viernes, 15 de julio de 2022

DESAYUNO - CENA - MARTES - MIERCOLES -JUEVES - VIERNES - Yolanda Díaz se lanza a la búsqueda de la “mayoría social”,. / EL PAPEL HIGIENICO ROJO - EL D.N.I. - Un momentáneo cierre de filas,. / Donde comen dos - El hormiguero Lunes -18 - Jueves -21- Julio ,.

 

             TITULO:  DESAYUNO - CENA - MARTES - MIERCOLES -JUEVES - VIERNES -Yolanda Díaz se lanza a la búsqueda de la “mayoría social”,.

 DESAYUNO - CENA - MARTES - MIERCOLES -JUEVES - VIERNES -Yolanda Díaz se lanza a la búsqueda de la “mayoría social” , fotos.

 Yolanda Díaz se lanza a la búsqueda de la “mayoría social”,.

La vicepresidenta presenta su plataforma como un “movimiento ciudadano” alejado de los esquemas clásicos de la izquierda,.

 Yolanda Díaz se lanza a la búsqueda de la “mayoría social” | España | EL  PAÍS

Nadie dejaba de preguntárselo, ni la familia, ni los amigos, ni la gente que la paraba por la calle, ni los compañeros de Unidas Podemos, ni sus socios de Gobierno, ni siquiera algún comisario europeo. “¿A qué estás esperando, Yolanda?”, la asaeteaban. El “proceso de escucha” de Yolanda Díaz se había hecho tanto de rogar que los más cáusticos ya lo presentaban como una especie de criatura mítica. Ahora, casi un año después de haber expresado la idea en público, la vicepresidenta segunda del Gobierno se lanza por fin a la aventura .( desayuno) ,.

Dónde desayunar en Sevilla: 2017


El proyecto arrancará el próximo viernes en el centro cultural Matadero de Madrid y continuará hasta fin de año por diversos puntos de España. Más que plataforma política se define como “un movimiento ciudadano” en el que ya se han comprometido a colaborar profesionales de distintos ámbitos, 

 

Cena -  Comida Casera - Menu

académicos o artistas con el fin de aportar ideas en diversos grupos de trabajo sectoriales, explican fuentes que están participando en la gestación. Su objetivo primordial es “reanimar a la izquierda”, aunque esa palabra apenas se usará. Díaz aspira a ir más allá de los incondicionales; su objetivo, explican quienes están en la cocina del proyecto, es elaborar un discurso dirigido a “una mayoría social”, sin resignarse “a quedar en la esquinita a la izquierda del PSOE”, como ella mismo ha dicho. Una opción “transversal” con el fin declarado de bucear además entre los abstencionistas tradicionales.

El plan de la también ministra de Trabajo había empezado a tomar cuerpo el pasado agosto, a caballo entre reuniones en Madrid y escapadas a la playa en Galicia. En septiembre disponía de un documento completo, en cuya elaboración participaron Díaz y miembros de su equipo de confianza. Allí ya estaban perfiladas las líneas generales: metodología, objetivos, plazos, mensaje, estilo… La voluntad era hacer algo que superase a los partidos, recuperar un discurso optimista que rompiese con el “negativismo” que sus promotores achacan a la izquierda clásica, huir de las proclamas de grandes principios y presentar programas concretos.

La idea estaba perfilada, pero en los meses siguientes la vicepresidenta apenas fue desgranando algunos detalles a cuentagotas, como el nombre registrado, Sumar. Díaz no creía necesario apresurarse, estaba absorbida por las negociaciones de la reforma laboral y ni siquiera confirmaba que su propósito último fuese constituir una plataforma para las próximas elecciones generales. Su idea inicial era esperar a la primavera de 2022 y, según se desarrollase la iniciativa, fraguar la posible conjunción electoral después del verano. La guerra de Ucrania la convenció de que no era el momento y lo aplazó de nuevo. El “proceso de escucha” seguía en el congelador, y la pregunta era cada vez más insistente: ¿a qué está esperando Yolanda Díaz?

Ese mismo agosto del año pasado, la vicepresidenta había explicado su plan a Pablo Iglesias y recibido la anuencia de este. En los meses siguientes, las relaciones entre ambos -amigos desde hace casi dos décadas- se fueron deteriorando irreversiblemente. La distinta manera de plantearse su papel en el Gobierno y el recelo que crecía en Podemos a medida que la vicepresidenta dejaba caer algunos de sus planes acabaron dinamitando esa amistad. Díaz intentaba reconstruir los puentes con el grupo de Íñigo Errejón y hablaba constantemente de diluir el papel de los partidos, lo que obviamente incluía al fundado por Iglesias. Las elecciones en Castilla y León y Andalucía -con casi nulo protagonismo de Díaz en el primer caso y algo mayor en el segundo- resultaron un fiasco tras otro para Unidas Podemos.

La pregunta ahora es si la política gallega estará aún a tiempo de reflotar un espacio político que languidece y que, como se ha visto en Andalucía, casi siempre sucumbe a su instinto cainita. “¿Cómo vamos a llegar tarde si todavía queda un año y medio de legislatura?”, replican en el equipo de Díaz. “Claro que hay tiempo”. En el entorno de la vicepresidenta minimizan el alcance del fracaso en Andalucía porque, alegan, allí se constituyó una simple coalición de partidos, muy diferente a lo que ella persigue ahora. En los próximos meses, Díaz desarrollará su programa de actos por España, en los que insiste que se limitará a escuchar, al tiempo que 25 grupos de trabajo elaboran sus documentos. A principios del año próximo, llegará el momento en que la vicepresidenta tenga que confirmar si da el paso definitivamente, y Sumar se convierte en una plataforma electoral en la que los partidos “estarán, pero no serán”, según lo ha explicado ella misma.

