TITULO: Cena con mamá - Raúl Castro , Viernes -23- Abril .
Viernes -23-Abril a las 22:00 en La 1, foto,.
Raúl Castro, la última reliquia de la revolución de los barbudos,.
Fue la mano derecha de Fidel durante 50 años y ha demostrado más cintura que él. Tras dos mandatos al frente de Cuba, el general abandona la vida pública, dejando un país que anhela más reformas,.
Lo contaba el periodista español Enrique Meneses en su libro 'Fidel Castro, Patria y Muerte', donde relataba las tribulaciones de la insurgencia cubana en Sierra Maestra. «¡En cuanto llegue lo fusilo! ¡Me importa un carajo que sea mi hermano! ¡Lo fusilo!». La anécdota se remonta a 1958, cuando Raúl Modesto Castro Ruz (Birán, 1931), a la sazón comandante, recorría la provincia de Oriente liderando una columna guerrillera, todos barbudos salvo él. Raúl solía intercambiar correspondencia con Ernesto 'Che' Guevara, epístolas preñadas de utopía y justicia social donde ambos daban rienda suelta a sus afanes.
Quiso el destino que una de aquellas cartas cayese en manos de los soldados de Fulgencio Batista, al que sin saberlo le quedaba menos de un año en la poltrona. La dictadura utilizó la misiva para extender la idea de que los rebeldes querían instaurar un régimen comunista en la isla. Fidel, que por aquel entonces estaba lejos de imaginar un Bahía Cochinos ni que acabaría echándose en brazos de los rusos, abroncó a su hermano cuando le tuvo a tiro. «¡No me estoy rompiendo los cuernos luchando contra una dictadura para caer en otra!», recuerda Meneses que le dijo. Las vueltas que da la vida.
Raúl, hijo de gallego, expulsado de varios colegios, metido en un internado militar a la fuerza, fue llevado a rastras por su hermano a La Habana para que estudiase Administración Pública antes de hacer la revolución. Aún se le tiene que aparecer en sueños Nikolai Leonov, el espía del KGB al que conoció cuando no era nadie y con quien tejió una amistad que tendría luego consecuencias en el tablero internacional. También la celda de Isla de Pinos -R. L. Stevenson situó allí 'La Isla del Tesoro'-, en la que pasó dos años encerrado por asaltar el cuartel Moncada y donde se forjó el revolucionario que sería después.
Raúl, que se asoma ya a los 90 años, no sólo ha conseguido sobrevivir a los arrebatos de su hermano, sino que se ha convertido en el artífice de los primeros signos de aperturismo en el país caribeño. Siguiendo sus instrucciones, el Congreso del Partido Comunista de Cuba, el primero que se celebra desde la muerte de Fidel, elige este fin de semana al sucesor de una estirpe que ha sido el faro de todos los movimientos revolucionarios surgidos en América Latina en los últimos 60 años.
Un proceso que arrancó con la preselección de los 605 candidatos a la Asamblea Nacional, el paso por las urnas de 8 millones de cubanos y la constitución de la Cámara, y que acaba con la propuesta de miembros del Consejo de Estado y el nombramiento del presidente, cargo para el que Raúl llevaba tiempo postulando a Miguel Díaz-Canel, su mano derecha y actual vicepresidente. Un candidato que ni siquiera había nacido cuando un jovencísimo Fidel respondió al tribunal que le juzgaba por el asalto al Moncada aquello de que la Historia le absolvería.
Socialismo «irreversible»
Tal y como prometió, Raúl se retira después de cumplir dos mandatos presidenciales de 5 años, bendecido primero por Barak Obama -con el que inició un deshielo, canje de espías incluido- y denostado después por Donald Trump -que volvió a la casilla de salida, la misma que Biden se muestra ahora reticente a abandonar-. Atrás deja una agenda de reformas que nunca hubiera suscrito su hermano Fidel, y que él jura y perjura sólo persiguen apuntalar el carácter «irreversible del socialismo», el mismo que recoge la Constitución aprobada en 2019, «hija de su tiempo y reflejo de la diversidad de la sociedad».
