viernes, 4 de marzo de 2016

CALLEJEROS - BALONCESTO, EL CACERES ACUDE A LA TRAMPA DEL COLISTA,./ REVISTA CAMPO - ANTES TODO SE HACÍA A MANO CON MUCHOS JORNALEROS,.

TITULO: CALLEJEROS - BALONCESTO , EL CACERES ACUDE A LA TRAMPA DEL COLISTA,.

LEB ORO

El Cáceres acude a la trampa del colista,.

El pívot Ibrahim ThomasEl pívot Ibrahim Thomas - foto,.
  • Los extremeños visitan hoy a un necesitado Lleida con la idea de continuar mirando a la zona de playoff,.

    Demostrar hechuras de equipo con aspiraciones. Esta será hoy la intención del Cáceres Basket en su visita a la cancha del farolillo rojo de la competición, Lleida (Barris Nord, 21.00 horas).
    Los catalanes, que ya lograron imponerse al conjunto extremeño en el Multiusos en el partido de la primera vuelta, afrontan el choque con la urgencia de conseguir un triunfo que les mantenga vivos en la lucha por la permanencia. Mientras, los hombres de Ñete Bohigas, con un cómodo colchón, querrán presentar con una nueva victoria a domicilio sus credenciales para batallar por conseguir una plaza en los playoffs de ascenso a la máxima categoría.
    Por primera vez en las últimas semanas, el Cáceres afrontará su encuentro con una plantilla compensada. Las últimas llegadas del pívot Ibrahim Thomas y del joven escolta Tomeu Rigo han conferido un mayor fondo de armario tras los sucesivos reveses en forma de lesión. Ambos debutarán esta noche con la elástica verdinegra, aunque al senegalés aún le quedan por delante algunos días para coger el estado de forma óptimo que exige la competición.
    Para el entrenador del Cáceres, la semana ha sido un poco más compleja de lo normal, «al contar con dos jugadores nuevos en un grupo con los roles establecidos».
    Pese a ser su rival el actual inquilino del farolillo rojo, a Bohigas no le faltan elogios para referirse a un equipo que ya le ganó la partida en la primera vuelta: «Parece mentira que pueda estar en esta situación en la tabla, no solo por su plantilla, sino por su juego. En la primera vuelta ellos venían en una situación difícil y lograron salir». Algunas de sus principales preocupaciones se centran en hombres como Herum, una novedad de Lleida respecto a la primera vuelta: «Es capaz de anotar en el poste bajo y ayuda en el rebote».
    El técnico cacereño prevé un choque muy físico y duro. «Será vital que al principio tengamos controlado el ritmo para que no nos saquen físicamente del partido».
    Hoy tendrá lugar el esperado debut de Ibrahim Thomas y Tomeu Rigo. Sobre el primero, Bohigas tiene claro lo que quiere: «Necesito de él rebote defensivo y presencia física para intimidar y obligar a cambiar tiros. Algo muy bueno es que tiene buena mano, lo que da versatilidad. Estamos acelerando los pasos para que se encuentre mejor físicamente».
    Pese a la presencia del senegalés, se prevé que Sergio Pérez tenga que continuar asumiendo algunos minutos como cuatro.
    Respecto a Tomeu Rigo, el míster habla de él como un jugador joven con capacidad para crecer. «Nos va a dar intensidad defensiva y tiene talento para poner la bola en el suelo. Los días que ha entrenado lo ha hecho muy bien».
    El jugador cedido por el Baloncesto Sevilla exhibió ayer su declaración de intenciones: «Intentaré dar mucha intensidad en defensa. Puedo tirar de fuera y jugar bloqueos. Soy un dos que intenta dar la máxima intensidad, garra y empuje al equipo».
    Con esta situación, el Cáceres pretenderá esquivar la trampa del colista.

    TITULO:  REVISTA CAMPO - ANTES TODO SE HACÍA A MANO CON MUCHOS JORNALEROS,.

    Antes todo se hacía a mano, con muchos jornaleros»,.

  • Forma parte de una de las familias que abandonó las tierras del norte de Cáceres como consecuencia de la construcción de la presa de Valdecañas,.

  • Manzano posa con una imagen de Talavera la Vieja de fondo. :: e.g.r.-foto, José Luis Manzano León Nació en Talavera la Vieja,.

    En la popularmente conocida como 'Talaverilla', la familia de José Luis Manzano se dedicaba a la agricultura, oficio que más tarde continuaron en Santa María de las Lomas y Rosalejo. Labores en las que sin embargo él (ahora al frente del bar Manzano de Navalmoral) prefirió no seguir.
    ¿Qué recuerdos tiene usted de aquella tierra fértil, agrícola y ganadera, que rodeaba Talavera la Vieja?
    Pues no muchos, ya que nos tuvimos que ir cuando tenía nueve años de edad. Casi todo el mundo se dedicaba a la agricultura y la ganadería. Mis padres eran agricultores y principalmente cultivaban algodón. Recuerdo que nadie se quería ir, pero por aquel entonces era lo que había.
    ¿Dónde recaló la familia con posterioridad?
    Primero estuvimos en Santa María de las Lomas, aunque solo un año. Pero mis padres cambiaron esta parcela que adquirimos en Santa María por otra en Rosalejo. Cultivamos algodón y también tabaco. Sin embargo finalmente optaron por dejar la agricultura para irse a Navalmoral, a buscarse otro medio de vida.
    ¿Por qué?
    Porque en aquellos tiempos no era como ahora. Todo se hacía a mano y mi padre tenía que buscar muchos jornaleros para hacer cualquier cosa. No acababa de ver futuro en esto de la agricultura y decidió venirse a Navalmoral, después de dos años en Rosalejo.
    ¿Cree que la construcción del pantano de Valdecañas, que anegó miles de fértiles hectáreas, benefició o perjudicó a la zona?
    A ver... En aquella época a nosotros nos perjudicó, pero la verdad es que ahora podríamos estar pasando sed si no hubiese sido por la construcción de este y otros pantanos. En cuanto a esta zona y sobre todo al entorno de Talaverilla... Recuerdo que el perjuicio fue muy grande. En primer lugar porque eran los tiempos que eran, y tenías que irte de allí, obligado, quisieras o no. Por otro lado recuerdo que por aquel entonces mi pueblo ya era grande. Corría el año 1963 y podría tener 1.800 ó 1.900 habitantes. Además la gente estaba preparando ya la zona para el regadío, para empezar a poner tabaco. De hecho algunos ya lo estaban poniendo, pero todo el mundo tuvo que abandonarlo todo.
    Sería duro dejar atrás el lugar donde se crió y a los amigos, vecinos...
    Así es, pero que se le va a hacer. Recuerdo que la gente se repartió entre varios de los denominados 'pueblos nuevos', como Rosalejo, Santa María, Tiétar y Pueblonuevo de Miramontes, además de Leganés y Hospitalet.
    ¿Leganés y Hospitalet?
    Pues sí. Por lo que sea hubo mucha gente que se fue allí, imagino que habría más trabajo que por aquí.
    De aquellas labores del campo, aun siendo usted muy joven... ¿Qué recuerda?
    Pues que era una vida muy dura. Cuando mis padres iban a recoger algodón, como no tenían a nadie cerca que pudiera echarles una mano, me llevaban con ellos. Lo vi y lo viví de cerca, pero la verdad es que no me gustaba.
    Y por eso eligió otra ocupación...
    Pues sí, la verdad es que la hostelería me gusta más y a mi parecer aquí se está mejor que trabajando en el campo, aunque tampoco es fácil. No obstante no nos podemos quejar. Abrimos el bar Manzano en el año 1970, lo ampliamos en el 1998... ¡Y aquí seguimos!
    ¿Suele regresar a Talaverilla?
    Sí, cuando baja el pantano y se puede ver algo de los restos. Vamos con la familia, nos llevamos la merienda y pasamos el día. Aunque nuestra casa no se suele ver ya que el pantano tiene que bajar mucho. La última vez fue hace 22 años.

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