Leyla se agarra a la vida gracias a la ayuda anónima .
Un viandante dio el aviso y el lacero de la perrera municipal se encargó de llevarla ... Leyla se agarra a la vida gracias a la ayuda anónima.-foto
Esta perra fue abandonada con un tumor y mañana será operada en Madrid,.
Los ojos marrones y tristes de Leyla reflejan una historia amarga que
tiene un final abierto. Esta perra braca alemana de entre 6 y 8 años
fue abandonada en Don Benito cerca de la avenida de Badajoz. Un
viandante dio el aviso y el lacero de la perrera municipal se encargó de
llevarla hasta este lugar de acogida ubicado en la granja educativa El
Mansegal.
El animal se encuentra enfermo, pues tiene un bulto de gran tamaño que apenas le deja caminar. Hace más de una semana, el veterinario confirmó que se trataba de un tumor mamario, aunque después de realizar una prueba no pudo determinar si era maligno o benigno.
Una de las posibles soluciones que sugirió el experto fue operarla, eliminarle el tumor y realizar una biopsia para determinar el grado de la dolencia. Ante este diagnóstico las voluntarias de la perrera se pusieron manos a la obra para conseguir que Leyla disfrutara de la oportunidad de ser curada, teniendo en cuenta que el presupuesto de la cirugía ascendía a unos 300 euros.
Según cuenta, la recaudación funcionó bien. «Logramos rápido los 300 euros, todos de personas de a pie, ninguna asociación. Algunos vecinos dejaron el dinero en El Mansegal aunque la mayoría de las aportaciones son del resto de España e incluso de Alemania», asegura.
La suerte no estuvo de cara para encontrar nuevo dueño, pero a través de la asociación protectora de animales Perrikus, situada en la sierra norte de Madrid, se ha abierto un rayo de esperanza. Mañana Leyla será operada allí. «Rezaremos para que el tumor sea benigno. Si no fuera así y está en fase 1 o 2, le harán los tratamientos oportunos y seguiríamos pidiendo ayuda; si está en fase 3, ya contemplaremos otras opciones», indica Mari Cruz. Después de la intervención, Perrikus buscará un hogar para Leyla en la capital o alrededores
La voluntaria cree que la sociedad se va concienciando del respeto hacia los animales, aunque todavía queda trabajo por hacer. «Muchos perros son adoptados en Don Benito y son muy felices pero hay otros dueños que dejan mucho que desear, los atan con correa corta y les echan de comer pan duro», manifiesta.
Al igual que la draca alemana, este perro con apellido de Beatle será trasladado en breve. «Quizá a una casa de acogida en Francia porque los mastines son de difícil adopción. A las tres semanas de ser operado, viajará», apunta la encargada, quien hace un llamamiento a la responsabilidad de los que tienen mascota porque, como demuestran estos dos casos, en ocasiones, el hombre es el peor amigo del perro.
El animal se encuentra enfermo, pues tiene un bulto de gran tamaño que apenas le deja caminar. Hace más de una semana, el veterinario confirmó que se trataba de un tumor mamario, aunque después de realizar una prueba no pudo determinar si era maligno o benigno.
Una de las posibles soluciones que sugirió el experto fue operarla, eliminarle el tumor y realizar una biopsia para determinar el grado de la dolencia. Ante este diagnóstico las voluntarias de la perrera se pusieron manos a la obra para conseguir que Leyla disfrutara de la oportunidad de ser curada, teniendo en cuenta que el presupuesto de la cirugía ascendía a unos 300 euros.
Cadena solidaria
Mari Cruz Roiz es una de las seis personas que cuidan altruistamente
a los canes. Entre otras labores, ella se dedica a la difusión de las
necesidades que surgen en el recinto y fue la que inició una colecta
comunitaria a través de las redes sociales para poder realizar la
operación y encontrar una casa de acogida durante el período de
convalecencia. Según cuenta, la recaudación funcionó bien. «Logramos rápido los 300 euros, todos de personas de a pie, ninguna asociación. Algunos vecinos dejaron el dinero en El Mansegal aunque la mayoría de las aportaciones son del resto de España e incluso de Alemania», asegura.