Cambios radicales al menos para un régimen como el cubano, donde la gente ha acabado haciendo de la necesidad virtud -en buena medida debido al embargo que mantiene Estados Unidos- y la libertad de expresión brilla por su ausencia. Un ejemplo. Los cubanos ya pueden comprarse un automóvil o una casa. Y hasta venderlos. Una medida que en el caso de las viviendas ha alentado un mercado de bienes raíces que, aunque tímido, sigue creciendo; y que en el de los coches tropieza continuamente con los precios desorbitados para un ciudadano medio. Es más, pueden ir a los hoteles de su propio país, algo para lo que hasta hace bien poco sólo estaban autorizadas las parejas de recién casados o los trabajadores especializados. Como lo oyen.
Otra medida 'revolucionaria': favorecer las inversiones extranjeras, abriendo un polo industrial en el puerto de Mariel. O el acceso a Internet, una bomba en uno de los países con mayores tasas de acceso a la educación. En 2010, Raúl abrió la isla a la propiedad privada, creando el fenómeno de los 'cuentapropistas', que tiene en los paladares o restaurantes su manifestación más conocida. También la reforma migratoria, que desde 2013 autoriza a los cubanos a salir del país hasta por espacio de dos años sin perder sus bienes ni su residencia. ¿Suficiente? Seguro que no, aunque con Fidel la mayoría de estas reformas habrían entrado en el terreno de la ciencia-ficción.
El Raúl que se dispone a abandonar la vida pública ha sido testigo de giros de la historia difíciles de asimilar en el mundo actual. El aura romántica que siguió al triunfo de la revolución, vientos de guerra cuando estalló la Crisis de los Misiles, años de bonanza a la sombra de los soviéticos, el descenso a los infiernos cuando cayó el Telón de Acero y con él la ayuda que le llegaba del Este...
Quienes visitaban la isla en los noventa hablaban de un país hambriento en el que costaba encontrar perros o gatos porque acababan en la cazuela; sacudido por huracanes que causaban destrozos millonarios, haciendo cada vez más hondo el agujero económico en el que aún hoy vive sumido el país. Tuvo que llegar Hugo Chávez y la inyección de crudo venezolano a precio de saldo para que el país levantara cabeza.
Durante todo ese tiempo, Raúl Castro, Héroe de la República y ministro de las Fuerzas Armadas, ha sabido mantenerse siempre a flote, ya fuera al frente de Interior, de Cultura o de Salud Pública. Casado con Vilma Espín hasta el fallecimiento de ésta en 2007, tiene cuatro hijos y una cintura bastante más flexible que la de su hermano, como quedó de manifiesto cuando restableció relaciones con los Estados Unidos de Barak Obama, para lo que no dudó en contar con la mediación del Vaticano.
TITULO:
Imprescindibles' estrena en La 2 -Fallece el conocido fotógrafo de Mallorca Donal G. Murray ,.
Domingo -25- Abril,.
Domingo -25- Abril a las 21:30 horas en La 2, foto,.
Fallece el conocido fotógrafo de Mallorca Donal G. Murray,.
El fotógrafo Donald Gordon Murray (Toronto, Canadá, 1943) falleció este sábado en Palma. Murray fue piloto de las fuerzas aéreas canadienses. En 1979 se instaló en Mallorca.
De formación autodidacta, publicó reportajes en multitud de revistas de estilo, moda y diseño. Es autor de la parte gráfica de 'Finques rústiques de les Balears' (1980), coordinado por Aina Pascual; 'Ses nostres cases, arquitectura tradicionals de les Balears' (1986), de Catalina Cantarellas; 'La casa y el tiempo' (1988), en dos volúmenes, también de Aina Pascual; y 'El modernismo y su tiempo' (1989), de Miquel Seguí.
Asimismo colaboró con muchas de las obras de la colección 'La Illa de la Calma' de J.J. Olañeta, como 'La Catedral de Mallorca'; 'El Consell de Mallorca. Història i Patrimoni' o 'La imatge de la música de les Illes Balears'. Con su esposa Aina Pascual y el investigador Jaume Llabrés, publicó algunas obras, entre ellas 'El Baluard de sant Pere i la Ribera del Moll'. Su producción sobre la historia y el patrimonio de Mallorca es muy abundante.
