Un trío en la cocina - Fusilli con ragú de pato ,./ Un país mágico - Comer a la orilla del Tajo , ./ Diario de un nómada - La ruta de la seda. Capítulo 4: Presentación,.

TITULO: Un trío en la cocina - Fusilli con ragú de pato ,.

 Fusilli con ragú de pato ,.

fotos,. Un trío en la cocina - Fusilli con ragú de pato ,.

Las claves

• Ingr. prin.: Pasta y Cereales
• Plato: Principal
• Estilo: Cocina de fiesta, Cocina italiana.
• Ambiente: Celebraciones, Navideña.
• Tiempo: medio
• Dificultad: bajo
• Comensales: 2
• Programa: Un trío en la cocina
• Episodio: 22
• Le gusta a 5 personas

INGREDIENTES PRINCIPALES

• 100 g de fusilli
• 1 muslo de confit de pato
• 1 Zanahoria
• 1 rama de apio
• 1 Chalota
• Romero fresco
• 1-2 Pimientos amarillos
• 1 cucharadita de pasta de tomate
• 50 g de nata para cocinar
• 50 g de queso grana padano
• Aceite de oliva virgen
• Sal
• Pimienta
• 1 Chile verde
• 1 Chile rojo

Preparación de la receta

En el capítulo 22 de Un trío en la cocina, Nicola prepara esta receta con espirales de pasta que en Italia son conocidos como fusilli. Esta vez Gonzalo y Julius esperan sentados en la mesa.

En primer lugar, lavamos y cortamos en brunoise el pimiento amarillo. Dejamos a un lado.

En una sartén con un poco de aceite caliente salteamos el pimiento amarillo picado durante unos minutos.

Con ayuda de una batidora trituramos los pimientos salteados con la nata hasta que quede la textura de una crema. Reservamos.

En una olla con abundante agua y un poco de sal ponemos a hervir los fusilli el tiempo que indique el fabricante para dejarla al dente. Escurrimos y reservamos.

Mientras, limpiamos y picamos menuda la zanahoria, la chalota, el romero y el apio. En una sartén grande con un poco de aceite caliente sofreímos la verdura.

Por otro lado, con ayuda de unas tijeras desmigamos el muslo de pato. Seguidamente, picamos bien el pato desmigado.

Añadimos el pato desmigado al sofrito de verduras. Salpimentamos y añadimos una cucharadita de pasta de tomate. Rehogamos durante 5 minutos.

Incorporamos la pasta a la sartén del ragú de pato y cocinamos durante 2 minutos.

Después, lavamos y cortamos en rodajas los chiles rojo y verde. Reservamos.

Para el emplatado vertemos la crema de pimientos, añadimos los fusilli con el ragú de pato por encima. Coronamos con unas rodajas de chile rojo y verde. Con ayuda de un rallador, rallamos un poco de queso grana padano por encima.

  TITULO: Un país mágico  - Comer a la orilla del Tajo , .
 
  El sabado -29- Diciembre  a las 18:30 por La 2, foto.

Comer a la orilla del Tajo,.

Imagen panorámica del pueblo portugués de Constancia. 

El restaurante 'Pezinhos no rio', en Constancia, sirve platos caseros,.

En la ruta entre la frontera de Valencia de Alcántara y el mar, pegada al río Tajo, junto a la autopista que va de Castelo Branco a empatar con la Lisboa-Oporto, convertida en una etapa más de la preciosa ruta ferroviaria del Tajo, que parte de Vila Velha de Rodão, frente a Cedillo, y acaba en Entroncamento, conformando uno de los viajes en tren más bellos de Europa y más desconocidos... Ahí, con un encanto fluvial particular, nada lejos de Extremadura y con la gracia de haber acogido en 1546-47 al poeta Luis de Camões en su destierro y de haberle inspirado algunos de sus poemas más líricos... Ahí se encuentra Constancia.
Este pueblo tiene nombre de virtud y encanto suficiente para que en un viaje a Fátima o a Peniche hagamos un alto en el camino y paseemos por sus calles o recorramos demoradamente sus paseos fluviales y sus parques a la orilla del río Tajo, que por aquí discurre tranquilo, ya sin más embalses hasta su desembocadura, sin encajonamientos ni desfiladeros, un río plácido cruzado por un puente ferroviario y sombreado por árboles de ribera de porte considerable.
Constancia se llama así por razones políticas. La reina María II de Portugal la bautizó con este topónimo en 1833 como premio a su apoyo constante y sin fisuras a la causa liberal-pedrista. Tuvo un nombre más bélico pues, 100 años antes de Cristo, los romanos la llamaban Pugna-Tagi, es decir, Combate en el Tajo, y con ese nombre evolucionado, Punhete, fue conocida durante siglos. En resumen: si la reina no la hubiera llamado Constancia, ahora, en España, la conoceríamos como Puñeta, dos nombres de evocaciones bien distintas para un municipio pequeño, de poco más de 4.000 habitantes, uno de los menos poblados de Portugal junto con Barrancos. El cambio de nombre también fue una petición del pueblo porque lo de Punhete tenía unas connotaciones sexuales que provocaban la chanza y el escarnio en las aldeas vecinos
Constancia, la capital del municipio, que cuenta con dos freguesías más (Montalvo y Santa Margarida da Coutada), no llega a los mil vecinos: 900 concretamente. A cambio de tener poco ambiente callejero, nos regala tranquilidad, silencio, unos paseos fluviales solitarios y evocadores y un río que sitúa la localidad en la antigua provincia de Ribatejo, aunque administrativamente pertenezca a Santarem, región Centro y mancomunidad de Médio Tejo.
Su centro histórico está presidido por la iglesia parroquial de Nuestra Señora de los Mártires, situada en lo alto, blanca y reluciente. Desde allí, el pueblo se dispone en una ladera hacia el Tajo, componiendo un espacio urbano de callejas, placitas y rincones con encanto. El monumento más importante de la villa es su rollo o pelourinho, declarado de interés público en 1933, construido en 1821 tras ser destruido el original por las tropas francesas. Destaca también su iglesia de la Misericordia, iniciada en el XVI y rematada un siglo después. En el río, hay una playa fluvial con arenal, bar y zona de meriendas.
Junto al paseo fluvial, abre un restaurante agradable y familiar. Se llama 'Pezinhos no rio', se puede aparcar bien en las inmediaciones y cuenta con un comedor acristalado con vistas al río. Nada más sentarte, te sirven unos aperitivos de los que no se rechazan: ricas aceitunas (1 euro) y un queso blanco y fresco de cabra (2.25) muy sabroso. Tomamos una sopa de legumbres (1.50) muy propia de estos días de invierno y pedimos el plato del día (9): chocos a la brasa con patatas cocidas, judías verdes, zanahorias y un aceite de oliva virgen extra muy rica.
La carta no es amplia, pero la cocina es casera y el restaurante tiene mucho movimiento y atrae a las familias de la zona los domingos, lo cual es una garantía. Ofrecen secretos de ibérico (9), un muy solicitado bacalao con natas (7.50), pescado del día a la brasa (8.50) y postres tradicionales (2.30): mousse, pudim de ovos o serradura. Después, un café, un paseo y a seguir viaje descansados y satisfechos.

TITULO:  Diario de un nómada - La ruta de la seda. Capítulo 4:  Presentación,.

  El domingo -30- Diciembre a las 19:00 por La 2 , foto.

Diario de un nómada - La ruta de la seda - Presentación,.

Diario De Un Nómada: Expedición Ruta De La Seda supone un viaje al corazón de Asia Central y a aquellos parajes olvidados por la acción del Ser Humano, donde la civilización parece haber sido dejada de lado y la naturaleza se ha impuesto en bastas llanuras, carreteras parcheadas y paisajes de ensueño habitados por personas humildes, honradas y de gran corazón.