TITULO:
El Objetivo La Sexta - SALVADOS LA SEXTA - La noche encendida
- Guerra fría entre aliados,.
La noche encendida,.
'La noche encendida'
no será solo un programa de charlas, espectáculo, música, comedia,
sorpresas e invitados, presentado por Pedro Ruiz, por La 2,foto,. etc,.
Guerra fría entre aliados,.
Solo un despegue de Casado en las encuestas y no la presión de Podemos puede encender las alarmas en Moncloa,.
foto / La relación entre el PSOE y Unidas Podemos se ha tensionado considerablemente en los últimos días. Resulta una paradoja. La luz verde a los Presupuestos ofrece oxígeno para desarrollar la legislatura y, sin embargo, han surgido nuevos escollos en la dinámica del Gobierno de coalición que tienen mucho más que ver con la exhibición de una coreografía que con otros debates de fondo. Ahora es la congelación o la subida del Salario Mínimo Interprofesional, o los planes antidesahucios, o las ayudas a los sectores más vulnerables, o los cortes de suministros a los más desfavorecidos durante el invierno... Las discusiones internas en el seno del Ejecutivo afloran al exterior y generan una 'guerra fría' imprevisible y demasiado teatralizada aunque el discurso primario y tosco de la derecha sigue siendo un pegamento eficaz. Por ahora.
La proyección de diferencias en el seno de la alianza que preside Pedro Sánchez no es ningún drama y puede formar parte de la lógica de una coalición inédita. Pero a la larga desgasta a los dos socios. Los socialistas se mantienen pero no logran despegar a costa de Podemos. Y los morados sufren lo indecible para conservar su espacio, según las encuestas, lo que les lleva a una presión escénica in crescendo. El estancamiento de ambos socios quizá refleja las carencias de un experimento forzado por la mutua necesidad, que, en todo caso, no tiene posible recambio. Lo que pudo haber sido Ciudadanos como una opción liberal bisagra y transversal no ha terminado de cuajar. Los primeros que lo saben son Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, conscientes desde casi el primer momento del reparto de papeles del que son protagonistas y de las dificultades que entraña su apuesta.
La coalición es un desafío novedoso en la cultura política española, en donde la gestión de la complejidad es un asunto aún muy poco trabajado desde la esfera política. Un partido socialdemócrata clásico se alía con una formación de nuevo cuño que nace a su izquierda y en el seno de los movimientos sociales tras el 15-M. Les rodean profundas desconfianzas y recelos atávicos que hunde sus raíces en el choque cultural de las tradiciones socialista y comunista. No hace demasiado tiempo nadie hubiera considerado sensato pensar que esta experiencia podría cristalizar en el sur de la Unión Europea. El gobierno de Tsipras en Grecia no era homologable. En Alemania se había registrado una iniciativa similar en su momento con la coalición entre los socialdemócratas y los verdes y allí la apuesta funcionó relativamente con éxito, a pesar de las discrepancias, que afectaron en especial al movimiento ecologista, dividido entre los 'realos', el ala más pragmática, y los 'fundis' más ortodoxos. Otro modelo cercano fue el gobierno socialista en minoría en Portugal apoyado desde fuera por los comunistas y el Bloco de Esquerda.
España no es Alemania ni Portugal, pero en el Partido Socialista puede empezar a incubarse un sentimiento cada vez más incómodo con su aliado si esta dinámica de tensión va en aumento y no se reconduce en algún momento. Lo que molesta en sí no es que haya discrepancias. Las hay dentro de la coalición y dentro del bloque socialista del gabinete.
Lo que irrita cada vez más es una táctica que se repite. Cada vez que surgen diferencias se filtran a los medios de comunicación y se genera una corriente de presión desde la izquierda al Partido Socialista, que se ve obligado a reaccionar y a moverse. Para el PSOE, es una espiral de deslealtad. Unidas Podemos, sin embargo, cree que responde al juego legítimo de una coalición en la que el socio minoritario hace un esfuerzo por no verse fagocitado por el pez grande. Cuando Iglesias habla de afianzar una «dirección política de Estado» hacia la izquierda se refiere a activar un experimento 'socialdemócrata de izquierdas' por primera vez en la historia de España. Al ala liberal del establishment no le gusta ese giro.
Por eso confía en el contrapeso de Calviño y de Bruselas, quiere recuperar el control de esa deriva y presiona a Sánchez. Pero la aritmética es tozuda. Ni siquiera unas nuevas elecciones depararían un cambio en la relación de fuerzas. Solo un serio despegue de Pablo Casado en las encuestas encenderá las luces rojas en La Moncloa. Por ahora hay dudas aunque la fatiga pandémica empieza también a hacer mella. La llegada de la vacuna y su eficacia, el dinero de los fondos europeos para los proyectos y la recuperación de la economía y del empleo en 2021 son los salvavidas de Sánchez. Pero tardarán unos meses y ese tiempo de espera somete a todos a una prueba de estrés y de impaciencia.
La hora de los Fósforos - La Cope - CARLOS HERRERA - Banana Split - Con el morro fino .fotos,.
Banana Split - Con el morro fino,.
Hay músicos que se distinguen por su exquisitez. Con ciertos chefs es igual: su visión de la cocina es puro arte. Mikel López Iturriaga propone un recorrido para deleitar oídos y paladares junto a Rufus Wainwright, Anni B Sweet con Lori Meyers o el chef Gonzalo D'Ambrosio.
TITULO: RADIO
- TELEVISION - EL TRANVÍA DEL TIEMPO - EL BOTIJO - El Checkpoint Charlie busca destino digno 30 años después ,.
RADIO - TELEVISION - EL TRANVÍA DEL TIEMPO - EL BOTIJO - El Checkpoint Charlie busca destino digno 30 años después ,. , fotos,.
El Checkpoint Charlie busca destino digno 30 años después,.
El mítico puesto de control entre los sectores occidental y oriental de Berlín durante la Guerra Fría es en la actualidad centro de atención de los turistas que visitan la ciudad,.
El 22 de junio de 1990 el Checkpoint Charlie, el emblemático puesto fronterizo entre el este y el oeste de Berlín era desmantelado. Treinta años después, este cruce, reducto de la Guerra Fría, sigue sin encontrar la manera de reinventarse.
Cinco cosas importantes que hay que saber sobre este famoso punto de control, que aparece por ejemplo en la película de James Bond 'Octopussy', del año 1983. El puesto fronterizo fue establecido por los aliados en septiembre de 1961, coincidiendo con la construcción del Muro de Berlín, que separó la capital alemana durante casi 30 años entre su parte comunista, al este, y su mitad occidental. Su nombre se debe al alfabeto fonético de la OTAN, C, como Charlie.
Hasta la reunificación del país, en 1990, fue el más importante punto de paso de extranjeros y diplomáticos. También fue un lugar de intercambio de prisioneros.
El Checkpoint Alpha (A), el lugar de paso más importante entre los dos bloques, estaba situado en Helmstedt, y el Checkpoint Bravo (B) estaba en Dreilinden, en la entrada de Berlín-Oeste. Este último fue el escenario de varios intentos audaces de fuga de alemanes desde el este hacia el oeste que inspiraron incluso películas de cine. Representaba finalmente la única apertura en el muro de hormigón y alambradas que separaba la ciudad.
En abril de 1962, el austriaco Heinz Meixner logró atravesar el control al volante de un descapotable junto a su prometida del este de Berlín y su futura suegra. Había logrado reducir tanto la altura del vehículo que pasó por debajo de la barrera y para cuando los guardias de seguridad se dieron cuenta ya estaba al otro lado. Todos los berlineses conocían su rostro, que aparece en millones de fotos de recuerdo.
Escenario de enfrentamientos
El 27 de octubre de 1961, decenas de tanques y soldados de los bandos se enfrentan durante 16 horas tras un problema sobre la libre circulación de ciudadanos de países aliados entre las dos partes de la ciudad. Los soviéticos quisieron registrar a un diplomático estadounidense que deseaba ir Berlín-Este, lo que se oponía a los acuerdos en vigor. El presidente estadounidense John F. Kennedy y el dirigente soviético Nikita Kruschev dieron finalmente la orden de retirar los tanques antes de que el incidente provocara una nueva guerra.
Tras la reunificación alemana, el Checkpoint Charlie se transformó en una especie de parque temático sobre la Guerra Fría donde vendedores de recuerdos ofrecían típicos gorros rusos, máscaras de gas de plástico o soldados americanos de juguete. Era un lugar de visita obligada para todo aquel que iba a Berlín. El Ayuntamiento de la ciudad no apreció mucho el comercio que comenzó a rodear el lugar y debate desde hace tiempo sobre el destino que se debe dar a este punto emblemático.
El soldado cuyo retrato se ve hoy en el antiguo Checkpoint Charlie es un exmúsico que tocaba la tuba en el ejército estadounidense llamado Jeff Harper. Tenía 22 años cuando fue fotografiado para una serie de conmemoraciones de los últimos soldados aliados en Berlín en 1994. Su retrato fue elegido más tarde para ser expuesto en el lugar, al lado del de un soldado soviético.
El último proyecto es construir pequeños edificios en los que el 30% de las casas sean viviendas sociales, una plaza pública y un verdadero museo de la Guerra Fría.
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