Cartas Olvidadas - Crowfunding ,. / Cartas en el Cajon - Escenario 0', una ventana al teatro ,. / REVISTA TENIS - Zverev remonta y deja a Carreño sin final del US Open,.

TITULO: Cartas Olvidadas - Crowfunding,.

 

Crowfunding,.

foto / Leo que el CSIC, el principal organismo dedicado a la investigación científica en nuestro país, ha lanzado un 'crowfunding' para descubrir el posible impacto positivo que podrían tener cien antivirales ya existentes en la lucha contra el coronavirus. El 'crowfunding', un mecanismo colaborativo de microfinanciación de proyectos de todo tipo -grupos de música, revistas, negocios, inventos e incluso campañas solidarias- a través de internet, es un método que, con un poco de suerte, puede funcionar bien para sacar adelante pequeños emprendimientos, propuestas innovadoras en el campo de la cultura y otras iniciativas de ámbito privado; pero que un equipo perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas, con un proyecto entre manos que podría resultar crucial para frenar el avance de la pandemia, dependa de la ayuda económica voluntaria resulta, cuanto menos, preocupante.
La directora de este equipo, Cristina Rico, ha explicado que es importante seguir avanzando hacia el descubrimiento de una vacuna efectiva, pero que ésa no es la única opción para combatir el virus: se podrían hallar terapias farmatológicas susceptibles de ser utilizadas en las fases más leves de la enfermedad, e incluso se podría evitar que los entornos de personas asintomáticas en los que se produzca un brote se conviertan en zonas de transmisión comunitaria. Pese a todo, una investigación de este calibre no está obteniendo los medios públicos suficientes, y tiene que recurrir a una colecta ciudadana, entre otras cosas, porque los trámites impuestos por la burocracia ralentizan el arranque hasta el punto de que muchos proyectos nacen ya muertos. Y esto, me temo, no hay 'crowfunding' que lo arregle.

TITULO:  Cartas en el Cajon - Escenario 0', una ventana al teatro ,.

 

Escenario 0', una ventana al teatro,.

foto / Bárbara Lennie e Irene Escolar, en una imagen promocional de 'Hermanas',.

HBO estrena este domingo este proyecto creado por Irene Escolar y Bárbara Lennie, que reúne seis obras españolas y contemporáneas de toda índole y condición,.

Cuenta Irene Escolar (Madrid, 1988) que 'Escenario 0', el proyecto que reimagina seis obras teatrales para HBO, arrancó en pleno confinamiento, cuando la incertidumbre se instaló en medio planeta. «No sabíamos qué iba a ocurrir con las artes escénicas ni con el cine y nuestros proyectos se empezaban a caer», recuerda la ganadora del Goya a la mejor actriz revelación por su papel en 'Un otoño sin Berlín'.
Habla en plural porque, después del éxito cosechado con 'Hermanas', la joven iba a coincidir de nuevo con Bárbara Lennie (Madrid, 1984), en 'Las ficciones', la obra que preparaba el dramaturgo Pablo Remón, cuyo estreno finalmente se pospuso. «Las dos somos muy inquietas, así que empezamos a hablar de la posibilidad de rodar 'Hermanas', algo que siempre habíamos tenido en mente. Y luego nos preguntamos: ¿y por qué no hacemos más?», continúa.
Dicho y hecho. A partir de hoy, por la plataforma de vídeo bajo demanda, desfilarán títulos como 'Vania', 'Los mariachis' o 'Juicio a una zorra' en una singular y ecléctica apuesta que combina distintas disciplinas para crear una original fusión entre las artes escénicas y el audiovisual en un proyecto que comenzó con la selección de las obras.
«Básicamente –explica Lennie– buscamos aquellas que ya hubiéramos visto y nos gustaran. Elaboramos una lista larga que luego fuimos reduciendo». Su intención era rodar lo antes posible y aprovechar «la situación de desconcierto y que todo estaba parado» para proponer algo atractivo a la plataforma. Con ese punto de partida en mente, era importante que los derechos de dichas funciones fueran fáciles de conseguir y, en este sentido, las dramaturgias contemporáneas españolas «eran, a priori, más accesibles». Había otros factores a tener en cuenta como que fuera posible reunir de nuevo a las compañías de teatro y buscar aquellas que «tuvieran un recorrido previo, cierto respaldo del público» para seducir a HBO.
Tras recibir luz verde por parte de la plataforma comenzaron tres meses de trabajo agotador –«A mí ahora mismo me tienen que recoger con cucharilla del suelo», suelta divertida Lennie–. Tres meses de esfuerzo que se palpan en cada fotograma. Del nervio y la intensidad de 'Hermanas' –una coreografía ejemplar la de los cámaras–, a la exquisita planificación de 'Todo el tiempo del mundo' o al juego entre la realidad y la ficción que propone 'Mammón' en esa suerte de falso documental. No hay un hilo conductor y cada obra, con sus directores y sus actores, es de su padre y de su madre. «Tuvimos libertad absoluta por parte de HBO y nosotras dimos libertad absoluta a cada creador porque la gracia era dejar que gente con mucho talento, mucha creatividad y muchísima imaginación pudiera volar», sostiene Escolar.