TITULO:
De seda y hierro - Los libros se hacen fuertes en la televisión .
Domingo -25- Abril ,.
El Domingo -25- Abril a las 20:20 por La 2, foto,.
Los libros se hacen fuertes en la televisión,.
'Fortunata y Jacinta' estrenó la adaptación de novelas en TV y las plataformas han convertido la pantalla en reclamo literario,.
«El cuervo abrió el pico y graznó; fue un chillido agudo de miedo, y los jirones de niebla gris que se arremolinaban a su alrededor se desgarraron como un velo, y vio que el cuervo no era tal (…) ¿Dónde? En Invernalia, claro, la recordaba bien; y entonces se dio cuenta de que estaba en Invernalia, en una cama, en una habitación helada en la cima de una torre». Estas son palabras escritas en 'Canción de Hielo y Fuego' de George R. Martin.
Pero, en la mítica serie de 'Juego de Tronos' (2011), que este mes de abril cumple diez años desde su estreno, se vio un plano general que se acercaba a un cuervo en un paisaje helador rodeado de nieve para acabar entrando en una habitación. Así es como novela y ficción televisiva maridaron en esta saga que ha dejado boquiabiertos a millones de espectadores en todo el planeta.
En este caso, R. Martin trabajó también en el desarrollo del guion televisivo para HBO, pero «normalmente, cualquier escritor con experiencia prefiere desentenderse», explica a este periódico Antonio Onetti, guionista de cine y televisión y presidente de la SGAE. «En mi caso, mi papel, casi siempre, ha sido supervisar los guiones», destaca María Dueñas, autora de las novelas 'La Templanza' (2015) y 'El tiempo entre costuras' (2009).
La irrupción de Netflix, HBO, Movistar+ o Prime Video de Amazon ha espoleado esta unión de dos mundos tan diferentes. «Tanto las novelas como los guiones tienen el mismo esqueleto y se nutren de los mismos ingredientes: un conflicto, un personaje y un objetivo», destaca Susana López, coordinadora de guion de Boomerang TV.
Como dice el dicho español, la duda está en si fue antes el huevo o la gallina. «Yo siempre me aíslo y me centro en mi novela, no pienso en televisión», explica Dueñas. «Aunque si me preguntas si hay alguna idea creativa mía para trasladarla directamente a lo audiovisual, pues te diría que estamos valorando opciones».
Precisamente, Susana López ha sido una de las encargadas de llevar a la televisión en los últimos meses las 545 páginas de 'La Templanza', de María Dueñas. «Hemos tenido tiempo en esta serie incluso de alargar la historia», añade.
Esta ficción cuenta las aventuras de Soledad Montalbo y Mauro Larrea, Leonor Watling y Rafael Novoa, con tintes de superproducción. Una reproducción «fiel de la novela de Dueñas» aseguran ambas. Pero, sabiendo que la televisión es otra forma de ver y contar las cosas: «Los escritores tendemos a cerrarnos más a lo nuestro, a nuestras percepciones y nuestra manera de ver las cosas», responde la escritora puertollanense. «También hay que tener un poco de tolerancia en estas cosas», puntualiza.
La fidelidad al texto
Decía Borges que «el libro es el instrumento más asombroso porque es una extensión de la memoria y de la imaginación». Estas palabras del escritor bonaerense definen a la perfección la liturgia de la lectura y el mundo que el lector recrea en su mente. «Hay muchas maneras de transformar lo que el autor ha escrito en el original», expresa Antonio Onetti, que trabajó como guionista en 'La Catedral del mar (2016), una adaptación de la novela de Ildefonso Falcones. Producida por Atresmedia, TV3 y Netflix, Falcones llevaba a sus lectores a la Barcelona del siglo XIV bajo la Corona de Aragón en uno de los momentos más prósperos de la ciudad. Aitor Luna, Michelle Jenner y Silvia Abascal fueron los encargados de dar vida a los guiones adaptados por Onetti.
