TITULO: El paisano - Viernes - 17- Junio -Nació en Escocia, se enamoró de Andalucía y da clases de gimnasia rítmica en Benalup ,.
Viernes - 17- Junio a las 22:10 horas en La 1 , foto,.
Nació en Escocia, se enamoró de Andalucía y da clases de gimnasia rítmica en Benalup,.
Michelle nació en Escocia. Desde niña su pasión han sido la gimnasia rítmica y la danza. Empezó a competir a nivel internacional con nueve años, ganando varias competiciones.
A los 15 comienza a estudiar danza en una de las mejores academias de danza de Londres y llega a actuar para la mismísima reina de Inglaterra. Comienza a trabajar para compañías de danza internacionales y es así como llega al que hoy es su pueblo, Benalup-Casas Viejas, Cádiz.
Le gustó tanto Andalucía que decidió quedarse. Da clases de gimnasia rítmica a casi un centenar de niñas del municipio y trabaja además como agente inmobiliaria de villas de lujo.
TITULO: VACACIONES - EUROPA DE PELICULA - Los extremeños resisten a 40 grados,.
Los extremeños resisten a 40 grados,.
En Badajoz, una de las diez ciudades más calurosas del país este sábado, la mayoría no ha aplazado planes y ha buscado cómo refrescarse y seguir con su rutina de fin de semana,.
foto / Badajoz, la segunda ciudad más calurosa hoy de Extremadura y entre las diez con mayor temperatura del país este sábado, se ha encontrado de frente con una ola de calor que muchos pacenses han sorteado entre precauciones, trucos y resignación. Ni un ambiente tan bochornoso, con máxima de 40'8 grados, ha conseguido que muchos de sus habitantes, La semana vendrá marcada por la presencia de una DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos), fruto de un embolsamiento de aire frío en las capas medias de la troposfera, actualmente sobre las Islas Madeira, pero que se irá acercando lentamente a la Península y que inestabilizará parcialmente Extremadura, sobre todo en la segunda mitad,.
TITULO: HOSPITAL - ¿Cuántos años podemos llegar a vivir?,.
Está claro que cada vez vivimos más años, pero, ¿cuál es la edad límite de supervivencia en la especie humana y las razones que están detrás de una esperanza de vida que no para de crecer? Montaña Román, doctora especialista en Geriatría y vocal de esta comunidad autónoma en la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, Un análisis demográfico global publicado hoy en la revista Nature sugiere que existe un límite máximo natural para la vida humana, fijado en unos 125 años y que difícilmente podrá ser superado. La esperanza de vida de las personas se ha incrementado de manera regular en la mayoría de países durante los últimos 150 años, aunque este progreso se ha estancado desde la década de 1980, lo que ha llevado a los investigadores a explorar la posibilidad de establecer una frontera de edad natural infranqueabl e.
Un equipo liderado por Jan Vig, de la Escuela de Medicina Albert Einstein de Nueva York (EE UU), ha utilizado para su estudio la Base de Datos de Mortalidad Humana (HMD, en inglés) puesta en marcha en 2002 por la Universidad de California y el Instituto Max Planck para la Investigación Demográfica. Junto a su grupo de científicos, ha determinado a partir de esos datos que el grupo de seres humanos que llega a una edad más avanzada es cada vez mayor en las últimas décadas . Sin embargo, la edad a la que acaban por fallecer apenas se ha movido.
Limitada de forma natural, aunque tal vez no para siempre
La francesa Jeanne Calment, que murió en 1997 con 122 años, es la persona que más ha vivido hasta ahora, y los científicos creen que es poco probable que ese récord sea superado. La probabilidad de que alguien lo haga, en un año dado, es de menos de una entre diezmil.
"Algunas evidencias apuntan a que la esperanza de vida máxima no es fija. Hay estudios a partir de modelos en otros organismos que muestran que la esperanza de vida máxima es flexible", constata el estudio de Nature. "Sin embargo, en contra de lo sugerido anteriormente, que la longevidad humana puede extenderse más allá (de los límites observados hasta ahora), nuestros datos sugieren de manera sólida que la esperanza de vida está limitada" de forma natural, afirman los investigadores.
El estudio señala que la idea de que el envejecimiento es un proceso con utilidad evolutiva, programada a partir de la selección natural, está "desacreditada". Lo que parece más probable, para Vig y su grupo, es que la existencia de un límite natural a la existencia humana es "una consecuencia de los programas genéticos establecidos en las primeras etapas de la vida, como el primer desarrollo, el crecimiento y la reproducción".
Los científicos subrayan que no consideran imposible que el ser humano logre extender su vida más allá de esos límites naturales, si bien sugieren que ese escenario "requeriría intervenciones más allá de la mejora de la salud" . Algunos de esos métodos "están actualmente siendo investigados", afirma el estudio, que apunta que "no existe razón científica para anticipar que esos estudios no pueden tener éxito".
