domingo, 2 de noviembre de 2014

DESAYUNO- CENA- DOMINGO- FITO CABRALES CANTANTE,./ EL TREN, ASALTO EN LA CANDELA,./ LA COCINA- DOMINGO, " PANNA COTTA" DE LIMÓN Y FRESAS,.

TÍTULO: DESAYUNO- CENA- DOMINGO- FITO CABRALES CANTANTE,.

" Hay días que, aunque parezca increíble, me siento actractivo,".

Fito Cabrales-foto,.


Fito Cabrales
Fito cabrales.jpg Actuación en Barcelona en 2009.
Datos generales
Nombre real Adolfo Cabrales Mato
Nacimiento 6 de octubre de 1966 (48 años)
Origen Bilbao (Vizcaya), Flag of Spain.svg España
Ocupación Músico, cantante, guitarrista, compositor y escritor
Información artística
Otros nombres Fito
Género(s) Rock and roll
Instrumento(s) Guitarra, banjo, voz
Período de actividad 1989-presente
Discográfica(s) DRO
Artistas relacionados Fito & Fitipaldis Platero y Tú Extrechinato y Tú
Adolfo Cabrales Mato, «Fito» (nacido el 6 de octubre de 1966 (48 años) en Bilbao,1 España), es un músico español. A lo largo de su carrera musical ha sido cantante, guitarrista y compositor del grupo Platero y Tú y actualmente de Fito & Fitipaldis.

Biografía

Adolfo Cabrales, conocido como «Fito», nació en la calle bilbaína de Zabala,2 pasando parte de su infancia y adolescencia en Laredo (Cantabria) y en Málaga.3 En su juventud trabajó de camarero en un prostíbulo del que su padre era jefe,4 en la calle de Las Cortes (más conocida por La Palanca).5 En la versión en directo del tema Un ABC sin letras que aparece en el disco A pelo de Platero y Tú, Fito comenta que «curraba en La Palanca y ahora soplo en Barrenkale (una de las Siete Calles del Casco Viejo bilbaíno)». Estas no son las únicas referencias en la obra de Fito a esta zona de la capital vizcaína: en el disco de Platero y Tú Muy deficiente hay una canción ambientada en el cercano puente de Cantalojas en la que alude a una «chica de las Cortes» (es decir, una prostituta). En esta época comienza también sus problemas con las drogas; aunque en la actualidad asegura «estar limpio»4 durante años abusó del «speed». Varias canciones suyas (por ejemplo Marabao) hablan de esta droga. En Corazón oxidado, de Fito & Fitipaldis, dice «mi pobre corazón, que está enganchado al speed»; sin embargo, en la versión del disco en directo de 2004 Vivo… para contarlo, deja la frase a medias, alejándose del micro.
Fito destaca por su peculiar estilo personal. Suele llevar el pelo totalmente rapado y unas patillas largas. Otras de sus señas de identidad son los cigarrillos sujetos en el clavijero de su guitarra y sus gorras; en los primeros años con Platero y Tú las solía regalar después de los conciertos, pero ya no lo hace.
En la actualidad reside en la localidad vizcaína de Gernika.

Platero y Tú

En 1989 Fito se unió a Iñaki «Uoho» Antón, Juantxu «Mongol» Olano y Jesús «Maguila» García, también originarios del mismo barrio6 para formar el grupo de rock and roll Platero y Tú. Platero y Tú se desmarcaba del entonces tan en boga rock radical vasco para abrazar la tradición rockera más clásica vía Status Quo, Leño, AC/DC, The Rolling Stones o John Fogerty, con letras que hablan de bares, amores, drogas y rock and roll. A lo largo de la década de los 90 los Platero se consolidaron en el panorama del rock en castellano, manteniendo una estrecha relación con otros artistas importantes de dicho género como La Polla Records (Evaristo colabora en el tema Juliette), Rosendo Mercado (quien colabora en Sin solución) y sobre todo con Roberto Iniesta, «Robe», voz y guitarra de Extremoduro, con los que llegan a hacer una gira conjunta en 1996. A lo largo de su trayectoria consiguieron tres discos de oro y un disco de platino en España (hasta el año 2002).7

Fito & Fitipaldis

En 1998 crea de forma paralela a Platero y Tú el grupo Fito & Fitipaldis, para publicar en su primer trabajo, A puerta cerrada, una serie de temas acústicos que no se ajustaban al estilo musical de Platero y Tú. En principio ambos grupos coexistieron sin problemas, pero tras la disolución de Platero y Tú en 2001, Fito se dedicó en exclusiva a su nuevo grupo. Con la publicación de su segundo álbum Los sueños locos y de las posteriores grabaciones, va desarrollando su estilo personal, a la vez que va iniciando un acercamiento al sonido de la última época de Platero y Tú, volviendo a introducir guitarras eléctricas y ritmos más rápidos y directos. Con los Fitipaldis, Fito ha conseguido mayores éxitos de ventas que con Platero y Tú, lo cual le ha valido críticas de los sectores más conservadores del rock de España.
También en 2001, participa junto a Uoho y a Robe en el proyecto de éste último, Extrechinato y Tú, para hacer un disco titulado Poesía Básica con obras del poeta Manolo Chinato. Fito grabó las voces junto a Robe y las guitarras junto a Robe y Uoho. El disco recogía también tres composiciones propias, «Si el cielo esta gris», «Rojitas» y «Abrazado a la tristeza». Estos dos últimos temas han sido grabados también por los propios Fitipaldis, primero «Rojitas las orejas» en A puerta cerrada (tres años antes de que se grabara Poesía básica y con un título distinto) y posteriormente «Abrazado a la tristeza», tema que cierra Por la boca vive el pez.
En verano de 2007 Fito & Fitipaldis llevan a cabo una gira conjunta con Andrés Calamaro por España y Latinoamérica, grabada en DVD con el título «Dos son multitud».
En mayo de 2008 sale a la venta un libro autobiográfico, «Soy todo lo que me pasa».
El martes 15 de septiembre de 2009, se publicó su nuevo disco con el nombre de "Antes de que cuente diez", al que seguirá una gira por todo el territorio español como ya ocurriera con su último disco de estudio
A finales de octubre de 2014 se publicará su nuevo disco "Huyendo conmigo de mí", precedido por el primer sencillo «Entre la espada y la pared»'8 . El 15 de noviembre de 2014 comenzará en Santander la gira de presentación8 .

Discografía

A pesar de las evidentes diferencias de estilo entre el Rock & Roll de Platero y Tú y la mezcla de pop, blues, jazz, country,… de Fito & Fitipaldis, la temática tratada por Fito en sus canciones es siempre la misma: historias personales ambientadas en el mundo de la noche con presencia constante de bares, drogas y amores.