Vídeo. El tráiler de 'Escenario 0'.

Productoras ejecutivas de la ficción, son conscientes de que la propuesta de 'Escenario 0' es atípica y no se dirige al gran público. «Evidentemente no es 'Élite' y no lo va a petar a nivel mundial», reflexiona Lennie provocando las carcajadas de su compañera. «Es un riesgo que ellos han tomado y que tiene muchas particularidades», resume. «Sí porque la narrativa también es diferente», completa Escolar. «No es un contenido de consumo rápido, no es efectista... Es otra manera de contar una historia, que tiene más que ver casi con el cine. No es para ver en el tren en un iPhone», advierte la actriz.
Está claro que en el traslado a la ya no tan pequeña pantalla se pierden las emociones a flor de piel del directo, pero cabe preguntarse qué se gana. A juicio de Escolar:«Intimidad». «No tiene nada que ver la energía que debemos tener en 'Hermanas' en un teatro ante 400 espectadores, que con la cámara delante, que genera un vínculo con el espectador». Para Lennie, una de las cosas más interesantes es ver cómo conviven los dos lenguajes, el del teatro y el del cine y la televisión, «cuyos márgenes son cada vez más difusos». «En el teatro», dice, «todo tiene que ver con la fe del espectador, con querer creer e imaginar lo que le están contando, y con la astucia de los directores y los actores para trasladar al público a un lugar. Aquí, de pronto, los lugares físicos también cuentan mucho. Es un traslado real, que a la vez no es real», razona.

Nuevas miradas

Dicen las dos que 'Escenario 0' no nace con vocación de continuidad, pero que estarían «encantadas» de hacer otra temporada. Al fin y al cabo, «esto es solo el retrato de una parte de nuestra escena», reconoce Lennie. «El milagro es que se haya podido hacer y ojalá fije el interés suficiente como para que una propuesta así se gane su espacio», desea. Algo que en su día logró 'Estudio 1', en TVE, espacio con el que, según Escolar, comparte «un espíritu parecido».
Tras estos intensos meses de trabajo, queda el resultado y, sobre todo, lo aprendido por el camino. «Hasta ahora solo había participado en los proyectos como actriz –explica Escolar–. Esto me ha enseñado lo difícil que es sacar algo adelante a nivel de producción». «Estar detrás –añade su compañera– te recoloca y te abre la cabeza».
Pero a juicio de Lennie hay algo más intangible, que tiene que ver con «creer que eres capaz de sacar adelante un proyecto. A las mujeres nos cuesta asumir esos lugares, siempre nos cuestionamos, se nos pone en tela de juicio, y veo hombres, menos capaces, que van con todo y no se cuestionan nada. Afortunadamente, se van abriendo espacios y miradas». «Queda mucho camino por recorrer, pero estamos en él y eso es lo importante», concluye Escolar.