"Las posibilidades (de lograrlo) están esencialmente limitadas por la miríada de variables genéticas que determinan de forma colectiva la esperanza de vida de una especie determinada", indica el trabajo.
TITULO: VUELTA AL COLE - Howard Gardner,.
Howard Gardner,.
Con motivo de nuestro 35 aniversario y en colaboración con la Fundación BBVA, hablamos esta semana con este psicólogo de la universidad de Harvard que revolucionó para siempre nuestra idea de inteligencia. Gracias a él, los test han dejado de ser una terrible herramienta que divide a los niños en listos y tontos. El creador de la Teoría de las Inteligencias Múltiples ahora ha puesto sus ojos en las universidades. Y lo que ha visto le preocupa.
Este investigador de la Universidad de Harvard trabajó durante veinte años con pacientes con afasia, a los que un daño cerebral impedía hablar con normalidad. Pese a esa limitación, se desempeñaban normalmente en otros aspectos, como la música o la orientación espacial. Fue una revelación. En 1983, Howard Gardner formuló su teoría de las inteligencias múltiples, que puso patas arriba la educación a nivel mundial y cuestionó los test sobre cociente intelectual, que entonces solo medían la capacidad lingüística y lógico-matemática. Con Gardner aprendimos que la mente humana se despliega a través de un conjunto de habilidades que se complementan. Premio Príncipe de Asturias en 2011, es autor de más de 30 libros y, a sus 78 años, sigue trabajando incansablemente. Acaba de publicar The real world of college (MIT Press), junto con Wendy Fischman, una exhaustiva investigación sobre los retos que afectan a los universitarios en Estados Unidos.
XLSemanal. Ha dedicado diez años de su vida a investigar qué está pasando (de verdad) en las universidades. ¿Por qué?
Howard Gardner. Me interesan los dilemas de los jóvenes. Y muchos estudiantes me comentaban que la ética está muy bien, pero para más adelante, que primero hay que tener éxito en el trabajo y la vida. Eso me dejó preocupado.
XL. Han hecho un trabajo monumental: más de dos mil entrevistas en diez campus. Y no solo de élite.
H.G. Hemos analizado cientos de miles de respuestas. Y una de las palabras más frecuentes era 'ayuda'. Son muchos los que sufren problemas de salud mental: ansiedad, sentimiento de no pertenencia… Y los datos de campo se recogieron antes de la pandemia. Las evidencias indican que la situación ha empeorado.
XL. ¿A qué se debe esta situación?
H.G. El periodo de 1950-2000 fue bastante próspero, y desde entonces lo ha sido menos. Muchos jóvenes sienten que no les irá tan bien como a sus padres, y eso es una situación amenazante.
XL. ¿Alguna conclusión que se pueda extrapolar a Europa?
H.G. Casi la mitad de los estudiantes no sabe para qué va a la universidad. Es solo un trámite para conseguir un trabajo.
XL. Teniendo en cuenta lo difícil que está el mercado laboral, no es de extrañar…
H.G. Ya. Pero cuando les dices que son trabajos que pueden desaparecer en tres años se quedan estupefactos. Ni les pasa por la cabeza que cada vez hay más tareas que aprenden a realizar los algoritmos y la inteligencia artificial. Solo una minoría aprovecha su paso por la universidad para explorar sus intereses y utilizar ese conocimiento para una transformación personal. Y esto pasa incluso en las facultades de ciencias sociales y humanidades, no solo en las ingenierías.
XL. En España, eso también se da. Lo llamamos 'titulitis'.
H.G. Prefiero hablar de 'proyectitis'. Las universidades tienden a prometer de todo a todo el mundo... ¡y así tienen garantizado el fracaso! Se han convertido en una especie de centros comerciales del conocimiento. Compiten unas con otras por ofrecer a los alumnos y a sus padres un retorno de su inversión.
«Las universidades tienden a prometer de todo a todo el mundo... ¡y así tienen garantizado el fracaso! Se han convertido en una especie de centros comerciales del conocimiento»
XL. En los campus asiáticos están peor; tienen un problema de suicidios…
H.G. Influyen las presiones familiares, el perfeccionismo, la necesidad de aceptación, el síndrome del impostor… En los peores casos hay suicidios reales o de facto: borracheras, conducción temeraria, sobredosis accidental de drogas…
XL. ¿Soluciones?
H.G. No creo que las universidades por sí solas puedan resolver estos problemas. Tienen que colaborar otras instituciones educativas, médicas y cívicas. Algún tipo de servicio público obligatorio después de la escuela secundaria sería una buena idea.
XL. ¿Por qué tantos jóvenes han interiorizado que lo único importante es el expediente?
H.G. Es el mensaje que reciben de sus padres, de los medios de comunicación y de los propios institutos.
XL. Para cambiarlo, habrá que empezar desde que son pequeñitos…
H.G. Sí. La tendencia natural de los padres es que sus hijos sean como fueron ellos o como hubieran deseado ser. Aunque a veces funciona, es un error. Cada niño es diferente y hay que fijarse en lo que les llama la atención y lo que los motiva a perseverar.
«Siempre les he dicho a mis hijos que deberían hacer lo que quisieran y que yo los apoyaría. Pero un día uno de mis hijos me dijo: 'Solo había que ver lo crítico que eras con fulanito para saber lo que pensabas de verdad'»
XL. ¿Y eso cómo se consigue?
H.G. Los padres deberían ser los antropólogos de sus propios hijos. Por ejemplo, llevándolos a museos con actividades y observando lo que les atrae, pero también estando atentos a los cambios en sus intereses.
XL. Usted habla de la importancia del mentor, pero también de cómo nos influyen los que nos atormentan. Yo me acuerdo de mis buenos profesores, pero también de los muy malos…
H.G. A medida que he ido envejeciendo, he pensado mucho en cómo me influyeron mis padres y profesores, y en cómo yo he influido en mis alumnos y en mis hijos. Le contaré una anécdota.
XL. Diga.
H.G. Siempre les he dicho a mis hijos que deberían hacer lo que quisieran profesionalmente y que yo los apoyaría. Lo creía y lo sigo creyendo. Pero, un día, uno de mis hijos me dijo: «Solo había que ver lo crítico que eras con fulanito o menganito para saber lo que pensabas de verdad». Fue una llamada de atención. Las buenas intenciones están bien, pero los niños son muy perceptivos.
XL. Usted argumenta que los test de inteligencia solo pueden predecir si alguien va a destacar en la escuela, pero que no garantizan el éxito fuera de ella. Sin embargo, los gobiernos están obsesionados con medir competencias. ¿Cuál es su opinión sobre el informe PISA?
H.G. No me opongo. Y PISA es mejor que la mayoría mientras no se utilice para competir entre países o como arma política. Y, además, siempre se hacen trampas. El engaño suele ser por parte de la entidad política, que encuentra formas de elevar el rendimiento medio. Prefiero la evaluación formativa, en la que se detecta lo que está mal, a la aditiva, en la que se otorga una puntuación y se pasa a otras cosas.
«Creo que el mundo necesita una religión unificadora que no enfrente a un dios contra otro»
XL. ¿Dejaremos que la inteligencia artificial piense por nosotros?
H.G. Si la inteligencia artificial me ayuda a hacer algo mejor, estupendo. Pero no voy a entregar los juicios éticos a un sistema computacional no humano. Los valores deben negociarse dentro de una comunidad de seres humanos y no asignarse a un algoritmo cuyas fuentes y procesos no se entienden.
XL. ¿Qué vamos a necesitar para sobrevivir en esta época de incertidumbre?
H.G. Creo que el mundo necesita una religión unificadora que no enfrente a un dios contra otro. Me inspira Gandhi, que entendió lo que el mundo necesitaba mejor que nadie en el último milenio.
XL. ¿Y algo más realista?
H.G. Creo que en este siglo es muy importante tener una mente sintetizadora para poder manejar la sobrecarga de información a la que estamos expuestos y darles sentido a todos esos datos. Un truco: una buena síntesis no intenta abarcarlo todo.
XL. ¿Teme que algún día el rastro diario de información que dejamos en la Red se vuelva contra nosotros?
H.G. Es un tema que me preocupa mucho. China, Rusia y otros países autoritarios adoptan un enfoque; por su lado, Estados Unidos es muy permisivo en esto y reacio a instalar cualquier tipo de control. Creo que Europa es mucho más sensata: no controla el pensamiento, como hacen las sociedades autoritarias, ni se inhibe completamente.
TITULO: EN PRIMER PLANO - A FONDO - REVISTA XL SEMANAL PORTADA ENTREVISTA - En la tuya o en la mía - Miercoles -22- Junio -¿Dejaría a sus hijos estudiar aquí?,.
En la tuya o en la mía - Miercoles - 22- Junio ,.
En la tuya o en la mía', presentado por Bertín Osborne, acerca a los espectadores el lado más desconocido de personajes relevantes de diversos ámbitos. Durante aproximadamente una hora, los telespectadores tienen la oportunidad de conocer mejor al invitado y también al propio Bertín Osborne, en La 1 a las 22:30, el miercoles -22- Junio , etc.
EN PRIMER PLANO - A FONDO - REVISTA XL SEMANAL PORTADA ENTREVISTA - En la tuya o en la mía - Miercoles - 22- Junio - ¿Dejaría a sus hijos estudiar aquí?,.