«Es cierto que es una tranquilidad contar con la ayuda del escritor a la hora de adaptar una novela», recalca Susana López. Pero, «yo diría a la gente que, aunque adapten tu libro o tu película favorita y te decepcione, el original no va a desaparecer», intenta tranquilizar a los amantes de la lectura la coordinadora de Boomerang TV. «Los que adaptamos novelas no vamos a coger las copias del libro y las vamos a prender, así que se pueden disfrutar los dos productos».
Un largo idilio en España
Este matrimonio entre papel y televisión es ya una larga historia de amor, con sus momentos dulces y también con sus amargos pasajes. El salto se dio en los 80 con la adaptación de 'Fortunata y Jacinta' en TVE, «el papel lo soporta todo y la televisión no tanto», añade Onetti.
En los últimos años se está viviendo una segunda luna de miel en España. Al éxito internacional de 'Juego de Tronos', se sumó la de 'Crematorio' (2011), que cambió el mundo de la ficción televisiva en España.
La aplaudida novela de Rafael Chirbes hablaba sobre la corrupción urbanística y política. Una época donde el Caso Malaya era 'trending topic', que se diría ahora, y donde la Gürtel empezaba a asomar la cabeza. Chirbes se centraba en una ciudad imaginaria del Levante español infectada por la corrupción y que los Cabezudo llevaron a Canal+ a competir cara a cara con otro tipo de mafia, la de 'Los Soprano'.
Otros éxitos más recientes han llegado con 'Patria' (2016), de Fernando Aramburu, llevada a la pequeña pantalla por HBO y, un año antes, con 'Fariña' (2015), la novela de Nacho Carretero sobre el narcotráfico en Galicia, que llegó a la televisión de la mano de Atresmedia.
TITULO:
Noche Sexo - Monica y el sexo -Diez falsos mitos de la sexualidad masculina ,.
El viernes -23- Abril 0.40 / Cuatro, foto,.
Diez falsos mitos de la sexualidad masculina,.
Hay ideas, casi prehistóricas, que presionan, acomplejan y ponen trabas al disfrute. ¿Las desterramos ya?,.
Si vamos a un museo arqueológico, donde se muestran tallas y figuras de los albores de la humanidad, nos encontraremos con hombrecillos y dioses dotados de enormes falos, de genitales descomunales que eran símbolo de poder, fertilidad, virilidad y fuerza. Por aquel entonces también creían que pintando un bisonte en la pared de la cueva lograrían cazar uno. Sabían muy poco del mundo y, claro, sacaban sus propias conclusiones 'mágicas' para explicarlo. Miles de años después, ya sabemos que lo de los bisontes es una memez, pero lo del tamaño del pene y sus 'superpoderes', así como un montón de ideas sobre la potencia sexual masculina, sigue teniendo un enorme arraigo. Ni la ciencia, con sus miles de estudios sobre el tema, ni los sexólogos han logrado desterrar del todo los mitos. Por eso siguen teniendo las consultas llenas de hombres preocupados, ya que ciertas creencias presionan al varón «y le pueden llegar a acomplejar y agobiar», explica Jesús E. Rodríguez, director del del Instituto Sexológico Murciano. Y, claro, si el varón está avergonzado o inseguro, ni él ni su pareja van a disfrutar como se debe del sexo, que es una de las pocas parcelas que nos quedan a los humanos de libertad, goce e instinto.
«El porno clásico, la falta de educación sexual y la sociedad coitocentrista están creando unas expectativas que luego generan graves problemas: hombres con depresión, que temen perder a su pareja... Además, suelen callárselo por vergüenza, cuando se pueden buscar soluciones», apunta Patricia López, CEO y fundadora de MYHIXEL, una 'startup' dedicada al bienestar sexual masculino y que ofrece, entre otras cosas, una aplicación para combatir la eyaculación precoz y el control del clímax. «Es que, en una relación heterosexual, ellos tienes que ser 'empotradores' bien dotados y expertos amantes, en ellos recae la responsabilidad del clímax femenino», lamenta Sara Martínez Rodríguez, de la firma de artículos sexuales EroticFeel.
Estos son, según tres expertos, los principales falsos mitos que lastran la sexualidad masculina.
El tamaño importa
A estas alturas, debería verse como una estupidez lo de que el tamaño del pene influye en el placer sexual que se proporciona a la pareja. Pero no. «Los hombres tienen una gran preocupación por este tema, que en algunos casos limita su vida –evitan cambiarse en el gimnasio, les da corte ir a comprar preservativos de su talla...– y que en los casos más acusados desemboca en un complejo ya a nivel clínico, en un trastorno dismórfico corporal», apunta Rodríguez. Es decir, que creen que sufren una 'anormalidad' cuando, encima, casi siempre entran dentro de baremos normales. El sexólogo nos lo explica: «Hay casos de micropene, que sería el que mide menos de siete centímetros en erección y que sí que puede limitar las relaciones, por lo que hay que ir a un especialista: principalmente, porque puede haber, por ejemplo, una alteración endocrina. Pero, salvo en esos casos excepcionales, la realidad es que el tamaño de los penes en erección varía muy poco», desvela.
¿Y cuanto más grande, mejor? La media es de 14 a 16 centímetros en erección y «en torno a los 20 centímetros, un pene suele causar a la pareja más molestias que otra cosa», afirma Rodríguez, quien, además, recuerda que, si nos limitamos a las relaciones heretosexuales, sólo el tercio externo de la vagina «es muy sensible, el resto no», con lo cual un falo muy grande no es más efectivo. «Sólo sería más útil si la mujer está muy sugestionada y le gusta ver ese tamaño, pero operativamente no es mejor», añade.
Aun así, algunos hombres siguen haciendo de todo para alargar su pene perfectamente normal. Someterse a cirugías para cortarse el ligamento suspensorio y que 'caiga' más, usar extensores y hasta implantarse silicona bajo la piel del miembro para incrementar el grosor. «¡A las mujeres no hay que llenarlas como si fueran un botijo que está esperando el agua! ¡La vagina se adapta a cualquier pene!», recalca Sara Martínez, quien recuerda que al clítoris, la parte más sensible de los genitales femeninos, le traen sin cuidado los centímetros.
El hombre es el responsable del éxito en una relación sexual
Todavía existe la creencia de que, si algo se tuerce en la cama, el hombre es el máximo responsable por su falta de pericia. Para muchos, el sexo es casi un examen. Y no todos lo llevan bien, es mucha presión. «Esta creencia viene del feminismo de los años 80 y 90 y de la frase 'no existen mujeres frígidas, sino hombres inexpertos'», lamenta Rodríguez. El sexo es cosa de dos. El 60% de las mujeres no llega al orgasmo sólo mediante el coito y es tarea de ambos buscar otras fórmulas o posturas que mejoren el rozamiento. «Si no, el hombre afronta una relación sexual en plan 'venga, tengo que salvar los muebles'», apunta el sexólogo.
Los hombres siempre están dispuestos al sexo
Pues no. Aunque es verdad que no suelen admitirlo, porque temen que su hombría se ponga en entredicho. «Hay hombres con bajo interés sexual, claro. Lo que pasa es que en la mujer se ve tradicionalmente como algo corriente y el hombre, si ocurre, o lo oculta o busca corriendo ayuda porque 'no es normal'», señala Rodríguez. Cuadros depresivos, ansiedad, ciertas medicaciones o problemas endocrinos pueden explicar la falta de deseo desde un punto de vista biológico, pero hay muchos otros motivos que les pueden desganar. Lo mismo que a las mujeres. Lo que sí es verdad es que en los hombres influye mucho el llamado efecto Coolidge, que se da en la mayoría de los mamíferos, en machos y, en mucha menor medida, en hembras. Es el mayor deseo de aparearse al aparecer una nueva pareja receptiva. «La novedad suele ser siempre un buen estímulo», resume Rodríguez.
El volumen eyaculado tiene que ver con la potencia
La pornografía ha hecho mucho por los complejos masculinos. Las eyaculaciones torrenciales que se ven en este género hacen pensar a muchos hombres que eso es lo normal y que es un signo de potencia sexual. «Los actores usan muchos trucos para lograr esos efectos. El problema es que muchos hombres tienen una gran falta de educación sexual y eso hace que carezcan de sentido crítico y se crean todo lo que ven en el porno. No entienden que es un espectáculo, un teatrillo», subraya Jesús E. Rodríguez.