Las apelaciones constantes a la ciudadanía por encima de las estructuras políticas evocan inevitablemente al primer Podemos, aunque el conjunto del mensaje será muy diferente. El partido de Iglesias nació de la energía de la indignación y hasta creyó posible “asaltar los cielos”. La plataforma de Díaz no quiere canalizar la rabia, sino “devolver la ilusión” mostrándose como una izquierda afable y propositiva. El primer vídeo con el que acaba de presentar su logo marca el tono: colores rojos suaves y palabras aterciopeladas como escuchar, dialogar, cuidar, progreso, libertad, igualdad, ilusión, unión…

En el acto del próximo viernes no habrá ninguna fila reservada para políticos. Los que asistan lo harán a título individual. Tampoco figuran militantes de partidos en los grupos de trabajo que elaborarán las propuestas. Tras vivir en primera persona el hundimiento de las mareas en Galicia, Díaz cree que dejar a las formaciones políticas fuera de la gestación del proyecto e implicar en él a gente ajena es la mejor manera de ponerlo a salvo de los vicios partidistas.

Si el experimento sale bien y desemboca en una plataforma electoral, inevitablemente entrarán en juego los partidos -Podemos, IU, Más País, En Comú y otras formaciones regionales- con todas sus aspiraciones. Y Díaz tendrá que lidiar con la habitual madre de todas las batallas, la confección de las listas, que seguramente se deberían dirimir mediante elecciones primarias. Hasta entonces no se sabrá con certeza si la vicepresidenta ha logrado construir algo realmente nuevo y escapar a la melancolía de una izquierda magullada por años de experimentos fallidos.

 

TITULO:   EL PAPEL HIGIENICO ROJO - EL D.N.I. - Un momentáneo cierre de filas ,.

 EL PAPEL HIGIENICO ROJO - EL D.N.I. -  Un momentáneo cierre de filas  ,  fotos,.

Un momentáneo cierre de filas,.

 El aviso de Yolanda Díaz a Casado por la ley de vivienda: "No gobernará  nunca" | El HuffPost Política

La puesta en largo del proyecto de Díaz no llega precedida de las mejores noticias. Los problemas judiciales por un caso de presunto encubrimiento de abusos a menores han forzado a dimitir a la vicepresidenta valenciana Mónica Oltra, llamada a ser una de sus principales aliadas territoriales. Y luego, el batacazo de Andalucía. Díaz quiso subrayar desde el principio que ese no era el proyecto que ella concibe, pero se implicó mucho más en la campaña que en Castilla y León porque presentaba una novedad, la incorporación de Más País, por la que ella había combatido.  

 

Tras el revés andaluz, los partidos de Unidas Podemos, deseosos en su mayoría de que Díaz se ponga cuanto antes el traje de líder para revertir la tendencia descendente, han cerrado filas con ella. Lo hicieron muy rápido Izquierda Unida y los comunes -desde hace tiempo entregados a su estrategia-, que trataron de desvincular los resultados de la coalición Por Andalucía (un escuálido 7,68%, en una comunidad donde ese espacio político rondó muchas veces el 20%) del futuro proyecto de Díaz. “Es más necesario que nunca”, aseveró la 

 

portavoz federal de IU, Sira Rego, la mañana siguiente a los comicios. “Hay que abrir un nuevo tiempo que mire al futuro y para nosotros la próxima parada es el día 8 [la presentación de Díaz] Tienen que dejarse atrás las dinámicas del pasado”, ratificó el presidente del grupo parlamentario de UP, el catalán Jaume Asens, en alusión a los conflictos internos. El apoyo total de IU lo reiteró este sábado su coordinador general y ministro de Consumo, Alberto Garzón, quien señaló ante los miembros de su formación que el proyecto de Díaz, "representa muy bien el anhelo de las diferentes izquierdas por converger" y se mostró de acuerdo que "en este proceso el protagonismo no debe ser de los partidos políticos preestablecidos".

A la mejora de la relaciones con Podemos contribuyó que, al día siguiente de las elecciones andaluzas, la vicepresidenta se desmarcase del PSOE al hacer pública en redes sociales la propuesta de su grupo para incluir un impuesto a las energéticas y un cheque a familias en el decreto de medidas contra la crisis. La estrategia, más propia de Podemos que de Díaz, gustó al partido de Ione Belarra, a la vez que desataba las alarmas en La Moncloa. Fuentes de la formación afirman que la coordinación en las conversaciones de esos días para presionar por sus demandas ante el PSOE y la postura común frente a la cumbre de la OTAN -de rechazo, pero con un perfil bajo- han sido claves para mejorar la sintonía entre las ministras de Podemos y la vicepresidenta. Por primera vez en meses, Díaz acudió el lunes pasado, con motivo de la celebración del Orgullo, a un acto del Ministerio de Igualdad en compañía de Irene Montero, su titular, y de Belarra. 

Fuentes de Podemos repiten que esperan el “mayor éxito” del proceso que inicia el viernes la vicepresidenta. En el partido fundado por Iglesias les gustaría que Díaz anunciase claramente su candidatura a las generales, algo que, de momento, no figura entre los planes de esta, según fuentes de su entorno. La obsesión de los de Belarra es ahora mismo el PSOE, tratar de convencerlo de que sin un giro hacia políticas de izquierdas no va a ser posible, opinan ellos, reeditar el Gobierno de coalición. Y por ahí se ha restablecido la paz con Díaz, después de meses en que las dos almas de UP en el Ejecutivo parecían actuar por libre.  En este tiempo se han acumulado muchas heridas -ataques poco disimulados de Pablo Iglesias a Díaz, por ejemplo- y restañarlas no resultará nada fácil.

   TITULO:  Donde comen dos - El hormiguero Lunes -18 - Jueves -21- Julio ,.

El hormiguero Lunes -18 - Jueves -21- Julio ,.

 

El lunes  al jueves a las 21:45 horas, en Antena 3, fotos.

 

Lunes -18- Julio,.

 Carlos Mármol, en Sevilla, junto a uno de los artistas 'punk' del Sur: 'El Pali'.

Carlos Mármol, en Sevilla, junto a uno de los artistas 'punk' del Sur: 'El Pali'.

Carlos Mármol: "Nada hay más universal que la experiencia de la vulgaridad, que a todos nos iguala",.