En Roermond, en la frontera holandesa con Alemania, hay un colegio público donde los alumnos son los que deciden qué estudiar, cuándo y cómo. Una apuesta pedagógica radical que empezó con 30 estudiantes y que, gracias a sus resultados, ahora cuenta con lista de espera. Entramos en Agora, el colegio más extraño del mundo.
foto / Una barriada deprimida en Países Bajos. Media docena de adolescentes están subiéndose a un coche. Se encaraman al capó mientras la música de la radio suena a todo trapo. Su comportamiento no puede ser más descontrolado y antisocial. Pero estos jóvenes están a las puertas de un instituto, y todo esto forma parte de su educación.
TITULO: EL BLOC DEL CARTERO - LA CARTA DE LA SEMANA - MI CASA ES LA TUYA - viernes -17- Junio - Isabel Coixet - La rareza de lo normal , .
MI CASA ES LA TUYA - VIERNES -17- Junio ,.
MI CASA ES LA TUYA -', presentado por Bertín Osborne,.
acerca a los espectadores el lado más desconocido de personajes relevantes de diversos ámbitos. Durante aproximadamente una hora, los telespectadores tienen la oportunidad de conocer mejor al invitado y también al propio Bertín Osborne, en Telecinco a las 22:00, el viernes -17- Junio ,etc.
EL BLOC DEL CARTERO - LA CARTA DE LA SEMANA - MI CASA ES LA TUYA - viernes- 17- Junio - Isabel Coixet - La rareza de lo normal , .
Isabel Coixet - La rareza de lo normal , .
- Isabel Coixet - foto,.
Un día estás hablando de la Gioconda con un taxista y bajas del taxi y entras en un edificio y subes a un ascensor y entras en una oficina y te dicen que un tipo le ha tirado un plato de nata a la Gioconda y te da la risa porque no te lo crees y resulta que es verdad.
Otro día, te registras en un hotel y, arrastrando tu maleta, pasas delante de varios salones consecutivos donde se celebran comuniones y enlaces matrimoniales y suena Rauw Alejandro en todos menos en uno donde suena María del Monte, y bajas una planta en un ascensor y empiezas a dar vueltas y eres incapaz de encontrar tu habitación y arrastras la maleta sobre tus pasos otra vez, intentando seguir las indicaciones, y te cruzas con alguien que también arrastra su maleta y está perdido, y no decís nada la primera vez: sólo os miráis a hurtadillas porque os da vergüenza que el otro piense que sois incapaces de encontrar vuestra habitación, pero la tercera vez que os cruzáis ya os reís y una camarera que tararea una canción de María del Monte, «tú me dices cántameeeee», y empuja un carrito con una cubitera y copas os ayuda a encontrar la habitación diciendo que «todo el mundo se pierde la primera vez».
Te cruzas con alguien que también arrastra su maleta, perdido, y no decís nada: sólo os miráis a hurtadillas porque os da vergüenza que el otro piense que sois incapaces de encontrar vuestra habitación
Yo me perdí todo el tiempo que estuve en el hotel hasta que entendí que había que hacer justo lo contrario de las indicaciones porque las indicaciones sólo indicaban las habitaciones del hotel que no existían: acababan de cambiar la numeración y no se lo habían dicho a la gente de recepción, que, claro, como no lo sabía, no te lo decía. Y me vino a la cabeza el tirador de platos de nata y entendí de repente a ese hombre que tiraba una tarta de nata a la Gioconda, porque cuando en la vida te ocultan las reglas del juego y te dan unas cartas marcadas con un código indescifrable, reaccionas de la peor manera posible y atacas al cuadro más bello del mundo, aunque sólo sea para fastidiar un rato la vida de un turista de Seúl que ha estado ahorrando la mitad de su vida para ir a París y ver el Louvre, y mientras limpian de nata el cristal que cubre la Gioconda, vacían la sala y te quedas sin ver ese cuadro y sólo te dio tiempo a hacer una foto desenfocada de la nata en el cristal que cubre la obra.
Al turista de Seúl no le cabe en la cabeza que alguien haya hecho algo así y, cuando vuelve a su país, afirma que él vio al hombre disfrazado con peluca y silla de ruedas, que a él ya le pareció raro ese hombre, pero no más raro que todas las cosas que estaba viviendo en la Ciudad de la Luz, como el precio astronómico del agua con gas Perrier en las terrazas o la persistencia de las llaves de su hotel en desmagnetizarse o la imposibilidad de encontrar buen kimchee en París.
A todo esto, me he vuelto a perder en el hotel, hoy han quitado todos los números de las habitaciones y los huéspedes nos cruzamos como sonámbulos por los pasillos, soñando con tirarle platos de nata a la Gioconda, al David de Miguel Ángel o al gracioso de turno que nos hace la vida un poco más absurda, un poco menos vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario