TITULO: Viva la vida - Àngel Llàcer y Torito ,. SABADO - 16- Noviembre,.
El sabado -16- Noviembre a las 16:00 por Telecinco , foto,.
Àngel Llàcer y Torito,.
Àngel Llàcer y Torito, dos 'locas' sueltas por el plató de 'Viva la vida',.
El juez de TCMS se pasó por una tarde por el programa de la competencia para presentar su obra de teatro. Habló de su etapa por Operación Triunfo y dejó claro que no tiene relación alguna con Risto Mejide
Àngel Llàcer cambió por una tarde de cadena, de Antena 3 a Telecinco. La promoción de La jaula de las locas, montaje que dirige y protagoniza, llevó al jurado de Tu cara me suena al plató de Viva la vida este domingo 10.
Y
lo hizo haciendo honor al musical, travestido como su personaje e
interpretando uno de los números del espectáculo junto a Ivan Labanda y
más compañeros del reparto que está sobre los escenarios del Teatro
Rialto de la Gran Vía madrileña. De esa guisa se mantuvo durante la
entrevista posterior, donde se recordaron algunos momentos de su
estancia en Telecinco, como director de la academia de OT y como juez de Tú sí que vales.
Por ejemplo, Llàcer volvió a ver las imágenes de este último talent show, al que se presentó una por entonces adolescente Rosalía (15 años), a la que el artista despachó con una total honestidad.
"Era una niña", decía, justificando los problemas de afinación que
evidenció sobre el escenario. "Una de las claves es siempre decir la
verdad. Intento decir lo que pienso y eso me ayuda muchísimo".
Del mismo modo, también dijo lo que pensaba sobre Risto Mejide, con el que protagonizó sonados desencuentros durante la etapa de este en Operación Triunfo.
"Cuando haces un programa tienes que ir a favor del programa. Él, en un
momento dado, fue a favor suyo en detrimento del programa", dijo,
llamando la atención en el hecho de que el polémico publicista tuvo
enfrentamientos con buena parte del equipo visible del programa. Llàcer
dejó claro que no había vuelto a hablar con él ni tenía especial interés
por su trayectoria posterior: "No le he seguido más".
Llàcer también tuvo tiempo para hablar de su futuro profesional, que se encamina a dejar la interpretación tras La jaula de las locas para centrarse en la dirección y producción, antes de que Torito
apareciera también travestido para improvisar otro número al estilo del
musical. El reportero de Telecinco aprovechó la coyuntura para realizar
un reportaje sobre el invitado en el barrio de este, donde pudo conocer
la opinión de sus vecinos y conocidos.
TITULO:
VIVA LA VIDA - la actriz Natalia de Molina ,. DOMINGO - 17- Noviembre .
El domingo -17- Noviembre a las 16:00 por Telecinco , foto.
la actriz Natalia de Molina,.
«Mostrar una axila sin depilar también es feminismo»,.
A punto de estrenar 'Adiós', la actriz Natalia de Molina asegura haberse lanzado de cabeza «a ese pozo sin fondo que es el dolor»,.
-¿En la vida todo es cuestión de actitud?
-Es algo muy importante. Yo intento hacerlo todo desde el corazón y desde las entrañas, que no falte nunca la verdad en cada cosa que hago.
-¿No teme que la arrastre el personaje?
-Siempre te quedan cosas, porque estás jugando a meterte en la piel de otro. En 'Adiós' he tenido que entrar en un lugar para el que nadie está preparado como es la pérdida de un hijo. Del personaje me ha quedado la fuerza, la esperanza.
-Es miembro de la Academia de los Oscar, ¿qué le impide ser una creída?
-La educación que he tenido, mi madre, mi hermana... Lo importante es dejarte la piel en cada trabajo con la sensación de que puede ser el último. Y relativizar los premios y las alfombras rojas. Yo donde me siento más feliz es en un set de rodaje, dejando mensajes para la gente que luego ve las películas, no tengo mucha conexión con el 'star system'.
-¿Qué mensaje ha dejado en 'Adiós'?
-Es una película dura, habla sobre la vida, la muerte. Tiene también mucho flamenco, esa cosa visceral de venganza y de justicia. Pero al final deja un mensaje de luz, de perdón.
-¿Ha sufrido interpretando a una madre desgarrada?