La suerte no estuvo de cara para encontrar nuevo dueño, pero a través de la asociación protectora de animales Perrikus, situada en la sierra norte de Madrid, se ha abierto un rayo de esperanza. Mañana Leyla será operada allí. «Rezaremos para que el tumor sea benigno. Si no fuera así y está en fase 1 o 2, le harán los tratamientos oportunos y seguiríamos pidiendo ayuda; si está en fase 3, ya contemplaremos otras opciones», indica Mari Cruz. Después de la intervención, Perrikus buscará un hogar para Leyla en la capital o alrededores
La voluntaria cree que la sociedad se va concienciando del respeto hacia los animales, aunque todavía queda trabajo por hacer. «Muchos perros son adoptados en Don Benito y son muy felices pero hay otros dueños que dejan mucho que desear, los atan con correa corta y les echan de comer pan duro», manifiesta.
Lennon, un mastín cojo
La situación de Leyla no es aislada. En 'El Mansegal' espera Lennon,
que es un mastín con los ligamentos y tendones de una pierna rotos.
Hasta allí lo llevaron «unos señores de La Haba» que, según decían, el
perro no tenía amo y se metió en una finca donde atacaba a las gallinas.
Mari Cruz duda de esta versión. «Muchas veces los dueños traen a perros
que están lastimados y cuentan historietas para que los acojamos, pero
al ser un sitio municipal, tenemos que atenernos a las normas y no
podemos entrar y sacar perros como quisiéramos», narra. Al igual que la draca alemana, este perro con apellido de Beatle será trasladado en breve. «Quizá a una casa de acogida en Francia porque los mastines son de difícil adopción. A las tres semanas de ser operado, viajará», apunta la encargada, quien hace un llamamiento a la responsabilidad de los que tienen mascota porque, como demuestran estos dos casos, en ocasiones, el hombre es el peor amigo del perro.
TÍTULO : La Reina del azucar Patricia Arribalzaga,.
La diseñadora de pasteles de Alta Costura-foto- Patricia Arribálzaga
desvela sus secretos en un libro. Sus dulces han sido lucidos por
joyerías como Tiffany o Tous y es un referente mundial del 'sugarcraft',.
Sin llegar a la excentricidad que llevó a Leonardo da Vinci a
construir una tarta de 60 metros para celebrar dentro de ella la boda de
Ludovico Sforza 'El Moro' con Beatrice d'Este -tarta que, por cierto,
se comieron las ratas antes de empezar la ceremonia-, la actual
tendencia en pastelería destaca por sus grandes creaciones de varios
pisos en los que la decoración en 'sugarcraft' (modelado artístico en
azúcar) las hace pasar por verdaderas obras de arte. Así, eventos tan
especiales como la fiesta del 50 aniversario de 'Desayuno con
diamantes', celebrada por la famosa joyería de lujo Tiffany, el 50
cumpleaños de Barbie o el 25 de la emblemática joya en forma de oso de
Tous no han podido prescindir de tener en sus galas una de estas tartas
tan especiales, diseñadas especialmente para la ocasión. Tras todas
ellas está la mano experta de Patricia Arribálzaga, una de las más
reconocidas 'cake designer' y referente mundial del 'sugarcraft'.
Esta argentina, que se estableció en Sitges (Barcelona) en 2002 para fundar su Atelier Cakes Haute Couture, montó la primera empresa y escuela en España dedicada a la pastelería de diseño. De hecho, su marca Alta Costura en repostería se hizo tan conocida que se identifica con este nombre todo este tipo de pastelería que despuntó hace cinco años en nuestro país y que como ella misma indica, «es una tendencia que no deja de crecer, sobre todo en una era tan visual como la que vivimos».
Ahora Patricia Arribálzaga desvela algunas de sus recetas y secretos en 'Pasteles de Alta Costura', editado por Libros Cúpula, y enseña a los lectores cómo lograr hacerlos, porque según afirma: «Es todo técnica. Con práctica y perseverancia se logra la excelencia».
-Estudió Bellas Artes. ¿Le ha servido para sus creaciones?
-Por supuesto, lo que hago me ha dado la posibilidad de unir mis dos pasiones: la cocina y el arte. De hecho, gran parte de la inspiración la encuentro en la pintura, en la arquitectura... Pero también, y mucho, en la moda y en la jardinería, que es algo que me encanta.
-¿La tarta más compleja?
-La del 50 aniversario de Barbie, una tarta de seis pisos para 650 personas con un metro de diámetro y dos de altura. Recuerdo que tuvimos que construir un rodillo especial para trabajar la pasta de azúcar. Eso sí, quedó espectacular decorada con las Barbies más icónicas, desde la primera de 1959, a la Barbie astronauta, la Pop Star... Además, creamos un sabor especial para ella, de champán rosado y arándanos, y estaba recubierta de fondant rosa y purpurina comestible.
-Elaboró también todas las tartas para la boda de la diseñadora Maya Hansen. Un trabajo descomunal...
-Así es, pero también fue uno de los más creativos que he afrontado. Maya quería sustituir los centros de las 20 mesas por tartas de tres pisos y que fueran diferentes entre sí. Estaban inspiradas en sus corsés y vestidos e iban acordes a la estética de cada una de las mesas. La idea, que ahora me la piden mucho, es que durante la fiesta los comensales pudieran recorrer la sala probando los diferentes pasteles. Eso sí, aunque la decoración con azúcar se prepara con antelación, estuvimos tres noches sin dormir trabajando sin parar para poder elaborar todas las tartas y cubrirlas con el fondat.
-Así como para elaborar el oso de Tous empleó plata comestible, imagino que para el pastel inspirado en el Palacio de Versalles el oro habrá sido fundamental...
-Sí, para este pastel tan sofisticado inspirado en los colores de sus jardines utilicé oro comestible de 24 quilates. Ya en la Antigüedad este metal precioso era usado como alimento e incluso como medicina y en el Lejano Oriente se espolvoreaba sobre las viandas.
-¿Cuántos kilos de azúcar pueden gastar de media en una semana?
-Elaboramos unas siete tartas para 150 personas cada una por semana, así que hemos llegado a gastar 80 kilos de pasta de azúcar.
-¿Lo más complicado en el proceso de elaboración?
-Todo es cuestión de técnica, pero quizá sea montar los pisos. Es como un trabajo arquitectónico y hay que poner muy bien los pilares para que el pastel no se venga abajo.
-¿Cuánto cuestan estos pasteles y cuál es el más caro que haya hecho?
-Pues justo de los más caros no puedo hablar porque hay personas que son muy celosas de su intimidad, tanto que nos hacen firmar acuerdos de confidencialidad ante notario para que no revelemos nada, ni siquiera podemos publicitar el pastel. Como mínimo un pastel de 150 raciones cuesta 1.500 euros, y el precio sube dependiendo de las horas de trabajo que requiera, si va pintado a mano, si lleva mucho oro...
-¿Cuál es la actual tendencia en decoración en este tipo de pastelería?
-Las tartas muy personalizadas, que capten el espíritu de la fiesta o de las personas para quienes se encarguen. También se llevan mucho las tartas pintadas a mano.
-A veces estos dulces tan bonitos tienen mala fama en cuanto al sabor se refiere. ¿Su secreto?
-Eso sucede porque a veces los hay un tanto secos y con sabores muy del gusto del mundo anglosajón, no olvidemos que es su cuna, pero se pueden hacer tartas húmedas, con cremas que jueguen con la sorpresa del sabor y combinaciones más exóticas, incluso de cócteles. En mi empresa hemos innovado mucho en esa área, así podemos ofrecer al cliente dulces con sabor a Margarita, con crema de Cosmopolitan, de Green Apple Martini, Sex on the Beach... Pueden saber al cóctel que elija el consumidor.
Esta argentina, que se estableció en Sitges (Barcelona) en 2002 para fundar su Atelier Cakes Haute Couture, montó la primera empresa y escuela en España dedicada a la pastelería de diseño. De hecho, su marca Alta Costura en repostería se hizo tan conocida que se identifica con este nombre todo este tipo de pastelería que despuntó hace cinco años en nuestro país y que como ella misma indica, «es una tendencia que no deja de crecer, sobre todo en una era tan visual como la que vivimos».