Si hay erección, hay excitación
Pues no. De hecho, la mayor parte de las erecciones se producen por otras razones. Es bien conocida la llamada 'morning glory' ('gloria matutina'), esa erección al levantarse que no indica que el varón tenga ganas. Es algo fisiológico, neurovascular, que responde a estímulos reflejos, «lo mismo que las cuatro o cinco erecciones que los hombres tienen cada noche durante la fase REM del sueño y que pueden durar unos veinte minutos». Y otra cosa: que un hombre no tenga una erección no quiere decir que no le guste su pareja –«hay muchas causas»– y lo peor que se le puede decir en este momento de gatillazo es '¿estás bien?', '¿pasa algo?'... «Entonces entra en un bucle de ansiedad que no ayuda nada», asegura el sexólogo. «Ni la viagra funciona, tal y como indica su prospecto, si no estás estimulado sexualmente. Es decir, puedes tener una erección sin deseo sexual y deseo sexual sin una erección», aclara Sara Martínez, la experta de EroticFeel.
El alcohol ayuda
'A la corta, la alarga. Y a la larga, la acorta', dice una perla del refranero sobre el efecto de alcohol en la sexualidad masculina. Beber moderadamente –de 30 a 60 centímetros cúbicos, unas dos copas– causa desinhibición, pero a partir de ahí el alcohol dificulta la erección, ya que afecta al sistema nervioso central, relacionado directamente con la respuesta sexual. El 50% de los varones en estado de embriaguez han tenido dificultades para mantener relaciones.
Si te masturbas, luego no 'rindes'
«Esto es verdad... a medias. Es cierto que un varón, entre eyaculación y eyaculación, tiene un tiempo de espera, lo que se llama periodo refractario, que varía mucho de unos a otros (según los niveles de testosterona, el estado de salud...) y que con la edad se alarga... y en algunos veinteañeros ni existe», apunta Rodríguez. Según explica, si el hombre se masturba y espera su periodo refractario, no habría problema. Sara Martínez desvela, además, que hay otro mito masturbatorio que se cae: el de que los hombres no usan juguetes sexuales: «En el sex shop online EroticFeel, el 47% de los clientes son hombres y prácticamente el 90% de las compras que realizan corresponden a masturbadores». «Es más, el sexo en solitario ayuda a explorar la sexualidad y algunos recurren a él para liberar tensión y 'durar' luego más con su pareja», añade Patricia López, quien alerta de que están viendo muchos casos de eyaculación retardada: tanto se esfuerzan algunos por durar que al final les cuesta hacerlo «y la pareja se acaba aburriendo». La media de tiempo dedicado al coito es de 5 a 6 minutos, así que «uno de 30 minutos sin estimular otras partes, como el clítoris, es más fácil que provoque irritación que orgasmo», afirma Martínez.
Los hombres no tienen punto G
Lo tienen. Ahora vamos a estudiar un poco de geografía corporal para indicar dónde. «La estimulación indirecta de la zona de la glándula prostática a través del ano produce orgasmos intensos. Está nada más entrar, en la pared anterior», indica Rodríguez. «Se le llama punto P y sólo se puede acceder a él a través del ano, pero aún subsiste en algunos hombres la idea de que el sexo anal es para homosexuales», lamenta Martínez.
La vasectomía te resta potencia
Esta afirmación no tiene ningún sentido desde el punto de vista anatómico y funcional. Pero algunos hombres «que no terminan de entender el tema» y son sometidos a esta intervención sufren el efecto nocebo, es decir, «se sugestionan psicológicamente y creen 'empeorar'», lamenta el sexólogo. Es la antiquísima idea de potencia sexual ligada a fertilidad, que aún hace estragos.
Los hombres no fingen en la cama
Diferentes investigaciones han determinado que cerca del 50% de las mujeres ha fingido alguna vez en la cama y ha escenificado orgasmos. Pero ellos no pueden fingir, ¿no? Error. El 30% de los varones también han hecho su paripé. Es decir, han exagerado los síntomas de excitación y, sobre todo con preservativo, han simulado una eyaculación. «Hay mucho postureo en el sexo», resume Rodríguez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario