Este especialista en el terreno de la alimentación acaba de alzarse como ganador del XXV Premio DuPont de la Ciencia, cuya temática este año vuelve a centrarse en la Nutrición y la Salud y que está dotado con 30.000 euros.
Dentro de su campo, se ha especializado en la carne.Efectivamente. En alimentos de origen animal y, especialmente, en carne y derivados.
Pues ha dicho la OMS que la carne procesada y la roja son cancerígenas.Eso nos ha sorprendido a todos. Sí que hace tiempo que se venía diciendo que algunos compuestos puede ser que tengan esa posibilidad de, a largo plazo, generar cáncer. Pero es como todo: depende de la dosis. Siempre decimos que no hay que abusar de los alimentos porque, cuando abusas, te encuentras con problemas. Y esto no iba a ser la excepción.
¿Se lo toma entonces con cautela?Lo que pasa es que han sido recomendaciones muy genéricas. Han hablado de todas las carnes rojas y no han especificado la diferencia entre cordero, ternera y cerdo, que, aunque sean todo carnes, son distintas. Hasta que no salga publicado el informe completo, en febrero, no sabremos exactamente los mecanismos que pueden ser causantes de ese cáncer y de qué estamos hablando. Porque incluyen todas las carnes rojas y los productos cárnicos procesados. Pero es que estos son muy variados y muy distintos y, en el sector, siempre hemos estado muy atentos sobre el uso del nitrito como agente conservador. Porque, si no se maneja eficientemente, podría dar lugar a la generación de nitrosaminas, que son cancerígenas. Aunque, desde el punto de vista de la regulación legal, están estipulados unos máximos.
¿Demasiado alarmista, por tanto?Un poco sí. Porque no es lo mismo un jamón que un jamón cocido que una hamburguesa o que un perrito. La cosa cambia muchísimo. Hay muchos aditivos e ingredientes que pueden estar ahí. Y luego también hay que observar qué consumo tenía la gente con la que se hizo el estudio. En cualquier caso, siempre vale la recomendación de seguir una dieta variada y equilibrada. Carne sí, pero con moderación y alternándola con otros alimentos proteicos.
¿Un experto como usted cuántas veces come carne a la semana?Bueno, yo lo que como es cerdo, que, aunque esté englobado en lo que llaman carne roja, es menos roja. Y también algo de pollo. Unas tres veces a la semana. Según las recomendaciones de la OMS, las aves se han quedado fuera de la alarma.
Y, a pesar de todo, el jamón serrano sigue triunfando en España.Hombre, con 40 millones de piezas al año, somos el mayor productor del mundo. Hay que tener en cuenta que, aunque esté salado y curado, todas las enzimas que tenía ese músculo permanecen activas y son las que dan esos buenos sabores con el tiempo. Así que, cuanto más curado, más tiempo tienen para actuar y más rico es el producto.
Interesante para los amantes del pata negra.El tiempo es importante, además, porque esas enzimas producen algo que estamos investigando estos últimos años: péptidos bioactivos. Son aminoácidos que se generan en el jamón curado por la ruptura proteica. Y hemos observado que algunos de ellos son antihipertensivos.
¿Quiere decirse que un buen jamón reduce la presión arterial?Hay que ser cuidadosos con esto porque el jamón contiene sal, pero, en algunos experimentos, se ha observado que no subía tanto la tensión como esperábamos. Los péptidos contrarrestan el efecto negativo de la sal. Ahora hay un proyecto europeo que va a hacer la prueba con humanos.
Imagino que habrá bastantes voluntarios.(Risas). Sí. Se hará con 40 para tener una primera aproximación.
Además de comprar jamón poco curado, ¿qué otros errores frecuentes cometemos al comer?Abandonar la dieta mediterránea por el ritmo de vida que llevamos. Cocinar menos y caer en la tentación de consumir alimentos rápidos en lugar de los tradicionales como garbanzos, lentejas o fabes. O abusar del tapeo. Decir aquello de: «Ya voy picando algo y con eso ceno». No hay que perder la tradición de desayuno, comida, merienda y cena. Es mejor alimentarse en pequeñas dosis que pegarse un atracón en la comida y luego no cenar, por ejemplo. Por desgracia, es cierto eso de que es mejor pasar un poco de hambre, no quedarnos saciados. Porque, además, somos sedentarios y no quemamos esas calorías.
Vacas locas, gripe aviar, peste porcina... ¿Qué está pasando?Todos esos escándalos son diferentes y, a veces, surgen de pequeños productores, como pasó con la crisis de las dioxinas, que comenzó por un pequeño empresario en Bélgica. Pero, en general, los controles funcionan y, en cuanto hay una sospecha, las autoridades bloquean las partidas. Además, cada vez es más fácil saber el origen por la trazabilidad.
¿Y en qué tenemos que fijarnos a la hora de comprar?Pues la tendencia es a reducir el consumo de grasa, que en la carne es visible. Pero corremos el riesgo de que sea una carne tan magra que no haya quien se la coma. Por querer reducir grasas perdemos la calidad sensorial. Es como la carne de cerdo ibérico, que es una carne muy grasienta y tiene muchas calorías, por lo que no puedes comerla todos los días, pero el placer de comer una buena carne de cerdo es una experiencia que no hay que perderse. Igual que beber un gran vino.
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