TITULO: Trastos y tesoros - CANAL EXTREMADURA - Villanueva de la Serena,.
TITULO: Domingo - 17- Abril LA SEXTA - Ambulancias, en el corazón de la ciudad - Rusia experimenta un vertiginoso aumento de casos por covid con un millar de muertos al día,.
El domingo -17- Abril a las 21:30 por La Sexta, foto,.
Rusia experimenta un vertiginoso aumento de casos por covid con un millar de muertos al día,.
Solo un 29% de la población está vacunada en el primer país en registrar un suero contra el coronavirus. El Gobierno ruso busca atajar el repunte con nuevas restricciones y el cierre de los centros de trabajo durante nueve días,.
Rusia, el primer país en registrar una vacuna contra el coronavirus, la Sputik V, ampliamente promocionada de cara el exterior por el Kremlin, contabiliza nuevos récords de mortalidad ―alrededor de un millar de fallecidos al día― y contagios a un ritmo vertiginoso día tras día desde hace semanas. Pese a los últimos esfuerzos de las autoridades, solo 42 de los 145 millones de habitantes (un 28,9%) del país euroasiático se han vacunado contra la covid, según el Ministerio de Sanidad.
El bajo porcentaje de población inmunizada con las inyecciones rusas, por apatía, desconfianza o falta de temor hacia el virus, unido al escaso cumplimiento de las ya de por sí laxas medidas sanitarias impuestas hasta ahora por un Gobierno que mantuvo antes de tiempo una actitud triunfalista sobre el fin de la pandemia, ha derivado en otra oleada de casos. El Ejecutivo ruso ya ha anunciado un endurecimiento de las restricciones y el cierre de los centros de trabajo durante nueve días.
“¿Escuchan los sonidos de fuera?”, pregunta enfundada en un traje blanco de EPI Ekaterina Zuikova, médica en un hospital de la región de Oriol. “Desde hace varias semanas, las sirenas de las ambulancias no cesan ni de día ni de noche”, lamenta a través de Instagram mientras describe la gravedad de los enfermos. Los hospitales de Oriol, a unos 320 kilómetros de Moscú, con una población de 724.700 personas, no tienen ya camas disponibles, ha reconocido el gobernador, Andrei Klychkov. Habían habilitado unas 900, pero registran más de 250 nuevos casos de covid cada día; la mayoría muy graves. Los centros sanitarios, insiste Zuikova, están saturados.
Otros territorios van por el mismo camino. La ocupación de camas por pacientes con covid es superior al 90% en 27 de las 84 regiones rusas, ha dicho este miércoles la viceprimera ministra Tatiana Golikova, responsable de la lucha contra el coronavirus.
Este miércoles, Rusia ha vuelto a registrar un máximo histórico de fallecidos por covid-19 en las últimas 24 horas: 1.028. Y 34.073 nuevos contagios. El gigante euroasiático reporta el segundo mayor número de muertes por coronavirus diario del mundo ―en el recuento a 28 días―, por detrás de Estados Unidos, según datos de la Universidad Johns Hopkins.
La mayoría de los pacientes de las unidades de cuidados intensivos no están vacunados, ha alertado el responsable del principal hospital para pacientes covid, Denis Protsenko. “La situación es extremadamente tensa”, incide por teléfono Danila Konnov, médico jefe del hospital Universitario H-Clinc, que achaca el incremento de casos a los “fuertes” sentimientos antivacunas de la población, al “uso de medicamentos sin eficacia probada contra la covid” y al hecho de que los sanitarios no parecen aún concienciados del todo de la importancia de la inmunización.
Desde la tercera ola de antes del verano, varias regiones rusas, entre ellas Moscú, decretaron medidas para forzar la vacunación para ciertos grupos de trabajadores: los funcionarios de cara al público o el personal del sector servicios, por ejemplo. Ninguno podía ir a trabajar sin el correspondiente certificado. Pero, además de que surgió un jugoso mercado de certificados de vacunación falsos, la medida no parece haber funcionado. Tampoco las últimas iniciativas de premios –incluso el sorteo de apartamentos—para las personas que se vacunen.
