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De pequeña me gustaba leer los consultorios sentimentales. No los leía sola. Me sentaba en el banco de un parque con mi mejor amiga de entonces y leíamos. Incluso si llovía o hacía calor, y nos metíamos en una cafetería con la revista y nos pedíamos un refresco, o una cerveza, ya de mayores, porque esa costumbre nos acompañó años. Esos son algunos de los mejores recuerdos de aquella época.
Me gustaban los consultorios porque yo, por amor, sufría lo que no estaba escrito. Desde siempre. A los siete años me enamoré de un cantante melódico y ahí empezó el drama: ningún chico estaba a su altura y yo me gané la fama de rara. Me convertí en la amiga, nunca en la novia. No me importaba. Siempre fui más platónica que práctica y prefería esperar a conocer a mi cantante, porque estaba segura de que tal cosa pasaría aunque tuviera que convertirme en periodista, para entrevistarle algún día y que se enamorara de mí.
Mi amiga y yo nos preguntábamos si las dudas que se planteaban en el consultorio eran de verdad, si una mujer que había perdido su anillo de recién casada en la arena de la playa durante su luna de miel esperaba encontrar en el papel satinado de la revista las palabras de aliento que la sacaran de la tristeza por haber perdido al marido por culpa de la ausencia del anillo; o si una chica esperaría el tiempo que tuviera que esperar su carta en ser publicada para perdonar o no a la hermana que le había birlado el novio; o si era normal que la pareja no te tratara bien, o te fuera infiel o te pusiera la mano encima.
Mi amiga y yo queríamos pensar que las consultas no eran reales. Que en algún parque o cafetería, según fuera el clima, dos redactoras comían frutos secos o bebían refrescos mientras se morían de la risa inventándolas y elaborando las respuestas.
Nadie puede ser tan cándido, queríamos pensar. Y sin embargo, el tiempo nos demostró lo equivocadas que estábamos. Nunca llegamos a saber si las cartas eran ciertas o fruto de la imaginación de una periodista, pero sí nos dimos cuenta de que en la vida real, casi todos, alguna vez, nos hemos enamorado de alguien que quiere que hagas algo que tú no quieres hacer, o que te deja porque pierdes un anillo, o que no te trata bien, o que te es infiel. Ahora les llaman relaciones tóxicas y por suerte tenemos a nuestro alrededor infinidad de gente que nos quiere bien y que nos ayuda a salir de ellas.
En algún momento de la historia yo conocí al cantante melódico, aunque le encontré antipático y, además, había perdido pelo. Pero le estoy agradecida: de no haber sido por él, seguramente no sería nada de lo que soy y no tendría nada de lo que tengo. El amor, sea como sea, tiene que sacar lo mejor de nosotros mismos.
TÍTULO: EL HOROSCOPO - PROTAGONISTA - Diane Kruger Actriz,.
Diane Kruger - foto,.
Diane Kruger | ||
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Kruger en 2014. | ||
Nombre de nacimiento | Diane Heidkrüger | |
Nacimiento | Algermissen, Distrito de Hildesheim, Baja Sajonia, Alemania Occidental 15 de julio de 1976 (38 años) | |
Nacionalidad | Alemana / Estadounidense | |
Ocupación | Actriz, modelo | |
Rol debut | Duelles en Mauvaise conduite (2002) | |
Años activo/a | 2001-presente | |
Características físicas | ||
Estatura | 1,70 m (5 ft 7 in)1 | |
Familia | ||
Cónyuge | Guillaume Canet (2001-2006) | |
Pareja | Joshua Jackson (2006-presente) | |
Premios | ||
Premios SAG | Mejor reparto 2009 Inglourious Basterds |
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Ficha en IMDb | ||
Es conocida por sus actuaciones en películas como Troya, Wicker Park, Feliz Navidad, La búsqueda, Mr. Nobody, Inglourious Basterds, entre otras. Kruger ha grabado dos veces con Brad Pitt, Rose Byrne, Nicolas Cage y Sean Bean.
Primeros años
Kruger nació en Alemania, su madre Maria-Theresia trabajaba en un banco y su padre, Hans-Heinrich Heidkrüger, era impresor. De niña estudió ballet en la escuela Freese-Baus. Destacó mucho en la danza, así que a la edad de 13 años la enviaron a estudiar ballet con el Ballet Real en Londres. Sus padres se divorciaron más tarde, a raíz de los problemas de su padre con el alcohol.A los 15 años tomó parte en el concurso de modelos Look of the Year, donde llegó hasta la final. Se trasladó luego a París, la ciudad más importante en el mundo de la moda, y abandonó la enseñanza secundaria. Fue fichada por la agencia Elite y pronto desfilaría por las pasarelas con firmas como Dior, Yves Saint Laurent o Giorgio Armani.
Diane estudió arte dramático en París y Nueva York, y luego quiso actuar en la película de Luc Besson El quinto elemento, pero no pudo hacerlo pues no hablaba francés con la suficiente fluidez.
Carrera
En 2002 y motivada por su entonces esposo, el actor francés Guillaume Canet, que actuó en La playa, Diane se introdujo en el mundo de la interpretación y apareció por primera vez en una película, The Piano Player, con Christopher Lambert y Dennis Hopper. Después de este comienzo, Diane actuó en algunos filmes franceses, como Mon idole (2002), Ni a favor ni en contra (sino todo lo contrario) (2003) y 24 horas al límite (2003).Es en el film Troya, la película de Wolfgang Petersen, Troya (2004), donde Diane Kruger logra su papel más conocido, el de Helena. En esta película trabajó con actores de renombre como Brad Pitt, Orlando Bloom, Sean Bean, Eric Bana, y con la no tan conocida por aquel entonces Rose Byrne además del mítico Peter O'Toole. En esta película, interpretó a Helena, la mujer más bella de su época, sobre lo que dijo: Algunos podrían decir: sí, ella debería ser Helena, tan solo basta con apreciar su belleza.
En 2004 hizo National Treasure. Su papel en esta película fue un importante impulso en su carrera. Protagonizando la película junto a Nicolas Cage, interpreta a Abigail Chase, quien acompaña a Ben Gates (Cage) y a Riley Poole (Justin Bartha) en la búsqueda de un tesoro en la que se ven envueltos diversos personajes de la historia de Estados Unidos como Benjamin Franklin.
La película tuvo su secuela, National Treasure: Book of Secrets, en diciembre de 2007. En el 2008 hizo la película francesa Pour elle, en la que reprensenta a una mujer encarcelada injustamente por el homicidio de su jefa.
En el 2009 formó parte del reparto de Inglourious Basterds, película de Quentin Tarantino, como la exquisita agente encubierta Bridget von Hammersmark. En ella cuajó una destacada actuación junto a Christoph Waltz , Mélanie Laurent y, de nuevo, con Brad Pitt.
En 2012 obtuvo el papel de la reina María Antonieta de Austria en la película francesa Les Adieux à la reine, dirigida por Benoît Jacquot.
Diane Kruger protagoniza la serie de televisión estadounidense The Bridge estrenada en el 2013.
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