-Ha sido lo más difícil y profundo que he hecho hasta ahora, porque además no soy madre. Lo he afrontado lanzándome a esa oscuridad y a ese pozo sin fondo que es ese dolor.
-Ya ha dicho alguna vez que es «un poco masoquista».
-Cuando digo masoquista me refiero a que me tiro de cabeza a todas las cosas que me dan miedo, quizás para controlar ese miedo. Más que masoquista soy contrafóbica.
-¿Es Mario Casas tan inexpresivo como dicen?
-Mario es un pedazo de actor. Yo he flipado con él.
-¿Se ha enfrentado en la vida a un adiós tan dramático?
-No, a día de hoy tengo a mis padres y a mi hermana a mi lado. Pero se me murió un amigo y fue muy duro.
-Enseñó en las redes su trasero lleno de estrías. ¿Por qué?
-Fue una forma de reivindicar la verdad y decir que todas las mujeres somos hermosas. ¿Quién no tiene estrías y celulitis? Hay que romper con esa imagen perfecta que crea personas infelices. La arruga es bella y la estría más.
-¿Enseñar una axila sin depilar o un pecho también es feminismo?
-Sí. Es una forma de reivindicar la naturalidad. Es increíble el momento que vivimos. La transgresión ahora viene por ser natural.
-«El cine me ha hecho sentirme menos rara», afirma.
-Bueno, es que yo soy rara, ja, ja, ja... Siempre he sido muy tímida e introvertida. Me costaba mucho relacionarme. Sufrí bullying en el colegio, pero eso también me ha hecho ser quien soy ahora. El cine me ayudó mucho. Era una ventana donde descubría realidades con las que conectaba.
-¿Actor en España es sinónimo de izquierdas?
-En otros países los actores dicen a quién votan y nadie juzga su trabajo ni deja de ver sus películas por eso.
-Vale, pues dígame a quien vota usted.
-No voy a revelar a qué partido... Eso sí, respeto totalmente al que sí quiera decirlo.
TITULO: Ese programa del que usted me habla con - Voto en ruinas .
El martes -12- Noviembre por La 2 a las 21:30, foto,.
De
pequeña me encantaba acompañar a mis padres a votar. Aquel ritual me
resultaba exótico, misterioso, casi proscrito: en mi casa nunca hemos
sido especialmente religiosos, y lo de 'vestirnos de domingo' sólo lo
hacíamos en días señalados -bodas bautizos y comuniones- o en jornadas
electorales. Pero lo que de verdad hacía todo aquello emocionante era el
hecho de que mis padres votasen en un colegio abandonado, un lugar que
se caía a pedazos y que se abría una vez cada dos, tres o cuatro años
para que unos cuantos vecinos metiesen un sobre en una urna. Hoy, desde
la ironía que da el tiempo y que lo corrompe todo, me parece alegórico
eso de engalanarse para depositar una papeleta en un edificio en ruinas,
pero entonces sólo incrementaba la sensación de que aquella ceremonia
tan rara, que se hacía detrás de una cortina y que yo no terminaba de
comprender, era importante.
La mayoría de las instituciones que ordenan nuestra vida no son democráticas: la familia, la escuela, el trabajo, el mercado y hasta internet, ese espacio ilusorio en el que nuestra opinión se diluye o se censura, están a salvo de la ficción ateniense. En este contexto, ¿es relevante el principio de 'un ciudadano, un voto'? Esta vez sí, porque está en juego algo más trascendental que la democracia: las piedras de toque, antidemocráticas por naturaleza, que se suponen indiscutibles, que forman parte de nuestro ADN y de las que nos sentimos orgullosos. Votaré porque no quiero que mis derechos se terminen sometiendo a ninguna votación orquestada por quienes llevan el racismo, el machismo y el clasismo por bandera. La democracia nunca se construye para que se pongan en duda sus pilares: si la estructura es débil, el edificio se viene abajo. Lo común, aunque se parezca cada vez más al colegio en ruinas en el que votaban mis padres, merece hoy mi voto.
La mayoría de las instituciones que ordenan nuestra vida no son democráticas: la familia, la escuela, el trabajo, el mercado y hasta internet, ese espacio ilusorio en el que nuestra opinión se diluye o se censura, están a salvo de la ficción ateniense. En este contexto, ¿es relevante el principio de 'un ciudadano, un voto'? Esta vez sí, porque está en juego algo más trascendental que la democracia: las piedras de toque, antidemocráticas por naturaleza, que se suponen indiscutibles, que forman parte de nuestro ADN y de las que nos sentimos orgullosos. Votaré porque no quiero que mis derechos se terminen sometiendo a ninguna votación orquestada por quienes llevan el racismo, el machismo y el clasismo por bandera. La democracia nunca se construye para que se pongan en duda sus pilares: si la estructura es débil, el edificio se viene abajo. Lo común, aunque se parezca cada vez más al colegio en ruinas en el que votaban mis padres, merece hoy mi voto.
Los toros es un programa radiofónico que dirige el periodista especializado Manuel Molés en la Cadena SER. Desde abril de 2015 se emite los lunes de madrugada tras ser sustituido de su horario habitual de emisión de los domingos por el programa Contigo dentro. Contó con la colaboración de Antonio Chenel Antoñete, fallecido en Madrid el 22 de octubre de 2011, siendo uno de los espacios más antiguos del panorama radiofónico nacional ya que continúa emitiéndose de manera ininterrumpida desde 1982.
Es un espacio taurino a modo de repaso informativo semanal. Consta de tertulias, entrevistas con los personajes de actualidad y crónicas de los eventos taurinos más destacados de la jornada., etc.
Un palco dadivoso reparte a discreción orejas. Una para El Fandi, en versión profesional y capaz, otra por un José Garrido en alza y dos para un entregado Adame,.
Vinieron en este envío de Arles tres toros de las célebres reatas de los músicos. No fueron vástagos de ellas ninguno de esos dos toros tan distinguidos. Ni el hondo cinqueño que partió plaza ni el lindísimo cuarto El lote de la feria. Un Deseadito y un Notario. Con el soberbio Economista que acaba de copar en Fallas todos los premios de Valencia, este Notario podría adscribirse a las familias monetarias o propietarias. Y hacerlas tan célebres como las melómanas.
FICHA DEL FESTEJO
- uToros
- Seis toros de Alcurrucén (familia Lozano Martín).
- uToreros
- El Fandi, palmas y oreja tras aviso. José Garrido, oreja tras dos avisos y palmas. Luis David Adame, una oreja en cada toro.
- uPlaza
- Arles. 5ª de Pascua. 3.500 almas. Encapotado, ventoso, fresco. Dos horas y cuarenta minutos de función.
Todo eso propició faenas larguísimas. Horas y media de festejo tras el arrastre del tercero. Justamente entonces empezó a colarse por el suelo del Anfiteatro un viento revoltoso que complicó el trabajo con el excelente cuarto y más todavía con el quinto. Viento fresco y desapacible. Fría la gente con El Fandi, que anduvo suelto, seguro y fácil con los dos toros del lote mejor; cálida y entregada con el extremeño José Garrido, que expuso, se templó y dibujó los mejores momentos de la tarde, con el capote -siempre bien mecido, encajada la figura- y con la muleta, que no le pesa; y cariñosa con el menor de los hermanos Adame matadores de alternativa, Luis David, que ha sido uno de los tres injertos de toreros jóvenes de la feria. Aunque taurinamente educado en España, Luis David, igual que su hermano Joselito, aporta notas de la tauromaquia mexicana convencional y, por tanto, de punto festivo: los lances capote a la espalda cosidos con sedicentes caleserinas, los giros de resolución en las series de muleta, los cambios de mano, los pases cambiados intercalados. Y también un sentido del poder, paso previo del temple, que tal vez esté en camino.
Pese a pecar de pausas dilatadísimas sin razón, y de llenar de tiempos muertos sus dos faenas, Garrido se hizo querer por su calma tan acoplada al torear. Con la zurda le pegó al noble segundo de corrida dos tandas francamente buenas. Y otra en redondo de rica composición antes de que el toro se le entregara con casi dulzura. Le dieron casi tres vueltas a un pasodoble de tres melodías tan denso como el Martín Agüero. Música celestial para Garrido, que apostó en los remates por el repertorio sevillano filtrado por Morante: el kikirikí, el molinete de rodillas. Faena, con todo, muy bien armada. A El Fandi le hicieron poco caso. Ni el regalo de la música siquiera. Y, sin embargo, tanto la lidia, con cuyo peso corrió David, como los dos trasteos tuvieron poso, lógica y formas. Del Adame del sexto toro cuentan los portales cosas buenas. Del otro, del visto en el tercer toro, contó su firme resolución, su aplomo.