Mensajes contradictorios
La cifra de inoculados está estancada en el 28,9%. ¿Cómo un país con tres vacunas de fabricación nacional contra la covid-19 va a la cola en las campañas de vacunación? ¿Es solo la baja cifra de inoculados lo que alimenta la cuarta ola? Las razones, apunta el sociólogo Denis Volkov, responsable del centro de sondeos Levada, son varias, pero sobre todo los “mensajes contradictorios” del Gobierno. Por un lado, minimizaron la pandemia y criticaron a otros países por sus duras medidas, dice. También han declarado repetidamente la victoria sobre el coronavirus. Moscú y San Petersburgo, donde se celebró un foro económico o partidos de la Eurocopa, han sido dos de las ciudades más abiertas, activas y vibrantes de Rusia en plena pandemia.
En Rusia, la televisión pública ha llegado a definir la vacuna de AstraZeneca como “la vacuna del mono” (en alusión a que utiliza un adenovirus atenuado de chimpancés) y solo en los últimos tiempos se ha empezado a mostrar la realidad de los hospitales, con imágenes de camas saturadas y hospitalizados graves en la televisión estatal. En el país euroasiático, donde los expertos dudan de las cifras oficiales, que reportan 226.353 fallecidos desde el principio de la pandemia, el 55% de la población no tiene miedo a la covid-19, según la última encuesta del centro Levada, de septiembre. Y esa cifra, señala la organización demoscópica, la única independiente de Rusia, se ha mantenido prácticamente sin cambios desde principios de año.
El Kremlin está empezando a reconocer que sus recetas no han funcionado. Hace una semana, el vicepresidente de la Duma (el Parlamento), Pyotr Tolstoi, admitió que los requerimientos de las autoridades no han sido eficaces. “Desafortunadamente, llevamos a cabo una campaña de información completa sobre el coronavirus en Rusia de manera incorrecta y completamente errada”, declaró a un canal progubernamental. “La ciudadanía no tiene confianza para ir a vacunarse”, remarcó Tolstoi.
La antropóloga social Alexandra Arjipova, de la Academia Nacional de Economía y Administración Pública de Rusia, ha recopilado e investigado una base de datos de millones de mensajes en las redes, rumores y textos sobre la covid-19 y entrevistado a decenas de personas en el país euroasiático sobre su actitud hacia la enfermedad y las vacunas. Su análisis señala que a las actitudes antivacunas generales se han sumado otras hacia una nueva inmunización y también reticencias específicas hacia la vacuna rusa, derivada de la desconfianza hacia el sistema y el Gobierno. “No es un simple miedo primitivo hacia la vacunación”, dice.
Ausencia de alternativas
Arjipova ha dividido en tres grupos a los reticentes a vacunarse en Rusia: los “teóricos de la conspiración”, aquellos que temen la interferencia externa a través de las vacunas; los “reaseguradores”, que, como los anteriores, tienen poca comprensión de cómo funcionan las vacunas y están muy preocupados por cómo afectarán a su salud pero confían en que se vacunen otros y en la inmunidad de grupo; y un tercer grupo de escépticos hacia la Sputnik V. “Estos últimos desconfían por ejemplo de la medicina rusa, o de las instituciones y les molesta, además, la falta de alternativas (en Rusia no están disponibles las vacunas occidentales)”. La Sputnik V ha sido aprobada por 70 países ―entre ellos, México, Argentina, Bielorrusia, Hungría o Serbia―, pero la Organización Mundial de la Salud aún tiene paralizado su proceso de autorización; también, la Agencia Europea del Medicamento.
Con este caldo de cultivo de nuevos contagios y fallecidos, algunas regiones han anunciado ya más restricciones. El Gobierno ha declarado como no laborables los días entre el 30 de octubre y 7 de noviembre, aprovechando un puente por festivo nacional, y el presidente ruso, Vladímir Putin, ha autorizado este miércoles a las regiones a añadir más días a ese cierre de centros de trabajo, que no llega a ser, sin embargo, un confinamiento y no afecta a trabajadores esenciales. Además, algunos territorios decretarán el autoaislamiento para los mayores de 60 años no vacunados; reducirán el número de personas en trabajo presencial desde este momento, vetarán la entrada a establecimientos públicos y de ocio a los no inmunizados o sin PCR negativa, algo que controlarán a través de un sistema de códigos QR que ya funcionó antes del verano.
TITULO: CAFE GIJON - MANZANAS VERDES - El fútbol, ante un cisma mundial ,.
CAFE GIJON,.
Café Gijón - foto,.
MANZANAS VERDES -El fútbol, ante un cisma mundial ,.
MANZANAS VERDES -El fútbol, ante un cisma mundial , fotos,.
El fútbol, ante un cisma mundial,.
La FIFA pospone a diciembre la búsqueda de un consenso para una Copa del Mundo bianual al que se oponen la UEFA, federaciones sudamericanas y la Asociación Europea de Clubes,.
El rechazo de la mayoría del fútbol europeo y de algunas federaciones suramericanas al plan de la FIFA de implantar la Copa del Mundo cada dos años a partir de 2028 ha desembocado en un intento de las partes por llegar a un acuerdo que se rubrique en una reunión con las 211 federaciones el 20 de diciembre. Para ese día, la primera intención del presidente de la FIFA, el suizo Gianni Infantino, era la de haber celebrado un congreso extraordinario en el que se votara la propuesta del Mundial cada dos años. Con más de 160 federaciones a favor, la aprobación sin contar con el respaldo de UEFA y parte de la Confederación Suramericana (Conmebol) hubiera desencadenado una guerra total en la que el sistema actual de gobernanza del fútbol mundial corría peligro de saltar por los aires. Ante esta encrucijada, Infantino anunció tras el Consejo de la FIFA celebrado este miércoles el consenso para “una cumbre en la que todos están citados para hablar e intentar llegar a un acuerdo respecto a un nuevo calendario, algo necesario”.
Infantino compareció vía telemática ante los medios consciente de que “el debate ahora mismo es acalorado”. El tono del mandamás del fútbol mundial fue conciliador a la espera de poder sentarse durante las próximas semanas con el presidente de la UEFA, el esloveno Alexander Ceferin, con el que mantiene una tensa relación. “No sé a qué tipo de acuerdos podemos llegar, si habrá un Mundial cada dos años, cada tres o cada cuatro. Partimos de esa posición de enfrentamiento. Hay federaciones que piensan que el Mundial cada dos años es una panacea y otras que sería la ruina. No dejaremos de buscar una salida, creo que podemos llegar a un acuerdo”, expresó Infantino.
La oposición europea al proyecto del Mundial cada dos años es radical. Si Ceferin ya amenazó con el boicot, la Asociación Europea de Clubes (ECA) también se suma ahora al bloqueo. “No cederemos a nuestros jugadores y en esto vamos de la mano con la UEFA, también para presentar un calendario que reduzca las fechas de selecciones”, advierte un dirigente de la Asociación de Clubes.
Los órdagos contra el plan de la FIFA se desatan uno tras otro. La UEFA ha hecho todo lo posible para que los seleccionadores europeos no participen en las conferencias que esta semana ha organizado Arsène Wenger, en las que el exentrenador del Arsenal ha explicado el proyecto en nombre de la FIFA. Los capitanes de las selecciones europeas tampoco participaron cuando fueron convocados. A su vez, los países nórdicos han amenazado con abandonar el organismo mundial si la idea sale adelante. Las ligas europeas también se oponen y hasta el Comité Olímpico Internacional se ha pronunciado en contra de un evento que puede mermar económicamente sus beneficios por los Juegos Olímpicos. Todos los actores opositores asumen la idea de la FIFA de celebrar el Mundial cada dos años como una amenaza para sus ingresos. La UEFA estima en unos 3.000 millones de euros las pérdidas que le generarían una Copa del Mundo bienal.
El fuerte conflicto de intereses económicos al que ahora se busca consenso es una mera guerra económica en la que Infantino busca que los ingresos de la FIFA no solo se den cada cuatro años con la organización del Mundial. La UEFA recauda anualmente por las competiciones europeas de clubes, además de por la Eurocopa. En el último cuatrienio, UEFA ingresó unos 11.000 millones de euros y la FIFA 6.000, la mayoría de ellos procedentes del Mundial de Rusia 2018.
Bajo la premisa de un mayor y mejor reparto del pastel económico que permita el desarrollo del fútbol en los países menos desarrollados, la intención de Infantino es lograr que la rica Europa sea solidaria. El Mundial de selecciones cada dos años es su órdago para la negociación que se avecina. FIFA podría renunciar a su polémico proyecto a cambio de que la UEFA no torpedee un Mundial de Clubes anual o bienal con 12 de los mejores equipos europeos y una Liga de las Naciones global. De no llegarse a un acuerdo, del cisma mundial desatado podría salir un nuevo orden en el que ni FIFA ni UEFA tengan tanto peso en la gobernanza del fútbol.
TITULO: LA AVENTURA DEL SABER TVE - Una escuela montada en seis días,.
La lava engulló un colegio público: sus maestras montaron uno nuevo en seis días,.
El centro educativo de La Laguna, evacuado por el volcán, reabre en un nuevo espacio con 65 de los 160 alumnos que iniciaron el curso en septiembre. Unos se han marchado a sus países de origen, otros a zonas alejadas del magma, foto.
El 21 de septiembre, dos días después de que explosionara el volcán de La Palma, Mónica Viña, directora del colegio público La Laguna, comentaba por WhatsApp sobre la inclemencia del volcán con las viviendas: “Así caen, como casas de papel. Es muy triste”. Tres días más tarde, daba un nuevo parte. “Ha entrado en fase explosiva con una onda expansiva de kilómetros, nos piden precaución con los cristales”. En ese momento, las clases ya se habían suspendido y poco a poco la lengua de lava tomaba una nueva dirección, parecía enfilar el colegio. “Acabamos de vaciar nuestro cole”, escribía el día 12. “Ahora estamos descolocadas, pero tenemos que seguir”. Este miércoles se confirmaba el peor pronóstico: el magma ―con más de tres metros de altura― tocaba a la puerta principal de acceso al centro.
Todos saben lo que han perdido. El CEIP La Laguna, en la parte más agrícola de Los Llanos de Aridane ―una de las tres localidades afectadas por el volcán―, era lo más parecido a un colegio rural. Allí, todas las aulas estaban en una sola planta, dentro de pequeños bloques que se comunicaban con pasillos al aire libre, como un pueblo en miniatura. De fondo, se veían las montañas y las plataneras. Era el referente de innovación educativa de la isla, sobre todo por su proyecto de Educación Emocional ―una asignatura obligatoria en Canarias desde el año 2014―.
Desde este miércoles están en un nuevo espacio que les ha asignado el Ayuntamiento, un edificio moderno de dos plantas que en seis días han transformado en colegio, con todo lo que pudieron rescatar del antiguo en las dos horas y media que les dieron para vaciarlo. “Mira, la lava ya está ahí”, dice Viña en voz baja, mientras muestra una imagen tomada por los equipos de emergencia en la que se ve cómo una montaña negra de fuego se dispone a engullir su antiguo centro, del que es directora desde hace más de 20 años. En este primer día de clase, nadie quiere hablar en voz alta del tema, pero todas las maestras lo tienen presente.
Los niños están tocados. Amaya, de cuatro años, se desplaza por el aula con una oveja blanca a la que no quiere soltar. Es lo único que pudo llevarse de su casa antes de que desapareciera bajo la lava. Lucas, otro niño de 11 que tiene problemas de aprendizaje, se ha echado a llorar varias veces. “Es muy sensible, más que los demás, y está muy removido, el volcán le da miedo y sus padres se lo llevaron a la otra punta de la isla, pero ahora ha vuelto y tiene que asimilar todo esto”, cuenta su tutora. A lo largo de la mañana, otros alumnos se van derrumbando y salen del aula acompañados de una de las profesoras. Hace falta mucho diálogo, tienen que digerir lo que les ha tocado vivir. “La familia de ese niño perdió sus cultivos con el incendio del verano y ahora su casa... él dice que no puede sonreír, que cada vez que lo hace pasa algo malo”, cuenta una tutora. Esta primera semana la prioridad es ayudarles a superar el trauma.
Durante seis días, los 19 profesores del centro han trabajado hasta 12 horas diarias para que los alumnos se sientan como en casa. Arrancaron del antiguo centro los murales de bienvenida del curso, que han vuelto a colocar. Junto con todo el mobiliario, la biblioteca y los juguetes que ya les son familiares, han decorado las paredes con carteles que quieren colarse en el subconsciente de los pequeños: miedo, rabia, decepción, esperanza... “Son pequeños y aún no manejan el vocabulario para expresarse, vamos a ayudarles y la próxima semana ya veremos si volvemos con las matemáticas”, dice Beatriz, una de las maestras.
Es la hora del recreo y la directora recibe un mensaje de una madre: “Lo siento mucho, Mónica”. La lectura es clara, la lava penetra en el centro. Sus ojos están empañados, pero rápido se levanta y se dirige a la puerta a recibir a un alumno que ha llegado más tarde. “Mi chico guapo, te extrañaba mucho”, le dice mientras le abraza fuerte y le da un beso en la parte alta de la cabeza. “Estos días el protocolo covid no puede cumplirse”, dice una maestra que pasa al lado.
Los temblores
De los 160 alumnos que comenzaron el curso en septiembre, quedan unos 65. La mayoría de los procedentes del extranjero han vuelto a sus países de origen hasta que cese la actividad volcánica y los palmeros se han reubicado en otros centros educativos de la isla que ahora quedan más cerca de los lugares que habitan. Otras familias se han marchado a otras zonas de La Palma asustadas por los temblores diarios que se sienten en el valle. “Otra de nuestras tareas de hoy es explicarles el plan de evacuación como si fuese un juego, se tienen que colocar debajo de los pupitres, hay que tratar estos temas con cuidado porque muchos están asustados por el sismo de ayer”, señala una maestra sobre el terremoto del pasado martes de 4,8, el más alto registrado hasta el momento.
Algunas familias esperan para recoger a sus hijos. Delante, el suelo está cubierto de ceniza y la fachada del edificio, de color gris, contrasta con las cintas de colores que cuelgan de la barandilla del primer piso. Las caras son largas, se crean corrillos y se preguntan cómo ven “la cosa”. La cosa es el volcán, es el nuevo plan de vivienda, es la situación de las empresas en ERTE, es el encaje de los niños en la nueva escuela. Arriba, han colocado el antiguo cartel blanco con el nombre del colegio, que arrancaron de la pared casi sin tiempo. Se rompió y le falta un trozo en uno de los extremos. “Lo íbamos a arreglar, pero no vamos a hacerlo, es nuestra cicatriz”, dice Mónica.
Gabriel, otro de los maestros, sonríe a través de sus ojos. Ha sido un mes complicado, pero en el estreno todo ha salido bien. Él se prestó como voluntario para ayudar a las familias afectadas a vaciar sus casas y fue el que dio la voz de alarma sobre la evacuación del antiguo colegio. “Hay algo que me sigue afectando: la imagen de la energía de las personas mientras lo sacan todo de su casa y del desplome cuando cierran la puerta por última vez, saber que no vas a volver a entrar nunca”.
Son las ocho y media de la tarde. Mónica manda su último mensaje:
- Ya lo devoró. Me alegro de que conocieras nuestro cole azul.
No hay comentarios:
Publicar un comentario