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Zverev remonta y deja a Carreño sin final del US Open

foto / Pablo Carreño, al servicio en el US Open contra Alexander Zverev.

El español roza la gloria, pero el alemán se recupera tras perder los dos primeros sets y le deja sin la que hubiera sido su primera final de Grand Slam,.

A Pablo Carreño se le hizo muy larga la semifinal del Abierto de los Estados Unidos. Rozó la gloria y estuvo a escasos juegos de pisar la que hubiera sido su primera final de un Grand Slam, pero los nervios, el miedo y un Alexander Zverev en ascenso, demostrando por qué es uno de los valores de futuro, le arrancaron su sueño (3-6, 2-6, 6-3, 6-4 y 6-3) en 3 horas y 22 minutos.
El milagro parecía prácticamente hecho cuando el asturiano se puso dos sets arriba ante un desdibujado Zverev, que estaba asustado y superado por la situación. Pero a todo tenista hay que rematarlo, porque las remontadas pueden llegar desde cualquier punto. Si Carreño, en sus anteriores semifinales aquí en 2017, consiguió llevarse el primer set ante Kevin Anderson, para acabar claudicando, esta vez se alzó con los dos primeros.
Lo hizo alargando la solidez que ya demostró en cuartos de final ante Denis Shapovalov. Zverev, entrenado ahora por David Ferrer, es un manejo de dudas y de incertidumbres mentales. Por eso alterna los grandes servicios (hizo hasta 24 aces) con las dobles faltas (8). Para evitar pensar demasiado, suele sacar los segundos a más de 200 kilómetros por hora.
Sin esa fortaleza mental, el alemán se fue deshaciendo a medida que solo veía llegar bolas desde el otro lado. Una tras otras, las pelotas amarillas llegaban a su campo para que este las recibiese, las procesase y las tuviese que jugar con la suficiente inteligencia para desarmar a Pablo. No era así. Carreño se llevó los dos primeros sets por 6-3 y 6-2, pero lo pudo hacer perfectamente por 6-1 y 6-0 si hubiese estado más consistente al servicio.
El gijonés tenía la experiencia y los golpes para crear un agujero mental en la cabeza del joven germano, pero no asestó el golpe definitivo.
Cuando entró al tercer set lo hizo de forma diferente, imprimiendo menos fuerza a su tenis, arriesgando menos, pensando que, quizás solo con seguir devolviendo bolas, sería suficiente.
Zverev se vio lejos de su primera final en Nueva York y liberó el brazo. Comenzó a jugar con más tranquilidad y a golpear con mucha más perseverancia y sentido.
Casi sin darse cuenta le había comido mucho terreno al asturiano y las tornas se habían cambiado. En la inconsistencia de ambos (hubo 15 roturas de saque), prevaleció el alemán, que se llevó el tercer y el cuarto set de manera prácticamente parecida.
Ayudó incluso Carreño a despertarle, con dos pelotazos al cuerpo que molestaron a Zverev. Además, se desvaneció físicamente y, como ante Shapovalov, tuvo que pedir la atención del fisioterapeuta por molestias en la espalda antes de empezar el quinto set.
Esta vez no hubo épica. Zverev quebró el saque de Carreño en el primer juego y ya no hubo forma de escalar los casi dos metros de altura que atesora el de Hamburgo.
Carreño, que consiguió agarrarse al encuentro y no descolgarse del todo, sucumbió ante los bombazos que caían desde el otro lado de la pista. El pupilo de Ferrer desterró sus propios fantasmas y, por primera vez en su carrera, remontó dos sets adversos (había fallado en los seis intentos anteriores) para llegar a su primera final de un Grande. De este modo iguala a Michael Stich, que fue el último alemán en llegar a la final en Nueva York en 1994 (perdió ante André Agassi), y el domingo tendrá la posibilidad de suceder a Boris Becker, que ganó aquí en 1989.