Con Platero y Tú

Con Extrechinato y Tú

Con Fito & Fitipaldis

Colaboraciones

Proyectos musicales

  • Platero y Tú
  • Fito & Fitipaldis
  • Extrechinato y Tú
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  • Su desayuno es el siguiente, un café cortadado y nada más, al levantarme no me cabe otra cosa en el cuerpo y,  despues del café, me voy a correr, que es muy sano,.
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  • La cena, es la siguente, una tortilla de queso, pan, beber agua, postre una naranja,.
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  • TÍTULO: EL TREN, ASALTO EN LA CANDELA,.
  •  foto
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    La Candela parecía una cabaña que acabara de resistir un temporal. Todos sus muebles eran antiguos y crujían, y olía a humedad. Tenía detrás un jardín frondoso con una parrilla para los asados, una mesa para el póker de verano y espacio suficiente para jugar picaditos de cuatro contra cuatro. Estaba en San Rafael, cerca de un hotel de ladrillo que recordaba al de El resplandor y que antaño tuvo un casino que cayó en desuso cuando abrió en la Punta el gigantesco del Conrad, donde a veces en temporada cantaba Julio Iglesias. Veranear en San Rafael tenía el inconveniente de que había que conducir cerca de cuarenta kilómetros hasta la playa de José Ignacio, donde se concentraban el chic y las mujeres despampanantes de Punta del Este, y unos quince hasta las fiestas y los restaurantes de la Barra. Es decir, que ahí estábamos algo desplazados. Pero a los amigos no les importaba porque aprendieron a amar La Candela cuando todos juntos veraneaban allí de niños y seguían amándola, cargada de recuerdos, cuando todos los de la barra golfa dormíamos apilados en sacos de dormir, desayunábamos cerveza y Marlboro mientras alguien barajaba para las primeras manos o retaba con la pelota, y al abrir la puerta del cuarto de baño a menudo nos encontrábamos en la ducha una mujer desnuda que nadie sabía quién había traído. A veces no lo sabía ni el que la había traído.
    Todos los veranos, durante una semana permanecían en La Candela sus propietarios, los padres de C. Procurábamos que durante esos siete días oliera a café y las amigas estuvieran vestidas, y nos contábamos los mismos chistes y las mismas anécdotas que el año anterior durante el asado de Año Nuevo, culminado con cohetería y fiesta en algún club de la playa o en la casa de algún conocido de Buenos Aires que al ver llegar al grupo suplicaba en vano contención. Los veranos de la infancia yo no los pasé en La Candela, pero por los que sí viví allí amo esa cabaña y a la gente con la que estuve dentro, al menos aquella de la que me acuerdo.
    Además de los chistes y las anécdotas repetidos, en aquellos asados de Año Nuevo el padre de C. también hacía siempre el relato del acontecimiento más estremecedor vivido por La Candela. Cuando mi amigo y sus hermanos todavía eran adolescentes, en Punta del Este se hizo habitual una técnica de robo que consistía en gasear a las familias con un somnífero para hacer más profundo su sueño durante la noche. Así era posible desvalijar casas enteras sin que se enteraran sus ocupantes, que al día siguiente amanecían con dolor de cabeza y ante el frustrante decorado del hogar allanado. Así despertó una mañana La Candela. Profanada. Destripada. Con el olor algo irritante del gas prendido todavía del ambiente. El padre de C. siempre insistía en lo conmovedor que le resultaba imaginar a los asaltantes moviéndose cerca de sus hijos sin haber podido defenderlos. Después de aquello instaló una alarma cuya horrísona sirena saltaba sistemáticamente todas las madrugadas cuando regresábamos de fiesta. De hecho, saltaba varias veces por noche si nos habíamos dispersado y volvíamos cada uno por su cuenta.
    Cuando hizo inventario para averiguar qué le había sido robado, a la familia le sorprendió que los ladrones no se llevaran una cámara de fotos que pareció quedar olvidada. Ellos trataron de superar el susto tremendo y continuaron con el veraneo, dispuestos a que el robo no se lo arrruinara. Aquí nos acercamos al escalofriante desenlace de la historia, que todos los asados de Año Nuevo relataba el padre de C. mientras a su alrededor, borrachos ya de clericó y cerveza Brahma, los amigos nos esforzábamos por contener la risa. Terminado el verano, regresada la familia a Buenos Aires, el padre de C. llevó a revelar los carretes de la máquina que no fue robada. En las fotografías que le entregaron descubrió que estaban ellos mismos narcotizados y también los asaltantes de la casa. Los ladrones posaban riendo mientras se introducían por el culo sus cepillos de dientes.

     TÍTULO: LA COCINA- DOMINGO, " PANNA COTTA" DE LIMÓN Y FRESAS,.

    Este es un postre tan rico tan rico, que no entendía cómo es que todavía no lo había probado, con lo fácil que es de hacer... La "Panna Cotta", otra delicia típica de Italia significa "nata cocida". Es una gelatina, pero con sabor lácteo. Y con este mix con gelatina de fresas, y coulis de fresas naturales es, simplemente, espectacular.-foto-

    Es un postre fresco, e ideal para aprovechar las fresas de temporada. No puedes dejar de probarlo! Yo lo voy a volver a hacer un día de estos porque me encantó, y como digo, es muy fácil de hacer.
     Ingredientes:

    - 1 paquete de preparado de gelatina de fresa
    - 500 ml de nata (crema de leche)
    - 50 g de azúcar glas (azúcar impalpable)
    - 1 cdta. de esencia de vainilla
    - 2 cdtas. de gelatina neutra en polvo
    - 2 cdas. de agua fría
    - 250 g de fresas naturales
    - 150 g de azúcar normal
    - el zumo de 1/2 limón

    Preparación:

    Lo primero es preparar los vasos donde se van a montar los postres. Para ello, sobre una bandeja o caja, colocaremos un paño, y acomodaremos los vasos en ángulo inclinado, sostenidos con el paño y el lateral de la caja. Asegúrate de que los vasos quedan firmes en el punto de inclinación.
     
    A continuación, vamos a preparar la gelatina de fresas, tal como se indica en las instrucciones del paquete (mitad agua caliente junto con la gelatina en polvo, revolver, y agregar la otra mitad de agua fría). 
    Vuelca la gelatina de fresa en los vasos, completando hasta la mitad más o menos y deja enfriar por completo en esa posición. Guarda los vasos con la gelatina en el frigorífico hasta que ésta haya solidificado.
     
    Pasadas unas tres horas, cuando ya hayas comprobado que la gelatina se ha hecho, prepara la Panna Cotta. Para ello, en una cacerola pequeña vierte la nata con el azúcar y calienta a fuego lento hasta que el azúcar se haya disuelto. Añade la esencia de vainilla y lleva a ebullición. Aparta del fuego y reserva.
    Por otro lado, mezcla en un bol metálico las dos cucharadas de agua fría con las dos cucharaditas de gelatina neutra en polvo, y lleva a baño María sin dejar de revolver, hasta que la gelatina se haya disuelto por completo en el agua.
    Agrega la mezcla de gelatina a la nata y revuelve para integrar. Reserva esta preparación en el frigorífico hasta que la mezcla se haya enfriado por completo o alcance la temperatura ambiente, sin dejar que cuaje (aproximadamente 40 minutos). Este paso es importantísimo: nunca incorpores la mezcla de la nata todavía caliente a la gelatina, ya que si no la gelatina se derretirá.
    Antes de agregar la mezcla de nata (la Panna Cotta), comprueba que la gelatina ha cuajado y se mantiene en el ángulo deseado. Agrega a continuación la Panna Cotta y lleva nuevamente al frigorífico al menos 6 horas (yo la preparé de un día para otro).
    La última capa es un "coulis de fresas" (salsa de fresas). Para esta preparación tritura la fresa lavada y sin rabillo con una procesadora o minipimer. Coloca la fresa triturada en una cacerola junto con el azúcar y el zumo de limón y calienta a fuego lento durante 10 minutos aproximadamente, sin dejar de revolver.
    [Si tienes Thermomix, para hacer el coulis de fresa coloca las fresas limpias en el vaso junto con el azúcar y el zumo de limón. Tritura 15 segundos/velocidad progresiva 5-10. Por último, programa 5 minutos/90º/velocidad 3].
    Una vez que está montada la gelatina con la Panna Cotta encima, ya fría y totalmente cuajada, cubre con una fina capa de coulis, y decora cada vaso con una fresa.
     
    Y no quiero despedirme de este post sin contarte que me fue súper lindo por Colombia. Es un país maravilloso con gente muy amable y cariñosa. Y como a donde voy lo pruebo todo, así he vuelto, con casi tres kilos de más... (oh my God!). He trabajado muchísimo allá, han sido dos semanas muy intensas pero muy productivas. Participé en un Seminario en Bogotá y en el Foro Mundial Urbano, que ya ves, nada que ver con esto de la cocina, pero como ya comenté en mi presentación, este blog es para mí un hobbie y una vía de escape a tanto trabajo de oficina... 
    Y después de dos semanas sin mis pequeñitas volví a casa y aunque tenía recetas guardadas para publicar, no me senté ni un día frente al ordenador a escribir. Quise aprovechar esta semana pasada y los días festivos para disfrutar de mis peques y mi marido, y devolverles con tiempo en cantidad y calidad mis días de ausencia. Y han sido unos días geniales. Fuimos a Málaga a casa de unas amigas que tenía muchas ganas de ver, paseamos por la playa, vimos procesiones, comimos un asado argentino, seguimos comiendo dulces... Y ahora toca volver a la rutina, y a este espacio que tanto me gusta compartir y que espero te guste leer y seguir.
    Gracias por estar ahí.
    Cariños,

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