Ahora Patricia Arribálzaga desvela algunas de sus recetas y secretos en 'Pasteles de Alta Costura', editado por Libros Cúpula, y enseña a los lectores cómo lograr hacerlos, porque según afirma: «Es todo técnica. Con práctica y perseverancia se logra la excelencia».
-Estudió Bellas Artes. ¿Le ha servido para sus creaciones?
-Por supuesto, lo que hago me ha dado la posibilidad de unir mis dos pasiones: la cocina y el arte. De hecho, gran parte de la inspiración la encuentro en la pintura, en la arquitectura... Pero también, y mucho, en la moda y en la jardinería, que es algo que me encanta.
-¿La tarta más compleja?
-La del 50 aniversario de Barbie, una tarta de seis pisos para 650 personas con un metro de diámetro y dos de altura. Recuerdo que tuvimos que construir un rodillo especial para trabajar la pasta de azúcar. Eso sí, quedó espectacular decorada con las Barbies más icónicas, desde la primera de 1959, a la Barbie astronauta, la Pop Star... Además, creamos un sabor especial para ella, de champán rosado y arándanos, y estaba recubierta de fondant rosa y purpurina comestible.
-Elaboró también todas las tartas para la boda de la diseñadora Maya Hansen. Un trabajo descomunal...
-Así es, pero también fue uno de los más creativos que he afrontado. Maya quería sustituir los centros de las 20 mesas por tartas de tres pisos y que fueran diferentes entre sí. Estaban inspiradas en sus corsés y vestidos e iban acordes a la estética de cada una de las mesas. La idea, que ahora me la piden mucho, es que durante la fiesta los comensales pudieran recorrer la sala probando los diferentes pasteles. Eso sí, aunque la decoración con azúcar se prepara con antelación, estuvimos tres noches sin dormir trabajando sin parar para poder elaborar todas las tartas y cubrirlas con el fondat.
-Así como para elaborar el oso de Tous empleó plata comestible, imagino que para el pastel inspirado en el Palacio de Versalles el oro habrá sido fundamental...
-Sí, para este pastel tan sofisticado inspirado en los colores de sus jardines utilicé oro comestible de 24 quilates. Ya en la Antigüedad este metal precioso era usado como alimento e incluso como medicina y en el Lejano Oriente se espolvoreaba sobre las viandas.
-¿Cuántos kilos de azúcar pueden gastar de media en una semana?
-Elaboramos unas siete tartas para 150 personas cada una por semana, así que hemos llegado a gastar 80 kilos de pasta de azúcar.
-¿Lo más complicado en el proceso de elaboración?
-Todo es cuestión de técnica, pero quizá sea montar los pisos. Es como un trabajo arquitectónico y hay que poner muy bien los pilares para que el pastel no se venga abajo.
-¿Cuánto cuestan estos pasteles y cuál es el más caro que haya hecho?
-Pues justo de los más caros no puedo hablar porque hay personas que son muy celosas de su intimidad, tanto que nos hacen firmar acuerdos de confidencialidad ante notario para que no revelemos nada, ni siquiera podemos publicitar el pastel. Como mínimo un pastel de 150 raciones cuesta 1.500 euros, y el precio sube dependiendo de las horas de trabajo que requiera, si va pintado a mano, si lleva mucho oro...
-¿Cuál es la actual tendencia en decoración en este tipo de pastelería?
-Las tartas muy personalizadas, que capten el espíritu de la fiesta o de las personas para quienes se encarguen. También se llevan mucho las tartas pintadas a mano.
-A veces estos dulces tan bonitos tienen mala fama en cuanto al sabor se refiere. ¿Su secreto?
-Eso sucede porque a veces los hay un tanto secos y con sabores muy del gusto del mundo anglosajón, no olvidemos que es su cuna, pero se pueden hacer tartas húmedas, con cremas que jueguen con la sorpresa del sabor y combinaciones más exóticas, incluso de cócteles. En mi empresa hemos innovado mucho en esa área, así podemos ofrecer al cliente dulces con sabor a Margarita, con crema de Cosmopolitan, de Green Apple Martini, Sex on the Beach... Pueden saber al cóctel que elija el consumidor.
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