 Carlos Mármol. Sevilla, 1971. El escritor y periodista acaba de publicar 'Charles Bukowski. Un disparo en la oscuridad' (Athenaica), un ensayo literario plagado de titulares sobre el último gran salvaje de las letras norteamericanas.

¿Es posible definir a Bukowski en un titular? 
Por supuesto: "Cuando escribo soy el rey de mi mierda. ¿Está claro, nena?". También valdría un verso del Rubén Darío más crepuscular: "Ser sincero es ser potente". Añadiría una tercera opción: "Un hombre es su estilo y su forma de decir la verdad".
"Escribe igual que una ametralladora", dice del escritor en su libro.
La escritura es la forma más pacífica que existe de librar una guerra. ¡Incluso de ganarla! La existencia es una batalla contra los demás. Escribir, al menos en mi caso, me ha ayudado a defenderme. Sirve para poner orden en el caos, te ayuda a salvar tu cuello y, si hay suerte, se lo salva también a alguien más. Además, carece de efectos secundarios, salvo el goce de empezar al siguiente párrafo, encontrar la palabra exacta, comenzar el próximo capítulo. Escribir es como escuchar buena música o subir en una montaña rusa.
¿Y por qué lo de "un disparo en la oscuridad"? 
Porque todos creamos a ciegas. Bukowski, al reflexionar sobre la creación, dice que querer escribir no es suficiente para crear algo bueno. Hacen falta dedicación y voluntad, pero es necesario el talento. Sin talento, la escritura no funciona. Me parece una idea luminosa en un mundo donde la gente cree que contar sus frustraciones ya es suficiente para hacer arte. Todos estamos rodeados de mierda a nuestro alrededor, pero sólo los creadores logran convertirla en la emoción de un poema, una canción o una película. Los diletantes no crean arte. El arte lo crean los artistas.
Para muchos, Bukowski es un escritor depravado, obsesionado con el alcohol y el sexo. 
Bueno, no creo que esta definición sea un problema, ¿verdad? Esta imagen responde a la máscara literaria que Bukowski creó con sus experiencias biográficas. De ellas nace el alter-ego de su literatura, sobre todo en las novelas y en los relatos. En realidad, y esta es una de las ideas centrales del libro, Bukowski está mucho más cerca de los autores clásicos de lo que pensamos. Beber y practicar sexo son temas bastante tradicionales. Nada hay más universal que la experiencia de la vulgaridad, que a todos nos iguala.
¿Es un antihéroe? 
Lo es en la medida en que su épica incluye la certeza del fracaso y, pese a esto, el protagonista de su literatura libra su batalla. Sabe de antemano que no va a llegar a nada en la vida, pero no deja de pelear para convertirse en aquel que quiere ser. Es una actitud admirable. Especialmente en un mundo en el que tanta gente oculta su verdadera identidad.
Él sí "se mató de hambre" por su arte. 
Sus años inverificables, la década en la que recorrió Estados Unidos sobreviviendo con trabajos basura y durmiendo en pensiones, borracho la mayor parte del tiempo, están llenos de momentos en los que no tenía con qué alimentarse. Para conseguir dinero tenía que dejar de escribir y relacionarse con la sociedad. En general, prefería quedarse solo en su cuarto, escribiendo aunque no tuviera muchas opciones de publicar. Sin dinero. Allí era él mismo. Cualquier otro hubiera desistido. Él persistió y escribió sobre esta elección. Dicho con sus palabras: "El coraje del individuo encarando la extinción sin la ayuda de la sociedad, Dios, bandera, amigo o familia. Éste es el mundo oculto del que nunca leíste nada en el periódico".
Bukowski dejó su trabajo de cartero para escribir. ¿Cómo fue? 
Gracias a una propuesta (demencial) de John Martin, el editor de Black Sparrow Press, que entonces se dedicaba a vender material de oficina. Martin quería montar una editorial para publicar la poesía de Bukowski, que entonces tenía 50 años y trabajaba en la oficina de Correos de Los Ángeles, clasificando cartas. Le ofreció pagarle 100 dólares mensuales como manutención vitalicia tanto si escribía como si no. Bukowski hizo sus cuentas y aceptó. Renunció al trabajo y poco después entregó a Martin su primera novela: 'Post Office'. ¿Cómo la has escrito tan pronto?, le preguntó Martin. "Por pánico", contestó Bukowski.
Colaboró con decenas de publicaciones, algunas de escaso prestigio.
Le llamaban 'The King of Underground Magazines' [El Rey de las Revistas Underground]. A lo largo de su carrera publicó poemas y narraciones en 1.414 cabeceras distintas. Fue su manera de intentar convertirse en escritor profesional. Muchas no aceptaban sus escritos. Las cartas de rechazo -su primer relato va sobre esta cuestión- eran constantes, pero insistió sin descanso hasta lograr que algún editor reparase en su trabajo. Aunque su primer éxito como escritor, las columnas de 'Notes of a Dirty Old Man', no se publicaron en revistas literarias, sino en 'Open City', un periódico contracultural de Los Ángeles en los años sesenta.
Las revistas eróticas le pagaban por cada relato de "mete-saca" 60 dólares. Ahora, los periódicos no pagan mucho más por un artículo.
Bueno, supongo que eso significa que los escritores de periódicos estamos al mismo nivel de precariedad que los pornógrafos. Si nos atenemos a las tarifas que pagan los periódicos, no cabe ninguna duda. Bukowski cobraba por cada columna en 'Open City' diez dólares de 1967. Al cambio actual serían 80 euros. Algunos periódicos españoles de tirada nacional pagan en 2022 menos dinero que un diario 'underground' norteamericano hace 50 años. Las grandes empresas periodísticas hablan constantemente de la importancia del periodismo, pero no lo pagan como debieran. Ni lo hacían antes ni lo hacen ahora.
Fue un pionero de la cultura de la cancelación. Ahí están las feministas quemando sus libros. 
Bukowski escribe su verdad. Si dejara de hacerlo, no sería él. Las feministas lo acusaron de misógino y machista, colectivos homosexuales lo consideraban homófobo y organizaciones afroamericanas lo tildaron de racista. Muchos querían prohibir sus libros porque en ellos no da una imagen idílica de estos colectivos. ¿Acaso estaba obligado a hacerlo? Le llamaron hasta sádico. Es el delirio habitual de los fanáticos que creen que la literatura debe dedicarse a exaltarlos a ellos en vez de contar la realidad desde el prisma personal de un escritor. Una patología social que, por desgracia, ha ido a más.
Ahora vivimos momentos en los que no deja de crecer la lista de 'ofendiditos' e impera lo políticamente correcto. Nada de esto va con Bukowski. 
Un escritor, igual que un periodista, no escribe para agradar a la gente. Escribe para contar la vida. Bukowski decía que si en sus libros había negros, homosexuales y mujeres malas es porque los que él conoció eran así. Y añadió: "Los únicos malos que no se quejan cuando escribes sobre ellos son los blancos". Como escritor describe lo que ve. Si hiciera otra cosa, mentiría como artista. "La censura" -decía- "es la herramienta de gente pequeña y amargada que necesita alejar la realidad de sí mismos y de los demás. Lo único que temen es su incapacidad para enfrentarse a lo real. En algún lugar, mientras crecían, les enseñaron a mirar sólo hacia un lado, cuando hay muchos otros".
Es uno de los escritores más influyentes, pero parte de la crítica lo desprecia. ¿Por qué? 
Bukowski criticaba la literatura institucional y renegaba de los mandarines culturales. La Academia acostumbra a llegar tarde a los grandes fenómenos literarios. Piensa que hasta que no los valida no existen. La única valoración que cuenta es la de los lectores. Y hoy, en las secciones de poesía de las librerías, quien está es Bukowski. Sus libros siguen vivos. Dicho lo cual, existen interesantes aportaciones académicas sobre su obra, como las de Rusell Harrison, David Stephen Calonne o el traductor español Abel Debritto.
Es más conocido por su prosa y sus relatos, pero usted ha profundizado en el poeta secreto. 
Bukowski es básicamente un poeta. Las novelas y los relatos le permitieron hacerse célebre, pero el grueso de su obra está consagrada a una forma de poesía prosaica, minimalista, capaz de crear emoción con los mínimos elementos posibles. Es una poesía perdurable. Una poesía que no suena a poesía y que, justo por esto, recupera el espíritu original de lo poético.
El autor dijo "la familia es un infierno; el trabajo es una condena; el amor, un accidente absurdo, y la política, una estafa".  
Bukowski tiene lo que Nietzsche llamó übermensch: la capacidad de distanciarse de la moral del rebaño y alejarse de la comodidad del resentimiento. Quien no soporta la realidad, practica el optimismo, esa forma de autoengaño. No es el caso de Bukowski: miraba el mundo de frente y lo describía tal cual lo sentía. Ya sabemos que la sinceridad no es el mejor método para hacer amigos. Pero ¿quién diablos necesita amigos?
Era un amante de la música clásica. Usted ha escrito su libro siguiendo el esquema de una sinfonía.
La propuesta de la editorial era hacer un breviario de 120 páginas, con notas. Un formato que Bukowski utilizó para sus primeros libros de poesía. Me pareció interesante que el libro, que es un ensayo literario, no una biografía, fuera una pequeña pieza de cámara, con cuatro movimientos, una obertura y un grand finale. Escribir es componer una partitura.
Bukowski exige autenticidad al arte. 
Es que en un mundo lleno de mentiras la única actitud digna que puede tener un escritor es ser sincero.
¿Qué pensaría el escritor al ver que la casa en la que se crió en Los Ángeles es ahora una especie de museo-hotel en la que se puede pasar la noche? 
Supongo que le revolvería el estómago. En esa casa -"the house of horrors", la llamaba él- fue maltratado por su padre. Que hoy sea un hotel customizado muestra la inmensa frivolidad con la que la sociedad trata algunas tragedias y sacraliza otras, dependiendo del interés.
Si Bukowski, de repente, resucitara en España, ¿qué pensaría de nuestros políticos?
Que son payasos a los que les hemos otorgado capacidad para decidir sobre nuestras vidas. "La gente que cree en la política" -escribe en un poema- "es como la gente que cree en Dios: sorbe aire con pajitas torcidas".
Bukowski solo escribe un poema: la vida es una mierda. 
Exacto. Pero lo hace más poderosamente que nadie. Y escribió algo aún más exacto: "Un intelectual es el que dice una cosa simple de un modo complicado. Un artista es el que dice una cosa complicada de un modo simple". Eso es el talento.
Si lo tuviera delante, ¿qué le preguntaría? 
¿Tienes fuego, Hank?
La imagen que le acompaña en la fotografía que ilustra esta entrevista no es la de Bukowski... 
Jajaja. No. Es un juego que sólo entenderán mis queridos indígenas (sevillanos). Representa a uno de los artistas punk del Sur: Francisco de Asís Palacios, El Pali, el último trovador de Sevilla. Autor de un verso colosal: "Menos misiles y más Pavías de bacalao". 
Martes -19- Julio,.
Jordi Mollà, con sus toros Osborne.
Jordi Mollà, con sus toros Osborne.

Jordi Mollà: "Rodé una película que era un mojón porque la amenaza contra mí era muy heavy",.

 El artista expone en la galería madrileña Gärna 65 siluetas del Toro de Osborne realizadas en chapa. El actor confiesa que ya gana más dinero con la pintura que con la interpretación.

 

¿Por qué haces este homenaje al toro Osborne?
Se dieron una serie de coincidencias. Era el 75 aniversario de Osborne y el 35 aniversario de 'Jamón, jamón'. Vino como anillo al dedo.
¿Cómo es pintar en una bodega?
Fue en el mes de abril en una bodega inmensa en un entorno natural muy andaluz. Todo eso me ayudó muchísimo. Si los hubiera pintado en Noruega, no habrían salido tan bien.
¿Qué sientes mientras estás pintando?
Todo y nada.
Reivindicas el toro, que ahora está muy cuestionado como símbolo de la fiesta nacional.
Ni lo reivindico ni dejo de reivindicarlo. Un toro para mí es un toro. Es difícil escapar de la imagen de un toro en una plaza, pero en mi cabeza veo toros en plazas y en cautiverio.
¿Qué representa para ti la tauromaquia?
No sé porque no entiendo del asunto. Representa a una España.
Precisamente hay otra España, que reniega de esos símbolos tradicionales españoles.
Mira, yo soy del lema vive y deja vivir.
¿Qué te enseñó Bigas Luna?
Mucho.
Fue el quien te metió el veneno de la pintura.
Sí. Yo veía que Bigas tenía mejor cara y ánimo cuando acababa de pintar. Estaba más tranquilo y luminoso. Entonces yo pensé que lo de pintar tenía que ser bueno. Él pintaba cuartillas en tinta china. Al terminar el rodaje, era una especie de meditación la que él hacía al pintar en tinta china hasta que se quedaba dormido. Hacía unas cosas maravillosas.
¿Te resultó difícil introducirte en el mundo del arte?
No. Yo empecé a pintar con 20 años y mi idea no era enseñarlo. Hasta que llegó una galerista maravillosa de Madrid que se llama Carmen de la Guerra y me dijo que quería ver mis obras. Yo le contesté que no, pero ella insistió mucho. Al final, se metió en mi casa, le enseñé lo que tenía y le encantó.
¿Y qué sucedió?
Me dijo que al día siguiente vendrían dos tipos a llevárselo todo. Y yo le contesté que no quería que saliese nada ni hacer una exposición. Pero llegaron los dos tipos, les dije que no, pero, al final, insistieron y se llevaron los cuadros. Yo les vi bajar por las escaleras y pensé: "Pero, ¿dónde irán estos desgraciados?". Pues, al final, funcionó.
Ahora, ¿vives de la pintura?
Y bien.
¿Ganas más con la pintura que con el cine?
Ahora mismo, sí.
¿No hay mucho impostor en el mundo del arte?
Cada artista tiene el derecho de expresarse como quiera. Para mí, el arte es comunicación. Hago algo para comunicar el mensaje y procuro no tener que añadir ni una palabra para expresar mi obra. El cuadro se tiene que entender de por sí.
¿Y si no se entiende?
Hay mucho artista conceptual del que el público a veces piensa: "Lo entenderá él porque yo no". Igual es que el artista no quiere hacerse entender absolutamente, sino sugerir algo.
¿Y los galeristas?
Digamos que son más comerciantes. Y, a veces son demasiado creativos porque no son sólo galeristas sino curadores. Yo soy una persona que protejo mucho lo que pinto y dónde quiero que esté.
¿Te sugieren lo que tienes que hacer o pintar?
Sí, pero tampoco trabajo yo con muchas galerías. Precisamente porque quiero tener una libertad total.
¿Eres un actor que pinta o un pintor que actúa?
[Largo silencio] Un actor que pinta.
¿Te sientes valorado y respetado como pintor? En España, es muy difícil que te tomen en serio en dos facetas.
Yo creo que ha costado, pero ya se ha entendido. Yo soy un tipo que hace varias cosas al mismo tiempo.
Pero cuesta, ¿no?
Sí, pero por el camino me entretengo. Se ha entendido que Jordi es actor, pintor, escritor, director, fotógrafo y también soy editor. Ya voy por el segundo libro editado por mí. La editorial se llama Plan F.
¿Qué libros has editado?
Un libro para coleccionistas, de esos que pesan. Tiene dos tomos: uno que recoge cómo fue mi pandemia y el otro, toda la obra que produje en ese año.
Un actor tiene que mostrar las vísceras, ¿cómo lo haces?
La cámara es una confesión. Nadie mejor que la cámara sabe lo que tú quieres decirle. Ni el director ni el director de fotografía ni el actor que tienes delante. La cámara es un ojo que si tú eres un buen intérprete y te abres, ella mira todo lo que tú tienes en las vísceras.
¿Cuál es la orden que te cuesta más acatar como actor?
Muchísimas.
¿La que más te molesta?
Me molestan muchas. Ése es el problema. "Ponte en la marca". ¿Por qué? Lo entiendo todo, pero ¿quién eres tú para decirme a mí que me ponga en la marca? Tampoco me gustan nada los retoques de maquillaje y de peluquería con todo mi respeto a los departamentos.
Son momentos que no te apetecen.
Tanto tocar, tanto tocar. Me llevan tocando la cara y el pelo 35 años. Al principio, está chulo porque eres el centro de un rodaje y todos te tocan, te visten y te arreglan. Pero pasado un tiempo piensas: "¡No me toquéis más!".
¿Qué es lo que más te enfada de los castings?
Yo sigo haciendo castings y últimamente se ha puesto muy de moda que te mandan la separata con una descripción del personaje y luego hay una cosa larguísima que es como te tienes que grabar.
¿Te grabas tú mismo?
Sí, yo lo hago mucho. Te dicen que tiene que ser así, con una luz de no sé cuántos, mirando a cámara... Mira, no. ¿P' a qué? Demasiado plano.
¿Has sufrido a directores tiranos?
Sí, claro. Un director tiene que ser duro como una piedra y sensible como una rosa. Es un capitán de barco que tiene a 100 tíos más a su cargo. Las películas son una gran amalgama de personas juntas que tienen que estar muy bien organizadas y sincronizadas.
¿Qué es lo que hay que tener para poner una pica en Hollywood?
¡Ay Dios Santo! ¡Qué pregunta! Fe.
¿En qué proyectos andas ahora?
Tengo algunos, pero no son grandes cosas. Me ofrecen grandes cosas, pero no sé si quiero hacerlas.
¿Por qué?
No me apetece ahora hacer grandes cosas en el cine porque también traen grandes problemas.
¿Cómo cuales?
Sacrificio y esclavitud.
Nunca has querido estar de moda. Cuando empezabas a pegar mucho, has dado pasos hacia atrás.
Mi madre me decía: "Hijo mío, el tren sólo pasa una vez". Y eso no es verdad. ¿Para qué han hecho una vía de tren? ¿Para que pase sólo una vez? No me lo creo. Igual no coges ese tren y tienes que esperar a que pase el próximo. Y ese tren igual no te lleva directo a Madrid sino que tienes que hacer transbordo y te para en Cuenca. Pero si quieres llegar a Madrid lo haces, aunque sea haciendo autostop. Oportunidades siempre hay. Quien crea que la vida son sólo tres oportunidades, ¡qué vida más miserable!
Es verdad que siempre se dice que ese tren no va a volver a pasar y hay que cogerlo.
Pero si no estás preparado para coger ese tren, cuidado. Puede que en mitad de la nada alguien te dé una patada y te tire en el desierto sin agua, sin bebida y sin nada. Entonces, ¿a quién acudes?
¿Has cogido el tren cuando no estabas preparado?
Absolutamente, sí. En la primera película que me ofrecieron antes de Jamón, jamón, que era francesa con Josep María Flotats, me fui. No estaba preparado.
¿En plena película?
Un día antes de empezar a rodar. Fue un aprendizaje heavy para conocer tus propios límites. Cuando hice Blow, casi casi que me piro para atrás.
Pero la rodaste y luego fue un éxito.
Sí, al final, la hice.
¿Cuál es el palo que te has llevado del que más has aprendido profesionalmente?
El palo es que me obliguen hacer algo que no quiero hacer. Cedí una vez porque la amenaza contra mi persona era muy heavy.
¿Te amenazaron porque ya habías firmado un contrato?
No, no había firmado. Pero alguna mosquita muerta me dijo que si me tiraba para atrás Disney me iba a llevar a juicio. ¡Disney!
¡Qué fuerte!, ¿no?
Obviamente no era verdad. Pero fue como hacer una película con una pistola en la cabeza apuntándome.
O sea que rodaste la película...
Con una pistola en la cabeza.
¿Se puede decir cuál era?
El Álamo. Entonces, este mojón yo no me lo vuelvo a comer.
No la he visto.
Yo tampoco.
¿Cuál es el personaje que más te ha impresionado en las distancias cortas?
Prince.
Es mi ídolo desde los 15 años. ¿Le conociste?
Era un iluminado.
¿No era muy reservado y difícil de conocer?
Hablaba muy poco, pero escuchaba mucho. Un hombre brillante en muchas cosas. Era un visionario de la industria de la música y un gran hombre de negocios y defensor de su marca. Un gran outsider al decirle a Warner Brothers: "Me habéis pagado 100 millones de dólares, pero yo no sabía lo que había detrás. Una cadena gigantesca contra un artista negro". También Johnny Depp y Stephen Hawking.
¿Conociste a Stephen Hawking?
Muy brevemente. Le abrí la puerta. También Bigas y el Papa Francisco.
¿Qué opinas de todo lo que ha vivido tu amigo Johnny Depp?
Johnny Depp debería retirarse del cine. No tiene ningún sentido que haga otra película. Y esto yo ya se lo dije a él hace 22 años.
¿Se debería haber retirado hace tantos años?
Yo le pregunté: "¿Por qué haces tantas películas, Johnny? No paras tío". "Es que tengo que pagar las cuentas". "Pero, ¿qué cuentas tienes tío? Aquí hay algo que no funciona".
¿No debería haber hecho la saga de 'Piratas del Caribe'?
Sí. No hay actor más rentable del planeta Tierra y seguramente el más solicitado. Pero cuanto más te quieren, menos tienes que dar. Espérate, desaparece durante un buen tiempo y dedícate a pintar. Él pinta maravillosamente.
¿También pinta?
Tengo uno de sus cuadros en Madrid. Yo le he propuesto hacer una exposición juntos: Johnny and Jordi.
Pero su imagen ha quedado muy tocada tras el juicio contra su ex Amber Heard.
¿Tú crees que ha quedado tocado?
Se han dicho cosas terribles y muchas intimidades.
Es que no he visto nada. Olvídate de cualquier serie de Netflix porque ese juicio ha sido el mejor tv show. Ha sido el negocio más rentable a nivel mediático que ha habido hace mucho tiempo.
Has contado que no te gusta que lleven tu coche, que manejen tu carrera. ¿Has tenido que luchar contra ello?
Y lucho continuamente. En eso me parezco mucho a Prince Roger Nelson.
¿Todos tenemos nuestro lado oscuro y nuestro armario?
Sí, claro. ¡Menos mal! La autoestima es dialogar con tus cuartos oscuros y tener compasión por ellos. Ése es un buen titular.

 Miercoles -20- Julio,.

 Xavier Font (Sant Boi de Llobregat, 1963), creador de Locomía.

 Xavier Font (Sant Boi de Llobregat, 1963), creador de Locomía.

Xavier Font: "Locomía era el grupo con menos drogas que te puedas echar a la cara",.

 Sant Boi de Llobregat, 1963. Xavier Font, creador de Locomía acaba de presentar la nueva encarnación de su proyecto en el festival Mad Cool y disfruta del éxito del documental sobre la tribu de los abanicos en Movistar +.

¿Era usted consciente de lo que terminaría siendo Locomía cuando montó el proyecto?
Cuando te haces un plan, rollo marketing, ya tienes un objetivo y ya no es orgánico ni natural. Yo nunca tuve un plan, por eso creo que cuando funciona, funciona a ese nivel que es más mágico. Yo no era consciente de nada, simplemente me dejaba guiar por mi instinto, que casi nunca me falla. En el documental digo: Era puta, sí, de corazón. Todo lo de mi vida ha sido siempre así, orgánico, sin un plan, sin saber y sin esperar nada. Y cuando pasan las cosas las disfrutas más y dices: bueno, algo he hecho bien.
¿Qué circunstancias favorecieron que ocurriese?
Fui muy transgresor y me adelanté a mi tiempo, pero tuve una ventaja: que en mi casa nunca salí del armario, pero porque nunca estuve dentro. Aceptaron mi condición sexual y que yo me dedicara a lo que estaba dedicándome. Nunca he tenido un complejo ni un trauma. Yo salía de mi casa vestido a mi manera, que yo estaba creando sin darme cuenta, me iba al 54 o al Distrito Distinto y para mí todo era natural. Y lo llevaba con una dignidad tremenda. Que sí, que era atrevimiento, porque tenía amigos de mi época, que de su casa no podían salir como yo iba y se tenían que cambiar en el tren desde Gavá. Si es que todavía vivía Franco y yo ya llevaba crestas y siete pendientes.
En el documental de Movistar + usted no tiene reparos en enseñar sus facetas más oscuras.
Me he arriesgado mucho con el documental, al mostrarme como soy, porque soy perfectamente imperfecto. Y soy visceral y soy natural. Pero puede que lo que cuento, y cómo yo lo cuento, llegue a los 'millennials', que es mi público potencial. Porque en el fondo tengo un niño que no dejo que mate el adulto. El cabrón culpable de mi carácter es el niñato que tengo dentro de mí, que todavía soy. Y tengo que decir la verdad. Y cuando dices la verdad, a la gente le llega. Por ejemplo, estoy casado desde hace cinco años, mi pareja tiene 24 y yo voy a hacer 59 en agosto. Ya tengo una edad, pero hay algo dentro de mí que no crece.
Ha pasado por el festival Mad Cool, dentro de Disco Vibra Mahou, el punto de encuentro que creó Mahou en el festival con conciertos y sets de DJs sorpresa, como Chimo Bayo u OBK. ¿Por qué considera que puede conectar con un público joven como el que acude a estas citas?
Lo que yo les quiero dar es la libertad de expresarse, de poder desarrollarse y tener un referente que yo no tuve, por mucho que estuviesen ya Pet Shop Boys, Boy George o Spandau Ballet. Lo mío es algo atemporal: Una estética sacada del pasado, puesta en los 80 y recreada en 2022. Yo ahora estoy cambiando un poco el rollo para presentarnos en el Festival de Benidorm con música electrónica, una cosa chula, evolucionada, que es lo que tenía que haber tenido Locomía en el momento que yo deje la agrupación y que me distorsionaron todos los colores.
¿Por qué dice lo de la distorsión?
Independientemente de que no eran las canciones que yo hubiese hecho, yo nunca he defendido una canción que tengo que hacer en playback. Y una de las razones por la que dejé el grupo era que ya llevaba muchos años con el abanico y que obviamente llevaba un año haciendo el playback de otro señor que no me dio ni una 'chance'. Como dijo el Capi [Miguel Ángel Arenas], si Locomía estuviera ahora tendría más Grammys que los grandes.
Hace un momento dijo que se adelantó a su tiempo.
Locomía pasó cuando tenía que pasar. El mundo estaba cambiando y nosotros cambiamos con el mundo. Y sobre todo en aquella España gris, que era de cojones. Hoy no sé si sería posible, porque está todo inventado y trillado.
¿Echa de menos la Ibiza en la que nació Locomía?
Ibiza ya no es lo que era, ni mucho menos. Es una historia comercial masificada. Antes ibas a bailar y estaba la McNamara, que mi hermano la tiraba a la piscina vestida. Y la Grace Jones. Y Roman Polanski, día sí, día no.O veías al rey de España, o a Julio Iglesias en el privado. Ahora la 'jet set' se hacen sus mega fiestones privados en sus mansiones y ya no se mezclan. Pero Ibiza es hoy lo que es gracias toda la fauna variopinta que hemos pasado por ahí a través de todos estos años. En la Inquisición desterraban a las brujas a Ibiza: pues nosotros venimos de ahí.
Ustedes contribuyeron a convertirla en el corazón del universo.
Siempre está el rollo de España, que nadie es profeta en su tierra, y está la mofa típica de que "pierdes más aceite que la furgoneta de Locomía". Y en vez de pensar que somos un un colectivo que hizo cosas por muchos y sobre todo por aquella España gris. Locomía es más que un grupito musical, es una cosa que la gente tal vez no entiende pero consume. Y ahora con el documental, imagínate tú: En el momento en que hablamos es la serie de no ficción más vista de Movistar +.
Usted lamenta, con vehemencia, que en España no se valore lo suficiente lo que ustedes hicieron.
Soy visceral, espontáneo, natural y, tío, no tengo filtro. Es que no me puedo poner una máscara porque no me la ponía ni a los 20 ni a los 30 ni ahora a los 58. Yo soy como soy. Si me aceptas, de puta madre. Si no, no pasa nada. No me considero más bueno, pero tengo buen fondo y ese rollo me salva, no. Y mi gente, mi tribu, lo sabe. Por eso tengo amistad con todos mis ex. Todos hablan de hace 36 años como si fuera ayer. Manolo, por ejemplo, dice: "Yo no cobraba, pero llevaba Chanel". Pero a lo que iba: en España somos así, no defendemos lo nuestro. De hecho, yo me tengo que ir a Latinoamérica y a día de hoy todavía te respetan, te idolatran, te quieren. Y yo he recibido afecto y afecto toda mi vida desde el otro lado.
¿Cómo valora, ahora, el escándalo por su detención hace más de una década, acusado de tráfico de drogas?
En 2009 me lapidaron públicamente: Fui a televisión y me pagaron 1.000 € por minuto, media hora de lapidación. Pero el objetivo no era pillar 30.000 €. Mi plan era defender mi tribu y mi marca de que si yo había vendido poppers, que lo había hecho, y que me estaban condenando en su momento -un juez lo diría en 2011- era mi responsabilidad. Que yo soy Xavier Font y García, que ostenta el cargo de ser el representante de un grupo que es Locomía. Pero no lo llamen Operación Abanico porque yo no soy un abanico: Yo soy una persona que ha hecho algo que parece que tiene que ser ilegal y que ya pagará en su momento. Así que Locomía es otra historia. Son cuatro señores que tienen sus familias. En el programa de la Patiño me dijeron que me iban a tratar bien y que eran fans.
Pero no.
No. A esta hija de puta le fue muy fácil condenarme cuando lo que hubo fue siete tíos pinchándome el teléfono durante 15 días, pero ninguna conversación de: "Te vendo una pastilla". Lo único que sacaron fue cuatro gramos de éxtasis de mi caja fuerte. Fue una encerrona de mucho cuidado. En este país estamos acostumbrados que el artista cuando tiene un buen momento se habla de la gloria de tal, pero cuando tiene un mal momento lo que hacen es pisotearle y joderle. Si mato a alguien está claro que me tienen que condenar. Pero cuando hay mariconadas a ese nivel, no es de recibo que tengas que mamarse una condena de tres años, que yo la resolví en un primer grado inicial porque o me quedaba de rebelde en el patio o me ponía a hacer el papel de chico bueno. Y opté por éste. Y salí antes que la Pantoja. Además, después de montar una obra de teatro en fin de año que se quedó el director de la prisión flipando.
¿Diría que todavía hay doble moral con las drogas?
Lo que más me jode es que Locomía era el grupo de menos drogas que te puedas echar a la cara. Yo, con 58, no he probado alcohol en mi vida, no he fumado un porro en mi vida ni sé fumar. Soy el más anti drogas que te puedas tirar a la cara, aunque mi aspecto y mis tatuajes digan otra cosa: pero la imagen de una persona no hace a la persona. Y me indigna porque sí: yo vendía poppers, ya se lo dije al juez, se lo dije a la Guardia Civil y a la procuradora homofóbica que me acusó. Yo vendía poppers a mis amigos porque es la única sustancia que no considero estupefaciente y que es un fármaco. ¿Sabes cuántas páginas hay ahora que están haciendo el negocio que yo me inventé? Mil. 
 
Jueves -21- Julio
 
Rosa Jové.

Rosa Jové: "Hay padres obsesionados por empastillar a los niños",.

 Lleida, 1961.Psicóloga especializada en el tratamiento de niños y adolescentes. Su nuevo libro, 'La crianza sostenible' (La Esfera de los Libros), propone eso mismo, una paternidad eco... incluidos los pañales lavables.

 Rosa Jové.

Yo recuerdo los meses antes de nacer mi hija como la época más consumista de mi vida. Todo era ver catálogos de coches, carritos, muebles...
Yo era mayor cuando nació mi hermano pequeño. Como era el cuarto, lo tenía todo, y lo que no tenía, venía heredado de las vecinas. Ahora, si no tenemos la cuna, la trona, el móvil, el carrito, el coche, o mejor, dos coches, la sillita, el cuco... Bueno, bueno, estás perdido si no lo tienes todo. Es terrible.
¿Y tiene una teoría de por qué?
Hay dos que se entremezclan. La primera es que los padres se sienten inseguros. Cuando yo fui madre me acordaba de la crianza de mi hermano y de la de los hijos de las vecinas... No lo sabía todo, ni mucho menos, pero había una transmisión del conocimiento que se ha roto. Como no sabemos nada de bebés, nos da una inseguridad que compensamos comprando cosas. Nos dicen que tal juguete desarrolla la cognitividad y picamos. Luego no sirve para nada. Falta que los padres se empoderen y se den cuenta de que los niños los necesitan a ellos y poca cosa más
¿Y la otra teoría?
Es obvio: la industria de la puericultura y la farmacia lanzan cada día el mensaje de cómprame, cómprame, cómprame.
Le dirán que antes los hijos se morían, que la mortandad infantil es baja hoy.
Sí, pero eso tiene que ver con la ciencia, no con la acumulación de cacharros. A mi abuela se le murió un hijo, Pauet, de una infección pulmonar. Al cabo de un año, apareció la penicilina. Pauet no hubiera muerto. No por la cunita ni por los pañales, por la penicilina.
También recuerdo del embarazo de que había gente que le explicaba a la madre lo que era una maternidad virtuosa y que era una presión poco invasiva. Su discurso, en el fondo, era «dale teta cuatro años y, si tienes que dejar de trabajar por eso, deja de trabajar»
Entiendo que muchas madre se sientan mal, que se abrumen. Yo también trabajaba mucho cuando fui madre... Pero esos consejos estaban bien enfocados. Si me preguntan cómo es una buena crianza, le diré que dé teta todo lo que pueda. Lo que pasa es que hay que adaptar esos ideales a la realidad. La gente trabaja, tiene turnos de noche y hace la crianza que puede, no la que quiere. Lo que hay explicar es: esta situación es la deseable; ahora vamos a ver qué podemos hacer.
Explíqueme lo de los pañales.
Hice un cálculo para el libro: gastamos 5.400 pañales en el primer año de vida de un bebé que tardan 500 años en biodegradarse. 5.400 pañales y 10.800 toallitas que se quedan por aquí, flotando. ¿Qué hacemos con eso? Vamos con la respuesta fácil: en lugar de comprar pañales desechables, podemos comprarlos orgánicos, con fibras naturales, que se degradan en siete años. Cuestan tres céntimos más.
Eso son ciento algo euros el primer año, ¿algo así?
10 euros más al mes, más o menos. Nadie es pobre por eso. El siguiente nivel es el pañal de tela lavable. Se pone una celulosa en media, un papel biodegradable, y el pañal sólo queda húmedo de pis. Se lava el pañal como se lava una camiseta manchada. No es para tanto, mi madre los lavaba a mano.
¿Y esa teoría de que estamos como locos demandando diagnósticos de TDAH y empastillando a los niños...?
Veo los dos extremos; veo padres a los que les dices que su hijo se autolesiona, se come las uñas, se arranca las cejas, tiene una ansiedad terrible y que un ansiolítico ayudaría a la terapia... Y que se niegan. Y ves a otros que entran en la consulta con la idea de empastillar a los niños, «duérmame al niño, por favor». ¿Hay un poco de abuso? Sí. No muchísimo pero sí algo. A menudo, por la presión de los padres.
Una colega suya me dijo que no da abasto, que hay una demanda de psicólogos imposible de atender
Yo tampoco doy abasto. Con los niños hicimos una animalada en la primera ola del COVID. Estuvieron encerrados tres meses y ahora tienen un estrés postraumático tremendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario