A Bertin le enseño a enchufar la cocina cuando quiera,.TONI CANTO ACTOR-foto.
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Toni Cantó es uno de los médicos de Franco en 'Amar es para siempre' (A3). «Por lo menos cumplo el sueño de mi padre de verme vestido de cirujano»,.
Tras cinco años retirado de la televisión, Toni Cantó (Valencia, 1965) vuelve a ejercer como actor en la serie diaria 'Amar es para siempre', a las 16.30 horas, en la que interpreta a Eugenio Martos, un eminente cirujano del equipo de Franco. Aunque no es lo único que ha retomado: tras su salida de UPyD, regresa a la política de la mano de Ciudadanos.
¿Se nota oxidado como actor?La verdad es que no, cuando me incorporé temía no recordar cómo era esto, pero por suerte es igual que montar en bici y no se olvida.
Es uno de los médicos de Franco. ¿El roce hace el cariño?No, de ninguna manera. Lo que pasa que un médico debe curar al paciente que sea.
Está cumpliendo el deseo de su padre.Sí, aunque sea en la ficción, al menos cumplo su sueño de ver a su hijo vestido de médico durante unas horas.
¿Entre sus hermanos, era su ojito derecho para seguir sus pasos?Absolutamente, papá creía que yo iba a continuar su brillante carrera. Él está jubilado, pero fue un cirujano muy importante. Y lo mío no pudo ser.
¿Lo de político y actor le hizo ilusión?Fue un '¡madre mía, la que nos ha caído!'. Yo empecé a trabajar como actor a los dieciocho años, momento en que me fui a Madrid, y cuando se lo dije se llevó un gran disgusto porque era muy estudioso, sacaba buenas notas y en aquella época estaba peor visto que ahora. Pero lo increíble es que al decirle que iba a ser político el disgusto fue aún mayor, lo que habla mucho de cómo lo ha hecho el gremio en las últimas legislaturas.
Ha elegido la profesión de actor, muy inestable, y la de político, la peor valorada por los españoles.Sí, digamos que lo mío no es la comodidad. Las dos profesiones me han gustado muchísimo: en mi casa se respiraba política desde niño y siempre guardé en mi corazón el anhelo de ser actor, porque lo veía un sueño inalcanzable.
Dice que viene de una familia muy roja. Pues en la serie se ha pasado al otro bando. ¿Igual que en la vida real con Ciudadanos?No, no. Ciudadanos es un partido de centro que trabaja para buscar la igualdad de los españoles y eso solo puede ser progresista. Este partido es necesario para la regeneración democrática.
Hay quien dice que es 'la marca blanca del PP'. ¿Qué le parecen estos comentarios?O bien que son malintencionados o que no se maneja la información necesaria. Si hay un programa y partido alejado del Partido Popular es Ciudadanos.
¿Cómo era Rosa Díaz (UPyD) como jefa y como es Rivera?No me gusta hacer comparaciones, no creo que sea justo.
¿Qué le pareció cada uno de los participantes del debate a cuatro?Por orden de colocación, Pedro, que estaba a la izquierda, fue el que peor estuvo, me pareció el candidato más flojo, casi al mismo nivel que Rajoy, que desde luego siempre será el peor porque ni siquiera se presentó. Pablo Iglesias resultó ser el hombre de hielo, al que no le afecta nada, yo no me lo creo porque le he oído cambiar tantas veces de opinión y defender lo indefendible que no sé qué Pablo Iglesias nos encontraremos cuando tenga el poder, el que va de socialdemócrata o el de extrema izquierda. Dice lo que quiere escuchar la gente. Me pareció que Albert estuvo muy bien, he oído que se le notaba inquieto, pero yo no lo percibo así, es una persona muy inquieta y eso no es negativo. Y Soraya esforzándose por defender lo indefendible. Ella no es candidata y estuvo allí cubriendo como pudo al jefe y pasándolo mal al explicar una legislatura nefasta.
¿Qué le parece que el Gobierno diga que el que mejor estuvo fue Pablo Iglesias?Son extraños compañeros de cama que se crean en este tipo de situaciones. Al PP le conviene que Podemos tenga un gran resultado. Ahora, el enemigo a batir es la segunda fuerza, que todas las encuesta dicen que es 'Ciudadanos'.
Territorio comanche¿Cómo se plantea el día 20 en caso de que gane Albert Rivera?Me lo plantearé como una gran alegría. Es lo mejor que le puede suceder a este país, el programa y el líder, que siempre sale como el político mejor valorado.
Hemos visto a Rajoy jugar al futbolín, a Pedro Sánchez al ping-pong, bailotear a Soraya Sáenz de Santamaría... ¿A qué se prestaría usted?No lo sé, no veo mal que los políticos demuestren su lado más humano. Yo en eso ya demostré hace mucho que era capaz de hacer cosas que se salían de lo normal, pero esta campaña estoy siendo serio. No he recibido propuestas extrañas, pero lo que me dices tampoco son cosas enloquecidas.
¿Se animaría a cocinar con Bertín Osborne?Por supuesto, le considero muy amigo y cuando él quiera le enseño cómo se enchufa esa estupenda cocina que tiene. ¡O le hago un arroz maravilloso!
Dice que no ha experimentado la erótica del poder. ¿Ni siquiera ahora que tienen a Inés Arrimadas, una de las políticas consideradas más atractivas?A mí lo que me atrae de Inés es la labor que está haciendo en la oposición en un lugar que es territorio comanche total. Es una sorpresa muy agradable y tiene la cabeza muy bien amueblada. Cualquier cosa que nos despiste un poco de eso, como entrar en consideraciones estéticas, no es serio.
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